ELMERCURIO.COM http://diario.elmercurio.cl/2011/03/01/economia_y_negocios/_portada/noticias/impresion93E A4C02-A1E5-4657-A9CE-70A7E15B29B9.htm?id={93EA4C02-A1E5-4657-A9CE70A7E15B29B9} http://diario.elmercurio.cl/2011/03/01/economia_y_negocios/_portada/noticias/93ea4c02a1e5-4657-a9ce-70a7e15b29b9.htm Estimaciones de Libertad y Desarrollo (LyD) para 2011: Alza en alimentos subiría en 5,7% el IPC de los más pobres y 3,6% el de los más ricos La alimentación equivale al 37% del gasto mensual de las familias con menores ingresos del país. LINA CASTAÑEDA Con las fuertes alzas que registran los precios mundiales de los alimentos en los últimos meses, no sólo resurge la preocupación por su efecto en la inflación, sino también porque más personas caigan en la línea de la pobreza. La División de Alimentos de la canasta del IPC tendría un alza de 11,3% en 2011, según cálculos del Bci. Jorge Selaive, economista jefe de esa institución bancaria, proyecta un IPC de 3,9% para el año con un sesgo al alza por el aumento del precio del petróleo, a raíz de la situación en el norte de África. "La inflación es regresiva, afecta más a los pobres que a los ricos, porque en general la gente de mayores ingresos tiene más facilidades para protegerse de la inflación a través de instrumentos financieros", apunta Selaive. Análisis que comparte Paulina Henoch, investigadora del Programa Social del Instituto Libertad y Desarrollo (LyD). Con una inflación proyectada en torno al 4% para el año y asumiendo que el precio de los alimentos sube un 11,3%, Henoch estima que el costo de vida para el 20% más pobre subiría 5,7% en 2011, y para el quintil de mayores ingresos el aumento sería sólo de un 3,6%. De acuerdo con la última Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF) realizada en 2007, el 20% de los hogares más pobres destina el 37,4% de sus ingresos al gasto en alimentos, mientras que el 20% de los hogares de mayores ingresos destina un 14,5%. En el anterior shock de precios de alimentos ocurrido en 2008, el costo de vida del quintil más pobre aumentó 11% en junio respecto a igual mes de 2007, y para el quintil más rico el incremento fue de 8%, según cálculos de LyD. Si bien en las últimas cifras del IPC de enero el precio de los alimentos y bebidas no alcohólicas tuvo una caída de 0,8%, los reportes de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) revelan una situación que, según la economista, resulta preocupante: la producción de los cereales se ha visto presionada al alza por una reducción importante en la oferta, como el caso del maíz, que fue seriamente afectado por las inundaciones en Australia. En 2010, la División de Alimentos y Bebidas no Alcohólicas aumentó un 5,6% y, según la FAO, en el mismo período el índice internacional de alimentos subió un 28%. La inflación de los alimentos y su efecto en la pobreza ha cobrado más importancia, especialmente después de los resultados de la Encuesta Casen 2009, que arrojó que 2 millones 564 mil 32 personas estaban en condición de pobreza. Si la línea de pobreza se hubiera mantenido con el mismo valor que tenía en 2006, en pesos de noviembre de 2009 ($53.850 en la zona urbana y $36.308 en la zona rural), el aumento de la inflación de alimentos habría hecho que 805.483 personas cayeran en la pobreza con la medición Casen 2009, dice Henoch. En opinión de Selaive, el Banco Central no debió detener el alza de 50 puntos base en la tasa de política monetaria, dado que el alza de los alimentos es un tema que retomó fuerza desde mediados de 2010. ______________ PROYECCIÓN "Los ingresos de los pobres tendrían que crecer sobre 11,3% para superar la condición de pobreza", dice Paulina Henoch, investigadora de LyD. Bci vislumbra efectos compensatorios En el análisis del Bci, si bien el alza en los precios internacionales de los alimentos tiene un impacto significativo, también es acotado. Al revisar lo ocurrido en 2008 concluye que el traspaso de las alzas, en el caso de Chile, demora en torno a tres meses. Por otra parte, hace notar que la magnitud de las alzas, en términos porcentuales, no son similares. Ello, porque el commodity tiene una participación reducida en los costos totales del bien final; por el establecimiento de límites o precios máximos a los consumidores; la reducción de holguras o márgenes de los productores y distribuidores locales, y por algún grado de sustitución por factores de menores costos de producción, entre otros. Su estimación es que si los precios internacionales del arroz regresaran a su máximo de 2008 (alza de 90%), el precio a consumidores subiría un 29%. Pese a que durante el shock de precios de 2008 en Chile se observaron alzas más pronunciadas en maíz, leche, arroz y pan, en términos porcentuales, con posterioridad los márgenes se recuperaron de manera más intensa que en otros países como México, Colombia, Brasil y Singapur. E incluso mantiene precios relativos más bajos que otras economías. "La posición de Chile en un ranking de precios para estos productos, da cuenta que desde 2006 nos hemos mantenido en niveles de precios relativamente bajos. Esto es un argumento adicional a favor de un traspaso acotado hacia precios locales de las alzas externas que estamos viendo en esta coyuntura", señala el reporte del Bci. Considera que habrá factores compensatorios: un traspaso incompleto de las alzas externas, como en 2008; márgenes aún con espacio para absorber alzas externas, y mercados con un grado de competitividad que fomenta la mantención de precios en nivel acotado respecto al resto del mundo. _________ IMPACTO En 2008, Chile tuvo alzas más pronunciadas en algunos alimentos, pero más bajos que otras economías.