52-54 HENRY MOORE_52-53 CINE.qxd 24/02/16 12:03 Página 52 DE LA CULTURA Y LA CIENCIA / ESCULTURA Exposición en Santiago de Compostela HENRY MOORE, ARTE EN LA CALLE Siete bronces monumentales del escultor Henry Moore (1898-1986), se exhiben en la Plaza del Obradoiro de Santiago de Compostela. La exposición, parte del programa Arte en la Calle de la Obra Social La Caixa, ha sido organizada por CaixaBank, la Fundación Henry Moore y el Ayuntamiento de Santiago de Compostela. Las obras expuestas fueron realizadas por el artista en la cúspide de su carrera. Entre ellas se hallan Gran figura de pie, filo de cuchillo, en la que el escultor evoca el espíritu de la gran escultura helénica Victoria alada de Samotracia, y Forma reclinada, pieza que realizó cuando tenía 84 años. La exposición permanecerá en la ciudad hasta el próximo día 28 de marzo. Situada entre el Palacio de Rajoy y el Hostal de los Reyes Católicos, Óvalo con os huesos nos pueden enseñar puntos, 1960-1970, nació, según palabras muchos principios estructurales y del crítico Alan Wilkinson, “a partir de la escultóricos. A pesar de su lige- observación de una piedra pequeña que reza, tienen una gran fuerza”, es- Henry Moore tenía en su estudio”. En esta cribió Henry Moore. Gran figura de pie, filo piedra había dos puntos en contacto en mede cuchillo (1976), surgió a partir de un hue- dio de una forma hundida. A partir de esso de pájaro, al que Henry Moore añadió ta observación, el escultor esculpió en una cabeza y un pie. A partir de estos ele- bronce una escultura de 332 centímetros mentos, el escultor inglés, nacido en Castleford en 1898, visualizó una obra monumental con la que quiso evocar el espíritu de la gran escultura helénica Victoria alada de Samotracia. Lo logró. En Gran figura de pie, filo de cuchillo, el visitante puede sentir ese espíritu. Puede sentir la esencia de los sueños. De la vida. Gran figura de pie, filo de cuchillo, tiene 358 centímetros de altura y transmite sensaciones de ingravidez y de verticalidad que, tal y como se explica en el dossier de pren- de altura que nos atrapa por su gran agusa de la exposición, “poseen grandes y va- jero de aire. Henry Moore depositó en esriados matices, y varían a medida que el es- ta obra monumental la tensión dinámica pectador se mueve alrededor de la escultu- de la vida. Esa tensión que surje cuando ra”. La hondura y lo superficial también se trabajamos por alcanzar un horizonte que hallan en esta obra, interactúan en la quie- Eduardo Galeano uso como metáfora de la tud de la misma. La materia quieta, aquí, se utopía. Nos acercamos a ese horizonte y mueve. Henry Moore logró este movimien- vemos que sigue estando lejos. Seguimos to poético, vivo, en esta obra y también en entonces en tensión yendo en su búsquela titulada Óvalo con puntos. da, yendo siempre, sin alcanzarlo. Como Arriba, ‘Formas conectadas reclinadas’ (1969); abajo, ‘Pieza de bloqueo’ ( Con el programa Arte en la Calle, la Obra Social La Caixa pretende c Por Juana Vera (Santiago de Compostela) L La obra de Henry Moore representada por estas seis piezas puede verse hasta el próximo 28 de marzo 52 29 de febrero–6 de marzo de 2016. nº 1144 52-54 HENRY MOORE_52-53 CINE.qxd 24/02/16 12:03 Página 53 o’ (1963-1964), dos de las obras presentes en la exposición. e convertir Santiago de Compostela en un museo al aire libre. no se alcanzan los dos puntos curvos, casi afilados, que se buscan en Óvalo con puntos. La tensión entre lo natural y lo abstracto, y la transformación de los objetos naturales en formas escultóricas, son los temas tratados por Henry Moore en Gran figura de pie filo de cuchillo y en Óvalo con puntos, respectivamente. Otros temas explorados por el escultor en las obras que forman parte de esta exposición son la relación entre la figura humana y el paisaje, tanto urbano como rural, la relación madre e hijo, y la fascinación por la figura reclinada. Un día, Henry Moore paseaba por los alrededores de su casa de Perry Green, una pequeña aldea de Hertforshire, a 40 kilómetros del norte de Londres, y encontró dos piedras unidas, que juntas parecían un puño cerrado. Las cogió y logró separarlas girándolas e inclinándolas. El artista escribió lo siguiente acerca de este especial encuentro: “Esto me dio la idea de realizar dos formas que pudieran hacer algo similar y que después llamé Pieza de bloqueo, porque estaban bloqueadas juntas”. Pieza de bloqueo es una de las esculturas que el visitante puede contemplar en la Plaza del Obradoiro de Santiago de Compostela. En ella Henry Moore nos narra de modo fascinante este encuentro. De 290 centímetros de altura y realizada en bronce, entre los años 1963-1964, es, con más violencia que las anteriores, lo que somos y representa una de las fuentes principales de inspiración del escultor, los objetos naturales y las formas de bloqueo: mandíbulas, caderas, rodillas, piedras de molino, cerraduras, ejes... Sobre la escultura Figura reclinada en dos piezas,que el artista realizó en el año 1960 y que el visitante también puede contemplar en esta muestra, Henry Moore escribió lo siguiente: “Esta escultura es más independiente que cualquiera de mis obras. Al tener dos piezas deja de parecer una mera representación de una figura reclinada. Las figuras que la forman son una mezcla. Una fusión del cuerpo humano con las formas rocosas y con el paisaje. Y al igual que una metáfora en poesía, dan un nuevo aspecto a cada elemento y tal vez un nuevo significado”. Al contemplar esta obra, el visitante descubre una escultura monumental de 259 centímenº 1144. 