23 LEADERSHIP AGENDA El Cliente Interno y su satisfacción El nivel de satisfacción del cliente interno se proyecta en la calidad percibida en el exterior Cada vez más, las organizaciones están comenzando a integrar en sus estructuras el término “cliente interno”. Hasta hace poco, nuestro concepto de cliente se relacionaba de forma unívoca con el cliente de toda la vida, aquel que recibe un producto y/o un servicio de nuestra organización y que, según las propiedades del producto o del servicio dado, tenderá a repetir su acción de comprar o no. Conceptualmente, el cliente paga por algo que va a recibir. relacionado con el primero, es el compromiso de calidad de los servicios internos como uno de los requisitos para que el servicio externo pueda ser también de alta calidad. De algún modo, lo que subyace al concepto de “cliente interno” es la premisa de que “sólo Sin embargo, el concepto de “cliente interno” rompe con la definición tradicional e introduce matices dentro de la organización que conviene observar y analizar. El tercer matiz derivado del concepto de cliente interno está sujeto a otro principio: el marco en el que las distintas unidades Sin duda, el primer matiz que ha de ser contemplado es que el concepto de cliente interno implica una dinámica de una relación de proveedor interno cliente interno, los criterios de actuación pasan a ser más rigurosos, a estar regulados por objetivos de servicio en términos de tiempos de entrega del servicio/producto, niveles de producción, calidad, de orientación a resultados... Así, el concepto “cliente interno”, profesionaliza la actuación de todos los departamentos de una empresa, marcando la calidad del resultado, del trabajo, independientemente de servicio dentro de la propia organización. En ese sentido, las distintas unidades organizativas se relacionan entre sí, dándose servicio unas a otras, practicamente como el servicio o producto que entregamos a un cliente externo. El segundo aspecto, íntimamente cuando la cultura de servicio interno está basada en la calidad, el servicio que se dará más adelante al cliente externo consecuentemente mantendrá esos estándares de calidad” . organizativas se relacionan dentro de la empresa . Si dos departamentos poseen que el servicio o producto final vaya a manos del cliente interno o externo. Teniendo en cuenta todos estos matices, el cliente interno se podría considerar previo al cliente externo, contemplándose como una antesala de la opinión que finalmente tendrá el cliente externo del producto/servicio de la empresa. Atendiendo a la calidad del servicio que recibe el cliente interno, es posible que podamos hacernos una idea de la calidad que percibirá el cliente externo. Por este motivo, conocer la opinión del cliente interno puede ser un buen ejercicio para establecer los parámetros de calidad que necesitamos dentro del funcionamiento de nuestra compañía. Un Ejemplo: Ericsson El Cliente Interno en Leadership Business Consulting ha realizado un proyecto en Ericsson España para medir la calidad del servicio ofrecido por una rama de sus unidades globales a sus clientes internos. El objetivo principal del proyecto fue la 24 mejora de la calidad del servicio prestado por la unidad analizada, partiendo de la opinión real de los clientes internos sobre dichos servicios. Para ello, una de las acciones clave fue hacer una correcta discriminación de los distintos clientes de la unidad. De esta manera, las preguntas a realizar fueron completamente adaptadas a cada una de las realidades. La metodología de sondeo varió también según el cliente, teniendo en cuenta variables para cada uno de ellos como la cercanía entre cliente-proveedor interno y los niveles de servicio dado. Las herramientas empleadas fueron principalmente: I) encuestas on-line de satisfacción; II) entrevistas telefónicas (para clientes internos dispersos geográficamente); y III) entrevistas presenciales. Se midieron los siguientes factores: la calidad de los procesos de trabajo en los que participan varios agentes, la calidad de los canales de comunicación empleados, el marco de actuación ( Service Level Agreement ), o el grado de conocimiento 25 LEADERSHIP AGENDA de las distintas unidades entre sí, entre otros. El resultado del análisis permitió obtener una visión clara, estructurada y precisa sobre la opinión de los diferentes clientes de la unidad en cuanto a los distintos niveles de servicio dado, con relación a todas las variables medidas. Esta primera fase del proyecto se materializó en un plan de acción a corto, medio y largo plazo, basado en los resultados de las encuestas y entrevistas, dotando así a las acciones futuras de una base sólida y fiel a la realidad. El Plan de Acción resultante incidió sobre la modificación de ciertos procesos de trabajo, la optimización de los canales de comunicación más frecuentes, y sobre las acciones de clarificación, actualización y comunicación de los Service Level Agreement que rigen los servicios. Una de las claves del proyecto fue la creación de un equipo de trabajo mixto, formado por personas del equipo del cliente interno, proveedor interno y de Leadership Business Consulting. Este grupo de trabajo fue clave para la concepción de proyecto y su puesta en marcha, para el conocimiento mutuo, la clarificación de expectativas, la alineación de visiones; en definitiva, para unificar los criterios de actuación, de ejecución y los resultados. El proyecto posibilitó una reflexión conjunta sobre la realidad de la relación entre distintos departamentos de la empresa a la luz de la relación cliente interno-proveedor interno , permitiendo establecer los criterios óptimos de servicio, los resultados esperados y delimitando las condiciones necesarias para solicitar un servicio y para que dicho servicio sea prestado con la calidad requerida.