Este artículo es una publicación de la Corporación Viva la Ciudadanía Opiniones sobre este artículo escribanos a: semanariovirtual@viva.org.co www.viva.org.co Bienvenida la Centro Derecha Héctor Alonso Moreno Profesor asociado Universidad del Valle A mediados del pasado año en la ciudad de Santa Marta el expresidente Álvaro Uribe Vélez, proclamó ante el país su estrategia político-electoral del Centro Democrático para la retoma del poder en el 2014, bajo la consigna: “Colombia piensa en grande”. La tarea de promover la construcción de una plataforma programática a partir de cinco puntos: seguridad, inversión, política social, Estado austero y participación ciudadana, les fue asignada en aquella ocasión a Francisco Santos, Carlos Holmes Trujillo García, Óscar Iván Zuluaga y Juan Carlos Vélez Uribe, a quienes presentó oficialmente como precandidatos presidenciales. Con anterioridad a la cita política de Santa Marta, el expresidente Uribe había trinado sobre sus huevos, afirmando que “Al Gobierno no le dejamos pollos robustos, pero si huevos fecundados, y por no cuidarlos ya quebró el de la seguridad”. El pasado lunes 16 de septiembre el expresidente Uribe desde su casa en Ríonegro (Antioquia) nos recordó aquella primera cita de la derecha colombiana en Santa Marta, pronunciando ante los medios de comunicación su programa de Gobierno. En esta ocasión fue explícito en temas como: el impuesto del 4 por 1.000, el cual propuso mantener con destino a fortalecer el agro colombiano. También propuso una jornada única escolar y habló de eliminar las EPS ineficientes. Afirmo que "En el país se desvanece la autoridad y se pierde la disciplina social" y aseguró acerca de la ley de justicia y paz que "El honor militar se ofende al ofrecerle a las Fuerzas Armadas lo mismo que al terrorismo". Habló de las relaciones internacionales afirmando que desde el Congreso encabezará la defensa de Colombia en la disputa con Nicaragua en el Tribunal de La Haya. En una clara alusión al Gobierno del presidente Santos, el Doctor Álvaro Uribe Vélez manifestó que "Queremos ayudar a enfrentar el deterioro de la seguridad, la creciente incertidumbre de la inversión, el estancamiento de la política social burocratizada, el derroche de los recursos oficiales y el abandono del diálogo popular sustituido por el riesgo de entrega del país al terrorismo". El tema de los diálogos de paz, la seguridad ciudadana y las relaciones internacionales, terminarán de nuevo realinderando la política nacional, y se constituirán en el centro del debate de la próxima contienda electoral a la Presidencia de la República. Desde ya entonces, el expresidente Álvaro Uribe se apresta a recorrer el país pidiendo el voto para su programa de Gobierno, y para llevar al Congreso de la República a una lista de la que hacen parte honorables desconocidos, pero los cuales coinciden todos en la adscripción ideológica a su pensamiento de Centro Derecha. La agitación de su bandera del Estado Comunitario acompañada de su popularidad que está alrededor de 63%; deberá conseguir para él y su listado de candidatos al Congreso mínimo unos 450.000 sufragios para alcanzar el umbral. Y poder así instalar en el Congreso una buena bancada de ilustres miembros de la derecha colombiana. A partir de ahora se perfila entonces el Centro Democrático Uribista en la oposición oficial al Gobierno del presidente Juan Manuel Santos. Uribe Vélez, tratará a partir de un discurso marcadamente de derecha colonizar el centro, aunque los Uribistas en la cumbre política se definieron como un movimiento que no es de derecha ni de izquierda. Así lo manifiestan en su plataforma, cuando precisan que “No somos de izquierda ni derecha, somos una expresión democrática de centro que cree firmemente en el equilibrio entre la seguridad y la justicia desde las instituciones del Estado de derecho.” De todas maneras bienvenido el nuevo Partido Uribista a la democracia multipartidista colombiana. Este nuevo movimiento de oposición, cuyo líder principal, sus precandidatos presidenciales y sus candidatos al Senado, provienen en su mayoría de las entrañas del bipartidismo Liberal – Conservador, con la novedad de un ex miembro del M-19, son todos ellos a partir de ahora, la expresión de la nueva derecha colombiana. Sin duda alguna, la consolidación de la derecha Uribista contribuirá a la discusión acerca de la necesidad de reinventar la política a partir de la construcción de un modelo de democracia multipartidista inclusiva, con reglas del juego claras, que garanticen la vida política de los disensos y de las minorías políticas con circunscripciones especiales electorales no sólo de minorías, sino también de paz. Es preciso adelantar una reforma política que permita estructurar un nuevo modelo político para el país en la cual se pueda expresar con claridad ideológica la derecha, el centro y la izquierda. Modelo político en el cual también debe quedar explícito que la violencia y la exclusión por pensar diferente no hacen parte de la actividad política, y en el cual tampoco exista la menor posibilidad de ser cooptado con dádivas o canonjías al establecimiento clientelar mayoritario. Es decir, hay que trabajar por construir un nuevo modelo político de profundo respeto a la actividad política de las diferentes formaciones ideológicas en el marco del fortalecimiento de la democracia. Edición N° 00369 – Semana del 20 al 26 de Septiembre de 2013