PRESENTACION El principio de reconocimiento y protección de la diversidad étnica y cultural de la nación es una de las expresiones mas importantes del modelo de Estado Social de Derecho que adoptó para Colombia la Constitución Política de 1991, pues comporta la expresión de una realidad que históricamente había sido invisibilizada por el ordenamiento constitucional. La materialización de este principio implica trascender de una sociedad etnocéntrica y monocultural a una multiétnica y pluricultural, lo que conlleva para el Estado la obligación de adoptar medidas que permitan la realización efectiva de los derechos especiales reconocidos a los pueblos indígenas, las comunidades afrocolombianas, la comunidad raizal y al pueblo rom, los grupos étnicos asentados en el territorio colombiano, que son un valioso fundamento de nuestra nacionalidad. La Procuraduría General de la Nación en cumplimiento de su mandato constitucional de protección de los derechos fundamentales ha venido avanzando en la formulación, adopción e implementación de políticas para prevenir la violación de los derechos de las personas que integran diferentes sectores poblacionales, con base en el documento función preventiva de Procuraduría General de la Nación en materia de derechos humanos, que fue adoptado mediante la Resolución No. 138 de 2003 emanada del despacho del Procurador General de la Nación como el instrumento que contiene los lineamientos generales para el ejercicio del control preventivo en relación con esta materia. En esta oportunidad, y atendiendo la necesidad de dotar a la institución de unos parámetros que permitan ejercer de manera adecuada y eficaz la función preventiva frente a las múltiples demandas que formulan los integrantes de grupos étnicos respecto a la amenaza y vulneración de sus derechos, se presenta la “Política preventiva de la PGN en materia de derechos de los grupos étnicos”. La Política que hoy se publica constituye una herramienta de la que se deben apropiar todos los servidores de la Procuraduría General de la Nación para fortalecer y optimizar el ejercicio de sus función, en la perspectiva de garantizar los derechos colectivos de los grupos étnicos e individuales de sus integrantes, cuando quiera que se vean amenazados o vulnerados, demandando de las instituciones estatales competentes, la oportuna y adecuada atención a las problemáticas que afectan a estos sectores de la población tradicionalmente marginados, situación que los ha puesto en condiciones de debilidad manifiesta y alto grado de vulnerabilidad. 1 Este documento es el resultado de un trabajo colectivo liderado la doctora Patricia Linares Prieto, Procuradora Delegada para la Prevención en materia de Derechos Humanos y Asuntos Étnicos, Danilo Valbuena y María Teresa Duque funcionarios de esa dependencia, quienes en compañía de los funcionarios del Grupo de Asuntos Etnicos de la Procuraduría Delegada para la Prevención en Derechos Humanos y Asuntos Etnicos1 elaboraron el mencionado documento. El documento inicial fue consultado con las procuradurías regionales y provinciales, dependencias que a partir de su experiencia, enriquecieron el documento. El documento de política está acompañado de un mapa inter-activo que contiene una caracterización de los grupos étnicos que conforman nuestro país, el cual permite una fácil aproximación a la diversidad colombiana, este mapa fue posible gracias a la dedicación de las antropólogas Claudia Galofre y Lina Gómez, quienes diseñaron y nutrieron su contenido. Sea esta la oportunidad de agradecer a quienes participaron en la elaboración de este documento, sus valiosos aportes. En este contexto, la política institucional pretende, desde el mandato de la PGN, contribuir a la efectiva realización del principio de diversidad étnica y cultural de la nación colombiana teniendo como fundamento la Constitución Política y los tratados internacionales suscritos por el gobierno nacional que se refieren a los derechos de los grupos étnicos. A partir de este momento se inicia la fase de promoción y difusión del conocimiento de esta política institucional, para de esta manera demandar de cada uno de los funcionarios de la PGN conforme a sus competencias, la responsabilidad en su ejecución, mediante la aplicación práctica de los principios rectores y las pautas de actuación que la integran, para así cumplir nuestra obligación de contribuir a la efectiva construcción de un Estado democrático, participativo y multicultural. Finalmente expreso mi agradecimiento a las comunidades, a sus representantes y a sus organizaciones que al depositar su confianza en la institución que represento, nos han permitido conocer sus realidades y aspiraciones, lo que constituye un valioso insumo para el ejercicio de nuestra misión y a la Empresa Colombiana de Petróleos - ECOPETROL- y a la Agencia Nacional de Hidrocarburos -ANH2- entidades que en el marco del “Programa de 1 El grupo de Asuntos Etnicos está conformado por Danilo Valbuena Ussa (Coordinador), Ricardo Medina, Judith Moreno, Claudia Galofre, Lina Gómez y María Victoria Carvajal. 2 El proyecto cuenta con la gerencia de recursos del Fondo Financiero de Proyectos de Desarrollo –FONADE- 2 fortalecimiento de la capacidad de interlocución entre Estado, pueblos indígenas, comunidades afrocolombianas y demás comunidades existentes en nuestro país” que actualmente adelantan con la PGN, financiaron la publicación de este texto que sin duda contribuirá a la realización de la Nación pluriétnica y multicultural que proclama la Constitución colombiana. . EDGARDO JOSE MAYA VILLAZON Procurador General de la Nación 3 INTRODUCCIÓN La política de la Procuraduría General de la Nación, en adelante PGN, para la prevención de las violaciones a los derechos de los grupos étnicos hace parte de la política de la entidad en materia de derechos humanos que se encuentra plasmada en el documento “Función Preventiva de la PGN en materia de derechos humanos3”. El control preventivo que realiza la PGN corresponde al cumplimiento del mandato constitucional contenido en el numeral 2 del artículo 277 que le atribuye al Procurador General de la Nación la función de proteger los derechos humanos y garantizar su efectividad. Prevenir integralmente es: “promover e impulsar un conjunto de acciones tendientes a evitar la ocurrencia de un hecho, a partir de la elaboración y aplicación de investigaciones y alertas pertinentes. Esta noción comporta propósitos tales como el fortalecimiento de las políticas públicas, la vigilancia permanente de la actividad del Estado y de ser el caso, la imposición de sanciones disciplinarias. El resultado de todo ello es el crecimiento social en términos democráticos y la consecuente legitimación institucional por vía del fortalecimiento de los canales de comunicación de la sociedad y el Estado4”. Por ello, el control preventivo ejercido por la PGN está orientado a verificar y exigir el cumplimiento de las obligaciones de respeto, garantía y prevención que en materia de derechos humanos le competen al Estado, busca la realización de los postulados constitucionales como vía para la realización de los derechos fundamentales de los ciudadanos y grupos étnicos que conforman la nación. En este contexto, la política institucional pretende, desde el mandato de la PGN, contribuir a la realización del principio de diversidad étnica y cultural de la nación colombiana teniendo como fundamento la Constitución Política y los tratados internacionales suscritos por el gobierno nacional que se refieren a los derechos de los grupos étnicos. 3 FUNCIÓN PREVENTIVA DE LA PROCURADURÍA DERECHOS HUMANOS. Imprenta Nacional de GENERAL DE LA NACIÓN EN MATERIA DE Colombia. Bogotá, 2002. En adelante, Función Preventiva. SISTEMA INTEGRAL DE PREVENCIÓN. LA FUNCIÓN PREVENTIVA A CARGO DE LA PROCURADURÍA GENERAL DE LA NACIÓN. Consultoría realizada por la Universidad Nacional de Colombia en el marco del Programa de apoyo al fortalecimiento institucional PGN-BID. Bogotá, febrero 2006. Pg. 24. 4 4 La vigencia de los derechos colectivos de los grupos étnicos e individuales de sus integrantes se ve amenazada, y en no pocas ocasiones, vulnerada por multiplicidad de factores. De allí, la necesidad de que la implementación de la política de control preventivo se oriente a que las autoridades públicas cumplan con sus obligaciones de protección, prevención y garantía de los derechos de los grupos étnicos. El documento que se presenta a continuación consta de tres partes: I. El marco de aplicación de la política preventiva a favor de los grupos étnicos, el cual desarrolla el alcance del principio constitucional de reconocimiento de la diversidad étnica y cultural, los grupos étnicos reconocidos por el Estado colombiano y la definición de los derechos colectivos. II. Los principios y pautas de actuación institucional que orientan el ejercicio del control preventivo a favor de los derechos de los grupos étnicos. Estos se han diseñado a partir de un análisis intercultural de la vigencia y desarrollo normativo de los derechos de los grupos étnicos. III. Finalmente se presentan las líneas de trabajo que orientan el accionar institucional para el logro de los objetivos del control preventivo. También forma parte integrante de la política un documento, que se entrega en medio magnético, y contiene un mapa interactivo a través del cual se hace una caracterización de los diferentes grupos étnicos, registrando su población, ubicación geográfica, particularidades culturales, sociales y económicas, y la problemáticas que los afectan, permitiéndole al usuario el acceso ágil a la información que facilitara su desempeño como servidor de la PGN. 5 I. MARCO DE APLICACIÓN DE LA POLITICA PREVENTIVA DE LA PGN EN MATERIA DE DERECHOS DE LOS GRUPOS ETNICOS 1. EL Principio de reconocimiento de la diversidad étnica y cultural: En armonía con las tendencias internacionales5, la Constitución Política de 1991 rompió con la concepción monocultural del Estado existente hasta ese momento, el artículo 1 del texto constitucional señala que Colombia es una república democrática, participativa y pluralista, en consecuencia, el artículo 7 establece como principio fundamental del Estado el reconocimiento y protección de la diversidad étnica y cultural de la Nación colombiana. Es decir, el ordenamiento jurídico colombiano admite la existencia de diferentes etnias y culturas y se obliga a protegerlas. Lo que proclama la Constitución de 1991 es “la aceptación tanto de la alteridad como de la multiplicidad de formas de vida y de sistemas de comprensión del mundo, diferentes a los de la cultura occidental6”. De ahí que el reconocimiento de la diversidad se puede entender como la “Política obligatoria de los Estados democráticos liberales que consiste en ayudar a los grupos que se encuentran en desventaja, con el fin de permitirles conservar su cultura aún cuando no coincida con las culturas mayoritarias o de masas…, que se hará efectiva si se garantiza la presencia de instituciones públicas que no pasen por alto las particularidades culturales, al menos en lo que se refiere a aquellas de cuya comprensión y aceptación dependa de la vitalidad misma de cada cultura7”. La construcción del Estado plural y multicultural que proclama la Constitución colombiana compromete no sólo a todas las instituciones del Estado sino a 5 El reconocimiento normativo de las sociedades multiculturales fue producto de las reinvindicaciones de diferentes grupos minoritarios cuya identidad no correspondía con la sociedad mayoritaria. Ello supone, como lo dijo la CORTE CONSTITUCIONAL que el individuo puede “definir su identidad, no como ‘ciudadano’ en el concepto abstracto de pertenencia a una sociedad territorial definida y a un Estado gobernante, sino una identidad basada en valores étnicos y culturales concretos” (T- 496 de 1996, Magistrado Ponente: Carlos Gaviria Díaz ) 6 SÁNCHEZ, Botero, Esther. DERECHOS PROPIOS. EJERCICIO LEGAL DE LA JURISDICCIÓN ESPECIAL INDÍGENA EN COLOMBIA. Procuraduría General de la Nación. Instituto de Estudios del Ministerio Público. Bogotá, 2004. Pg. 275. 7 SÁNCHEZ, Esther. JUSTICIA Y PUEBLOS INDÍGENAS DE COLOMBIA. LA TUTELA COMO MEDIO PARA LA CONSTRUCCIÓN DE ENTENDIMIENTO INTERCULTURAL. Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales UNIJUS – Unidad de Investigaciones Jurídico-Sociales y Políticas “Gerardo Molina”. Bogotá. 1998. Pg. 33. 6 todos los miembros de la sociedad colombiana. Para hacer efectivo el principio de reconocimiento de la diversidad étnica y cultural, el texto constitucional desarrolla una serie de normas que se refieren a los derechos de los grupos étnicos, entre ellos8: el artículo 8 establece la obligación del Estado de proteger la riqueza cultural de la nación; el numeral 5 del artículo 68 consagra el derecho a la etnoeducación entendida como el derecho al respeto de la identidad en materia educativa; el artículo 70, define la cultura como fundamento de la nacionalidad colombiana y señala el reconocimiento del Estado de la igualdad y dignidad de todas las culturas que conviven en el país, así como la promoción de la investigación, de la ciencia, del desarrollo y de la difusión de todos los valores culturales de la nación y el artículo 72 se refiere a la protección del patrimonio arqueológico de la nación. 2. Grupos Étnicos de Colombia: La definición de un grupo étnico comporta dos condiciones: una subjetiva y otra objetiva. La primera condición está relacionada con la conciencia de la identidad étnica, a saber: “(...) La conciencia que tienen los miembros de su especificidad, es decir, de su propia individualidad a la vez que de su diferenciación de otros grupos humanos, y el deseo consciente, en mayor o menor grado, de pertenecer a él, es decir, de seguir siendo lo que son y han sido hasta el presente9”. La segunda se refiere a “los elementos materiales que distinguen al grupo, comúnmente reunidos en el concepto de “cultura”. Este término hace relación básicamente al “conjunto de creaciones, instituciones y comportamientos colectivos de un grupo humano. (...) el sistema de valores que caracteriza a una colectividad humana.” En este conjunto se entienden agrupadas, entonces, características como la lengua, las instituciones políticas y jurídicas, las tradiciones y recuerdos históricos, las creencias religiosas, las costumbres (folklore) y la mentalidad o psicología colectiva que surge como consecuencia de los rasgos compartidos 10”. Es necesario entonces tener en cuenta varios elementos para identificar un grupo étnico: costumbres, lengua, territorio, etc; elementos que se construyen a partir de una historia común con orígenes similares11. 8 Ver anexo No. 1 CORTE CONSTITUCIONAL. Sentencia T-349 de 1996 MP: Carlos Gaviria Díaz. Bogotá, agosto de 1996. 10 Idem. . 11 Ver al respecto, Pineda Camacho, Roberto. LA CONSTITUCIÓN DE 1991 Y LA PERSPECTIVA DEL MULTICULTURALISMO EN COLOMBIA. En Revista Alteridades 1997, Tomo 7 Página 14. 9 7 La caracterización de los grupos étnicos va más allá de las simples características raciales, al respecto la Corte Constitucional ha señalado12: “El factor racial es tan sólo uno de los elementos que junto a los valores culturales fundamentales y a otros rasgos sociales, permiten distinguir e individualizar a un grupo étnico. De otra manera, se desvirtuaría el concepto de tolerancia y fraternidad que sustentan el principio constitucional del pluralismo étnico y cultural". Es necesario tener en cuenta que: “Las formas manifiestas y constitutivas de los rasgos culturales que en un momento dado distinguen a un grupo étnico están determinadas por la cultura transmitida y son, precisamente, las que van a ser juzgadas en el marco de la demanda de los derechos fundamentales13”. El Estado colombiano reconoce la existencia de cuatro grupos étnicos: indígenas, afrocolombianos, raizales y Rom o gitanos: a. Pueblos Indígenas: Son los pueblos originarios o aborígenes, preexistentes a la llegada de los europeos al continente americano. En el territorio colombiano hay 8714 pueblos indígenas que hablan 64 lenguas, son aproximadamente 1.378.88415. Constituyen menos del 3,4 % de la población total del país16. La mayoría de las comunidades habitan territorios ancestrales, legalizados hoy como resguardos de propiedad colectiva; territorios con ecosistemas que tienden a ser extremos en sus condiciones climáticas: selvas pluviales y territorios desérticos; tierras ardientes y páramos. Actualmente existen 710 resguardos titulados que cubren una extensión de 34 millones de hectáreas, las cuales equivalen el 29,8% del territorio nacional. Los pueblos indígenas tienen mecanismos de subsistencia diversos, desarrollados en actividades que van desde la recolección, la caza, pesca y horticultura itinerante predominantes en regiones de selva, sábana y desierto tropical, hasta actividades de economía campesina como agricultura y pastoreo de ganado, correspondientes a la zona andina; actividades que en algunas 12 Corte Constitucional, SENTENCIA T-422/96, MP: Eduardo Cifuentes. Bogotá, 1996. SÁNCHEZ, Esther. JUSTICIA Y PUEBLOS INDÍGENAS DE COLOMBIA. Op.cit. Pg. 167. 14 Fuente DANE censo 2005. Tomado de: Colombia Una Nación Multicultural. 10-06. En: http://www.dane.gov.co/files/censo2005/etnia/sys/colombia_nacion.pdf 15 Idem. 16 En algunas zonas geográficas constituyen la mayoría del país, por ej: Guainía, Vaupés, La Guajira, Amazonas, Vichada, Cauca y Nariño. Los departamentos de La Guajira, Cauca, y Nariño concentran aproximadamente la mitad de los indígenas del país (Fuente DANE censo 2005). 13 8 comunidades se complementan con explotaciones mineras a nivel artesanal y con actividades de comercio y trabajo asalariado estacional17. Los pueblos indígenas “definen sus sistemas sociales a partir de esquemas de reciprocidad, redistribución y cosmovisiones que integran los componentes sociales, culturales, económicos, políticos y naturales de sus sistemas de vida y de sus territorios”18. Es de señalar que: “Los indígenas han desarrollado toda una diversidad cultural y lingüística, que se identifica en su cosmovisión alrededor de la madre naturaleza y se expresa en una relación que tiende a ser conservacionista del medio ambiente. Mantienen un fuerte sentido de pertenencia a su etnia particular (Wayúu, Páez, Guambiano, Tucano, etc.), como también su identidad colectiva de pertenecer a la categoría general de Indígenas. Si bien han sido objeto de crecientes procesos de aculturación, han logrado mantener diferentes grados de expresiones culturales propias: lenguas, religión, sistemas de control social, conocimientos y técnicas tradicionales de aprovechamiento del medio natural, etc. A lo largo de la historia los indígenas han sido sometidos a la servidumbre y oprimidos culturalmente, pero no esclavizados como lo fue la población negra traída del África, aunque sí han sido objeto de condiciones similares, en casos como el de las caucherías. No obstante, desde las leyes de indias se les permitió tener autoridades propias, que han sabido mantener hasta el presente (cabildos, capitanes, caciques), lo mismo que formas propias de organización comunitaria desde las cuales han luchado por su autonomía. También han demostrado capacidad de movilización colectiva y de negociación política en defensa de sus reivindicaciones. Desde 1970 iniciaron los procesos organizativos del actual movimiento indígena nacional que los llevó a ser plenamente reconocidos en el nuevo ordenamiento político-jurídico de la nación a partir de la Constitución de 1991, conquistando amplios derechos colectivos19”. 