DEFINICION DE HIPERACTIVIDAD "Hiperactividad" se define como una situación en la que una porción particular del cuerpo está muy activa, como cuando una glándula produce demasiada cantidad de una hormona. Suele referirse a: agresividad, actividad constante, tendencia a distraerse fácilmente, impulsividad, incapacidad para concentrarse y comportamientos similares. Se trata de un trastorno del comportamiento caracterizado por distracción grave y períodos de atención muy corta, inquietud motora, inestabilidad emocional y conductas impulsivas. Los síntomas empeoran en las situaciones que exigen una atención o un esfuerzo mental sostenidos o que carecen de atractivo o novedad intrínsecos como ejemplos está el escuchar al maestro en clase, hacer los deberes, escuchar o leer textos largos, o trabajar en tareas monótonas o repetitivas pues como ya se mencionaba existen tiempos de distracción. DESCUBRIMIENTO DE LA HIPERACTIVIDAD En 1798, Sir Alexander Crichton (1763-1856), un médico escocés. Escribo sobre una "inquietud mental" que parece muy similar al subtipo inatento del TDAH. Crichton describe las características de este trastorno, que incluían la falta de atención y la inquietud en los niños, que él llamó "los mueve en exceso". Señaló un trastorno con síntomas similares a TDAH apareció por primera vez en la (APA) de la American Psychiatric Association Manual de Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales en 1968. "Reacción hipercinético de la infancia", fue el principal síntoma de hiperactividad. Síntomas menores como la incapacidad para concentrarse y una sensación de desasosiego. Profesionales de salud mental creen que la hiperactividad era una condición de la infancia de los pacientes que eventualmente se supera. EDAD EN EL QUE SE PUEDE VER ALGUIEN MÁS AFECTADO POR LA HIPERACTIVIDAD Y SÍNTOMAS Su prevalencia en la infancia y adolescencia. 3 a 5% de niños en edad escolar 8 a 10% de niños en edad escolar (American Academy of Pediatrics, 2000) > Síntomas presentes antes de los 7 años El TDAH según el DSM-IV (o trastorno hipercinético según el CIE 10) es un determinado trastorno de déficit de atención o hiperactividad-impulsividad que resulta desadaptativo en relación con el nivel de desarrollo del niño y está presente antes de los 7 años de edad. Las manifestaciones clínicas deben persistir durante más de 6 meses. El cuadro debe ser más severo que lo observado en otros niños de la misma edad, el mismo nivel de desarrollo e inteligencia. Debe estar presente en varios ambientes como familia, escuela, amigos. Debe producir serios problemas en la vida diaria. Además, este trastorno va cambiando con la edad y puede durar toda la vida (en general la hiperactividad mejora y se mantienen el déficit de atención y la impulsividad). Es importante tener presente que, para diagnosticar un TDAH, los síntomas del cuadro clínico no pueden ser debidos a otro trastorno mental como esquizofrenia o autismo, entre otros, ni a ningún problema médico, ningún fármaco o ningún tóxico. El TDAH no es un problema nuevo, Still, en 1902, describió por primera vez a un grupo de niños con diversos grados de agresión, hostilidad, conducta desafiante, desatención e inactividad. Desde entonces hasta la actualidad se han empleado más de 50 denominaciones diagnósticas diferentes, como impulsividad orgánica, niños inestables, síndrome de lesión cerebral mínima, disfunción cerebral mínima, síndrome de hiperexcitabilidad, trastorno por déficit de atención con/sin hiperactividad, entre otros, hasta llegar al actual de TDAH. Los síntomas no aparecen exclusivamente en el transcurso de un trastorno generalizado del desarrollo, esquizofrenia u otro trastorno psicótico, y no se explican por la presencia de otro trastorno mental (trastornos del estado de ánimo, ansiedad, disociativo o un trastorno de la personalidad).