EL GENIO DEL SISTEMA PERIÓDICO " i No es ésta la obra de un genio?", se preguntaba el Académico V.I. Spitsyn (Unión Soviética), miembro del Comité Consultivo Científico, al dirigirse a su auditorio en la Sede del Organismo, en el pasado mes de enero, con un entusiasmo compartido por sus oyentes. El Académico Spitsyn se estaba refiriendo a la primera formulación de la Ley periódica de los elementos, dada a conocer hace cien años por el Profesor Dmitry I. Mendeleiev. En circumstancias sumamente difíciles, dada la falta de datos sobre los pesos atómicos de los elementos, Mendeleiev elaboró en menos de dos años de trabajo, en la Universidad de San Petersburgo, un sistema de los elementos químicos que, en sus líneas generales, es el que se continúa utilizando en la actualidad. Su ley contribuyó poderosamente al ulterior progreso de la química y de la física, y él fue capaz de corregir inmediatamente las cifras correspondientes a los pesos atómicos de algunos elementos, entre otros el uranio, cuyo peso atómico determinó que e r a el doble del valor que se le venía asignando en aquella época. Dos años más tarde, Mendeleiev llegó al extremo de-describir detalladamente las propiedades física y químicas de algunos elementos que estaban aún por descubrir. El tiempo vino a confirmar rotundamente sus predicciones y su ley periódica. Mendeleiev expuso por primera vez sus conclusiones en un folleto que envió a principios de marzo de 1869 a numerosos científicos rusos y extranjeros, y en el que se describía su sistema de los elementos, basado en los pesos atómicos de éstos y en sus analogías de carácter químico.. El 18 de marzo del mismo año, se dio lectura a su trabajo sobre este tema en una reunión de la Sociedad Rusa de Química y, dos meses más tarde, la Revista de la Sociedad publicaba su artículo titulado "La correlación entre las propiedades de los elementos y sus pesos atómicos". En este artículo, la primera formulación que daba Mendeleiev a la Ley Periódica era la siguiente: "Si se ordenan los elementos según sus pesos atómicos, se pone de relieve una marcada periodicidad en sus propiedades". Posteriormente precisó aún más: "Tanto las propiedades de los elementos, como las formas y propiedades de sus compuestos, son función periódica de los respectivos pesos atómicos" . Aunque ya se había intentado anteriormente clasificar los elementos en grupos y tablas, se trataba de la primera elucidación de la relación general existente entre las propiedades de todos los elementos químicos conocidos. Su extraordinaria importancia para la filosofía de la ciencia residía fundamentalmente en el hecho de que revelaba la existencia de una relación entre todos los elementos químicos y entre sus propiedades físicas y químicas. Los grupos y s e r i e s del sistema se podían utilizar ya como una sólida base sobre la cual cabía identificar familias de elementos afines. 17 Entre los elementos cuya existencia predijo Mendeleiev y que fueron descubiertos con posterioridad figuran los actualmente conocidos con los nombres de galio, escandio, germanio, radio, actinio, polonio (encontrados todos éstos en vida del autor), tecnecio, renio, francio y protactinio. La Ley Periódica se amplió a los compuestos de los elementos, a los puntos de fusión de los elementos y cloruros metálicos, a la estructura de los espectros y alas propiedades magnéticas. Mendeleiev continuó trabajando en su ley durante cerca de cuarenta años; la última variante que dio a la Tabla precedió en poco a su fallecimiento en 1907. Después de pasar revista a los trabajos de este gran innovador, el Académico Spitsyn se ocupó de la influencia que han ejercido en los estudios acerca de la estructura de la materia, y de la importante función que han desempeñado en la elucidación de los fenómenos de la radiactividad y de la transmutación de los elementos por desintegración, conduciendo al descubrimiento de los isótopos. Las teorías que se han formulado acerca de la estructura atómica han venido a reafirmar la validez de la ley de Mendeleiev. Paulatinamente se han ido rellenando las casillas en blanco de su tabla, al descubrirse nuevos elementos, hasta que en 1947, al encontrarse el prometió, quedó completa la lista de los elementos comprendidos entre el hidrógeno y el uranio. En un principio, se creyó que no podía haber más elementos, pero el hecho es que, hasta la fecha, se han aislado doce elementos "transuránicos", gracias al empleo de los potentes a c e leradores modernos. El elemento 101 ha recibido el nombre de mendelevio, en reconocimiento del científico que, con su sistema para predecir las propiedades de los elementos aún desconocidos, ha aportado la clave para su descubrimiento. Con arreglo al procedimiento que suele seguirse para producir elementos transuránicos en cantidades ponderables la fase inicial consiste en irradiar uranio natural, uranio enriquecido o plutonio en un reactor. Sin embargo, para algunos de estos elementos puede r e c u r r i r s e al método de las explosiones nucleares subterráneas, aunque entonces se plantea el problema de aislar los elementos o sus isótopos a partir de grandes masas de rocas fundidas. La escala de producción varía considerablemente. La producción anual de plutonio en todo el mundo asciende a varias toneladas; otras cifras de producción son: decenas de kilogramos de neptunio, decenas o centenares de gramos de curio, miligramos de berquelio y californio, microgramos de einsteinio y fermio, y únicamente microcantidades de mendelevio, del elemento 102 -aún innominado- y de laurencio. Al referirse a algunos aspectos de las investigaciones y descubrimientos que se siguen realizando, el orador subrayó que, o bien están basados en la ley de Mendeleiev, o bien vienen a corroborar la misma en forma elocuente. 18