Documento Asociado - Hermanos del Sagrado Corazón

HACIA EL CAPÍTULO GENERAL DE MAYO 2012
UNA LLAMADA A UNA MISIÓN PROFÉTICA
“Para librar a los jóvenes de la ignorancia, prepararlos para la
vida y procurarles el conocimiento y el amor de la religión, el
Padre Andrés Coindre funda en 1821 el Instituto… como una
respuesta a las necesidades de los tiempos y lugares en favor de
una juventud abandonada y descristianizada”.
(Preámbulo de la Regla de Vida)
Los Corazonistas fuimos fundados por un hombre clarividente
cuyo carisma y misión fueron proféticos. El padre Andrés Coindre descubrió cuáles eran las
necesidades más urgentes de los niños y los jóvenes y respondió a ellas. Tanto él como los primeros
hermanos fueron hombres audaces, valientes y llenos de fe.
Nosotros somos los herederos del carisma y de la misión del padre Andrés Coindre. El tema central
del Capítulo general de 2012 es:
UNA LLAMADA A UNA MISIÓN PROFÉTICA
Estamos invitados a reflexionar sobre la Palabra de Dios (Mt 5, 13-16):
“Vosotros sois la sal... Vosotros sois la luz... Vuestra luz debe brillar...”
- ¿Somos sal para los niños y jóvenes que buscan sentido a su vida y un ideal?
- ¿Somos luz para los niños y jóvenes que buscan la verdad y nuevos horizontes?
- ¿Nuestros compromisos responden a las necesidades de los niños y jóvenes que viven en
condiciones insoportables de pobreza, soledad y desesperanza?
Jesús fue un profeta (Lc 4, 16-21):
Jesús desenrolló el libro y encontró el pasaje donde estaba escrito:
El Espíritu del Señor está sobre mí. Él me ha ungido para anunciar a los
pobres la Buena Nueva, me ha enviado a proclamar la liberación a los
cautivos y la vista a los ciegos, para dar la libertad a los oprimidos y
proclamar el año de gracia del Señor.
Todos tenían los ojos fijos en él y empezó a decirles: “Hoy se cumplen
estas palabras proféticas”.
Encuentro, H. Eusebio Calvo, con los Claustros (Primer Trimestre)
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HACIA EL CAPÍTULO GENERAL DE MAYO 2012
UNA LLAMADA A UNA MISIÓN PROFÉTICA
El P. Andrés Coindre fue un profeta de su tiempo
El P. Andrés Coindre fue un evangelizador y un profeta, pues se dejó guiar
por el Espíritu.
El P. Andrés Coindre fue un hombre “vigía”, profundo conocedor de los
hombres de su tiempo, de la vida de su sociedad y de los mecanismos que
operan en ella. Un hombre que, movido por el Espíritu, responde de forma
original a las necesidades de su época.
Son palabras suyas:
“El taller de prueba (del Pío Socorro) es para los chicos que han causado o
siguen causando graves problemas a sus padres por la inflexibilidad de su
carácter o por sus actitudes violentas. No quieren dedicarse a ninguna ocupación fija y vagan
frecuentemente por calles y plazas, expuestos a todos los desórdenes del vagabundeo y de la
delincuencia”.
Otros son prisioneros adolescentes que, después de haber permanecido en la cárcel, no encuentran
ningún medio para colocarse. Sin embargo, son dignos de un especial interés. Culpables a una
edad en que se es más superficial que malo, no había que desesperar de su cambio. ¿Qué hacer
entonces? Por todas partes los rechazan. Las casas honradas no quieren recibirlos; los centros
religiosos les cierran las puertas, ¿Habrá que dejarles volver a sus antiguos hábitos? No, es digno
de la caridad cristiana recogerlos y abrirles un refugio de salvación en un taller de caridad”.
La vocación del Educador corazonista es a la vez, un don y una responsabilidad:
- don de Dios al mundo, a la Iglesia, a la persona
- llamada para un compromiso en la misión de Jesús.