29 de febrero–6 de marzo de 2016 53 52-54 HENRY MOORE_52-53 CINE.qxd 24/02/16 12:04 Página 54 DE LA CULTURA Y LA CIENCIA Nuestro país y su arte tuvieron un significado especial para el escultor toda su vida. Moore y España Henry Moore (1898-1986) visitó España en motocicleta, durante sus vacaciones de verano, con su esposa Irina Radetsky y sus amigos Raymond y Edna Coxon. Entraron en España desde Francia, llegaron a Pamplona y tomaron la carretera de la costa en dirección a las Cuevas de Altamira, que Henry Moore definió como “la Real Academia de la Pintura Rupestre”. Después visitaron Madrid, Toledo y Vitoria. Henry Moore nunca regresaría a España, aunque el país y su arte tuvieron un significado especial para él durante toda su vida. Poco después de aquel viaje, Henry Moore contempló horrorizado los sucesos que ocurrieron en España a partir del año 1936. Nunca antes, en su tra54 yectoria artística, había hablado tanto de política y su compromiso con la difícil situación que estaban atravesando los españoles se reforzó tras la visita que le hizo a Pablo Picasso en su estudio de París, en donde tuvo la oportunidad de contemplar los avances del cuadro titulado Guernica. En el año 1936, Henry Moore firmó el manifiesto, en el que se solicitaba el fin de la política de No Intervención en España e intentó viajar a la España republicana junto con una delegación de artistas y escritores ingleses, pero su petición le fue denegada por el gobierno británico. En 1939 realizó su primera litografía, titulada Prisionero español, con la intención de venderla para ayudar a los 29 de febrero–6 de marzo de 2016. nº 1144 prisioneros de guerra republicanos, retenidos en los campos de refugiados de Francia. Aunque Henry Moore nunca regresó a España, en el año 1981 tuvieron lugar en Madrid y en Barcelona dos grandes retrospectivas de su obra y en el año 1983, la reina Doña Sofía lo visitó en su casa de Perry Green, Inglaterra. Veinte años después de su muerte, en el año 2006, la Obra Social La Caixa organizó una gran exposición sobre su obr, en CaixaForum Barcelona. Hoy podemos volver a disfrutar en nuestro país del genio de este creador a través de seis de sus esculturas monumentales expuestas, hasta el próximo 28 de marzo, en la Plaza del Obradoiro de Santiago de Compostela. tros de longitud. Una escultura ligera y pesada al tiempo, como lo son la montaña y la Catedral de Santiago de Compostela que, en esta exposición, la rodean. Una escultura unida al paisaje, al aire, al espacio y al mismo tiempo libre, independiente, expresiva en sí misma. Armaduras, conchas marinas y cáscaras fueron también una fuente de inspiración para Henry Moore. Formas conectadas reclinadas, la quinta obra presente en esta exposición, nos habla de la exploración que el escultor realizó sobre estas formas. Sobre sus asociaciones de delimitación y de protección. La particularidad de Formas conectadas reclinadas es que en ella una forma exterior protege a una interior. Realizada en el año 1960, esta escultura representa el concepto externo-interno, que nos acerca a la idea de la maternidad, que el artista definió, en relación a esta obra, del modo siguiente: “La armadura es una concha exterior, como la concha de una tortuga, que está ahí para proteger las formas más vulnerables. Igual que la armadura humana está ahí para proteger el cuerpo humano. A veces esto ha dado lugar a la idea de madre e hijo, donde la forma externa, la madre, protege la forma interna, el hijo, como una madre protege a su hijo”. La sexta pieza de esta muestra se titula Forma reclinada. Henry Moore la realizó en el año 1982, cuando tenía 84 años, y en ella resumió uno de los temas más importantes de su obra, la figura reclinada. “La figura reclinada ofrece la máxima libertad de composición y de espacio. La figura sentada tiene que tener algo donde sentarse. No puedes moverla de su pedestal. Una figura reclinada puede reclinarse sobre cualquier superficie. Es libre y estable al mismo tiempo”, escribió el escultor. Más alargada y sinuosa que las otras obras del artista nacidas de la investigación sobre este tema, Forma reclinada es montaña y es cuerpo. Nos habla de lo más exultante de la vida, el amor a uno mismo, y también de la contemplación hacia fuera porque la hay hacia adentro. Nos habla de ese amor que roza lo profundo de la tierra, el sexo, casi todo lo que somos. Y representa, como todas las esculturas presentes en esta exposición, ese casi y ese todo. l