17 PROGRAMA DE APOYO Y FORTALECIMIENTO ETNICO DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS DE COLOMBIA 1995-1998. Documento CONPES 2773-MINGOBIERNO-DGAI-DNP:UDT. abril 05 de 1995 18 Idem. P 2. 19 Cortés, Pedro. PROPUESTA PARA UNA POLÍTICA DE DERECHOS HUMANOS DE GRUPOS ÉTNICOS. Documento de Trabajo. Bogotá, 2003. 9 b. Comunidades Negras o Afrocolombianas: Tienen origen en los pueblos africanos traídos como esclavos y mantenidos como tales desde la colonia hasta más de medio siglo después de la independencia nacional (1851)20. Muchos de ellos se liberaron internándose en las selvas, donde constituyeron sus “palenques”, sus propias formas de organización comunitaria. Aunque provienen de diferentes pueblos, culturas y lenguas del África, los afrodescendientes han desarrollado formas culturales que los identifican. En música, por ejemplo, han hecho un gran aporte al patrimonio cultural de la nación. La Ley 70 de 1993, por medio de la cual se desarrolla el artículo transitorio 55 de la Constitución Política, define las comunidades negras como grupo étnico con una historia y cultura particular y les reconoce su derecho ancestral a la tierra, dándoles la posibilidad de administrar los recursos y de tener sus propias forma de gobierno mediante la conformación de un Consejo Comunitario. Según el DANE “dentro de la población negra o afrocolombiana se pueden diferenciar cuatro grupos importantes: los que se ubican en el corredor del pacífico colombiano, los raizales del Archipiélago de San Andrés Providencia y Santa Catalina, la comunidad de San Basilio de Palenque y la población que reside en las cabeceras municipales o en las grandes ciudades21. Es de señalar que es reiterada la inclusión del pueblo raizal dentro de las comunidades afrodescendientes, sin embargo dicho grupo étnico ha defendido su particularidad étnica, pues su origen, costumbres, lengua y cultura es diferente a la de la comunidad negra de la Cuenca del Pacífico. La población negra, está calculada hoy día 4.261.996 personas, cifra en la cual se incluye al pueblo raizal, lo cual equivale al 10,5% de la población nacional; dicha población se concentra principalmente en el litoral Pacífico -territorio que comparten con las comunidades indígenas-, los valles interandinos, la costa Atlántica, las islas del Caribe y en varias ciudades. Los recientes desplazamientos masivos, por causa del conflicto armado, han incrementado sensiblemente su presencia en las ciudades22. Los territorios del Pacífico, en particular, son territorios de alta diversidad biológica y de recursos del subsuelo, por lo cual la economía de estas 20 La esclavitud fue abolida en Colombia el 21 de Mayo de 1851 por la Ley 21 de dicho año. 21 Dane, COLOMBIA UNA NACIÓN MULTICULTURAL. Antes citado. 22 Mayor concentración poblacional afrocolombiana: en el andén Pacífico; en la Costa Atlántica (Córdoba, Sucre; Atlántico y Magdalena; entre Cesar y Guajira; Cartagena); en el Magdalena Medio; en zonas de Huila, Caquetá, Putumayo y Nariño; Sur del Valle, norte del Cauca, sur del Cauca y Bota Caucana. Ciudades: Bogotá, Cali, Medellín, Pereira, Barranquilla, Cartagena, Valledupar, Santa Marta, Sincelejo, Montería. 10 comunidades ha tenido mucho que ver con la explotación extractivista de la maderera, la minería y la pesca. Desde tiempo atrás los afrocolombianos se han visto enfrentados a condiciones difíciles impuestas en gran parte por el entorno, pero sobretodo por las circunstancias de la marginalidad social, económica y política a que han sido sometidos. Los afrodescendientes representan un 10,5%23 de los 42 millones de habitantes en Colombia y están entre los más desaventajados de la población. Más del 80% de los afrocolombianos gana menos de U$500 al año y viven en extrema pobreza, el 74% gana menos del salario mínimo. La identidad negra o afrocolombiana se basa en una estrecha relación entre la cultura y el territorio. A pesar de que existen diferencias sustanciales entre los distintos grupos de afrocolombianos en el país, en general los identifica una noción y una relación particular con el territorio: “La construcción territorial de las comunidades afrocolombianas mantiene estrecha relación con la reconstrucción de la familia. En Colombia, la identificación de la gente de origen africano con sus territorios está definida por dos principios: primero, la parentela; segundo, las actividades económicas que desarrollan, las cuales han dado lugar a la creación de paisajes particulares24”. Así, la organización familiar es determinante para la reproducción de la cultura, encuentra la supervivencia enmarcada dentro de un territorio ancestral. Las redes de parientes origen africano, han conformado a lo largo de los años el tipo de familia extensa, en donde es muy común la práctica de la poligamia. c. Los raizales: La comunidad raizal, habita el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, es un grupo étnico diferenciado por su historia, cultura, costumbres y lengua. Son un grupo angloafricano hablante de lengua Criole. Los raizales han tenido arraigadas las costumbres tradicionales derivadas de su naturaleza de pequeños agricultores, pescadores y marineros de habla inglesa y religión protestante: “Lo raizal está sustentado en la presencia de contenidos ancestrales, que tienen como fundamento el vínculo con las primeras etapas de colonización, en las que lo británico y lo anglo-caribeño, constituyen un factor determinante25” 23 Dane, COLOMBIA UNA NACIÓN MULTICULTURAL. Antes citado. Pg. 29. Estos porcentajes fueron calculados sobre la población que dio información de la pertenencia étnica. 24 Atlas de las Culturas Afrocolombianas. CIMARRONES Y CIMARRONAJES. En: http://www.colombiaaprende.edu.co/html/etnias/1604/channel.html 25 Leyva, Andrea. 2004. Tesis de Grado. Man no sell yuh birthright, man les go fight. DINÁMICAS DE REIVINDICACIÓN Y AUTO-DEFINICIÓN DEL MOVIMIENTO PARA LA 11 A partir de la Constitución de 1991, el archipiélago que era concebido como una intendencia del Estado Colombiano, paso a tener la categoría de Departamento, es decir, hoy es una entidad Territorial, en cuyo interior habita el grupo étnico raizal. El artículo 310 de la Constitución Política prevé un tratamiento especial para el Archipiélago que está orientado a la protección de los raizales, quienes por efecto de la inmigración, la sobre-explotación económica del turismo, la pérdida ambiental, hoy en día son una población minoritaria, que ve amenazada su subsistencia como grupo étnico. d. Los gitanos: son un grupo étnico cuya población es de aproximadamente 4.83226 personas, ubicadas en grupos de familias extensas “kumpaniyi” en varias ciudades del país. Mantienen su lengua el Romanés, los cuales en Colombia se denominan a sí mismos como pueblo Rom: “En el país hay varios subgrupos, entre los que se destacan los Bolochoc --que son mayoría--, los Boyhás, los Churon, los Mijhais, los Jhánes, los Langosesti y los Bimbay”27. “Las características básicas que distinguen a los rom como un grupo étnico independiente son, entre otras, la idea de un origen común y de una historia compartida, la larga tradición nómada, la utilización cotidiana y corriente de su idioma propio (el romanó, romanés o romaní), las funciones cotidianas de la familia extensa, especialmente en lo que actividades económicas se refiere, la vigencia de un conjunto de normas tradicionales así como de instituciones que regulan la aplicación de su derecho interno, conocido como la Kriss Romaní o ley gitana”28. No se ubican en un territorio específico, ya que son comunidades seminómadas y forman grupos de tamaño variable conocidas como Kumpania (compañía), que son unidades de corresidencia o cocirculación. Para el caso de Colombia estas unidades se asientan en un barrio o se dispersan por familias entre las viviendas de los demás habitantes, manteniendo vínculos culturales y sociales con algunas otras Kumpanias29. Según el DANE, “el 94% de la población Rom reside en los departamentos de Atlántico, Bolívar, Valle del Cauca, Norte de Santander, Santander y Nariño y en la ciudad de Bogotá, estos PUEBLO RAIZAL DE LA ISLA DE SAN ANDRÉS (AMEN S.D), en medio de un escenario “pluriétnico y multicultural”. Directora de tesis: Maria Clemencia Ramírez. Universidad de los Andes, Departamento de Antropología. Pg. 69 26 Dane, COLOMBIA UNA NACIÓN MULTICULTURAL. Antes citado. 27 NOTAS ETNOGRÁFICAS E HISTÓRICAS PRELIMINARES SOBRE LOS GITANOS EN COLOMBIA. en: Documentos para el Desarrollo Territorial No. 19 –Bogotá, Mayo de 1999 P. 12. 28 BASES PARA EL PLAN NACIONAL DE DESARROLLO. Pág. 171 29 NOTAS ETNOGRÁFICAS E HISTÓRICAS PRELIMINARES SOBRE LOS GITANOS EN COLOMBIA. Op. Cit, y en Etnias de Colombia http://www.etniasdecolombia.org/grupos_gitanos.asp AUTODETERMINACIÓN DEL 12 también son los departamentos a los que pertenecen las ciudades donde se encuentran las principales kumpanias: Barranquilla, Cartagena, Cali, Cúcuta, Girón e Ipiales”30. La Dirección de Etnias del Ministerio del Interior sobre el pueblo rom ha señalado que: “Este grupo étnico posee una identidad étnica y cultural propia que se caracteriza por los siguientes aspectos: 1. Se es gitano por derecho de nacimiento 2. La larga tradición nómada y su transformación en nuevas formas de itinerancia. 3. Idea de un origen común de una historia compartida. 4. Idioma propio, el romanés o romai shib. 5. La valoración del grupo de edad y el sexo como principios ordenadores de estatus. 6. Fuerte cohesión interna y manejo de un complejo sistema de relaciones frente al no Rom (gadye). 7. Organización social basada en la configuración de grupos de parentesco o patrigrupos. 8. Articulación del sistema social con base en la existencia de linajes patrilineales, llamados vitsa, dispersos, independientes y autónomos que constituyen distintas kumpeneniyi. 9. Funciones cotidianas de la familia extensa especialmente en lo que a actividades económicas se refiere. 10. Vigencia de autoridades e instituciones tradicionales, como el Shero Rom o Jefe de Familia, y la Kriss o Tribunal de Shero Rom. 11. Respeto a un complejo sistema de valores: una fuerte solidaridad entre los patrigrupos, un intenso apego a la libertad individual y colectiva, un especial sentido de la estética tanto física como artística, una peculiar interpretación de los fenómenos naturales31” 3. Derechos de los grupos étnicos: Los Grupos étnicos constituyen alrededor del 13,91%32 de la población colombiana; es decir, son grupos minoritarios cuyos derechos deben ser garantizados para asegurar su supervivencia. Para ello la Constitución y los 30 Dane, COLOMBIA UNA NACIÓN MULTICULTURAL. Antes citado. 31 Dirección de Étnias del Ministerio del Interior y de Justicia. CIRCULAR NO. 1629. Bogotá, 2 de octubre de 2003. 32 Dane, COLOMBIA UNA NACIÓN MULTICULTURAL. Antes citado. 13 tratados de derechos humanos ratificados por el Estado33 los reconocen como sujetos de derechos colectivos de carácter fundamental34. Siguiendo la jurisprudencia de la Corte Constitucional35 puede afirmarse que: • • Los Grupos étnicos son sujetos colectivos autónomos y no una simple sumatoria de sus miembros. Los individuos que integran estos grupos se realizan a través de los mismos, hacen parte de una unidad con la cual se identifican a partir de las distintas vivencias comunitarias. Por ello, el grupo étnico y los individuos que lo conforman son titulares de derechos fundamentales. Esto es consecuencia necesaria del principio 33 El artículo 93 de la Constitución Política señala: “Los tratados y convenios internacionales ratificados por el Congreso que reconocen los derechos humanos y que prohíben su limitación en los estados de excepción prevalecen en el orden interno. Los derechos y deberes consagrados en esta Carta se interpretarán de conformidad con los tratados internacionales de derechos humanos ratificados por Colombia”. A partir de este artículo, al Corte Constitucional ha desarrollado el concepto de Bloque de Constitucionalidad, definiéndolo como: “El bloque de constitucionalidad está compuesto por aquellas normas y principios que, sin aparecer formalmente en el articulado del texto constitucional, son utilizados como parámetros del control de constitucionalidad de las leyes, por cuanto han sido normativamente integrados a la Constitución, por diversas vías y por mandato de la Constitución. Son pues verdaderos principios y reglas de valor constitucional, esto es, son normas situadas en el nivel constitucional a pesar de que puedan a veces contener mecanismos de reforma diversos al de las normas del articulado constitucional stricto sensu” (Sentencia C-225 de 1995, MP: Alejandro Martínez). Es por ello, que el Convenio 169 de la OIT, ratificado por la ley 21 de 1991 “Sobre pueblos indígenas y Tribales” hace parte del bloque de constitucionalidad y constituye un referente necesario para el ejercicio del control preventivo a favor de los derechos de los grupos étnicos. 34 Will Kymlicka, uno de los teóricos contemporáneos que más ha estudiado los retos de las sociedades multiculturales, acuñó el término de derechos diferenciados en función del grupo, con el cual pretende diferenciar los derechos reconocidos al sujeto colectivo para su supervivencia como grupo étnico de aquellos de los derechos colectivos de los ciudadanos, como por ejemplo, el derecho al medio ambiente sano. Según aduce, el término de derechos colectivos es demasiado amplio y supone una falsa dicotomía con los derechos individuales. Ver al respecto, entre otros, su libro CIUDADANÍA MULTICULTURAL. Editorial Paidós, 1ª. edición en español, Buenos Aires, 1996. 35 La Corte Constitucional se ha referido específicamente a los derechos colectivos fundamentales de los pueblos indígenas y de las comunidades afro-descendientes. Este punto no ha sido desarrollado por esa Alta Corporación en relación con el pueblo raizal ni gitano. Sin embargo, la Procuraduría considera que la plena realización del principio de diversidad étnica y cultural requiere del reconocimiento de derechos colectivos fundamentales a los grupos étnicos reconocidos por el Estado colombiano. Ver al respecto, entre otras sentencias: T-380 de 1993, T-955-03. 14 • • • de reconocimiento de diversidad étnica y cultural de la nación colombiana. Los representantes de los grupos étnicos pueden interponer acciones de tutela para la defensa de los derechos fundamentales de dichos grupos: “El reconocimiento exclusivo de derechos fundamentales al individuo, con prescindencia de concepciones diferentes como aquellas que no admiten una perspectiva individualista de la persona humana, es contrario a los principios constitucionales de democracia, pluralismo, respeto a la diversidad étnica y cultural y protección de la riqueza cultural”. Los derechos fundamentales de los grupos étnicos no deben confundirse con los derechos o intereses difusos colectivos de otros grupos humanos, la defensa de estos últimos se realiza a través de las acciones populares y no de la acción de tutela. Los derechos individuales de los integrantes de los grupos étnicos son objeto de protección constitucional, en caso de presentarse un conflicto de derechos entre los derechos fundamentales individuales y los colectivos, la decisión deberá orientarse hacia la medida menos gravosa para la identidad étnica y cultural del grupo étnico de que se trate. El artículo 1 del convenio 169 de la OIT, ratificado por el Congreso colombiano mediante la ley 21 de 1991 señala que éste es aplicable a los pueblos tribales y a los pueblos indígenas en países independientes; agregando que la conciencia de su identidad es el criterio fundamental para determinar los grupos a los cuales se aplica dicho convenio36. Con base en esta disposición la jurisprudencia de la Corte Constitucional y la Dirección de Etnias del Ministerio del Interior y de Justicia consideran que los afrodescendientes, los raizales y 36 El artículo 1 del convenio 169 de la OIT dispone: “1. El presente convenio se aplica a: a) a los pueblos tribales en países independientes, cuyas condiciones sociales culturales y económicas les distingan de otros sectores de la colectividad nacional, y que estén regidos total o parcialmente por sus propias costumbres o tradiciones o por una legislación especial; b) a los pueblos en países independientes, considerados indígenas por el hecho de descender de poblaciones que habitaban en el país o en una región geográfica a la que pertenece el país en la época de la conquista o la colonización o del establecimiento de las actuales fronteras estatales y que, cualquiera que sea su situación jurídica, conserven todas sus propias instituciones sociales, económicas, culturales y políticas, o parte de ellas. 2. La conciencia de su identidad indígena o tribal deberá considerarse un criterio fundamental para determinar los grupos a los que se aplican las disposiciones del presente Convenio. 3. La utilización del término «pueblos» en este Convenio no deberá interpretarse en el sentido de que tenga implicación alguna en lo que atañe a los derechos que pueda conferirse a dicho término en el derecho internacional”. 15 los gitanos reúnen las características de un pueblo tribal y por ello se les aplica dicho Convenio. Teniendo como fundamento el convenio 169 de la OIT y la Constitución Política colombiana los derechos de los grupos étnicos son: el derecho a la identidad étnica y cultural, al territorio, a la autonomía, a la participación y al desarrollo propio. Estos derechos tienen alcance diferente según el grupo étnico de que se trate, pues la Constitución y su desarrollo normativo han delimitado el marco aplicable para cada grupo étnico37. En este marco se desarrolla la política preventiva de la PGN a favor de los derechos de los grupos étnicos, veamos: II. EL CONTROL PREVENTIVO DE LA PGN PARA LA PROTECCION DE LOS DERECHOS DE LOS GRUPOS ETNICOS En este contexto, la política institucional pretende, desde el mandato de la PGN, contribuir a la realización del principio de diversidad étnica y cultural de la nación colombiana teniendo como fundamento la Constitución Política y los tratados internacionales suscritos por el gobierno nacional que se refieren a los derechos de los grupos étnicos. Los objetivos del ejercicio del control preventivo de la PGN a favor de los derechos de los grupos étnicos son: • Promover la realización del principio de reconocimiento de diversidad étnica y cultural de la Nación colombiana a través de la colaboración armónica entre los diferentes Organos del Estado. • Incidir sobre las políticas del Estado en favor de la protección y el respeto de los derechos de los grupos étnicos. El principio de interdependencia de los derechos fundamentales tiene plena aplicación tratándose de los grupos étnicos, pues la vigencia plena de sus derechos depende del goce efectivo de cada derecho. 