UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo Universidad Centroccidental “Lisandro Alvarado” Decanato Ciencias de la Salud Departamento de Ciencias Morfológicas Sección de Anatomía Microscópica Asignatura Anatomía Microscópica I Introducción a la Respuesta Inmunológica y Tejidos Linforreticulares El presente material constituye una guía de ayuda para el estudio de la respuesta inmunológica y de los tejidos linforreticulares, adecuado a estudiantes de Anatomía Microscópica I del Decanato de Ciencias de la Salud, UCLA. Debe ser complementado con la información proporcionada por los libros de texto básico recomendados en este programa. Las imágenes histológicas pertenecen a la Sección de Anatomía Microscópica de este Decanato. Este material es editado sin fines de lucro y publicado en la biblioteca electrónica del Decanato de Ciencias de la Salud, para su libre consulta. Dra. Elisa D’Angelo Mendoza 1 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo Introducción a la Respuesta Inmunológica. El organismo se defiende frente a todo aquello que es extraño a través de una serie de mecanismos denominados en conjunto Respuesta Inmunológica. Esta es llevada a cabo por las células, tejidos y órganos que constituyen el Sistema Inmunológico. El tejido linforreticular es un tejido conectivo laxo rico en células (linfocitos, plasmocitos, células presentadoras de antígenos) especializadas en la defensa inmunológica, en cuyo estroma predominan las fibras reticulares. Los antígenos son todas aquellas moléculas extrañas al organismo. La porción del antígeno que es reconocido por el sistema inmunológico se denomina determínate antigénico. Aquellos antígenos capaces de evocar una respuesta inmunológica se denominan “Inmunógenos”. 2 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo La propiedad del sistema inmunológico de discriminar lo propio de lo extraño, depende de la capacidad que tiene de reconocer proteínas en la membrana de las células, específicas en cada individuo. Las células eucariotas expresan en su membrana plasmáticas proteínas codificadas por los genes del Complejo mayor de Histocompatibilidad I (CMH-I). En cada individuo, las células expresan una secuencia de aminoácidos particular en las proteínas del CMH-I, lo cual le confiere a cada individuo una identidad bioquímica única, que lo diferencia molecularmente de otros individuos. Esta secuencia de aminoácidos es reconocida por los receptores de las células T, permitiendo de esta forma eliminar todo elemento que no presente esta secuencia bioquímica. La respuesta inmunológica se divide en respuesta inmunológica innata, inespecífica o natural y respuesta inmunológica específica o adaptativa. 3 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo Respuesta inmunológica natural o innata. Constituye la primera barrera de defensa del organismo, en la cual participan prácticamente todas las células, a través de la producción de citoquinas. La piel y mucosas constituyen barreras físicas a la entrada de antígenos, mientras que las enzimas pueden actuar como barreras bioquímicas que destruyen moléculas extrañas. Sin embargo, las células especializadas en este tipo de defensa son los macrófagos y neutrófilos, capaces de eliminar antígenos a través de receptores que reconocen moléculas asociadas a los patógenos denominadas patrones moleculares conservados (PAMPs). Estas moléculas son exclusivas de los microrganismos, pueden formar parte de sus vías metabólicas y son indispensables para su supervivencia, pero no forman parte de las células del ser humano y por lo tanto son reconocidas como extrañas. Por ejemplo, algunas bacterias poseen en su membrana lipopolisacárido (LPS), que es reconocido a través de receptores presente en la membrana de los macrófagos y neutrófilos, permitiendo su destrucción por fagocitosis. Las células NK también participan en la respuesta inmunológica innata. Son capaces de destruir aquellas células que no expresen las proteínas del CMH-I, a través de un mecanismo de citotoxicidad. Durante la respuesta inmunológica innata, los fagocitos liberan el contenido de sus gránulos al medio extracelular, algunos de ellos con la propiedad de producir una respuesta inflamatoria en el tejido donde se lleva a cabo la respuesta. Si los patógenos se encuentran por ejemplo en la mucosa bronquial, se producirá un proceso inflamatorio en esta localización denominado bronquitis. Si ocurre en la mucosa gástrica, se denomina gastritis. A pesar de que la respuesta inmunológica innata involucra mecanismos muy evolucionados ancestralmente, no deja memoria inmunológica, ya que los fagocitos son células terminales que se destruyen durante la respuesta inmunológica. Cada vez que los mismos tipos de patógenos invadan el organismo serán reconocidos por los fagocitos, generando una respuesta inmediata, de igual intensidad e independiente de respuesta inmunológicas anteriores. 