cordillera del Turquino, y los demás sistemas montañosos cubanos

LÓPEZ ALMIRALL & al. - El endemismo vegetal del Turquino
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cordillera del Turquino, y los demás sistemas montañosos cubanos (fig. 3 ) , se p u e d e hablar
sobre la influencia de la flora de Moa-Baracoa (33), sobre las floras orófilas cubanas.
P a r a concluir, p o d e m o s decir, que el distrito 28 se relaciona con los sistemas montañosos
orientales que alcanzan más de 600 m. (distritos 27, 29, 31, 32, 33, 37, 38 y 39), a través de los
táxones del grupo norandino, al igual que en el resto del país (fig. 9 ) .
Con los distritos que no alcanzan esa altitud, a diferencia de lo que ocurre en los otros
dos sectores, las relaciones no son básicamente con los táxones amazónicos (fig. 9 ) , sino
q u e en los distritos m á s occidentales hay casi igual c a n t i d a d de e l e m e n t o s n o r a n d i n o s y
amazónicos (distritos 26, 30 y 34), mientras que en los más orientales dominan norandinos
(distritos 35 y 36).
Las causas de este patrón, podrían explicarse a partir de la facilidad con que los táxones
norandinos especian e invaden nuevos territorios, G E N T R Y ( 1 9 8 2 ) , lo cual habría facilitado
que, a partir de los centros de especiación existentes en las montañas, tales táxones hayan
comenzado a invadir rápidamente las zonas bajas colindantes.
CONCLUSIONES
- P o r la c a n t i d a d de e n d e m i s m o s estrictos que tiene el distrito Turquino (28), se p u e d e
considerar uno de los grandes centros evolutivos del país, solo superado por el distrito MoaBaracoa.
- D e s d e el punto de vista del endemismo, se nota en el distrito 28 una gran similitud con
América central, pues las familias más ricas en endemismos que viven en a m b a s regiones
de A m é r i c a son aproximadamente las mismas.
- P o r la gran c a n t i d a d de epífitas reales y p o t e n c i a l e s que c o n t i e n e el e n d e m i s m o
distrital, es de s u p o n e r q u e la mayor p a r t e de los e n d e m i s m o s del distrito Turquino son
propios del monte nublado, pues allí ocurre la mayor riqueza de ese sinusio en Cuba.
- La migración a occidente de los endemismos cubanos que viven en el distrito Turquino
ha sido d e s p r o p o r c i o n a d a , ya q u e la c a n t i d a d de los que llegan hasta C u b a c e n t r a l es
mínima, en comparación con los que hay en el oriente, y a C u b a occidental llega casi 6 0 %
de los presentes en C u b a central.
- La mayor acumulación de endemismos comunes con el distrito Turquino ocurre en los
sistemas orográficos con alturas superiores a los 600 m.
- L a g r a n c a n t i d a d de e n d e m i s m o s m u l t i d i s t r i t a l e s q u e viven s ó l o en los g r u p o s
orográficos que superan los 600 m, lleva a concluir que en la flora de C u b a se p u e d e hablar
de una disyunción orófila.
- E n las regiones d e C u b a occidental y central con m e n o s de 600 m, las r e l a c i o n e s
florísticas con el distrito Turquino ocurre en primer lugar a través de táxones amazónicos,
mientras en las que superan esa altitud tales relaciones tienen lugar a través de los táxones
norandinos. E n las zonas con alturas cercanas a esta cota, hay casi igual n ú m e r o de táxones
pertenecientes a ambos centros evolutivos.
- E n las r e l a c i o n e s florísticas con C u b a oriental p r i m a n los e l e m e n t o s n o r a n d i n o s ,
i n d e p e n d i e n t e m e n t e de la altitud.
- Puesto que la mayoría los endemismos estrictos, así como las familias y géneros que los
c o n t i e n e n , son n o r a n d i n o s , y q u e el n ú m e r o de táxones p o r g é n e r o y familia d e estos
elementos superan en n ú m e r o a otros grupos evolutivos, se p u e d e decir que las familias
norandinas n o sólo han especiado más, sino que mayor n ú m e r o de ellas lo ha hecho.
- C o m o regla, las familias que aportaron más táxones han especiado más, no así en los
g é n e r o s ; luego, en estos últimos, la presión de selección a m b i e n t a l s o b r e ellos h a sido
selectiva, lo que no ocurre con las familias.
- L a f o r m a en q u e h a n e s p e c i a d o las familias, y la s u p e r i o r i d a d n u m é r i c a d e los
endemismos multidistritales sobre los estrictos, evidencian que en el distrito 28 los procesos
de especiación no han ocurrido en condiciones de aislamiento, sino en medio de u n gran
i n t e r c a m b i o de g e r m o p l a s m a con otras p a r t e s del archipiélago, s o b r e t o d o con C u b a
oriental.
- O p i n a m o s que, ni en C u b a ni en América central, se p u e d e hablar p r o p i a m e n t e de la
inversión de elementos nórdicos como fenómeno generalizado, pues la mayor p a r t e de las
especies de ese origen que viven en Centroamérica lo hace en las grandes alturas, y sólo
excepcionalmente descienden al nivel del mar. Es de suponer que la adaptación de algunos
elementos orófilos a las llanuras ocurrió en el continente, y desde allí pasaron a las islas.
- E n m u c h o s t á x o n e s c o n c e n t r o d e e v o l u c i ó n l a u r á s i c a , se h a p r o d u c i d o u n a
readaptación a las condiciones propias de las montañas, fenómeno éste no señalado hasta