1. La actuación preventiva de la PGN para la construcción del diálogo intercultural: 37 Esta situación se encuentra en armonía con lo dispuesto por el artículo 34 del Convenio 169 de la OIT que señala: “La naturaleza y el alcance de las medidas que se adopten para dar efecto al presente Convenio deberán determinarse con flexibilidad, teniendo en cuenta las condiciones propias de cada país. 16 La consolidación del Estado de Derecho38 colombiano tiene como uno de sus presupuestos necesarios la realización del principio de diversidad étnica y cultural. En una sociedad multicultural la identidad no es sólo individual, ésta se construye a partir del reconocimiento del otro. En ese sentido: “La identidad étnica, por esencia de tipo relacional y oposicional (definición de un “nosotros” diferente y oponible a los “otros”), requiere de un discurso basado en una experiencia compartida -real, inventada o mítica-, puesta en palabras mediante el recurso a la memoria39.” Por ello se hace necesario armonizar las tensiones que puedan surgir en razón de la coexistencia de diferentes grupos étnicos minoritarios con la sociedad hegemónica o entre las diferentes culturas minoritarias. Ello supone la ponderación de los diferentes derechos y el establecimiento de reglas para la solución de los eventuales conflictos. Tal como lo señaló la Corte Constitucional, el reconocimiento de la diversidad responde a una nueva visión del Estado: “en la que ya no se concibe a la persona humana como un individuo abstracto, sino como un sujeto con características particulares, que reivindica para sí su propia conciencia ética. En donde, valores como la tolerancia y el respeto por lo diferente, se convierten en imperativos dentro de una sociedad que se fortalece en la diversidad, en el reconocimiento de que en su interior cada individuo es un sujeto único y singular, que puede hacer posible su propio proyecto de vida. En este nuevo modelo, el Estado tiene la especial misión de garantizar que todas las formas de ver el mundo puedan coexistir pacíficamente, labor que no deja de ser conflictiva, pues estas concepciones muchas veces son antagónicas e incluso incompatibles con los presupuestos que él mismo ha elegido para garantizar la convivencia. En especial, son claras las tensiones entre reconocimiento de grupos culturales con tradiciones, prácticas y ordenamientos jurídicos diversos y la consagración de derechos fundamentales con pretendida validez universal. Mientras que una mayoría los estima como presupuestos intangibles, necesarios para un entendimiento entre naciones, otros se oponen a la existencia de postulados supraculturales, como una manera de afirmar su diferencia, y 38 En efecto, el artículo 1 de la Constitución Política señala: “Colombia es un Estado social de derecho, organizado en forma de República unitaria, descentralizada, con autonomía de sus entidades territoriales, democrática, participativa y pluralista, fundada en el respeto de la dignidad humana, en el trabajo y la solidaridad de las personas que la integran y en la prevalencia del interés general”. 39 Hoffmann, Odile. LA MOVILIZACIÓN IDENTITARIA Y EL RECURSO DE LA MEMORIA Nariño, Pacífico colombiano. En: MEMORIAS HEGEMÓNICAS, MEMORIAS DISIDENTES. C.Gnecco y M.Zambrano (eds.), 2000, Bogotá, ICAN-Universidad del Cauca, Pg. 97-120. 17 porque de acuerdo con su cosmovisión no ven en ellos un presupuesto vinculante40”. Ahora bien, el alcance de la política de reconocimiento del Estado colombiano ha sido definida principalmente por la Corte Constitucional41 quien ha fijado los mínimos jurídicos aplicables para la resolución de los diferentes conflictos interculturales. Es decir, los problemas que han surgido de la materialización del Estado plural, han debido ser judicializados para encontrar una solución. Esto pone de presente que las instituciones del Estado, los grupos étnicos y la sociedad mayoritaria, aún están en proceso de avanzar en el logro de soluciones consensuadas. En otros términos, ni el Congreso, ni las instituciones del Gobierno han logrado de manera participativa abordar y reglamentar el manejo de aquellas situaciones especialmente problemáticas en la construcción de sociedades plurales. Tratándose de los pueblos indígenas es ilustrativo el caso, entre otros, de la reglamentación de las Entidades Territoriales Indígenas –ETIS- y de la Jurisdicción Especial Indígena –JEI. Ello trae como consecuencia necesaria la polarización del debate político en donde los actores estatales y sociales comprometidos asumen posiciones irreconciliables. En este contexto, la construcción de un Estado plural es cada vez más difícil con el creciente peligro del desconocimiento de los derechos de los grupos étnicos. La Procuraduría General de la Nación, observa con preocupación esta situación, como órgano de control independiente con funciones preventivas, priorizará su actuación hacia la construcción del diálogo intercultural. Entendiendo que este debe darse en el marco del reconocimiento de derechos y deberes del Estado, los grupos étnicos y la sociedad mayoritaria. Principios y pautas de actuación institucional: ¾ La PGN contribuirá a la construcción de espacios de diálogo intercultural entre el Estado, los diferentes grupos étnicos y la sociedad mayoritaria, especialmente a través de la realización de actividades de difusión y 40 CORTE Constitucional, Sentencia T–523 de octubre 15 de 1997 En algunos casos también le ha correspondido al Consejo de Estado pronunciarse. Es de señalar que no siempre las dos máximas Corporaciones han compartido la misma interpretación, fue así como en la SU-039 de la Corte Constitucional, la Corte Constitucional en relación con el proceso de consulta al pueblo U’wa consideró que el proceso de consulta no se había surtido en debida forma. Por el contrario, el Consejo de Estado consideró que dicho proceso había sido adecuado; aún están latentes las repercusiones políticas de esta contradicción. 41 18 formación en los que confluyan actores institucionales y sociales. ¾ La actuación de la PGN debe contribuir a la realización del Estado plural, en donde los diferentes actores estatales y sociales conozcan sus deberes y derechos. Lo cual supone un trabajo de sensibilización con los diferentes actores y un seguimiento continuo al cumplimiento del Estado de su obligación de garantizar el derecho de participación política y social de los ciudadanos. ¾ La PGN, en el marco de su mandato constitucional, podrá actuar como ente facilitador para la solución de conflictos interculturales, interinstitucionales o intersociales. ¾ La PGN presentará informes de verificación con recomendaciones a las autoridades competentes, tendientes a avanzar en la consolidación del Estado plural y multicultural que proclama la Constitución Política. 2. El control preventivo de la PGN frente al impacto del conflicto armado en la vigencia de los derechos de los grupos étnicos: Uno de los derechos fundamentales de los grupos étnicos es el derecho a la integridad étnica y cultural que comprende el derecho a la subsistencia, derivado de la protección constitucional del derecho a la vida (artículo 11 de la Constitución Política) y la prohibición de ser sometidos a cualquier forma de desaparición forzada42. Actualmente, el conflicto armado interno amenaza la integridad étnica y cultural los pueblos indígenas y de las comunidades afrodescendientes43: “Los territorios étnicos, que generalmente estuvieron marginados de las dinámicas del desarrollo nacional o fueron objetos de economías extractivas de enclave y articulaciones distorsionadas (comercio del caucho, pieles de animales, maderas y ahora narcocultivos), pasaron a convertirse en escenarios estratégicos de la guerra, quedando las 42 Esta noción ha sido desarrollada por la Corte Constitucional refiriéndose a los pueblos indígenas y a las comunidades afro-descendientes. La Procuraduría considera que su fundamento es aplicable también al pueblo raizal y al pueblo gitano, pues este concepto garantiza su supervivencia como grupos diferenciados en la nación colombiana. 43 El pueblo raizal, ubicado en San Andrés y Providencia y el Pueblo Gitano cuyas kumpanías están ubicadas en zonas urbanas, no han sido afectados por el conflicto armado. 19 comunidades atrapadas entre fuegos cruzados y resultando víctimas de todos ellos44”. Los pueblos indígenas y las comunidades afro-descendientes han sido víctimas de numerosas violaciones a sus derechos humanos: masacres, ejecuciones extra-judiciales (muchas de los cuales obedecen a homicidios selectivos), desplazamientos forzados, desapariciones forzadas, reclutamiento forzado de jóvenes y niños en grupos armados al margen de la ley, varias de las mujeres pertenecientes a éstos grupos han sido víctimas de diversas formas de violencia sexual. En algunas ocasiones, los grupos armados ilegales han bloqueado el tránsito de provisiones hacia las comunidades, les han prohibido enterrar los cadáveres de sus muertos y han sembrado minas antipersonales en sus territorios, etc. Además, se han documentado casos en los cuales los actores armados desconocen las formas de autoridad propia de los grupos étnicos, imponiendo normas comunitarias, entre ellas la prohibición a los hombres de usar el pelo largo, de realizar algunas practicas tradicionales, etc y resolviendo problemas cuyo tratamiento le corresponde a las autoridades tradicionales, entre ellos, conflictos entre las parejas, problemas en la educación de los hijos, etc45. En el marco del conflicto armado interno, los pueblos indígenas y las comunidades afro-descendientes han sido víctimas de la expropiación de territorios, semovientes y cultivos; los actores armados han obligado a las comunidades a sembrar cultivos ilícitos o han impedido su erradicación; en algunos casos, también han impedido la entrada de brigadas de salud, el trabajo de los maestros, de los defensores de derechos humanos. En conclusión estos actores han realizado una serie de acciones dirigidas que han conllevado a la desestabilizacion y desintegración de la vida cotidiana de los grupos étnicos y de sus relaciones armónicas con la naturaleza. Esta situación además de vulnerar los derechos individuales de los integrantes afecta los derechos colectivos del grupo étnico: la pérdida de la identidad puesto que el conflicto desarticula las formas de organización propias, impide la reproducción étnica y cultural (asesinato de líderes, guías espirituales, mujeres) y del territorio colectivo que contribuye a la desagregación cultural debido a la dispersión de los miembros. Es decir, de esta manera se pone en riesgo su supervivencia como pueblos o colectividades con identidad propia. 44 45 PROPUESTA PARA UNA POLÍTICA DE DERECHOS HUMANOS DE GRUPOS ÉTNICOS, Op. Cit. SÁNCHEZ, Botero, Esther. DERECHOS PROPIOS. Op. Cit, pg 205 y siguientes. El capítulo 9 de dicho libro describe casos de usurpación de funciones por parte de la guerrilla para la administración de justicia y las acciones de gobernabilidad de las autoridades indígenas. 20 En ese sentido: “Los impactos de la violencia son también culturalmente diferentes pues se profana no solamente la vida de las personas sino la cosmovisión, las relaciones con la tierra, la naturaleza, los seres espirituales y la identidad comunitaria. Así lo demuestra el reciente caso de suicidio de niños Embera del Atrato (Chocó), en octubre de 2003, atribuido por los jaibanás (shamanes) al castigo de los espíritus de la selva por tantos muertos de los combates entre guerrilla y paramilitares, que no tuvieron sepultura46”. Es de señalar que el Relator Especial de Naciones Unidas para las cuestiones indígenas, en relación con la afectación del conflicto armado a los pueblos indígenas señaló su preocupación por: “La situación de algunas comunidades muy pequeñas que se encuentran al borde de la extinción por los asesinatos de sus dirigentes, masacres, amenazas y dispersión forzada de sus pobladores”47. Para mitigar los impactos del conflicto armado sobre sus territorios, los pueblos indígenas y las comunidades afro-descendientes han desarrollado numerosos mecanismos de resistencia: la declaratoria de la neutralidad ante el conflicto, la constitución de sus territorios como comunidades de paz, el apoyo en ONG’s que buscan brindar seguridad no armada, como brigadas de paz, la solicitud de medidas cautelares ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos – CIDH-. Los pueblos indígenas han buscado fortalecer su autonomía a través del fortalecimiento y/o conformación de guardias comunitarias y de la protección shamánica de los territorios. Es de destacar que: “Un mecanismo de la resistencia indígena que se ha destacado en el contexto del conflicto armado ha sido la protección shamánica para los indígenas y afrocolombianos. Los paramilitares y las guerrillas desconfían y temen la acción de los shamanes, por lo cual ambos actores han cometido atropellos contra los médicos tradicionales, dejando profundos resentimientos en las comunidades. A mediados de mayo de 2002, después de la masacre de Bojayá, las comunidades negras realizaron la Noche de las Maldiciones y los Maleficios: “con ese acto quedaron malditas las FARC por matar a 119 campesinos que estaban resguardados en la iglesia de Bojayá 46 47 Idem. Comisión de Derechos Humanos. E/CN.4/2005/88/Add.2. INFORME DEL RELATOR ESPECIAL SOBRE LA SITUACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS Y LAS LIBERTADES FUNDAMENTALES DE LOS INDÍGENAS, Sr. Rodolfo Stavenhagen. Misión a Colombia. 10 de noviembre de 2004. Sirve de ilustración, la situación del pueblo Nukak-makú, pueblo que recientemente entró en contacto con la población mayoritaria: inicialmente una epidemia de gripe diezmó su población, recientemente algunos de sus miembros han sido víctimas de desplazamiento forzado, de asesinatos, lo cual ha puesto en peligro de extinción. 21 (Chocó), los paramilitares por haberse refugiado en las afueras del templo y el Estado por no haber escuchado sus continuos llamados de ayuda”48. Esto lleva a la conclusión de que el Estado no ha cumplido con sus obligaciones de protección, prevención y garantía de los derechos humanos de los grupos étnicos. Este incumplimiento se ha dado tanto por acción como por omisión: la inadecuada respuesta a las alertas tempranas, la impunidad en la investigación y sanción de los responsables de las violaciones de los derechos humanos, la inadecuada respuesta a las medidas cautelares decretadas por la CIDH, la insuficiente atención a los desplazados, etc. En este contexto, el ejercicio del control preventivo que le corresponde ejercer a la Procuraduría General de la Nación debe: “…De un lado, detener la actuación del Estado que viole los derechos humanos o atente contra ellos; y de otro, impulsar la acción estatal en relación con los deberes que le competen49”; esto significa que “la cláusula constitucional del Estado social de derecho abre el camino para que el control ejercido por la PGN en lo que a prevención de violación de derechos humanos se refiere, no se reduzca a asegurar que los organismos del Estado no penetren el núcleo esencial de los derechos – lo que de por sí es muy importante – sino que, además, se demanden continuamente del Estado todas las acciones, recursos y esfuerzos necesarios tendientes a propiciar el mejoramiento estructural de las condiciones de vida de las personas que habitan en su territorio”50. Tratándose del impacto del conflicto armado sobre los grupos étnicos, la respuesta preventiva de la Procuraduría General de la Nación debe atender las diferencias culturales y estar orientada al respeto de los derechos individuales y colectivos de estos grupos. La Procuraduría General de la Nación como Organo de control independiente realiza el seguimiento a las políticas públicas del Gobierno Nacional en materia de Derechos Humanos, exige su cumplimiento y se pronuncia sobre su contenido en una perspectiva de respeto a los derechos humanos y a la identidad cultural de los grupos étnicos. Igualmente promueve que las políticas del Gobierno Nacional se elaboren y apliquen de manera participativa con los representantes de estos grupos51. 48 PROPUESTA PARA UNA POLÍTICA DE DERECHOS HUMANOS DE GRUPOS ÉTNICOS, Op. Cit. El autor toma como referencia un artículo de “El Tiempo” del 19 de mayo de 2002, pág. 4. Los indígenas paeces del Cauca, a través de sus guardias comunitarias han puesto límites a la incursión de actores armados en su territorio y les han obligado en algunos casos a devolver a personas secuestradas. 49 PGN, FUNCIÓN PREVENTIVA, pg. 21. 50 FUNCIÓN PREVENTIVA, p. 26. 51 El Control preventivo que ejerce la PGN se realiza sin perjuicio del ejercicio de las competencias disciplinarias de la entidad. En ese sentido, una sanción disciplinaria 22 La Procuraduría es consciente de que la vulneración de los derechos de los grupos étnicos en el marco del conflicto armado sólo cesará de manera definitiva con la consolidación de la paz, presupuesto necesario para el fortalecimiento de las instituciones democráticas y del Estado plural que proclama la Constitución Política. Entre tanto, la Procuraduría continuará velando por el respeto de los derechos humanos y de los principios del Derecho Internacional Humanitario, de los grupos étnicos y demás comunidades que se encuentran afectadas por el conflicto armado interno. Principios y pautas de actuación institucional: ¾ La PGN en el seguimiento a las políticas públicas del Gobierno Nacional en materia de Derechos Humanos exige su cumplimiento desde una perspectiva de respeto a los derechos humanos y a la identidad cultural de los grupos étnicos. ¾ La PGN promueve que las políticas del Gobierno Nacional se elaboren y apliquen de manera participativa con los representantes de estos grupos. ¾ La PGN apoya, en el marco de la Constitución y la ley, el fortalecimiento de las formas propias de resolución de conflictos y la implementación de medidas de protección de los grupos étnicos. ¾ La PGN realiza el seguimiento de las medidas cautelares ordenadas por la CIDH a favor de los grupos étnicos, en especial, vela porque su implementación se haga de manera concertada con los peticionarios y beneficiarios de las mismas. ¾ La PGN continuará verificando la situación de los grupos étnicos afectados por el conflicto armado y promoviendo el respeto de los principios del DIH por los actores armados. ¾ La PGN promoverá que las políticas públicas que se refieran a los derechos a la verdad, justicia y reparación de los grupos étnicos respeten el derecho a su identidad étnica y cultural. ¾ La PGN dará un seguimiento especial, a que las políticas del Gobierno Nacional que se refieren a la reparación de los grupos étnicos, incluyan medidas de reparación individual y colectiva, teniendo en cuenta su identidad étnica y cultural. ¾ La PGN ejercerá labores de control y seguimiento frente a las recomendaciones y requerimientos que formulen al Estado los ejemplarizante tiene alcance preventivo dado su efecto disuasivo sobre la eventual comisión de nuevos hechos. La impunidad es una de las causas de recurrencia de las violaciones a los derechos humanos. 23 organismos internacionales de derechos humanos en relación con la vulneración de los derechos de los grupos étnicos que se derivan del conflicto armado. ¾ La PGN demandará del Estado la adopción de medidas que garanticen el respeto por el territorio, los lugares sagrados y las autoridades tradicionales de los grupos étnicos por parte de los actores armados regulares e ilegales. 