El Educador corazonista está llamado a ser, como los profetas, hombre de Dios, portador de su
Espíritu, en quien Dios irrumpe para ser el móvil de su existencia. Hombre impulsado por el
Espíritu, sabe leer los signos de los tiempos, se encarna en la realidad del mundo, revela la bondad y
la misericordia de Dios, testimonia los valores de la consagración bautismal, y celebra la
multiforme presencia del Reino en las realidades terrenas y en la sociedad.
Incorporado a una comunidad educativa, el Educador corazonista es signo de que el Reino de la
fraternidad existe ya.
El Educador corazonista asume, como equipo de trabajo, una misión, con el fin de ser continuadores
de la salvación aportada por Jesús.
El Educador corazonista, movido por el Espíritu y próximo a la gente, es un hombre que sabe
«escuchar a Dios y a los hombres».
Atento a los signos de los tiempos, es sensible, a las necesidades de la Iglesia y del mundo.
El Educador corazonista, comparte los gozos, las esperanzas y las tristezas de la humanidad;
favorece la toma de conciencia de la dignidad de la persona humana; denuncia las causas de las
estructuras sociales injustas y anuncia la Buena Nueva de la liberación.
Encuentro, H. Eusebio Calvo, con los Claustros (Primer Trimestre)
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HACIA EL CAPÍTULO GENERAL DE MAYO 2012
UNA LLAMADA A UNA MISIÓN PROFÉTICA
DOCUMENTO 1 (Textos de reflexión y lectura)
1.- La Palabra de Dios
“Vosotros sois la sal de la tierra. Mas si la sal se desvirtúa, ¿con qué se la salará? Ya no sirve para
nada más que para ser tirada afuera y pisoteada por los
hombres.
“Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad
situada en la cima de un monte. Ni tampoco se enciende una
lámpara y la ponen debajo del celemín, sino sobre el candelero,
para que alumbre a todos los que están en la casa. Brille así
vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras
buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos” (Mt 5, 13-16).
2.- La Regla de vida
6. A la escucha de los hombres
Nuestro instituto quiere estar al servicio de nuestros contemporáneos, que no cesan de interpelarnos.
[...]
29. Comunidad abierta
La comunidad local no está cerrada en sí misma. Hace suyos los puntos de vista espirituales y
apostólicos de la provincia y de todo el instituto. Una verdadera fraternidad sensibiliza también a las
necesidades del mundo e impulsa al don de uno mismo para realizar la misión de la Iglesia.
100. Escucha del Espíritu
El Espíritu Santo inspira nuestra fidelidad común. Sus intenciones sobre
nosotros se revelan cuando tratamos de discernirlas en la oración, el
acompañamiento espiritual y los intercambios fraternos. Nos hace receptivos
a los deseos de Dios tal como se manifiestan en la Sagrada Escritura, las
directrices del magisterio, las orientaciones del instituto, las decisiones de los
superiores, las llamadas del prójimo y los acontecimientos cotidianos.
150. Pastoral adaptada
Adaptamos nuestra acción educativa a las necesidades de los tiempos y
lugares con lucidez, prudencia y audacia para responder de la mejor manera
posible a las llamadas del Espíritu. [...] Nos gastamos promoviendo el desarrollo natural y
sobrenatural de todos, particularmente de los pobres y de aquéllos que padecen injusticia.
162. Los hermanos consideran el medio escolar como el lugar privilegiado de su actividad
apostólica. Sin embargo, están abiertos a todo tipo de apostolado que, a la luz de la oración y del
discernimiento comunitario, y con la conformidad de sus superiores, juzguen conforme al carisma
fundacional y a las necesidades del instituto.
3.- La intuición primera (Pío establecimiento para niños y jóvenes [Prospecto de 1818])
“Se funda en esta ciudad una nueva casa de caridad. [...] Tiene como fin formar en el amor a la
virtud y al trabajo a niños y jóvenes sin techo y sin recursos. Consta de dos talleres separados, [...].
“El primero se ha abierto sólo para los niños pobres, pero honrados, [...]. Se trata en general de
niños y jóvenes huérfanos que han sido atendidos durante su primera infancia, pero que por falta de
protección o de medios económicos no pueden conseguir ninguna buena colocación y se ven
expuestos a pervertirse en la ociosidad o con malos patronos. [...]
