Molesto zumbido

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Rx
Acudir prontamente al médico
es clave para evitar que el tinnitus
afecte la capacidad de percibir
los sonidos externos.
Tinnitus
Molesto
zumbido
Al menos 3 de cada
10 personas en el mundo
occidental percibe sonidos
intermitentes o permanentes
en el interior del oído.
Síntoma de una lesión
auditiva, la condición puede
ser provocada por causas
que van desde la acumulación
de cerumen hasta trastornos
metabólicos y cardiovasculares /
Adriana López Méndez
40+SALUD
Rx
tinnitus
*
El tinnitus puede afectar
uno o ambos oídos. En la mayoría
de los pacientes es referido como
“una molestia”, pero en casos
extremos puede perturbar
la rutina diaria: causa serias
dificultades para oír, concentrarse, trabajar o incluso dormir.
La exposición a ruidos extremos, algunas
afecciones cardiovasculares y desequilibrios
metabólicos, la vejez e incluso el consumo de
ciertos medicamentos pueden afectar el delicado sentido de la audición y llevar a percibir
timbres, aleteos, zumbidos, pitos u otros sonidos
intermitentes –o permanentes– sin que exista
una fuente sonora externa.
Conocida como tinnitus, esa percepción en los
oídos o en la cabeza, que no está generada por
una vibración del mundo exterior, “se puede presentar en un amplio rango de tonos, intensidad y
frecuencia”, precisa Enrique Iturriaga Casanova,
otorrinolaringólogo del Centro Médico de Caracas y del Centro Médico Docente La Trinidad,
al tiempo que aclara que la molestia auditiva
no debe ser considerada una enfermedad en
sí misma, sino un síntoma de una lesión en el
oído interno que puede obedecer a múltiples
causas.
La palabra tinnitus –usada exclusivamente
en la literatura médica de América– proviene
del latín tinnire, que significa sonar o tintinear,
y su empleo se popularizó en el año 70 después
de Cristo, luego de que el científico naturalista
Plinio el Viejo –en su obra Historia natural– le diera
a la expresión un carácter médico. En Europa,
en cambio, el equivalente es acúfeno, vocablo
que se adoptó cuando el latín cayó en desuso.
El término deriva del francés acouphene, una
adaptación de los verbos griegos akúein (oír) y
faino (parecer).
Divergencias lingüísticas aparte, Ingrid Cavalieri de Solórzano, otorrinolaringóloga de la
Policlínica Metropolitana, explica que ambos
Con cuidado
El nivel sonoro es medido en unidades
llamadas decibeles. Se sabe que la exposición
prolongada o repetitiva a sonidos por encima
de 85 decibeles puede llevar a la pérdida
gradual de la audición y al tinnitus. Incluso
una única exposición a un sonido muy intenso puede lesionar la capacidad auditiva.
He aquí una guía orientadora.
20 decibeles: los murmullos.
40 decibeles: el motor de una nevera.
60 decibeles: una conversación amena.
80 decibeles: el tráfico urbano.
90 decibeles: el sonido de los trenes
del metro o de una moto.
Entre 85 y 110 decibeles: la música emitida
por los audífonos de un reproductor portátil.
100 decibeles: un aserradero o taller
de carpintería.
110 decibeles: el uso de una motosierra
o de un taladro-martillo.
140 decibeles: un concierto de rock
o de música electrónica, cohetes y fuegos
artificiales.
términos son empleados indistintamente para
referirse a ese ruido que se produce en el oído
interno, debido a lesiones ocurridas dentro
del órgano receptor, llamado órgano de Corti.
Dependiendo del lugar específico del daño, advierte la especialista, “varía la frecuencia (grave
o aguda) del sonido escuchado”. La intensidad
también puede cambiar y, en ocasiones, “el ruido
es tan intenso que hasta puede ser percibido por
terceras personas”.
41+SALUD
Rx
tinnitus
*
El tratamiento está orientado a reducir
la sensación de ruido, porque el síntoma pocas
veces desaparece del todo.
Desde el interior
En el oído se encuentra “el caracol o
cóclea, que tiene una distribución parecida a las teclas de un piano.
Así como cada tecla emite una nota
específica, de la misma manera cada
uno de los segmentos del caracol tiene
la capacidad de recibir una determinada
frecuencia”, explica la otorrinolaringóloga Ingrid Cavalieri de Solórzano. Dependiendo de la región donde se produzca
Asunto complejo
Cerca de 35% de los habitantes de los países
occidentales –comenta Iturriaga Casanova– ha
sufrido en algún momento de tinnitus. En Estados Unidos, por ejemplo, la American Tinnitus
Association calcula que 50 millones de personas
experimentan en algún grado la condición; de
ellas, casi 12 millones requieren atención médica
y alrededor de 2 millones están tan seriamente
afectados que no pueden desempeñar normalmente su rutina diaria.