3. EL CONTROL PREVENTIVO DE LA PGN Y EL DERECHO A LA IDENTIDAD DE LOS GRUPOS ETNICOS La definición de grupo étnico está intrínsicamente ligada a la noción de identidad étnica y cultural. El derecho a la identidad cultural se deriva del principio a la diversidad cultural establecido, entre otros, en los artículos 1, 7 y 7052 de la Constitución. Este derecho es un derecho fundamental de los grupos étnicos, de carácter colectivo, cuya garantía es necesaria para su supervivencia como colectividades con formas de vida y concepciones del mundo diferentes a las de la sociedad mayoritaria. Tal como lo señaló la Corte Constitucional: “El mencionado derecho se materializa, entre otras manifestaciones, en la medida en que las comunidades que no ostentan los valores culturales y sociales de la sociedad mayoritaria puedan ejercer sus derechos fundamentales de acuerdo con su propia manera de ver el mundo. Ello implica que también los individuos que pertenecen a una comunidad indígena puedan expresarse y autodeterminarse de acuerdo con su cosmovisión cultural dentro y fuera de sus territorios. …Entonces, el derecho a la identidad cultural se proyecta en dos dimensiones una colectiva y otra individual. La primera se trata de la protección constitucional que se le otorga a la comunidad como sujeto de derechos y la segunda la protección que se le otorga al individuo para poder preservar el derecho de esa colectividad. Lo anterior comprende dos tipos de protección a la identidad cultural una directa que ampara a la comunidad como sujeto del derecho y otra indirecta que ampara al individuo para proteger la identidad de la comunidad. La protección a la identidad cultural de la comunidad como sujeto de derechos no supone que no se deban garantizar las manifestaciones individuales de dicha identidad ya que la protección del individuo puede ser 52 El inciso 2 del artículo 70 de la Constitución Política dispone: “Principio de igualdad de las culturas. La cultura en sus diversas manifestaciones es fundamento de la nacionalidad. El Estado reconoce la igualdad y dignidad de todas las que conviven en el país (...)”. 24 necesaria para la materialización del derecho colectivo del pueblo indígena al cual pertenece53”. Aunque la sentencia señalada se refiere expresamente a los pueblos indígenas, este análisis es aplicable a los grupos étnicos existentes en el país. Ahora bien, la relación existente entre el derecho del grupo a la identidad étnica y cultural y el derecho individual a la identidad puede admitir limitaciones originadas en la protección de derechos de superior jerarquía, entendidos como mínimos jurídicos que los grupos étnicos deben respetar, estos mínimos hacen parte del núcleo esencial de los derechos fundamentales de los individuos que el grupo no puede desconocer. Ello requiere de la ponderación de los derechos e intereses en cada caso específico. Igualmente la Corte ha admitido la aplicación de excepciones etno-culturales cuando la norma general afecta la identidad étnica del individuo. Siguiendo la jurisprudencia de la Corte Constitucional pueden determinarse los siguientes elementos del derecho a la identidad étnica y cultural de los grupos étnicos54: • • • • • El Estado tiene la obligación de promover la difusión de los valores culturales de la Nación En aplicación del anterior mandato constitucional es posible efectuar excepciones etnoculturales a reglas generales siempre que dicha excepción no contravenga ninguno de los límites establecidos al derecho a la identidad cultural: la excepción de la prestación del servicio militar a los indígenas que viven en sus resguardos y conservan sus costumbres es una de esas excepciones. Los límites establecidos por la jurisprudencia al derecho a la identidad cultural comprenden la protección de ciertos derechos individuales o valores que después de una ponderación demuestren tener un mayor peso en el caso concreto El derecho a la identidad cultural está radicado en cabeza de los grupos étnicos como sujetos colectivos y su protección se puede dar ya sea por vía directa, protegiendo a la comunidad, o por vía indirecta, protegiendo a un individuo de la misma, en aras de la protección a la comunidad El ejercicio del derecho a la identidad cultural no se circunscribe al ámbito territorial del grupo étnico. El derecho a la identidad étnica y cultural comprende entre otros: el derecho al mantenimiento de sus usos y costumbres (traje, rituales, alimentación etc); el 53 Corte Constitucional, Sentencia T-778-05, Magistrado Ponente: Manuel José Cepeda, Bogotá, 2005. 54 Idem. 25 derecho a la utilización de su propio idioma (educación bilingüe, traducción en caso de ser necesario, la oficialidad de la lengua, la toma de medidas que eviten la extinción de la lengua); el derecho a la cultura material (protección del conocimiento tradicional, de la religión y/o prácticas tradicionales, de la medicina tradicional, de los sitios arqueológicos, históricos y sagrados, a las expresiones de su cultura, arte, etc); el derecho a la etno-educación55, etc. El ejercicio del control preventivo en relación con la protección del derecho a la identidad étnica se concreta en el seguimiento a las políticas públicas del Gobierno Nacional y de las administraciones departamentales, municipales y locales que deben promover el derecho a la identidad étnica y cultural en los diferentes ámbitos de su competencia. En ese sentido, la Procuraduría vigila que las políticas públicas respeten el ejercicio de éste derecho y garanticen la reproducción étnica y cultural de los grupos étnicos. Principios y pautas de actuación institucional: ¾ La PGN respeta la identidad étnica y cultural de los grupos étnicos del país, teniendo en cuenta la diversidad existente en cada uno de estos grupos y promueve las manifestaciones externas de este derecho. ¾ La PGN realiza el seguimiento a las políticas públicas de manera tal que éstas respeten la identidad de los pueblos indígenas. En especial se realizará el seguimiento a los políticas relacionadas con la etnoeducación y la medicina tradicional. ¾ La PGN promueve la aplicación de excepciones etno-culturales que permiten la vigencia de los derechos de los grupos étnicos. ¾ La PGN promueve el respeto de los sitios arqueológicos y sagrados de los grupos étnicos, en ese sentido, vigilará que las políticas públicas contribuyan a su salvaguarda. ¾ La PGN realiza el seguimiento a la resolución de los conflictos entre los derechos individuales y los derechos colectivos del grupo. Entendiendo que la identidad individual se construye a partir de la identidad colectiva. ¾ La PGN promueve el respeto del derecho a la identidad étnica y cultural en el marco de los principios constitucionales y los derechos fundamentales del grupo y del individuo. ¾ La PGN propicia espacios para el fortalecimiento de las relaciones interculturales, que permitan superar los conflictos que se presenten 55 Estas variables, además del marco jurídico existente, han tenido en cuenta, la propuesta de Ricardo Calla Ortega, en LA PERSPECTIVA DE LA DIVERSIDAD ÉTNICA EN DERECHOS HUMANOS ALGUNOS APORTES PARA UNA DISCUSIÓN URGENTE. Mayo de 2001. 26 entre grupos étnicos, sociedad y Estado. ¾ La PGN recomienda e impulsa la adopción de medidas afirmativas que permitan reproducir la integridad étnica y cultural de las comunidades negras, indígenas, raizal y del pueblo Rom. ¾ La PGN requerirá del Estado la adopción de medidas tendientes a proscribir prácticas discriminatorias o excluyentes por razón de la pertenencia a un grupo étnico. ¾ La PGN demandará del Estado el cumplimiento de las obligaciones derivadas de la suscripción de los instrumentos internacionales orientados a garantizar la plena realización de los derechos de los grupos étnicos. 4. EL CONTROL PREVENTIVO DE LA PGN Y EL DERECHO AL TERRITORIO DE LOS GRUPOS ETNICOS El derecho al territorio es un derecho fundamental de carácter colectivo de los grupos étnicos. En ese sentido la Corte Constitucional ha entendido que: “El grupo étnico requiere, para sobrevivir, del territorio sobre el cual se ha asentado56”. Igualmente el Convenio 169 de la OIT57 dispone que los Gobiernos deben reconocer la importancia del territorio para el mantenimiento de la cultura de los grupos étnicos así como reconocerles el derecho de la propiedad sobre la tierra. 56 Corte Constitucional. SENTENCIA T-188 DE 1993. MP “Artículo 13 … los gobiernos deberán respetar la importancia especial que para las culturas y valores espirituales de los pueblos interesados reviste su relación con las tierras o territorios, o con ambos, según los casos, que ocupan o utilizan de alguna otra manera, y en particular los aspectos colectivos de esa relación.” Artículo 14. 1. Deberá reconocerse a los pueblos interesados el derecho de propiedad y de posesión sobre las tierras que tradicionalmente ocupan. Además, en los casos apropiados, deberán tomarse medidas para salvaguardar el derecho de los pueblos interesados a utilizar tierras que no estén exclusivamente ocupadas por ellos, pero a las que hayan tenido tradicionalmente acceso para sus actividades tradicionales y de subsistencia. A este respecto, deberá prestarse particular atención a la situación de los pueblos nómadas y de los agricultores itinerantes. 2. Los gobiernos deberán tomar las medidas que sean necesarias para determinar las tierras que los pueblos interesados ocupan tradicionalmente y garantizar la protección efectiva de sus derechos de propiedad y posesión. 3. Deberán instituirse procedimientos adecuados en el marco del sistema jurídico nacional para solucionar las reivindicaciones de tierras formuladas por los pueblos interesados”. CONVENIO169 DE LA OIT. Antes citado. 57 27 La Carta Constitucional en desarrollo del principio de diversidad étnica y cultural dispone en su artículo 63 que las tierras comunales de los grupos étnicos y las tierras de resguardos son imprescriptibles, inenajenables e inembargables58. Es decir la Constitución protege de manera especial los aspectos colectivos del territorio de los grupos étnicos. Es de señalar que la propiedad colectiva de los grupos étnicos, de la misma manera que la propiedad privada, está dotada de una función social y ecológica que implica obligaciones. Es necesario tener en cuenta que el tratamiento legal de los territorios étnicos es diferente según el grupo de de que se trate, veamos: a. El alcance de la definición de territorio para los grupos étnicos: - Pueblos indígenas: Los resguardos de los pueblos indígenas son imprescriptibles, inenajenables e inembargables59. La situación de los derechos territoriales de los pueblos indígenas es muy variada, depende de las condiciones socio-geográficas de cada uno de los 82 pueblos indígenas reconocidos. Si bien, aproximadamente el 30% del territorio colombiano está titulado como resguardo, el ejercicio real del domino de las comunidades sobre estos territorios en muchos casos no se da o está en riesgo. Los principales factores que afectan negativamente el derecho al territorio de los pueblos indígenas son: el impacto del conflicto armado, la insuficiencia o no titulación de tierras, la presencia de cultivos ilícitos y los mega-proyectos. Adicionalmente los territorios indígenas tienen vocación de Entidades Territoriales Indígenas: El artículo 329 de la Constitución Política señala que: “La conformación de las entidades territoriales indígenas se hará con sujeción a lo dispuesto en la Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial, y su delimitación 58 ARTICULO 63. Los bienes de uso público, los parques naturales, las tierras comunales de grupos étnicos, las tierras de resguardo, el patrimonio arqueológico de la Nación y los demás bienes que determine la ley, son inalienables, imprescriptibles e inembargables. Inalienables Se dice de aquel bien que está por fuera del mercado de tierras y no puede ser enajenado ni transferido a ningún título. Imprescriptibles Es decir, el derecho de propiedad sobre el bien no es susceptible de extinción por el paso del tiempo. Inembargables Significa que sobre estos bienes no procede el embargo que es una figura del Derecho procesal consistente en la ocupación e intervención judicial de determinados bienes, hecha por mandamiento de juez competente, bien por razón de delito o bien con la finalidad de sujetarlos al cumplimiento de las responsabilidades derivadas del impago de deudas o de otra obligación de índole económica. 59 La ley 70 de 1993, en desarrollo del artículo 55 transitorio de la Constitución le otorgó el carácter de tierras colectivas, en los términos del artículo 63 de la Carta, a las tierras de las comunidades negras ubicadas en la Cuenca y Ríos del Pacífico. 28 se hará por el Gobierno Nacional, con participación de los representantes de las comunidades indígenas, previo concepto de la Comisión de Ordenamiento Territorial”. La ley aún no ha regulado las Entidades Territoriales Indígenas, en el momento en que éstas sean conformadas, los territorios indígenas además ser colectivos se equipararán a las otras entidades territoriales del país. - Comunidades afro-descendientes: Al igual que los resguardos, las tierras tituladas a las comunidades negras de la Cuenca y Ríos del Pacífico, son imprescriptibles, inenajenables e inembargables60. La titulación colectiva de tierras a las comunidades afro-descendientes inició con la expedición de la ley 70 de 1993. De manera simultánea al progreso de la titulación de tierras, el conflicto armado escaló su arremetida en contra de las comunidades negras del Pacífico, especialmente los Consejos Comunitarios de Jiguamiandó y las familias de Curvaradó. Quienes han sido víctimas de desplazamientos forzados, masacres, desapariciones forzadas, etc. Estas comunidades actualmente son beneficiarias de medidas provisionales ordenadas por la Corte Interamericana de Derechos Humanos61. El conflicto armado que se vive en los territorios de las comunidades afrodescendientes se da en el marco de intereses económicos que buscan el control territorial sobre el corredor geográfico del Darién colombiano y de mega-proyectos relacionados con el cultivo de palma africana y la explotación ilegal de madera. - El pueblo raizal: Como se señaló anteriormente, este pueblo está ubicado en San Andrés, Providencia y los demás islotes e islas del Archipiélago. La Constitución busca proteger el territorio del pueblo raizal a través de medidas especiales que controlen la densidad, limiten los derechos de circulación y residencia, regulen el uso del suelo y sometan a condiciones especiales “la enajenación de bienes” del Archipiélago. Ello por cuanto la fuerte inmigración que se ha dado hacia el Archipiélago ha traído como consecuencia que el pueblo raizal sea actualmente minoría, situación que pone en peligro su subsistencia como pueblo diferenciado. Es decir, el estatuto jurídico especial de San Andrés busca proteger al pueblo raizal, la propiedad del pueblo raizal no es tratada como propiedad colectiva, la propiedad de los integrantes del pueblo raizal es concebida en términos de 60 La ley 70 de 1993, en desarrollo del artículo 55 transitorio de la Constitución le otorgó el carácter de tierras colectivas, en los términos del artículo 63 de la Carta, a las tierras de las comunidades negras ubicadas en la Cuenca y Ríos del Pacífico. 61 CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS, Resoluciones de 6 de marzo de 2003 y de 17 de noviembre de 2004, a favor de todos los miembros del Consejo Comunitario del Jiguamiandó y las familias del Curbaradó. 29 propiedad privada62. Al respecto, el decreto 1811 de 2003 que regula el acceso a la vivienda de interés social en el Archipiélago, establece que la población nativa o raizal será beneficiaria de éste programa y de sus subsidios, definiendo que las postulaciones serán de carácter colectivo y que sólo podrá postular esta población. Además determina que la vivienda de interés social debe respetar la tradición arquitectónica de éste pueblo. De esta manera se busca promover la agrupación del pueblo raizal, evitando su dispersión que eventualmente puede llevar a la desaparición de su identidad cultural. - El pueblo rom: aunque es tradicionalmente nómada, en los estudios que se refieren a los Rom de Colombia demuestran que su habitual itinerancia se ha adaptado a las nuevas realidades, sin que pueda afirmarse que se ha transformado en sedentario, se afirma que actualmente son semi-nómadas63. Dado su reciente reconocimiento, no existe en la legislación un desarrollo específico destinado a la protección del derecho al territorio del pueblo Rom. Por su parte, el Convenio 169 de la OIT señala que los gobiernos deberán prestar atención a los derechos territoriales de los pueblos nómadas y/o de agricultores itinerantes. El pueblo Rom es uno de los sectores de la población marginados, por ello, varios de sus integrantes no tienen acceso a ningún tipo de propiedad (programas de acceso a vivienda de interés social). En la perspectiva de mantenimiento de la identidad Etnica y cultural se requiere que el Estado diseñe políticas afirmativas de manera tal que se garantice la protección de las diversas Kumpanías existentes en el país, necesarias para el mantenimiento y reproducción cultural de los rom de Colombia. En este contexto, la protección legal de los territorios de los pueblos indígenas y comunidades afrodescendientes no ha garantizado de manera real el derecho a 62 El artículo 310 de la Constitución Política dispone: El Departamento Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina se regirá, además de las normas previstas en la Constitución y las leyes para los otros departamentos, por las normas especiales que en materia administrativa, de inmigración, fiscal, de comercio exterior, de cambios, financiera y de fomento económico establezca el legislador. Mediante ley aprobada por la mayoría de los miembros de cada cámara se podrá limitar el ejercicio de los derechos de circulación y residencia, establecer controles a la densidad de la población, regular el uso del suelo y someter a condiciones especiales la enajenación de bienes inmuebles con el fin de proteger la identidad cultural de las comunidades nativas y preservar el ambiente y los recursos naturales del Archipiélago. Mediante la creación de los municipios a que hubiere lugar, la Asamblea Departamental garantizará la expresión institucional de las comunidades raizales de San Andrés. El municipio de Providencia tendrá en las rentas departamentales una participación no inferior del 20% del valor total de dichas rentas”. 63 Comisión de Derechos Humanos. E/CN.4/2005/88/Add.2. INFORME DEL RELATOR ESPECIAL SOBRE LA SITUACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS Y LAS LIBERTADES FUNDAMENTALES DE LOS INDÍGENAS. Op. Cit. 30 la propiedad colectiva de estos grupos étnicos. Tal como lo expuso el Relator Especial de la Naciones Unidas para las cuestiones indígenas: “… es motivo de preocupación que las comunidades indígenas aún teniendo legalmente la posesión de los resguardos no están en posición de poder proteger adecuadamente sus territorios de invasiones o apropiaciones ilegales ni de ejercer efectivamente su derecho de determinar los usos que se den a las tierras, sobre todo cuando hay fuertes intereses económicos foráneos que disputan el control de las mismas64.” Ambos grupos étnicos han sido víctimas impotentes del impacto ambiental negativo que sobre su territorio tienen las situaciones descritas, lo cual lleva a la pérdida de un ecosistema estratégico para la subsistencia no sólo de los grupos étnicos sino de la sociedad colombiana. b. Derechos territoriales y protección del medio ambiente: El principio 22 de la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, señala: “Las poblaciones indígenas y sus comunidades, así como otras comunidades locales, desempeñan un papel fundamental en la ordenación del medio ambiente y en el desarrollo debido a sus conocimientos y prácticas tradicionales” Los pueblos indígenas, las comunidades afro-descendientes de la Cuenca del Pacífico y el pueblo raizal han sido considerados “guardianes de la naturaleza”, pues su conocimiento tradicional ha permitido la conservación de los diferentes ecosistemas en que habitan. El algunos casos se da el traslape o superposición de territorios de grupos étnicos con áreas de parques naturales. Esto no contradice el derecho de propiedad colectiva de los grupos étnicos, pues la misma como se indicó anteriormente tiene una función social y ecológica. Sin embargo, se hace necesario establecer claros mecanismos de coordinación entre las autoridades de los grupos étnicos y las autoridades ambientales. Estas últimas no pueden desconocer la propiedad colectiva que sobre algunas áreas de los parques nacionales ostentan los grupos étnicos. c. Límites a la protección de los derechos territoriales de carácter colectivos de los grupos étnicos: La Corte Constitucional en sentencia T-405 de 199365 estableció como límite al derecho de propiedad colectiva de las 64 Comisión de Derechos Humanos. E/CN.4/2005/88/Add.2. INFORME DEL RELATOR ESPECIAL SOBRE LA SITUACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS Y LAS LIBERTADES FUNDAMENTALES DE LOS INDÍGENAS. Op. Cit. 65 Corte Constitucional. SENTENCIA T-405 DE 1993 MP: Hernando Herrera Vergara. Bogotá, 1993. 