“El taller de prueba es para los chicos que han causado o siguen causando graves problemas a sus
padres por la inflexibilidad de su carácter o por la violencia de su inclinación al mal. Unos, espíritus
superficiales e independientes, no quieren dedicarse a ninguna ocupación fija y vagan frecuentemente
por muelles y plazas, expuestos a todos los desórdenes del vagabundeo y a todos los engaños de la
Encuentro, H. Eusebio Calvo, con los Claustros (Primer Trimestre)
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UNA LLAMADA A UNA MISIÓN PROFÉTICA
ratería. [...] Otros, se trata de prisioneros jóvenes que, después de haber sufrido una reclusión más o
menos larga, no encuentran ningún medio para colocarse. Sin embargo, son dignos de un especial
interés[...]. Culpables a una edad en que se es más superficial que malo, más atolondrado que
incorregible, no había que desesperar de su cambio; [...] ¿Qué hacer entonces? Por todas partes los
rechazan. Las casas honradas no quieren recibirlos de ninguna manera. Todos los centros religiosos
les cierran las puertas, [...] ¿Habrá que dejarles, pues, volver a sus antiguos hábitos [...]? No, es digno
de la caridad cristiana recogerlos y abrirles un refugio de salvación en un taller de caridad.”
(André Coindre, Escritos y documentos 3, El Pío Socorro - Dossier biográfico, Edición crítica por
Jean-Pierre Ribaut y Guy Dussault, Traducción de Tomás López Lambán, pp. 28-30)
-o-o-o-o–
“Pero la originalidad del Pío Socorro no reside en este ‘taller
de emulación’, bastante extendido en Lyón bajo la
Restauración y generalmente llamado ‘providencia’.
“El centro se propone responder más concretamente a una
necesidad específica que nadie quiere asumir: la acogida de
niños y jóvenes delincuentes al salir de la prisión. Además el
Padre Coindre no duda en dedicar un texto cinco veces más
amplio que el anterior para justificar este apostolado insólito y
convencer de su necesidad a los eventuales suscriptores. Con
el correr del tiempo se tendrá la tentación de olvidar la
originalidad, por no decir el carácter chocante de este carisma
original. Sin embargo, en sus memorias, el primer Hermano (Saverio) pone de relieve este aspecto
tan innovador de la institución: ‘En 1817 el señor Coindre, viendo que los hospitales y las
prisiones de Lyón se llenaban de muchachos, tomó la decisión de fundar una casa para recogerlos
y apartarlos del peligro’.”(André Coindre, Escritos y documentos 3, El Pío Socorro - Dossier biográfico,
Edición crítica por Jean-Pierre Ribaut y Guy Dussault, Traducción de Tomás López Lambán, p. 17)
Primera etapa: a nivel de comunidades educativas
a. Hermanos y seglares estudian el texto del Documento 1, pp. 11-12.
b. Intercambian ideas sobre los once (11) puntos propuestos a continuación.
c. El responsable, a su debido tiempo, envía al superior provincial (al delegado del provincial) el
informe de dichos intercambios.
CUESTIONARIO
Misión profética
1. ¿De qué modo era profética la misión de Andrés Coindre en favor de los jóvenes?
2. ¿A qué necesidades no cubiertas de los jóvenes podríamos responder para hacer su misión más
profética?
Promoción vocacional con vistas a una misión profética
3. ¿Cuáles son los obstáculos que entorpecen la promoción vocacional?
4. ¿Qué propuestas sugieres para favorecer la promoción de vocaciones con vistas a una misión
profética?
Formación común, hermanos y seglares, para una misión profética
5. ¿Qué importancia crees que se concede en la provincia a la formación común de hermanos y seglares?
6. Haga sugerencias concretas a nivel local y a nivel provincial para favorecer la formación común,
hermanos y seglares, con vistas a una misión profética.
(Si las preguntas las llevas ya preparadas, ¡fenomenal!)
Encuentro, H. Eusebio Calvo, con los Claustros (Primer Trimestre)
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