101. INVERSION SUPLEMENTARIA AL CAPITAL ASIGNADO. De acuerdo con el artículo 2°. del Decreto 2012 del 24 de agosto de 1 994 que modificó el artículo 7°. de la Resolución 51 de 1991 del CONPES, las inversiones de capital del exterior en empresas constituidas o establecidas o que se constituyan o establezcan en el país, podrán revestir las modalidades enunciadas, entre ellas, inversiones suplementarias al capital asignado, tratándose exclusivamente de las sucursales en proyectos de hidrocarburos y carbón, en los términos de la Resolución 17 de 1972 del CONPES y las Inversiones a un proyecto minero de carbón conforme a las Resoluciones 23 y 24 de 1976 y 45 de 1989 también del CONPES. Posteriormente el artículo 3°. del Decreto 1295 del24 de julio de 1996, a través del cual se dictaron normas relacionadas con el régimen de inversión extranjera, modificó nuevamente el artículo 7°. de la Resolución 51 de 1991 y dispuso que las inversiones de capital del exterior en el país, podrán revestir entre otras, la modalidad de inversiones suplementarias al capital asignado de las sucursales, sin establecer esta vez condición alguna para ese fin. De lo expuesto se colige que en virtud de la disposición última citada, fueron eliminadas las restricciones a las que estaba antes sujeto el manejo de las cuentas de inversión suplementarias al capital asignado, y por tanto, ha de entenderse que efectivamente a partir de la fecha en que entró a regir el mencionado decreto, les está permitido indistintamente a todas las sucursales acceder a dicha modalidad de inversión de capital sin ninguna limitación. Sin embargo, es claro que durante la vigencia del Decreto 2012, el manejo de la cuenta de inversión suplementaria realizado en contra de la restricción establecida para ese efecto, constituía una infracción cambiaría lo que impedía su registro como inversión extranjera, precisamente por ser una modalidad no autorizada, dando lugar a la imposición de la sanción correspondiente. Ahora, el hecho de que el Decreto 1295 de 1996 haya abolido las restricciones que pesaban sobre el manejo de la cuenta de inversión suplementaria, no supone que las infracciones cambiarias cometidas bajo la vigencia del régimen anterior con ocasión de su utilización indebida, no puedan ser ya sancionadas, so pretexto del principio de favorabilidad de la ley, pues en materia de derecho administrativo cambiario éste no tiene aplicación. En efecto, en el proceso administrativo se aplican algunos principios del derecho penal, de tal manera que no puede haber sanción sin norma preexistente al momento de la infracción con fundamento en el principio de legalidad; pero el principio de favorabilidad de la ley no tiene en este caso cabida, teniendo en cuenta que los principios orientadores de las conductas constitutivas de las infracciones, atienden primordialmente a motivos de política económica que varían de acuerdo con las circunstancias también de tipo económico y como tal cumplen una función de orden preventivo que impone su aplicación inmediata; de ahí que la ley aplicable sea la existente al tiempo de la infracción. A este propósito en la Sentencia del Consejo de Estado de abril 5 de 1991, siendo Consejero Ponente el Doctor Guillermo Chain Lizcano, expediente No.3116, entre otros se dijo: "Es ya reiterada la jurisprudencia de esta Superioridad en el sentido de excluir del derecho administrativo sancionatorio la normatividad y por ende la metodología pena¡. Es claro que el derecho administrativo es independiente de aquél, aún en su aspecto sancionatorio, dada la existencia de una normatividad regulada por principios propios, autónomos que consultan unas finalidades y procedimientos muy distintos de los del derecho pena¡. Este, según la dogmática, escoge institutos jurídicos que considera dignos de tutela, por los más variados motivos, aún de índole moral, y, supone que al imputar una sanción de tipo pena¡ (prisión, arresto, multa, etc.) a las conductas que puedan poner en peligro o afectar tales institutos, los protege de dichos ataques, dado el desestímulo que ello implica para el potencia¡ sujeto activo del hecho punible. Como la pena es por lo general privativa de la libertad, es esencial para su procedimiento sancionatorio la contemplación clara y específica de unas notas características, por ejemplo: principio de favorabilidad, el derecho de defensa, la legalidad del delito, del procedimiento y de la pena, la tipicidad, antijuridicidad y culpabilidad en los hechos punibles, etc. Es una metodología y técnica propias de ese derecho. El Derecho Administrativo sancionatorio, por el contrario, tiene finalidades propias, que en el campo económico consultan, como se dijo, al orden público económico, y por lo mismo utiliza mecanismos para hacer cumplir sus preceptos que en general tienen que ver con sanciones de índole patrimonial. En materia económica, por ejemplo, no se puede sacrificar el superior interés del Estado so pretexto de aplicar principios extraños, que no cumplen utilidad alguna en el ámbito administrativo y si, entorpecen las actuaciones administrativas, impidiéndoles cumplir con los objetivos para los cuales se adelantan." El principio de favorabilidad de la ley. Ref. : Oficio 220-43445 del 30-09-96.