31 comunidades indígenas manifestaciones concretas, no generales y abstractas, de la seguridad nacional. La sentencia revisó el caso de las comunidades indígenas huitoto y muinane que solicitaban se les amparan sus derechos fundamentales a la existencia como pueblos indígenas, el derecho a la integridad cultural, social y económica y el derecho a la autonomía por las labores de instalación de bases militares y de un radar al interior de los predios del Resguardo de Monochoa, propiedad colectiva de estos grupos étnicos. La Corte en esa oportunidad expresó: “Según lo anterior, si bien se trata de dos intereses colectivos, es evidente que desde el punto de vista del derecho en el que se funda cada interés, las pretensiones del Estado colombiano poseen un mayor peso que las de la Comunidad Indígena del Medio Amazonas, sin desconocer en ningún momento la importancia de sus intereses. Mientras que su interés se funda en el derecho de propiedad y al mantenimiento de su integridad étnica y cultural, el interés de todo el pueblo colombiano y en concreto del Estado está respaldado y fundamentado en el derecho a la soberanía nacional y en la necesaria conservación del orden público y la garantía fundamental de la seguridad de los habitantes del territorio colombiano en su vida, honra, bienes, creencias, y demás derechos y libertades”. Resulta claro entonces que, la Política de control preventivo de la PGN en relación con la protección de los derechos territoriales de los grupos étnicos esta estrechamente relacionada con la prevención de los impactos del conflicto armado. Igualmente, las líneas de acción de la política se han construido a partir de las particularidades de cada uno de los grupos étnicos existentes en el país y su papel en la conservación del medio ambiente. Principios y pautas de actuación institucional: ¾ La PGN vigilara que los grupos étnicos puedan ejercer eficazmente sus derechos sobre los territorios que les sean adjudicados por el Estado. ¾ La PGN verificará que los grupos étnicos puedan acceder al uso de los recursos naturales existentes en sus territorios, conforme a las disposiciones contenidas en los convenios internacionales, particularmente a lo previsto en el Convenio 169 de la OIT. ¾ La PGN intervendrá ante las autoridades a fin de garantizar que los grupos étnicos sean dotados de tierras adecuadas conforme a sus necesidades y practicas tradicionales. ¾ La PGN velará por que los grupos étnicos le den el uso adecuado a las tierras que les sean adjudicadas. ¾ La PGN velará porque las políticas públicas garanticen el respeto de los 32 territorios étnicos afectados por el conflicto. En ese sentido realizará el seguimiento a las medidas de recuperación implementadas. ¾ La PGN dará seguimiento al cumplimiento de las medidas de protección de los territorios de los grupos étnicos ordenadas por los Organismos Internacionales de protección de los derechos humanos. 5. EL CONTROL PREVENTIVO DE LA PGN Y EL DERECHO A LA AUTONOMIA DE LOS GRUPOS ETNICOS: El derecho a la autonomía de los grupos étnicos es el derecho del grupo a regirse según sus usos y costumbres. Este derecho se deriva de la política de reconocimiento del Estado a grupos diferenciados que existen en su interior. Es necesario resaltar que esta noción no es equiparable al concepto de soberanía cuya titularidad corresponde a los Estados independientes, por ello, la autonomía se expresa en relación con el Estado colombiano que reconoce al grupo étnico. En ese sentido: “La autonomía para los grupos étnicos es la expresión del principio constitucional de la unidad en la diversidad, de la caracterización de la nación colombiana como una nación pluriétnica y multicultural, la coexistencia de diversidad de pueblos, culturas, lenguas, sistemas de gobierno, de organización social, sistemas jurídicos, etc. El reconocimiento y respeto por las diferencias, por la diversidad étnica y cultural que caracteriza a nuestra nación, constituye una base fundamental para la paz y la gobernabilidad del país66”. El derecho a la autonomía es necesario para la reproducción étnica y cultural de los grupos étnicos, la plena realización de este derecho permite que el grupo étnico no sea asimilado a la sociedad mayoritaria, por ello, este derecho además de ser colectivo es un derecho fundamental. El derecho a la autonomía tiene dos componentes básicos: el reconocimiento a las formas propias de gobierno y la protección a los usos y costumbres comunitarios. El Estado colombiano reconoce diferentes grados de autonomía según el grupo de que se trate. Siguiendo la jurisprudencia de la Corte Constitucional puede establecerse el siguiente marco para el ejercicio de la autonomía de los grupos étnicos67: 66 PROPUESTA PARA UNA POLÍTICA DE DERECHOS HUMANOS DE GRUPOS ÉTNICOS, Op. Cit. Estos criterios se han definido siguiendo la metodología utilizada por Esther Sánchez Botero para la determinación de las reglas del ejercicio de la jurisdicción especial indígena. El esfuerzo realizado en este documento pretende completar el mencionado análisis sintetizando las normas de autonomía aplicables a los cuatro grupos étnicos 67 33 • • • • • • • A mayor conservación de usos y costumbres mayor autonomía68: La protección constitucional a este derecho es mayor, cuanto más el grupo ha preservado su identidad étnica y cultural. Los derechos fundamentales constitucionales establecen el mínimo obligatorio de convivencia para todos los particulares. En caso de conflicto entre dos derechos de igual jerarquía, se aplicará la medida menos gravosa para la autonomía de los grupos étnicos. El derecho a la autonomía del grupo protege el aspecto colectivo del derecho orientado a su supervivencia étnica y cultural y el aspecto individual de sus integrantes, que les permite vivir de conformidad con los usos y costumbres del grupo al cual pertenecen. En especial protegen a los individuos contra la discriminación de la sociedad mayoritaria. El derecho a la autonomía del grupo está limitado por el respeto a los derechos fundamentales consagrados en la Constitución Política. El derecho a la autonomía está ligada a la noción de territorialidad del grupo étnico. Los individuos de los grupos étnicos tienen derecho a invocar la protección de sus derechos fundamentales cuando crean que el grupo se los ha vulnerado69. La protección del derecho a la autonomía de los grupos étnicos comprende la garantía de las normas comunitarias que regulan la convivencia: el rol de las autoridades propias (familia extensa, consejos de ancianos, autoridades tradicionales, etc); las formas propias de resolución de conflictos internos, la forma de contraer alianzas matrimoniales, las fechas sagradas, etc. - El derecho a la autonomía de los pueblos indígenas: La Constitución Política le otorga un mayor grado de autonomía a los pueblos indígenas, que aquella que le concede a los demás grupos étnicos reconocidos por el Estado reconocidos por el Estado Colombiano. Ver al respecto: Sanchez. Esther. POLÍTICA DE RECONOCIMIENTO A LA DIVERSIDAD ÉTNICA Y CULTURAL Y DE PROTECCIÓN AL MENOR. Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia. ICBF. Tomo III. Biblioteca Básica: Programa de construcción de entendimiento Intercultural. Bogotá, 2002. Pg. 50 y siguientes. 68 Este criterio ha sido cuestionado por los especialistas en el tema, puesto que presupone el concepto de cultura como inmutable, los grupos étnicos en constante evolución pueden apropiar prácticas y transformarse, sin que por ello pierdan su carácter de grupos étnicos. 69 Este punto se ha tratado especialmente con la libertad del individuo para pertenecer o no a determinado grupo étnico, o para decidir si profesa o no las espiritualidad del grupo. 34 colombiano. Así el artículo 33070 consagra de manera expresa sus formas de gobierno propio, asignándoles funciones derivadas del ejercicio de dicho gobierno y, el artículo 24671 señala que las autoridades los pueblos indígenas podrán administrar justicia, estableciendo de esta manera la jurisdicción especial indígena. . a. Las autoridades indígenas son autoridades públicas: Como se anotó anteriormente los territorios indígenas tienen vocación de Entidades Territoriales y por ello, el artículo 330 reconoce a las autoridades indígenas funciones que son propias de autoridades administrativas. Así la autonomía de los pueblos indígenas además del respeto por los usos y costumbres incluye su reconocimiento como autoridad administrativa, por ello, las autoridades indígenas son autoridades públicas de carácter especial. El reconocimiento dado por la Constitución a las autoridades de los pueblos indígenas genera obligaciones para las mismas: es así como el artículo 25 de la ley 734 de 2002 o Código Disciplinario Único, establece que los indígenas que administren recursos del Estado pueden ser investigados disciplinariamente por la PGN de conformidad con lo establecido en dicho código. La Corte Constitucional en la sentencia C70 El artículo 330 de la Constitución dispone: De conformidad con la Constitución y las leyes, los territorios indígenas estarán gobernados por consejos conformados y reglamentados según los usos y costumbres de sus comunidades y ejercerán las siguientes funciones: 1. Velar por la aplicación de las normas legales sobre usos del suelo y poblamiento de sus territorios. 2. Diseñar las políticas y los planes y programas de desarrollo económico y social dentro de su territorio, en armonía con el Plan Nacional de Desarrollo. 3. Promover las inversiones públicas en sus territorios y velar por su debida ejecución. 4. Percibir y distribuir sus recursos. 5. Velar por la preservación de los recursos naturales. 6. Coordinar los programas y proyectos promovidos por las diferentes comunidades en su territorio. 7. Colaborar con el mantenimiento del orden público dentro de su territorio de acuerdo con las instrucciones y disposiciones del Gobierno Nacional. 8. Representar a los territorios ante el Gobierno Nacional y las demás entidades a las cuales se integren; y 9. Las que les señalen la Constitución y la ley. 71 El artículo Artículo 246 de la Constitución Política señala: “Las autoridades de los pueblos indígenas podrán ejercer funciones jurisdiccionales dentro de su ámbito territorial, de conformidad con sus propias normas y procedimientos, siempre que no sean contrarios a la Constitución y las leyes de la República. La ley establecerá las formas de coordinación de esta jurisdicción especial con el sistema judicial nacional.” 35 127 de 2003, declaró exequible dicha disposición, condicionando su aplicación a que el Estado adelante una capacitación sobre la administración de estos recursos a cargo del Estado. b. Las autoridades indígenas son autoridades jurisdiccionales: Esto significa que: “(.. sic) • “El que se entienda la jurisdicción especial indígena como un derecho de los pueblos indígenas tiene dos consecuencias jurídicas: 1. Cuando el derecho es ejercido, las decisiones tienen igual valor jurídico al de las decisiones de los jueces ordinarios frente al Estado colombiano. 2. Cuando el derecho no se ejerce, no puede entenderse que ha ocurrido una denegación de justicia, debido a su carácter potestativo. • La jurisdicción indígena comprende, al igual que la jurisdicción del Estado, los poderes de la notio, la iudicium y el imperium. • La jurisdicción especial indígena debe ser entendida dentro de la especificidad cultural de cada pueblo indígena. El derecho a administrar justicia de cada pueblo indígena está acompañado del reconocimiento de las normas y procedimientos de cada pueblo indígena. • La notio en el caso de los pueblos indígenas está delimitada por dos factores: el territorial y el de pertenencia étnica. 1. Factor territorial: Las autoridades de cada pueblo indígena pueden conocer de los hechos ocurridos dentro del resguardo de su pueblo y dentro del territorio habitualmente ocupado por su pueblo. 2. Factor de pertenencia étnica: supone tener en cuenta la pertenencia étnica de los individuos involucrados en el conflicto y los intereses en juego. a. Si todos los intereses y todos los individuos en juego son los de un pueblo indígena y los hechos ocurren en el territorio de ese pueblo, la jurisdicción se radica en las autoridades del pueblo indígena en cuestión. b. Si los involucrados son un indígena y un no indígena la jurisdicción depende de: 36 I. Los hechos estén regulados o no en ambos ordenamientos. II. El grado de conocimiento que tengan los individuos involucrados de las prácticas de la comunidad en la que ocurrieron los hechos. • La facultad de la iudicium, esto es, la facultad misma de decidir un caso, está también limitada. En todos los casos el límite lo constituye los derechos fundamentales constitucionales. Pero, dependiendo del grado de asimilación o conservación, el límite es el núcleo intangible de estos derechos o la totalidad de garantías que acompañan a cada derecho. • El imperium tiene como límite los derechos a la vida y la prohibición de la tortura, la esclavitud y los tratos crueles, inhumanos y degradantes. Sus principales límites, no obstante, son fácticos72”. En ese sentido, el control preventivo de la PGN en relación con la protección del derecho a la autonomía de los grupos étnicos tiene en cuenta los diferentes grados de reconocimiento de este derecho y se orienta al seguimiento de las políticas públicas que regulan su ejercicio. Principios y pautas de actuación institucional: ¾ La PGN velará que el Estado promueva y materialice el derecho constitucional de los grupos étnicos a ejercer su autonomía administrativa, política y su identidad cultural. ¾ La PGN estimulará el reconocimiento y respeto de las autoridades de los pueblos indígenas como autoridades publicas de carácter especial. ¾ La PGN demandará del Estado el reconocimiento de las formas de control social ejercidas por los grupos étnicos, siempre y cuando se ajusten a lo dispuesto en la Constitución Política y los tratados internacionales de protección de los derechos humanos. ¾ La PGN requerirá del Estado la adopción de medidas orientadas a establecer mecanismos de coordinación entre las formas de justicia propia y el sistema judicial nacional ¾ La PGN propiciará espacios de interrelación entre las autoridades del Estado y las autoridades tradicionales de los grupos étnicos para 72 Sanchez, Esther y Jaramillo, Isabel Cristina. LA JURISDICCIÓN ESPECIAL INDÍGENA. Procuraduría General de la Nación, Instituto de Estudios del Ministerio Público. Bogotá, febrero de 2000. Páginas 144 y sgtes. 37 armonizar el ejercicio de sus competencias. 6. EL CONTROL PREVENTIVO DE LA PGN Y EL DERECHO A LA PARTICIPACION DE LOS GRUPOS ETNICOS: El artículo 1 de la Constitución Política señala que el Estado colombiano es un Estado social de derecho, democrático, participativo y pluralista, en consecuencia consagra como uno de sus fines esenciales la promoción de la participación de todos en la vida económica, política, administrativa y cultural de la nación colombiana73. En consecuencia, la Constitución establece nuevas formas de participación ciudadana y los mecanismos para su protección: la acción de tutela, las acciones populares y de grupo, el derecho de petición, las veedurías ciudadanas. Tratándose de los grupos étnicos, el derecho colectivo a participar en los asuntos que los afectan adquiere el carácter de fundamental, puesto que se encuentra en relación directa con el mantenimiento de la identidad étnica y cultural de los mismos. Los artículos 6 y 7 del Convenio 169 de la OIT establecen la obligación de los gobiernos de garantizar el derecho a la participación de los pueblos indígenas y tribales en las instituciones legislativos y administrativas. El mencionado convenio establece un mecanismo específico de participación de los grupos étnicos: la consulta previa, la cual está prevista para los siguientes casos: • • • • 73 Previamente a la expedición de medidas legislativas o administrativas susceptibles de afectarlos directamente Cada vez que sea necesario trasladar a las comunidades indígenas y tribales de sus tierras tradicionales a otro lugar; y Antes de diseñar y ejecutar programas de formación profesional dirigidos a los referidos pueblos. Antes de emprender cualquier actividad de exploración o explotación de minerales y/u otros recursos naturales que se encuentren en las tierras de dichos pueblos. En concordancia con esta norma, el artículo 8 del Convenio establece que se deben realizar los estudios de impacto socio-cultural, con la participación de los pueblos interesados, a efectos de determinar “la Artículo 2 de la Constitución Política. 38 incidencia social, espiritual, cultural y sobre el medio-ambiente” de los proyectos de desarrollo. Dichos estudios deben servir de fundamento a la decisión sobre la ejecución del respectivo proyecto. El derecho a la participación de los grupos étnicos se expresa especialmente en dos aspectos: la participación política y la participación administrativa. Ahora bien, tal como se ha insistido a lo largo del presente documento, este derecho tiene un alcance diferente según el grupo de que se trate. a. Participación Política: El numeral 4 del artículo 176 de la Constitución Política establece una circunscripción especial en la Cámara de Representantes por medio de la cual se asegura la representación de los grupos étnicos, de las minorías políticas y de los colombianos residentes en el exterior. Mediante esta circunscripción se pueden elegir hasta cinco representantes. Igualmente, el artículo 176 de la Carta Magna establece la circunscripción nacional indígena por medio de la cual se eligen dos senadores. De esta manera, se consagra una política afirmativa, que permite a los grupos étnicos, acceder a cargos de representación política cuyo acceso antes les estaban vedados, por carecer de la maquinaria electoral necesaria para hacerse elegir en estas Corporaciones. Refiriéndose a estas normas la Corte Constitucional ha señalado: “Las anteriores disposiciones constitucionales se erigen como un estatuto especial relativo a la representación política indígena que protegen y reconocen la diversidad étnica y cultural, además de promover los distintos valores culturales de la nación y la participación de las diversas expresiones sociales. Este estatuto se inscribe en un contexto en el que la propia Constitución establece, en el ámbito del Congreso de la Republica, una excepción etnocultural a la regla general de circunscripciones para corporaciones públicas 74”. b. Participación administrativa: Con el objeto de hacer efectivo el derecho a la participación administrativa de los pueblos indígenas y de las comunidades afro-descendientes la legislación colombiana ha consagrado su presencia en diferentes instancias administrativas del nivel nacional, regional y local. Es de señalar que la representación especial del pueblo raizal se da especialmente en instancias regionales y locales del Archipiélago de San Andrés y Providencia. En contraste, no existen disposiciones específicas que prevean la representación en instancias nacionales del pueblo Rom, su participación debe realizarse a través de los mecanismos de participación previstos para todos los colombianos. 