4 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo Respuesta inmunológica específica o adaptativa. En este tipo de respuesta participan los linfocitos T, linfocitos B y las células presentadoras de antígenos. Los linfocitos T se subdividen en linfocitos T colaboradores (expresan en su membrana la proteína CD4) y los linfocitos T citotóxicos (expresan en su membrana la proteína CD8). Ambos tipos de células poseen receptores (TCR) que le permiten reconocer antígenos unidos a las proteínas del CMH. Los linfocitos B tienen en su membrana inmunoglobulinas que actúan como receptores (BCR). Estas células pueden reconocer directamente algunos antígenos y actuar a su vez como células presentadoras. Los receptores de las células T y de las células B son específicos para cada antígeno, por lo tanto, durante la respuesta inmunológica adaptativa, se activan solo las clonas celulares específicas para cada tipo de antígeno. Las células presentadoras de antígenos profesionales poseen también en su membrana proteínas del CMH II que le permite la presentación de antígenos extracelulares. Los macrófagos, las células dendríticas foliculares, las células B son células presentadoras de antígenos profesionales. 5 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo Fases de la Respuesta inmunológica específica. 1. Fase de presentación y reconocimiento antigénico 2. Fase de activación 3. Fase efectora 1. Fase de presentación y reconocimiento antigénico de la respuesta inmunológica específica. a. Antígenos intracelulares. Algunos patógenos, como los virus, parásitos y bacterias intracelulares, deben ingresar a las células para poder sobrevivir, haciendo uso de su maquinaria genética para codificar proteínas necesarias para su supervivencia pero que son extrañas para el individuo (huésped). Lo mismo ocurre con las células cancerígenas, en las cuales se producen proteínas extrañas al organismo. Estas proteínas actúan como antígenos intracelulares que son presentados en la membrana de las células infectadas o de las células tumorales a través de las proteínas del CMH-I. De esta forma, son reconocidos por los receptores de los linfocitos T CD8 citotóxicos. 6 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo b. Antígenos extracelulares. La mayoría de los patógenos, especialmente las bacterias, producen toxinas que se acumulan en el medio extracelular, capaces de generar daño a través de diferentes mecanismos. Son proteínas extrañas para el individuo que actúan como antígenos extracelulares. Estas moléculas son procesadas por células especializadas, denominadas Células Presentadoras de Antígenos Profesionales, que se caracterizan porque poseen en su membrana proteínas del CMHII. De esta forma, son reconocidos a través de los receptores de los linfocitos T CD4 colaboradores. 2. Fase de activación de la respuesta inmunológica específica. Cuando los linfocitos T o los linfocitos B reconocen el antígeno se activan, iniciándose una serie de eventos celulares que permiten su expansión clonal, multiplicándose el número de células que son específicas para el antígeno que inició la respuesta. Estos eventos determinan cambios morfológicos que indican la diferenciación del linfocito a linfoblasto y que incluyen el aumento del tamaño de la célula y la reorganización de la cromatina. En el caso del linfocito B, la célula se diferencia en plasmoblasto y luego en célula plasmática productora de inmunoglobulinas. 7 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo Las células hijas pueden actuar directamente en la fase efectora o puede quedar circulando en sangre, como un pool de células de memoria que se activarán, si el individuo vuelve a exponerse con el mismo antígeno. 8 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo 1. Fase efectora de la respuesta inmunológica específica. Durante esta fase se produce la eliminación del antígeno. Se divide en respuesta inmunológica celular y respuesta inmunológica humoral, lo cual está determinado por la naturaleza bioquímica del antígeno involucrado. a. Respuesta inmunológica celular. Se lleva a cabo por linfocitos T colaboradores, que, una vez activados, producen una serie de proteínas denominadas citoquinas, capaces de modificar la función de otras células. Dependiendo de la naturaleza del antígeno, se induce la diferenciación de linfocitos TH1 (productores de citoquinas predominantemente de tipo IFN, TNF e IL2) y/o linfocitos TH2 (productores de citoquinas predominantemente de tipo IL4, IL5) y/o linfocitos TH3 (productores de citoquinas predominantemente de tipo IL10, TGF) e TH17. Las interleuquinas o citoquinas son moléculas pleiotrópicas, capaces de estimular o inhibir la función de otras células, inducir la diferenciación y proliferación celular, la hematopoyesis y la quimiotaxis. Dependiendo del tipo de citoquina liberada, se pueden activar la fagocitosis, la liberación de gránulos por parte de eosinófilos, basófilos y mastocitos e inducir la activación de células que a su vez incrementan la producción de otras citoquinas. 