OBLIGACIONES 349 La palabra nexum designaba todo acto per aes et libram. Objeto del nexum. El objeto del nexum fue ordinariamente el dinero; primero un pedazo de bronce, posteriormente dinero contado. Se ha preguntado últimamente si no podía versar sobre cosas que se pesaran y se contaran, o sobre cosas que se midieran, pero la respuesta no ha sido dada en forma concreta por los romanistas. 9.9. CONTRATOS VERBIS Son los que se perfeccionan por la pronunciación de determinadas palabras solemnes, que eran fórmulas verbales prescritas por la ley. Estos contratos eran: Formales o solemnes: ya que quedaban concluidos por la observancia de las formalidades prescritas por la ley únicamente. El mero consentimiento de las partes sin esas formalidades, no genera obligación civil alguna. Había tres contratos que se formaban por palabras solemnes: La dictio dotis. La jurata promissio liberti. La stipulatio. a) La dictio dotis. Era un modo solemne por el cual, ciertas personas, la mujer sui juris, su deudor y su ascendiente varón en línea paterna, podían constituir una dote. En el antiguo derecho solo servía para ser jurídicamente exigible una promesa de dote, y su uso estaba reservado a la mujer y su ascendiente paterno. En la época clásica, sirvió para extinguir una obligación por el procedimiento de la delegación, en virtud del cual, el deudor de la mujer, prometía la dote al marido, quedando obligado verbis respecto de éste y liberado con relación a aquella. Su forma era más simple que la de la estipulación, pues consistía en una declaración unilateral, que no exigía la interrogación previa, ni la aceptación