74 Sentencia T-778-05, antes citada. 39 Es de destacar que para los pueblos indígenas se ha constituido la “Comisión Nacional de Territorios Indígenas y la Mesa Permanente de concertación con los pueblos y organizaciones indígenas” y la “Comisión de Derechos Humanos de los Pueblos Indígenas75”. El artículo 45 de la ley 70 de 1993 creó la Comisión Consultiva de Alto Nivel, integrada por representantes de las diferentes comunidades afrodescendientes del país, instancia encargada de realizar el seguimiento al cumplimiento de lo establecido en la mencionada ley. La adecuada operatividad de estas instancias permitiría avanzar hacia el logro de una efectiva participación de estos grupos en el diseño de las políticas y la toma de decisiones administrativas que les conciernen. c. El proceso de consulta previa a los grupos étnicos: La Corte Constitucional ha avanzado en la interpretación de las disposiciones del Convenio que se refieren a la consulta previa, a continuación se resumen las principales líneas jurisprudencias pues ellas son necesarias, para el ejercicio del control preventivo que debe realizar la PGN76. Igualmente el análisis se ampliará al proceso de consulta a realizar a los otros grupos étnicos. Veamos: • El derecho a la participación es un derecho fundamental colectivo de los grupos étnicos: La Corte Constitucional, en relación con los pueblos indígenas y las comunidades afro-descendientes ha señalado que la participación a través del mecanismo de consulta previa, adquiere la connotación de derecho fundamental pues: “se erige en un instrumento que es básico para preservar la integridad étnica, social, económica y cultural de las comunidades de indígenas y para asegurar, por ende, su subsistencia como grupo social77”. El argumento expuesto es aplicable a los diferentes grupos étnicos y a los procesos de consulta previa que deben surtirse sobre diferentes temas, pues la intervención del grupo en los aspectos contemplados en el Convenio 169, permite que las políticas y proyectos que los conciernen, previamente a su definición y ejecución, incluyan como referente fundamental la concepción del mundo y las prioridades de los grupos étnicos. De esta manera, a través de la consulta previa se garantiza el derecho fundamental colectivo a la participación de los 75 Decretos 1397 y 1396 de 1996. Este análisis se ha realizado con base en el artículo LA SENTENCIA SOBRE FUMIGACIONES EN TERRITORIOS INDIGENAS DE LA AMAZONIA COLOMBIANA. Ensayo de Interpretación. Duque Orrego, María Teresa. En Revista Kadoaro. Bogotá, septiembre de 2004. 77 Corte Constitucional, SENTENCIA SU 037 DE 1997, MP: Antonio Barrera Carbonell, Bogotá, 3 de febrero de 1997. 76 40 grupos étnicos, presupuesto necesario para la consolidación del Estado plural y multicultural que proclama la Constitución Política. • Obligatoriedad de la Consulta Previa: La Corte estima que inicialmente el parágrafo del artículo 330 de la Constitución Nacional establecía la obligatoriedad de la Consulta Previa únicamente para la explotación de recursos naturales en territorios indígenas; obligación que la ley 99 de 199378 extendió a las comunidades negras tradicionales (ubicadas en la Cuenca y Ríos del Pacífico y los raizales de San Andrés y Providencia79). Por lo tanto, dada la flexibilidad que tienen los gobiernos para dar cumplimiento al contenido del convenio80, cuando se trate de medidas administrativas o legislativas81 u otros proyectos que afecten a los pueblos indígenas debe analizarse caso por caso si procede o no la realización de la consulta previa con fundamento en los lineamientos constitucionales y legales previstos para el efecto82. Es así como la Corte consideró que la Ley Estatutaria de participación no debía ser objeto de consulta; sin embargo, dados los eventuales impactos del programa de erradicación de cultivos sobre la integridad étnica y cultural de los pueblos indígenas de la Amazonía, el Gobierno debió consultar este programa. Para los otros grupos étnicos, similar conclusión se impone: debe analizarse caso por caso la procedencia de la consulta previa sobre medidas administrativas y legislativas. • Las instancias legales y reglamentarias de participación contempladas para los grupos étnicos y/o la utilización de los mecanismos generales de participación ciudadana son espacios legítimos de consulta sobre las medidas legislativas y administrativas: En ese sentido, la participación de los representantes de los Grupos Etnicos en las instancias legislativas, la representación de éstos en los Consejos Directivos de las diversas entidades públicas, la interposición de derechos de petición, etc; son maneras democráticas y plurales de participación, a través de las cuales, los grupos étnicos pueden participar en estas decisiones. 78 Ver, artículo 76 de la ley 99 de 1993. La ley 99 de 1993 creó el Sistema Nacional Ambiental. 79 La Corte Constitucional ha entendido que las comunidades afrodescendientes tradicionales incluyen al pueblo raizal. Ver al respecto Sentencia C-169 de 2001, por medio de la cual se analizó la constitucionalidad de la ley estatutaria de participación. 80 Artículo 34 del Convenio 169 de la OIT, antes referido. 81 Los artículos 6 y 15 del convenio 169 de la OIT establece la obligatoriedad de la consulta previa para tales eventos. 82 Sentencia C 169-01 MP Carlos Gaviria Díaz. Ley estatutaria de participación. 41 Igualmente, la Corte señala como procedimiento válido de consulta la discusión de temas en espacios de concertación específicos de los grupos étnicos, así la Mesa Permanente de Concertación con los Pueblos y Organizaciones Indígenas y la Comisión Consultiva de Alto Nivel pueden servir de escenarios para realizar procesos de consulta sobre las medidas legislativas y administrativas susceptibles de afectar a las comunidades indígenas, afrodescendientes y raizales. • Procedencia de la consulta previa sobre proyectos de exploración y/o explotación en los territorios de los grupos étnicos: Como se anotó anteriormente está prevista de manera expresa para los pueblos indígenas y para las comunidades afrodescendientes y raizales. Es de señalar que el proceso de Consulta Previa está previsto en el Convenio 169 de la OIT, que establece su obligatoriedad en relación con los “pueblos indígenas y tribales”, sin exclusión alguna. Como se ha insistido, la definición de pueblos tribales es aplicable a las comunidades afrodescendientes, raizales y al pueblo rom. Dado que el convenio hace parte del Bloque de Constitucionalidad, la obligatoriedad del proceso de consulta previa es también aplicable al pueblo Rom. Ahora bien, las Kumpanías del pueblo Rom están ubicadas en centros urbanos, razón por la cual es improbable que en sus territorios se adelanten proyectos de exploración y/o explotación de recursos naturales. • Procedimiento para la realización de la consulta previa sobre proyectos de exploración y/o explotación en los territorios de los grupos étnicos: Con base en el informe del Consejo de Administración de la OIT83 que solicitó al Gobierno colombiano la modificación del decreto 1320 de 1998 por considerar que este no fue consultado y que su contenido no respeta las disposiciones del convenio 169 de la OIT, la Corte de manera reiterada, en casos concretos, ha ordenado la inaplicación del procedimiento de consulta establecido en el decreto 1320 de 199884. De esta manera, la Corte ha dejado sin aplicación, en algunas situaciones específicas, la decisión del Consejo de Estado que desestimó 83 Informe que aprobó las recomendaciones de la Comisión de Expertos de ese organismo. 84 Ver entre otras, sentencias SU 039 de 1997 (Caso U’wa), T 652-98 (Caso de la Hidro-eléctrica Urrá), SU-383 de 2003 (Caso del programa de erradicación de cultivos ilícitos). 42 la demanda de nulidad contra el mismo85. La Corte considera que un buen espacio para determinar el procedimiento de Consulta previa es la Mesa de Concertación Permanente con los Pueblos Indígenas. • Principios y objetivos de los procesos de consulta previa: Las consultas deben realizarse de buena fe, de una manera apropiada a las circunstancias y con miras a obtener una concertación. La consulta previa pretende: 9 Que la comunidad tenga un conocimiento pleno sobre el proyecto y/o medida a adoptar y sobre los mecanismos, procedimientos y actividades requeridos para ponerlos en ejecución. 9 Que la comunidad sea enterada e ilustrada sobre la manera en que la ejecución de los referidos proyectos puede afectar o menoscabar “los elementos que constituyen la base de su cohesión social, cultural, económica y política y, por ende, el sustrato para su subsistencia como grupo humano con características singulares86”. 9 Que la comunidad participe activamente en la decisión, para ello, se debe: “Darle la oportunidad para que libremente y sin interferencias extrañas pueda, mediante la convocatoria a sus integrantes o representantes, valorar conscientemente las ventajas y desventajas del proyecto para la comunidad y sus miembros, y ser oída en relación con las inquietudes y pretensiones concernientes a la defensa de sus intereses, y pronunciarse sobre la viabilidad del mismo87”. • Ambito territorial de la Consulta: La consulta previa es un procedimiento relacionado con la noción de territorio, por ello, es necesario determinar la presencia de grupos étnicos en la zona que se realizará el proyecto para establecer la procedencia de la misma. La Corte considera que la concepción territorial de los pueblos indígenas no concuerda con la visión de ordenamiento espacial que maneja el resto de la nación colombiana. Por ello considera que para determinar el territorio objeto de la consulta debe establecerse: 9 Dónde comienzan y dónde terminan los territorios. 9 Cuáles son los espacios indígenas propios y cuáles los compartidos. 85 Consejo de Estado, Sala de lo Contencioso Administrativo, Sección Primera, 20 de mayo de 1990, radicación 5091, CP. Juan Alberto Polo Figueroa. 86 SU 039 de 1997. 87 Idem. 43 9 En cuáles lugares no se da o no se ha dado presencia indígena. • Decisión: Las autoridades al tomar la decisión definitiva sobre el proyecto y/o medida consultada deben ponderar los intereses generales en conflicto, es decir, los objetivos del proyecto y/o medida con la protección de la diversidad étnica y cultural. Si al final del proceso de consulta previa no hay consenso las autoridades deben tomar la decisión. Los pueblos indígenas no tienen derecho de veto sobre las medidas objeto de consulta. La consulta previa es la oportunidad para que los pueblos indígenas expongan las consideraciones que el programa debe tener en cuenta para que respete el derecho a la integridad étnica y cultural y la autonomía de los pueblos indígenas. En la adopción de las medidas se deben ponderar: 9 La protección de los derechos amparados. 9 La garantía de los derechos fundamentales de los pueblos indígenas y otras poblaciones, entre ellos, la vida, la integridad personal y cultural, el libre desarrollo de la personalidad, la seguridad, la salud. 9 Las propuestas que los pueblos indígenas presenten. 9 El interés general de la nación. 9 La potestad del Estado para definir y aplicar los planes y programas de desarrollo y las políticas públicas. 9 La decisión de las autoridades tiene un límite: no pueden decidir sobre las prioridades de los pueblos indígenas en sus procesos de desarrollo pues esta decisión les corresponde de manera exclusiva a los mencionados pueblos. Principios y líneas de actuación institucional: ¾ La PGN vigilara que el Estado garantice la participación política y administrativa de los grupos étnicos en las instancias que conforman su estructura. ¾ La PGN propiciara la implementación de instancias y espacios de concertación entre el Estado y los grupos étnicos para la adopción de medidas que puedan afectarlos. ¾ La PGN estimulará prácticas que permitan mejorar el relacionamiento entre los grupos étnicos y las instancias gubernamentales, que viabilicen acuerdos para la ejecución de proyectos y actividades de interés 44 general. ¾ La PGN, en el ámbito del control preventivo, a solicitud de los interesados, eventualmente prestará asesoría técnica y buenos oficios para la resolución de los conflictos que se susciten entre grupos étnicos e instituciones del Estado. ¾ La PGN vigilará el estricto cumplimiento de las previsiones contenidas en tratados internacionales, para el efectivo ejercicio del derecho fundamental a la consulta previa reconocido a los grupos étnicos. 7. EL CONTROL PREVENTIVO DE LA PGN Y EL DERECHO AL DESARROLLO PROPIO DE LOS GRUPOS ETNICOS: El artículo 7 del convenio 169 de la OIT establece el derecho de los pueblos indígenas y tribales a: "1. decidir sus propias prioridades en lo que atañe al proceso de desarrollo, en la medida en que éste afecte a sus vidas, creencias, instituciones y bienestar espiritual y a las tierras que ocupan o utilizan de alguna manera, y de controlar, en la medida de lo posible, su propio desarrollo económico, social y cultural. Además, dichos pueblos deberán participar en la formulación, aplicación y evaluación de los planes y programas de desarrollo nacional y regional susceptibles de afectarles directamente. 2. El mejoramiento de las condiciones de vida y de trabajo y del nivel de salud y educación de los pueblos interesados, con su participación y cooperación, deberá ser prioritario en los planes de desarrollo económico global de las regiones donde habitan. Los proyectos especiales de desarrollo para estas regiones deberán también elaborarse de modo que promuevan dicho mejoramiento. (…sic) 4. Los gobiernos deberán tomar medidas, en cooperación con los pueblos interesados, para proteger y preservar el medio ambiente de los territorios que habitan”. El contenido de este artículo expresa aquello que la doctrina especializada ha denominado el derecho colectivo al desarrollo propio de los grupos étnicos, el cual adquiere carácter fundamental pues su garantía permite la efectiva realización del principio de diversidad étnica y cultural. Este derecho consagra la obligación a cargo del Estado de asegurar: “la disponibilidad de los recursos 45 suficientes así como despliegue un conjunto de medidas, tareas y actuaciones orientadas a garantizar las condiciones de posibilidad para que este derecho se realice en la práctica88”. El derecho al desarrollo propio está relacionado con la prospección de futuro que cada cultura se plantea a sí misma. En este sentido los planes y programas formulados por los pueblos desde su propia perspectiva cultural, constituyen elementos de la construcción y adecuación intercultural que el desarrollo nacional requiere; involucra: el sentido émico, intracultural e ineludible a que se debe apelar en la búsqueda de ejes de desarrollo que convoquen a una nación multiétnica y pluricultural89”. Por ello, configura la dimensión objetiva de los derechos fundamentales de carácter colectivo de los grupos étnicos, tal como lo señaló la Corte Constitucional: “Que los derechos constitucionales fundamentales se consignen en documentos jurídicos significa un gran paso en orden a obtener su cumplimiento, pero no es suficiente. Es preciso el despliegue de todo un conjunto de medidas, tareas y actuaciones por parte del Estado – tanto en el nivel nacional como en el territorial - orientadas a garantizar la plena efectividad de estos derechos en la práctica90”. Siguiendo la jurisprudencia de la Corte Constitucional91, puede afirmarse que: • • • El derecho al desarrollo propio de los grupos étnicos es condición necesaria para la verdadera realización del principio de diversidad étnica y cultural. Este derecho pone en evidencia la estrecha conexión entre los derechos políticos y civiles, los derechos sociales económicos y culturales y los derechos colectivos de los grupos étnicos. El derecho al desarrollo propio implica una obligación de hacer a cargo del Estado; no es un simple derecho programático, es un derecho realidad que se expresa en el diseño y ejecución de políticas públicas, de manera tal que el Estado debe garantizar de manera efectiva los derechos básicos de los grupos étnicos: derechos al agua potable, a la salud, a la vivienda digna, a la educación, al trabajo, etc. 88 Corte Constitucional. SENTENCIA T-704 DE 2006. Magistrado Ponente: Humberto Sierra. Bogotá, 22 de agosto de 2006. 89 Santoyo, Gladys; Correa, Hernan y Luna, Miguel. HACIA EL RECONOCIMIENTO DE LOS DERECHOS DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS, Serie: Retos de la Nación Diversa 2. Dirección General de Asuntos Indígenas – Ministerio del Interior 1998. 90 Idem. 91 Ver entre otras, Corte Constitucional, sentencias T-007 de 1995, SU-039 de 1997 y T-652 de 1998. 46 • • • • • Ello implica la adopción de medidas de discriminación positiva que garanticen la igualdad material de los grupos étnicos, en el entendido de que no se trata de imponer un concepto de bienestar dominante, se busca apoyar a los grupos étnicos en la realización de su propio proyecto de futuro. Las omisiones del Estado en relación con la garantía de este derecho pueden expresar una discriminación originada en su pertenencia étnica y poner en peligro de desaparición al grupo étnico que sufre dicha discriminación92, se estaría en esa eventualidad ante un verdadero etnocidio. Para su plena realización el derecho al desarrollo propio requiere del fortalecimiento del derecho a la participación de los grupos étnicos. En virtud de los principios de solidaridad, complementariedad y subsidiaridad que regulan la organización administrativa y territorial del Estado, todos los niveles y entidades de la administración pública deben contribuir a garantizar el derecho al desarrollo propio de los grupos étnicos. Dada la exclusión histórica de los grupos étnicos, en muchos casos, será necesario que el Estado implemente programas de capacitación que les permitan acceder y utilizar los recursos que éste pone a su disposición para la realización de sus derechos básicos. Es de señalar que los pueblos indígenas han avanzado en el diseño de sus Planes de vida y las comunidades negras en la elaboración de sus “planes de manejo”, estos: “Contribuyen también a dar coherencia a la acción institucional de apoyo al desarrollo de las comunidades. De hecho, en diferentes regiones del país se han hecho esfuerzos valiosos de planeación del ordenamiento territorial, de planes de desarrollo local y de planes de vida para el caso indígena. Tal experiencia debe hacerse extensiva a todos los pueblos indígenas y comunidades afrocolombianas del país, con metodologías eminentemente participativas que recojan el sentir y las aspiraciones no solo de sus dirigentes sino de toda su gente. La ley orgánica de planeación, ley 152 del 94, exige a todas las entidades territoriales tener sus propios planes de desarrollo y de ordenamiento territorial y es también sustento legal para los planes de vida de los pueblos indígenas y los planes de manejo de las comunidades negras93”. 