IP/00/541 Bruselas, 30 de mayo de 2000 Servicios postales: la Comisión propone acelerar la realización del Mercado Interior La Comisión Europea ha propuesto una serie de medidas para abrir a la competencia una parte importante del mercado de los servicios postales antes del año 2003. En base a nuevas propuestas que se presentarán antes de que termine el año 2004, otra parte del mercado se abriría a la competencia antes del año 2007. Este enfoque gradual para realizar el Mercado Interior de los servicios postales mantendrá las actuales garantías que protegen un servicio postal universal en toda la Unión. Las propuestas son consecuencia de una solicitud del Consejo Europeo de Lisboa para acelerar la liberalización de los servicios postales como parte de los esfuerzos destinados a garantizar un Mercado Interior completo y totalmente operativo y desarrollar así “la economía del conocimiento más competitiva y dinámica del mundo”. Concretamente, la Comisión propone que se incremente la gama de servicios que deben abrir a la competencia los Estados miembros incluyendo las cartas de más de 50 gramos (el límite de peso actual es de 350 gramos), las cartas de menos de 50 gramos cuyo precio es al menos de dos veces y media el coste de una carta normal (el límite de precio actual es cinco veces el coste de una carta normal) y todo el correo destinado a otros Estados miembros y todo el correo urgente. El efecto de esta propuesta será la apertura a la competencia de un 23% aproximadamente del mercado postal comunitario, comparado con el modesto 3% que contempla la Directiva existente. El Comisario de Mercado Interior Frits Bolkestein afirmó: “Unos servicios postales rápidos, eficaces y competitivos son esenciales para garantizar la competitividad de la industria comunitaria y para que el Mercado interior sea una realidad para los consumidores. Y serán fundamentales si las empresas y los consumidores pueden aprovechar todo el potencial del comercio electrónico – nadie querrá comprar por Internet si no dispone de un servicio de suministro rápido, asequible y eficaz. Unos servicios postales eficaces son indispensables asimismo para la publicidad, las comunicaciones y un suministro rápido y rentable tanto de los componentes como de los productos acabados. Tenemos que superar el debate ideológico, ya que tanto la Directiva actual como la nueva propuesta proporcionan unas sólidas medidas de salvaguardia para garantizar un servicio universal y consolidar el papel especial de los servicios postales en la sociedad. Ahora debemos centrarnos en llevar a la práctica este enfoque gradual para abrir el mercado postal a una mayor competencia. Los desafíos a que se enfrenta el sector postal hacen imposible mantener la situación actual.” La propuesta pretende garantizar que la apertura del mercado, que deberá ser total en 2003, tenga la suficiente entidad para generar la competencia sin poner en peligro el servicio universal ni el equilibrio financiero de los operadores del servicio universal. A este fin, la apertura de mercado propuesta afecta a todos los segmentos del mercado postal (la reducción de los límites de peso y de precio para el sector máximo reservable), pero se centra más concretamente en los segmentos de mercado que ya están abiertos de facto a la competencia (por ej. el correo destinado al extranjero). Primera fase La propuesta exigiría a los Estados miembros lo siguiente, antes del 1 de enero de 2003: - reducir los actuales límites de peso y de precio de 350 gramos y 5 veces la tarifa básica normal para las cartas a 50 gramos y 2 veces y media la tarifa básica normal para cartas - reducir los actuales límites de peso y de precio de 350 gramos y 5 veces la tarifa básica normal para cartas a 50 gramos y 2 veces y media la tarifa básica normal para el mailing directo (es decir el envío de publicidad) - abrir totalmente a la competencia el correo destinado al extranjero - abrir totalmente a la competencia todos los servicios de correo urgente (sin límite de precio). Se calcula que la apertura total del mercado resultante de la propuesta representará aproximadamente el 20% de los ingresos que obtienen los operadores del servicio universal de los servicios postales. La Comisión no propone medidas específicas para la apertura del mercado postal transfronterizo debido al riesgo de que dichas medidas puedan utilizarse para burlar el sector de los servicios de correo interior que los Estados miembros podrían reservar a los operadores del servicio universal. En base a esta propuesta, los Estados miembros podrían mantener un ámbito reservado que representa, como media, el 50% de los ingresos que obtienen los operadores del servicio universal de los servicios postales. Actualmente, los operadores del servicio obtienen una media del 70% de sus ingresos de los servicios reservados. No obstante, como varios Estados miembros ya han abierto sus mercados postales en mayor medida de lo que propone la Comisión, las consecuencias de la propuesta sobre la apertura del mercado varía entre los distintos Estados miembros. Por último, la propuesta mejora la claridad y la seguridad legales del actual marco reglamentario con una definición clara de los servicios especiales, que no se pueden reservar, y la exigencia de unos principios de transparencia y no discriminación a la hora de aplicar tarifas especiales. 2 Fase siguiente Se propone una fase posterior para una mayor apertura del mercado postal, que entrará en vigor el 1 de enero de 2007. Deberán presentarse propuestas concretas a la Comisión antes del 31 de diciembre de 2004. Dichas propuestas se basarán en una revisión del sector centrada en el mantenimiento del servicio universal en un entorno competitivo. Garantías relativas al servicio universal Las garantías para la salvaguardia del servicio universal, que ya están definidas en la Directiva postal existente (97/67/CE), deberán reforzarse. Concretamente, los Estados miembros podrán seguir aplicando un régimen de concesión de licencias para imponer obligaciones de servicio universal a los competidores y la posibilidad de crear un fondo de compensación al que contribuirían los operadores para cubrir las posibles pérdidas de ingresos procedentes de los servicios reservados que podría sufrir el operador del servicio universal y que podrían impedirle cubrir los costes derivados de la obligación del servicio universal. La nueva propuesta reforzará esas disposiciones al incluir la posibilidad expresa para los operadores del servicio universal de realizar subvenciones cruzadas entre los servicios no reservados con ingresos procedentes de los servicios reservados. 3