Aunque la edad no es un factor determinante
(los niños también podrían llegar a padecerlo),
estudios han demostrado que la incidencia de
tinnitus es mucho mayor en pacientes que superan los 60 años, debido al envejecimiento natural
y a la degeneración celular de la vía auditiva.
Si bien la exposición a sonidos extremos es
sin duda la causa más común del trastorno,
otros factores están asociados a su aparición.
Cavalieri de Solórzano precisa que la falta de
oxigenación en el oído interno, la acumulación
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la lesión, se origina un ruido: cuando
el paciente refiere el tinnitus como un
“pito en el oído”, la frecuencia afectada
es de tipo aguda; si hace mención de un
“zumbido”, la lesión se ubica en la zona
receptora de los tonos graves. Aunque la
presencia de esos ruidos internos revela
un deterioro del órgano auditivo, no
necesariamente indica que el paciente se
está quedando sordo.
de cerumen y el consumo de medicamentos
ototóxicos (dañinos para los oídos) –entre ellos,
algunos antiinflamatorios, sedantes, antibióticos y antidepresivos– pueden generar daños en
alguna de las estructuras celulares del órgano
de Corti y “producir una especie de irritación,
que se traduce en el ruido que los pacientes
perciben”.
Iturriaga Casanova apunta que también existen afecciones en las vías respiratorias, alteraciones en la estructura de la mandíbula, trastornos metabólicos –diabetes, hipertiroidismo
o deficiencias vitamínicas–, traumatismos en el
área de la cabeza o del cuello y algunas enfermedades cardiovasculares –sobre todo cardiopatías, hipertensión arterial y arteriosclerosis– que
pueden provocar la condición. Adicionalmente,
hay ciertos casos en los que el tinnitus puede ser
indicativo de la presencia de tumores, especialmente cuando está relacionado con la aparición
de otros síntomas, como pérdida auditiva, parálisis facial, inestabilidad y vértigo.
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tinnitus
• Reduzca las molestias del tinnitus con otros sonidos, como
los ronroneos constantes y uniformes de algunos electrodomésticos.
• Utilice técnicas de relajación para mitigar la sensación de estrés
o ansiedad que pudiera producirle la condición.
• Duerma con la cabeza en una posición elevada: disminuye
la percepción del ruido.
• Limite el consumo de cigarrillos, alcohol y cafeína.
• Use protección auditiva –orejeras o tapones– si debe exponerse
a ruidos fuertes.
Enmascarar la molestia
Para poder tratar el tinnitus es necesario identificar su origen. Es probable, entonces, que luego
de una evaluación inicial el otorrinolaringólogo indique un análisis del conducto auditivo
(otoscopia) o la realización de estudios audiométricos (acufenometría), además de pruebas
complementarias, como una tomografía axial
computarizada. Igualmente, también es común
que sugiera la visita a otros especialistas para
tratar, si fuera el caso, el problema de base.
Sin embargo, es importante que los pacientes estén al tanto de que el tratamiento estará
orientado a reducir la sensación de ruido, porque
el síntoma pocas veces desaparece del todo. ¿La
razón? Los terminales nerviosos del oído interno
no tienen la capacidad de regenerarse, ni siquiera a través de técnicas quirúrgicas.
Aunque es difícil aprender a lidiar con tan
molesta condición, Cavalieri de Solórzano sub-
raya que existen diversos métodos de apoyo al
paciente. El uso de prótesis auditivas o audífonos es útil en pacientes que además presentan
pérdida de su capacidad auditiva. Se trata de
aparatos que “aumentan la intensidad de los
sonidos externos y sirven, simultáneamente,
para enmascarar el tinnitus”. También existen
dispositivos que emiten un ruido con la misma
intensidad y frecuencia del tinnitus, de manera
que el sonido resulte menos notorio.
Igualmente, precisa Iturriaga Casanova, hay
opciones farmacológicas que pueden aliviar el
trastorno y terapias de reentrenamiento auditivo para que el paciente aprenda a relajarse y sea
capaz de “anular su percepción consciente” del
ruido (le permitirá habituarse al sonido y eliminar el impacto que tiene en su rutina diaria).
•
F ue n t es c o n sul t adas
º Enrique Iturriaga Casanova, otorrinolaringólogo.
Centro Médico de Caracas / Centro Médico Docente La Trinidad.
º Ingrid Cavalieri de Solórzano, otorrinolaringóloga.
Policlínica Metropolitana.
º www.ata.org / www.hipusa.com
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