92 Se han realizado estudios que demuestran que la omisión de garantía por parte del Estado esconde fenómenos de discriminación profunda hacia los grupos étnicos, esta omisión pretende perpetuar su exclusión social e impedir su acceso al poder político. Ver por ejemplo, el caso de la política del Estado en relación con el pueblo maya de Guatemala, durante el periodo que duró el conflicto armado interno. 93 PROPUESTA PARA UNA POLÍTICA DE DERECHOS HUMANOS DE GRUPOS ÉTNICOS, Op. Cit. 47 La realidad de los grupos étnicos es el resultado de la marginación social e histórica que han sufrido, situación que ha repercutido negativamente en el acceso a las oportunidades de desarrollo económico, social y cultural; de allí que el tratamiento legal especial orientado a crear nuevas condiciones de vida, tiende a instaurar la equidad social y consolidar la paz interna y, por lo mismo, adquiere legitimidad constitucional94. Una rápida mirada a los indicadores sociales de los grupos étnicos así lo revela. Las políticas públicas han buscado atender la situación de marginalidad de los grupos étnicos, es así como la ley 70 de 1993 y el documento CONPES 3310 de 2004 establecen políticas de diferenciación positiva para atender a la población afrodescendiente; por su parte, el documento Conpes 3058/1998 establece la estrategia del gobierno nacional para apoyar el desarrollo del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, teniendo como presupuesto la supervivencia étnica y cultural del pueblo raizal. El Estado colombiano aún no ha desarrollado ninguna política para atender la exclusión histórica del pueblo Rom de Colombia. Es de señalar que el artículo 35695 de la Constitución Política establece la participación de los resguardos indígenas en los ingresos corrientes de la Nación. Igualmente la ley prevé que los resguardos indígenas serán 94 Ver al respecto, Calla Ortega,Ricardo. LA PERSPECTIVA DE LA DIVERSIDAD ÉTNICA EN DERECHOS HUMANOS: ALGUNOS APORTES PARA UNA DISCUSIÓN URGENTE. Op. Cit. 95 El artículo 356 de la Constitución dispone: Salvo lo dispuesto por la Constitución, la ley, a iniciativa del Gobierno, fijará los servicios a cargo de la Nación y de los Departamentos, Distritos, y Municipios. Para efecto de atender los servicios a cargo de éstos y a proveer los recursos para financiar adecuadamente su prestación, se crea el Sistema General de Participaciones de los Departamentos, Distritos y Municipios. Los Distritos tendrán las mismas competencias que los municipios y departamentos para efectos de la distribución del Sistema General de Participaciones que establezca la ley. Para estos efectos, serán beneficiarias las entidades territoriales indígenas, una vez constituidas. Así mismo, la ley establecerá como beneficiarios a los resguardos indígenas, siempre y cuando estos no se hayan constituido en entidad territorial indígena. Los recursos del Sistema General de Participaciones de los departamentos, distritos y municipios se destinarán a la financiación de los servicios a su cargo, dándole prioridad al servicio de salud y los servicios de educación preescolar, primaria, secundaria y media, garantizando la prestación de los servicios y la ampliación de cobertura. Teniendo en cuenta los principios de solidaridad, complementariedad y subsidiariedad, la ley señalará los casos en los cuales la Nación podrá concurrir a la financiación de los gastos en los servicios que sean señalados por la ley como de competencia de los departamentos, distritos y municipios”. 48 beneficiarios de las regalías petroleras cuando se encuentren a no más de 5 kms del proyecto petrolero. Principios y pautas de actuación institucional: ¾ La PGN realizará el seguimiento a las políticas públicas para verificar que estas garanticen el acceso los derechos básicos de los grupos étnicos. En este sentido, promoverá la adopción de medidas de discriminación positiva. ¾ La PGN velará por al inclusión de los grupos étnicos en los planes y programas de desarrollo adoptados por el Estado, consultando sus aspiraciones y prioridades. ¾ La PGN demandará del Estado que genere las condiciones para que los grupos étnicos, en ejercicio de su autonomía, diseñen y ejecuten sus planes de vida conforme a sus particularidades y prioridades ¾ La PGN vigilará que las autoridades públicas cumplan con su obligación de capacitar a los grupos étnicos en el manejo de los recursos que el Estado les ofrece. III. Líneas de acción para el ejercicio del control preventivo de la Procuraduría General de la Nación a favor de los derechos de los Grupos Étnicos A continuación se exponen las líneas de acción de la PGN para el ejercicio del control preventivo a favor de los grupos étnicos: 1. Estrategia Institucional para el ejercicio del control preventivo a favor de los derechos de los grupos étnicos: Esta estrategia esta orientada al logro de los objetivos institucionales del control preventivo a favor de los derechos de los grupos étnicos. La definición de estas líneas de acción es resultado de un largo proceso en el cual se analizaron factores tales como: el conocimiento institucional, la experiencia acumulada de la Procuraduría Delegada para la Prevención en materia de Derechos Humanos y Asuntos Étnicos, los recursos disponibles, la facilidad para replicar las actividades, y la posibilidad de lograr cobertura nacional. 49 a. Vigilancia y monitoreo constante de la situación. La PGN realizará un seguimiento sistemático a la situación de los grupos étnicos mediante tres tipos de acciones: solicitud periódica de información a las autoridades competentes y análisis de dicha información; seguimiento, visitas de verificación y humanitarias a asentamientos, situaciones y comunidades en general; y seguimiento a la implementación de recomendaciones formuladas por órganos internacionales sobre la situación de los derechos de los grupos étnicos, lo cual detallará de manera específica la actuación institucional. En segundo lugar, la conducción de visitas de seguimiento y verificación de situaciones y actividades tales como consultas previas, fumigaciones, comunidades con medidas de protección internacional (cautelares y provisionales), problemas territoriales situaciones humanitarias que requieran acompañamiento de la Procuraduría Delegada para la Prevención en materia de Derechos Humanos y Asuntos Étnicos. A través de la realización de visitas regulares, razonablemente frecuentes y calificadas se adquiere un conocimiento de la situación de efectividad de los derechos de los grupos étnicos. Toda visita de seguimiento debe concluir en la transmisión formal de un informe, que contenga un diagnóstico la situación actual, conclusiones analíticas sobre lo observado, y recomendaciones para la superación de los problemas detectados. La implementación de estas recomendaciones debe ser objeto de un estricto seguimiento. Finalmente, la PGN realizará el seguimiento al cumplimiento de las recomendaciones internacionales en materia de derechos de los grupos étnicos. Múltiples mecanismos especializados y órganos de los sistemas internacionales de protección de derechos humanos han formulado recomendaciones específicas sobre los derechos de grupos étnicos en Colombia. El Grupo de Asuntos Étnicos coordinará con las distintas dependencias de la entidad la verificación del cumplimiento de dichas medidas por las autoridades ejecutivas. En algunos casos, entre ellos, cuando la Comisión Interamericana de Derechos Humanos dicte unas medidas cautelares sobre grupos étnicos, se requerirá diseñar planes de seguimiento de manera particular. b. Atención a estructurales. comunicaciones, análisis sistémico y respuestas En desarrollo de la función preventiva, la PGN recibe y tramita numerosas comunicaciones que provienen de diferentes fuentes. Sin embargo, con el fin de garantizar un impacto estructural, los casos recibidos deben ser sistematizados y analizados para establecer líneas de intervención temáticas 50 que permitan tratar situaciones violatorias de los derechos humanos de manera conjunta y estructural. Esta línea de acción busca la articulación nacional de problemas que pueden parecer aislados si sólo se examinan en el contexto de una comunidad o una región. Mediante esta lectura integral de la atención individual de casos se puede pasar de la atención coyuntural a la acción planificada de carácter preventivo. c. Investigación temática e incidencia en políticas públicas Como línea de actuación complementaria al análisis de la observación directa de la situación de los grupos étnicos, la PGN también acogerá una línea de investigación académica sobre diferentes aspectos tanto jurídicos como antropológicos de los grupos étnicos y el disfrute de los derechos humanos. Si bien el trabajo se concentrará en dimensiones jurídicas, las investigaciones se realizarán desde una óptica interdisciplinaria y estarán orientadas a ofrecer a las autoridades competentes y a la opinión pública documentos técnicos de trabajo que promuevan reformas y cambios concretos para fortalecer la apropiación y aplicación efectiva de los derechos de los grupos étnicos. Los temas de investigación se definirán sobre la base de los problemas más agudos o más desconocidos y sobre las necesidades de cambios más urgentes. Los insumos técnicos para dichas investigaciones serán la base del diagnóstico institucional de la realidad nacional de los grupos étnicos, el derecho constitucional, el derecho internacional de los derechos humanos, las relaciones interculturales (aspectos antropológicos y sociológicos de entendimiento intercultural) y el derecho comparado. Todos los productos de investigación serán de conocimiento público y están orientados a fortalecer el ejercicio de los derechos de los grupos étnicos y a promover la realización del principio de diversidad étnica y cultural. d. Información pública de los resultados del control preventivo: La eficacia del ejercicio de control preventivo está condicionada a que la autoridad respectiva considere de manera formal y oportuna los resultados de la gestión institucional y conozca las recomendaciones que emite el órgano de control para prevenir violaciones. En particular, todo ejercicio de vigilancia realizado en situaciones determinadas, debe concluir con la formalización de una comunicación a la autoridad respectiva. La consideración formal de los resultados del control preventivo por parte de la autoridad competente es una meta deseada de la actuación de la PGN. El seguimiento a este tipo de gestión 51 sólo es posible si se formalizan los resultados y las recomendaciones de la gestión de control. De acuerdo con la política institucional de comunicación pública, los resultados del seguimiento al efectivo ejercicio de los derechos de los grupos étnicos y su gestión preventiva, se darán a conocer de manera pública al conjunto de la sociedad colombiana, incluyendo a los miembros de dichos grupos. En primer lugar, se trata de una práctica de transparencia y rendición de cuentas de la gestión institucional. En segundo lugar, es un método para informar a la opinión pública sobre las situaciones que se presentan y las recomendaciones que se le han formulado a la respectiva autoridad para contribuir a superarlas. Además de que busca generar una incidencia favorable a la protección de los derechos humanos de los grupos étnicos, este tipo de comunicación contribuye a superar el desconocimiento generalizado sobre los grupos étnicos. e. Seguimiento y promoción de acciones judiciales. Dado el aporte que la jurisprudencia de la Corte Constitucional ha dado a la vigencia efectiva de los derechos fundamentales de los grupos étnicos, la Procuraduría Delegada para la Prevención en materia de Derechos Humanos y Asuntos Étnicos, de acuerdo con los arreglos de coordinación intrainstitucional que incluirán a la Procuraduría Auxiliar para Asuntos Constitucionales, propondrá al Procurador General de la Nación el análisis de aquellos casos en que se considere pertinente que la entidad coadyuve la revisión de ciertas sentencias de tutela que respondan a criterios de trascendencia, oportunidad, gravedad o necesidad de unificar criterios jurisprudenciales. El primer paso de este proceso debe cumplirse en el nivel regional y provincial. Estas dependencias deberán efectuar un seguimiento a la actividad judicial en su respectiva jurisdicción y reportar, de acuerdo con el procedimiento establecido, casos que consideren cumplen con los criterios establecidos. Puesto en conocimiento nacional el caso, este será debidamente estudiado y evaluado para determinar si cumple con los criterios preestablecidos para ser seleccionado como un caso que amerita la promoción de una acción. Posteriormente, en coordinación con las respectivas delegaciones, incluyendo la dependencia regional o provincial, se promoverá la acción ante la Corte Constitucional. De igual forma, la Delegada estudiará, a través del Grupo de Asuntos Étnicos, la conveniencia de la presentación de acciones de inconstitucionalidad de normas que afecten el disfrute de los derechos de los grupos étnicos, para que a través del procedimiento intrainstitucional convenido estas demandas sea presentadas. f. Difusión y promoción de los derechos de los grupos étnicos. 52 Como parte de la actuación preventiva en materia de derechos de los grupos étnicos, la PGN adelantará una gama reducida de actividades de difusión y promoción. La PGN continuará produciendo y difundiendo material informativo y práctico sobre los derechos de los grupos étnicos y los recursos disponibles para hacer valer estos derechos. En el desarrollo de su labor hasta la fecha, la PGN ha constatado un desconocimiento general por parte de autoridades tanto a nivel regional como nacional del gran abanico de derechos, desarrollo jurisprudencial y alcances de convenios internacionales vigentes para la promoción y protección de los grupos étnicos. Como complemento a esta actividad de difusión y promoción, la PGN también participará en programas informativos y de sensibilización en materia de derechos humanos, función preventiva y régimen disciplinario dirigidos a funcionarios que deban velar por los derechos de los grupos étnicos. Estas actividades se continuarán realizando durante la ejecución de los proyectos en los que se encuentre vinculada la PGN y particularmente el Grupo de Asuntos Étnicos, al igual que en el momento en el que se presente la posibilidad de participación de la PGN durante la ejecución de proyectos y esfuerzos institucionales permitiendo un seguimiento a la gestión y no en actividades aisladas sin fines programáticos. g. Coordinación Interinstitucional: La PGN procurará incidir sobre las distintas autoridades e instituciones que tienen responsabilidades de diseño, ejecución o control y evaluación de las políticas públicas relacionadas con grupos étnicos. A través de una interlocución abierta y cordial con las diferentes autoridades se buscará contribuir de manera efectiva a la garantía de los derechos de éstas comunidades étnicas. Ante las autoridades ejecutivas del nivel nacional se realizará un seguimiento a las políticas públicas y a la implementación de normas, decretos y leyes relacionados con los grupos étnicos. El Grupo de Asuntos Étnicos mantendrá una permanente interlocución y realizará el seguimiento a la actuación y toma de decisiones de las instituciones y entidades a nivel nacional que tengan como tarea la implementación de políticas en torno a los derechos de los grupos étnicos. Frente a las autoridades legislativas se buscará incidir en los procesos de iniciativas legislativas tales como el impulso a la reglamentación de la Jurisdicción Especial Indígena prevista en la carta constitucional. 53 En relación con el poder judicial, la labor de seguimiento se concentrará sobre la aplicación de la Jurisdicción Especial Indígena. Dada la función de autoridades indígenas como autoridades públicas, se buscará sentar las bases de un arreglo de coordinación interinstitucional con esta jurisdicción. Para fortalecer los derechos de los grupos étnicos, también es necesario profundizar la coordinación entre las entidades que conforman el Ministerio Público, es decir, la Defensoría del Pueblo y las personerías municipales. La actuación conjunta o complementaria de con estas entidades busca maximizar el impacto del seguimiento a los derechos de los grupos étnicos. Un espacio importante de coordinación interinstitucional se da con las autoridades departamentales y municipales. Así, la PGN propende por la promoción de comisiones de vigilancia y seguimiento de los derechos de los grupos étnicos para el fortalecimiento del trabajo conjunto de aplicación y ejercicio efectivo de los derechos de los grupos étnicos. Los organismos internacionales de derechos humanos han tenido un rol importante en la promoción y defensa de los derechos de grupos étnicos así como en el fortalecimiento de las entidades del Estado colombiano que trabajan con éstas comunidades, por ello se promueve la coordinación y cooperación interinstitucional entre éstos y la Procuraduría. Igualmente la PGN promueve la interlocución con las organizaciones que trabajan en materia étnica, de esta manera se avanza en la generación de espacios de participación política que tendrán incidencia en el diseño de políticas públicas a favor de los derechos de los grupos étnicos. 2. Estrategia institucional para el fortalecimiento del ejercicio del control preventivo: a. El logro de objetivos específicos: Con el fin de optimizar el ejercicio del control preventivo, se han establecido dos objetivos orientados a fortalecer el accionar de la Procuraduría Delegada para la Prevención en materia de Derechos Humanos y Asuntos Étnicos, Grupo de Asuntos Etnicos - como dependencia coordinadora de esta política, a saber: • La política preventiva de la Procuraduría General de la Nación en materia de derechos de los grupos étnicos se aplica de manera uniforme en todo el territorio nacional y en todos los niveles institucionales, mediante la adopción, de programas de difusión, proyectos y actividades programadas. 54 • La Procuraduría General de la Nación aplica en todo el territorio nacional procedimientos de verificación estandarizados y sistematizados para ejercer el control preventivo del respeto de los derechos de los grupos étnicos. b. Elaboración de una planeación estratégica y operativa para atender la situación de derechos de los grupos étnicos a nivel nacional y territorial: Este proceso de planeación en tanto que facilita el desempeño del mandato constitucional de la Procuraduría en la protección de derechos, ayuda a aumentar el impacto de su intervención y a garantizar el mecanismo de rendición de cuentas. En ese sentido: “El propósito de la planeación estratégica es el de ayudar a la organización a operar de una manera efectiva, dentro de un ambiente complejo y dinámico afectado permanentemente por restricciones y amenazas y que le permita capitalizar las oportunidades del medio ambiente. Otros elementos que explican su propósito son los siguientes: • • • • • • • Establece los propósitos de la organización Define e integra tareas directivas Patrón de decisiones coherentes Es una definición de la naturaleza de las contribuciones para los participantes Determina el camino para el logro de los lineamientos estratégicos Medio para desarrollar competencias esenciales Forma de adquirir recursos y capacidades96”. El ejercicio de los derechos de los grupos étnicos se ha dado de manera fragmentada evocando problemáticas y acontecimientos que surgen circunstancialmente. Por lo tanto, es necesario aplicar los mecanismos y herramientas de la planeación para que la protección de las comunidades y sus derechos sea real. De esta manera, es necesario crear un plan de acción efectivo que con las capacidades y recursos disponibles en la PGN, para asegurar resultados y garantizar una rendición de cuentas de la entidad. Todas las dependencias regionales y provinciales de la PGN deberán en el corto plazo adoptar un marco de planeación estratégica y operativa, en función de la realidad de los grupos étnicos de su respectiva jurisdicción. c. La actuación integral de la Procuraduría General de la Nación frente a la protección de los derechos de los grupos étnicos: 96 PGN. PROCESO DE DESPLIEGUE DEL PLAN ESTRATÉGICO DE LA PGN. Manual del participante. Evolucionado, un camino para el futuro. Pag. 5. 