9 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo Los linfocitos T colaboradores son las células rectoras de la respuesta inmunológica. A través de la producción de citoquinas, los linfocitos T colaboradores son capaces de activar otras células, como a los linfocitos T CD8, macrófagos y células presentadoras de antígenos. También colaboran con la activación de los linfocitos B (a través de señales co-estimuladoras) favoreciendo la respuesta inmunológica humoral. En el caso de los antígenos intracelulares, se produce principalmente la activación de los linfocitos T CD8, que eliminan las células a través de mecanismos de citotoxicidad. 10 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo 2. Respuesta inmunológica humoral. Es evocada principalmente por antígenos extracelulares. Una vez que los linfocitos B se activan, se diferencian en células plasmáticas productoras de inmunoglobulinas o anticuerpos, proteínas que neutralizan de forma específica los antígenos y que gracias al proceso de opsonización facilitan la fagocitosis de los mismos. 11 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo Tejido Linforreticular. La respuesta inmunológica se lleva a cabo en el tejido y órganos linforreticulares secundarios. En los órganos linforreticulares primarios solo se lleva a cabo la diferenciación celular (en la médula ósea se diferencia los linfocitos B y las células presentadoras de antígenos mientras que en el timo se diferencia el linfocito T). La vía de entrada de los antígenos es la mucosa respiratoria (antígenos inhalados), la mucosa digestiva (antígenos que ingresan a través de los alimentos), la mucosa genitourinaria (infecciones urinarias o enfermedades de transmisión sexual) y antígenos inoculados directamente en la sangre o en la piel. Tanto la epidermis como los epitelios de las diferentes mucosas actúan como barrera mecánica en la respuesta inmunológica innata. Sus células producen citoquinas que favorecen la quimiotaxis de fagocitos y la presentación antigénica. La fagocitosis se lleva a cabo en el tejido conectivo, especialmente en el tejido conectivo laxo. Sin embargo, en condiciones normales solo se identifican macrófagos. La presencia de neutrófilos en lámina propia indica el desarrollo de una respuesta inflamatoria. El reconocimiento de antígenos extracelulares (toxinas bacterianas) se produce por lo general en el tejido conectivo, donde residen células dendríticas especializadas en la presentación antigénica que inician la respuesta inmunológica específica. Sin embargo, la activación de las células T y B ocurre en el tejido linforreticular presente en los órganos linforreticulares secundarios (ganglios, bazo) y en algunas estructuras presentes a lo largo del tracto respiratorio y digestivo (amígdalas, placas de Peyer, apéndice cecal). En algunos sitios de intenso reto antigénico como en el caso de la dermis, la mucosa respiratoria y digestiva se puede ubicar tejido linforreticular. Los antígenos presentes en la dermis y en el conectivo son procesados por las células dendríticas y transportados a través de la linfa hasta el ganglio, donde ocurre la activación de las células T y B. los antígenos presentes en sangre son trasladados al bazo. 12 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo El tejido linforreticular puede organizarse en forma difusa o nodular. En el tejido linforreticular difuso ocurre la presentación de antígenos a los linfocitos T, la activación y diferenciación de estas en células efectoras. En este tejido también se pueden identificar macrófagos y células reticulares, productoras de fibras reticulares. 13 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo El tejido linforreticular nodular se caracteriza por la presencia de folículos linfáticos, estructuras nodulares que se forman como consecuencia de la activación de los linfocitos B. En los folículos linfáticos se pueden identificar histológicamente la zona del casquete linfocitario y el centro germinal (que a su vez posee una zona clara y una zona obscura). En el casquete linfocitario se ubican células dendríticas foliculares que presentan el antígeno a las células B. Una vez activados, los linfocitos B se diferencian en plasmoblastos, aumentando su tamaño y agrupándose en la zona clara del centro germinal. Estás células finalizan su diferenciación en la zona obscura del centro germinal, donde comienza la producción de inmunoglobulinas, que posteriormente pasa a la linfa y luego a la corriente sanguínea. Los linfocitos T y B activados migran desde el tejido linforreticular y a través de la sangre llegan a los sitios donde se encuentra el antígeno, haciendo así más efectiva la respuesta inmunológica. Por esta razón, las células del sistema inmunológico pueden ubicarse en el tejido conectivo de diferentes órganos del cuerpo. 14 UCLA. Introducción a la Respuesta Inmunológica.Dra. Elisa D’Angelo 15