2006. 55 Ello es especialmente importante dada la transversalidad de los asuntos relacionados con los derechos de los grupos étnicos; por ello el ejercicio del control preventivo en este tema, requiere de la articulación de las diferentes funciones misionales y de las diferentes dependencias, tanto del nivel nacional como territorial, de la institución. Así las cosas, la prevención atraviesa todas las funciones de la Procuraduría; a saber, la función preventiva como tal, la de intervención y la disciplinaria, en donde “prevenir integralmente es evitar que algo suceda, vigilar que el responsable adelante las acciones pertinentes para hacer efectiva la prevención y, de ser el caso, sancionar a los responsables de lo sucedido97” Debido a la cobertura nacional de la Procuraduría General de la Nación y la presencia de diferentes grupos étnicos en todo el territorio nacional, la implementación de la política debe propender por un afianzamiento en la coordinación al interior de la entidad que garantice un buen manejo y transmisión de la información y al mismo tiempo genere acciones coordinadas tanto a nivel central como territorial. Así, los funcionarios de la Procuraduría General de la Nación, en el desempeño de las labores preventivas, deben actuar de manera armónica, con conceptos unificados a la hora de abordar problemas relacionados con los grupos étnicos. A continuación se destacan los focos de coordinación que deben adquirir un sentido práctico, con el fin de reforzar el efecto preventivo de la actuación de la PGN: • La competencia preventiva y la disciplinara deben armonizarse con el fin de que se refuercen mutuamente. La actuación preventiva en temas étnicos no anula ni limita el deber de investigar a fondo los casos de presuntas violaciones de derechos humanos que acontezcan a estas comunidades. En buena medida, la incidencia o disuasión que pretende la función preventiva depende de la efectiva sanción disciplinara en los casos que lo ameriten. Por su lado la función preventiva, puede ser de utilidad para brindar elementos de contexto al desarrollo de la función disciplinaria. • El Grupo de Asuntos Étnicos de la Procuraduría Delegada para la Prevención en Materia de Derechos Humanos y Asuntos Étnicos, en coordinación con la Procuraduría Auxiliar para Asuntos Constitucionales, examinará la conveniencia de acudir a demandas de inconstitucionalidad de normas que se refieren a derechos de los grupos étnicos o coadyuvar 97 SISTEMA INTEGRAL DE PREVENCIÓN. LA FUNCIÓN PREVENTIVA A CARGO DE LA PROCURADURÍA GENERAL DE LA NACIÓN. Op. cit. Pg. 20. 56 la solicitud de revisión de fallos de tutela. Así mismo se examinará la viabilidad de otros recursos constitucionales de protección para promover la vigencia de los derechos de los integrantes de los grupos étnicos. • El Grupo de Asuntos Étnicos coordinará su actuación con la Procuraduría Delegada para Asuntos Ambientales y Agrarios en la medida en que sea necesario abordar temas relacionados con el medioambiente, resguardos, territorios colectivos, fumigaciones y demás situaciones que puedan afectar de alguna medida el disfrute de los derechos fundamentales de los grupos étnicos. • Es necesario coordinar con la Procuraduría Delegada para el Ministerio Público en Asuntos Penales, en relación con la verificación y el seguimiento al ejercicio de la Jurisdicción Especial Indígena. • El Grupo de Asuntos Étnicos coordinará con la Procuraduría Delegada para la Vigilancia Preventiva de la Función Pública, la vigilancia y seguimiento a las políticas públicas dirigidas a las comunidades étnicas asentadas en el territorio nacional. • La coordinación del nivel nacional con el nivel regional y provincial debe ser fortalecida. Por parte de la Delegada para la Prevención en Materia de Derechos Humanos y Asuntos Étnicos, el Grupo de Asuntos Étnicos servirá como impulsor y gestor de esta coordinación. d. Diseño y aplicación de protocolos de actuación: Es de resaltar que el proceso de seguimiento al ejercicio efectivo de los derechos de los grupos étnicos implica la utilización de parámetros legales, científicos, sociales y éticos para determinar el cumplimiento, alcance y goce de estos derechos. Este proceso requiere un importante grado de preparación, que incluye la definición de pautas que se utilizarán en el proceso de cotejar si la realidad (observada) se ajusta al desarrollo del principio de diversidad étnica y cultural expuesto en la Constitución98. Los protocolos de actuación se diseñarán y se implementarán con el fin de ejercer el control preventivo a favor de los derechos de los grupos étnicos, de una manera sistemática en todo el territorio nacional, ello sin descuidar la debida consideración de las realidades locales. De igual forma, los procedimientos buscan optimizar el ejercicio del control preventivo con miras a 98 Ver, PGN. POLÍTICA PREVENTIVA DE LA PGN EN MATERIA DE DERECHOS DE LAS PERSONAS PRIVADAS DE LIBERTAD. 57 generar un mayor impacto en las políticas públicas que regulan el ejercicio de los derechos de los grupos étnicos. A manera de ejemplo, en la fase inicial de la implementación de este método de trabajo se prevé la adopción en el nivel nacional de los siguientes procedimientos de seguimiento a la situación de los derechos de los grupos étnicos: • Protocolo para la sistematización de la información: Orientado a que la entidad tenga información actualizada sobre la situación de los grupos étnicos en Colombia, situación de derechos humanos e indicadores que permitan medir el disfrute de sus derechos económicos y sociales – DESC-. Esto facilitará el seguimiento y la priorización de acciones de control preventivo. • Procedimientos para el seguimiento a consultas previas: Con el fin de orientar la actuación de los funcionarios de la entidad que deben realizar el seguimiento a los Consulta Previa sobre la exploración y/o explotación de recursos naturales en los territorios de los grupos étnicos. • Procedimiento para la interposición de recursos constitucionales: Con el fin de orientar la promoción de los derechos de los grupos étnicos a través de los pronunciamientos de la Corte Constitucional. Como parte del modelo de seguimiento, también se diseñará una herramienta de monitoreo del grado de aplicación de estos procedimientos. Mediante la aplicación de los procedimientos, se consolidará un proceso de sistematización de la información sobre el estado de los derechos de los grupos étnicos y se promoverá la utilización de la información en función de los fines estratégicos de la actuación preventiva de la PGN, esto es, incidir en las políticas públicas relacionadas con los derechos de los grupos étnicos en Colombia. 58 ANEXO No. 1 Artículos de la Constitución que desarrollan el principio de la diversidad étnica y cultural Artículo 7 8 10 13 19 63 68 70, 2 Texto El Estado reconoce y protege la diversidad étnica y cultural de la Nación colombiana. Es obligación del Estado y de las personas proteger las riquezas culturales y naturales de la Nación. El castellano es el idioma oficial de Colombia. Las lenguas y dialectos de los grupos étnicos son también oficiales en sus territorios. La enseñanza que se imparta en las comunidades con tradiciones lingüísticas propias será bilingüe. Todas las personas nacen libres e iguales ante la ley, recibirán la misma protección y trato de las autoridades y gozarán de los mismos derechos, libertades y oportunidades sin ninguna discriminación por razones de sexo, raza, origen nacional o familiar, lengua, religión, opinión política o filosófica. El Estado promoverá las condiciones para que la igualdad sea real y efectiva y adoptará medidas en favor de grupos discriminados o marginados. El Estado protegerá especialmente a aquellas personas que por su condición económica, física o mental, se encuentren en circunstancias de debilidad manifiesta y sancionará los abusos o maltratos que contra ellas se cometan. Se garantiza la libertad de cultos. Toda persona tiene derecho a profesar libremente su religión y a difundirla en forma individual o colectiva. Todas las confesiones religiosas e iglesias son igualmente libres ante la ley. Los bienes de uso público, los parques naturales, las tierras comunales de grupos étnicos, las tierras de resguardo, el patrimonio arqueológico de la Nación y los demás bienes que determine la ley, son inalienables, imprescriptibles e inembargables. Los integrantes de los grupos étnicos tendrán derecho a una formación que respete y desarrolle su identidad cultural. inciso La cultura en sus diversas manifestaciones es fundamento de la nacionalidad. El Estado reconoce la igualdad y dignidad de todas las que conviven en el país. El Estado promoverá la investigación, la ciencia, el desarrollo y la difusión de los valores culturales de la Nación. 59 Artículo Texto El patrimonio cultural de la Nación está bajo la protección del 72 Estado. El patrimonio arqueológico y otros bienes culturales que conforman la identidad nacional, pertenecen a la Nación y son inalienables, inembargables e imprescriptibles. La ley establecerá los mecanismos para readquirirlos cuando se encuentren en manos de particulares y reglamentará los derechos especiales que pudieran tener los grupos étnicos asentados en territorios de riqueza arqueológica. 80 El Estado planificará el manejo y aprovechamiento de los recursos naturales, para garantizar su desarrollo sostenible, su conservación, restauración o sustitución. Además, deberá prevenir y controlar los factores de deterioro ambiental, imponer las sanciones legales y exigir la reparación de los daños causados. Así mismo, cooperará con otras naciones en la protección de los ecosistemas situados en las zonas fronterizas. 96, inciso Son nacionales colombianos: 2, lit. c 2. c) Los miembros de los pueblos indígenas que comparten territorios fronterizos, con aplicación del principio de reciprocidad según tratados públicos. 171 La Circunscripción Especial para la elección de senadores por las comunidades indígenas se regirá por el sistema de cuociente electoral. Los representantes de las comunidades indígenas que aspiren a integrar el Senado de la República, deberán haber ejercido un cargo de autoridad tradicional en su respectiva comunidad o haber sido líder de una organización indígena, calidad que se acreditará mediante certificado de la respectiva organización, refrendado por el Ministro de Gobierno. 176, inc. La ley podrá establecer una circunscripción especial para asegurar 4 la participación en la Cámara de Representantes de los grupos étnicos y de las minorías políticas y de los colombianos residentes en el exterior. Mediante esta circunscripción se podrá elegir hasta cinco representantes. 246 Las autoridades de los pueblos indígenas podrán ejercer funciones jurisdiccionales dentro de su ámbito territorial, de conformidad con sus propias normas y procedimientos, siempre que no sean contrarios a la Constitución y leyes de la República. La ley establecerá las formas de coordinación de esta jurisdicción especial con el sistema judicial nacional. 286 Son entidades territoriales los departamentos, los distritos, los municipios y los territorios indígenas. La ley podrá darles el carácter de entidades territoriales a las 60 Artículo 287 329 330 Texto regiones y provincias que se constituyan en los términos de la Constitución y de la ley. Las entidades territoriales gozan de autonomía para la gestión de sus intereses, y dentro de los límites de la Constitución y la ley. En tal virtud tendrán los siguientes derechos: 1. Gobernarse por autoridades propias. 2. Ejercer las competencias que les correspondan 3. Administrar los recursos y establecer los tributos necesarios para el cumplimiento de sus funciones. 4. Participar en las rentas nacionales. La conformación de las entidades territoriales indígenas se hará con sujeción a lo dispuesto en la Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial, y su delimitación se hará por el Gobierno Nacional, con participación de los representantes de las comunidades indígenas, previo concepto de la Comisión de Ordenamiento Territorial. Los resguardos son de propiedad colectiva y no enajenable. La ley definirá las relaciones y la coordinación de estas entidades con aquellas de las cuales formen parte. PARÁGRAFO.— En el caso de un territorio indígena que comprenda el territorio de dos o más departamentos, su administración se hará por los consejos indígenas en coordinación con los gobernadores de los respectivos departamentos. En caso de que este territorio decida constituirse como entidad territorial, se hará con el cumplimiento de los requisitos establecidos en el inciso primero de este artículo. De conformidad con la Constitución y las leyes, los territorios indígenas estarán gobernados por consejos conformados y reglamentados según los usos y costumbres de sus comunidades y ejercerán las siguientes funciones: 1. Velar por la aplicación de las normas legales sobre usos del suelo y poblamiento de sus territorios. 2. Diseñar las políticas y los planes y programas de desarrollo económico y social dentro de su territorio, en armonía con el Plan Nacional de Desarrollo. 3. Promover las inversiones públicas en sus territorios y velar por su debida ejecución. 4. Percibir y distribuir sus recursos. 5. Velar por la preservación de los recursos naturales. 6. Coordinar los programas y proyectos promovidos por las diferentes comunidades en su territorio. 7. Colaborar con el mantenimiento del orden público dentro de su territorio de acuerdo con las instrucciones y disposiciones del Gobierno Nacional. 61 Artículo 340 356 Texto 8. Representar a los territorios ante el Gobierno Nacional y las demás entidades a las cuales se integren; y 9. Las que les señalen la Constitución y la ley. La explotación de los recursos naturales en los territorios indígenas se hará sin desmedro de la integridad cultural, social y económica de las comunidades indígenas. En las decisiones que se adopten respecto de dicha explotación, el Gobierno propiciará la participación de los representantes de las respectivas comunidades. Habrá un Consejo Nacional de Planeación integrado por representantes de las entidades territoriales y de los sectores económicos, sociales, ecológicos, comunitarios y culturales. El Consejo tendrá carácter consultivo y servirá de foro para la discusión del Plan Nacional de Desarrollo. Los miembros del Consejo Nacional serán designados por el Presidente de la República de listas que le presenten las autoridades y las organizaciones de las entidades y sectores a que se refiere el inciso anterior, quienes deberán estar o haber estado vinculados a dichas actividades. Su período será de ocho años y cada cuatro se renovará parcialmente en la forma que establezca la ley. En las entidades territoriales habrá también consejos de planeación, según lo determine la ley. El Consejo Nacional y los consejos territoriales de planeación constituyen el Sistema Nacional de Planeación. Salvo lo dispuesto por la Constitución, la ley, a iniciativa del Gobierno, fijará los servicios a cargo de la Nación y de los Departamentos, Distritos, y Municipios. Para efecto de atender los servicios a cargo de éstos y a proveer los recursos para financiar adecuadamente su prestación, se crea el Sistema General de Participaciones de los Departamentos, Distritos y Municipios. Los Distritos tendrán las mismas competencias que los municipios y departamentos para efectos de la distribución del Sistema General de Participaciones que establezca la ley. Para estos efectos, serán beneficiarias las entidades territoriales indígenas, una vez constituidas. Así mismo, la ley establecerá como beneficiarios a los resguardos indígenas, siempre y cuando estos no se hayan constituido en entidad territorial indígena. Los recursos del Sistema General de Participaciones de los departamentos, distritos y municipios se destinarán a la financiación de los servicios a su cargo, dándole prioridad al servicio de salud y los servicios de educación preescolar, primaria, secundaria y media, garantizando la prestación de los servicios y la ampliación de cobertura. 62 Artículo 357 Texto Teniendo en cuenta los principios de solidaridad, complementariedad y subsidiariedad, la ley señalará los casos en los cuales la Nación podrá concurrir a la financiación de los gastos en los servicios que sean señalados por la ley como de competencia de los departamentos, distritos y municipios. La ley reglamentará los criterios de distribución del Sistema General de Participaciones de los Departamentos, Distritos y Municipios, de acuerdo con las competencias que le asigne a cada una de estas entidades; y contendrá las disposiciones necesarias para poner en operación el Sistema General de Participaciones de éstas, incorporando principios sobre distribución que tengan en cuenta los siguientes criterios: a) Para educación y salud: población atendida y por atender, reparto entre población urbana y rural, eficiencia administrativa y fiscal, y equidad; b) Para otros sectores: población, reparto entre población y (sic) urbana y rural, eficiencia administrativa y fiscal, y pobreza relativa. No se podrá descentralizar competencias sin la previa asignación de los recursos fiscales suficientes para atenderlas. Los recursos del Sistema General de Participaciones de los Departamentos, Distritos y Municipios se distribuirán por sectores que defina la ley. El monto de recursos que se asigne para los sectores de salud y educación, no podrá ser inferior al que se transfería a la expedición del presente acto legislativo a cada uno de estos sectores. El monto del Sistema General de Participaciones de los Departamentos, Distritos y Municipios se incrementará anualmente en un porcentaje igual al promedio de la variación porcentual que hayan tenido los ingresos corrientes de la Nación durante los cuatro (4) años anteriores, incluida la correspondiente al aforo del presupuesto en ejecución. Para efectos del cálculo de la variación de los ingresos corrientes de la Nación a que se refiere el inciso anterior, estarán excluidos los tributos que se arbitren por medidas de estados de excepción, salvo que el Congreso, durante el año siguiente les otorgue el carácter permanente. Los municipios clasificados en las categorías cuarta, quinta y sexta, de conformidad con las normas vigentes, podrán destinar libremente, para inversión y otros gastos inherentes al funcionamiento de la administración municipal, hasta un veintiocho (28%) de los recursos que perciban por concepto del Sistema General de Participaciones de los Departamentos, Distritos y 63 Artículo Texto Municipios, exceptuando los recursos que se destinen para educación y salud. 64