Hace diez meses recibí por herencia unas acciones de una compañía cotizada. Mi intención es vender dichas acciones que han generado una pequeña ganancia durante estos diez meses, no obstante se me plantea una duda, a los efectos exclusivamente fiscales ¿es preferible venderlas ahora, o esperar hasta que haya transcurrido más de un año para beneficiarme del tipo impositivo especial del 15%? Es probable que en su caso la opción de esperar más de un año para beneficiarse del tipo impositivo especial del 15% no sea la más beneficiosa fiscalmente. Hay que tener en cuenta que la propiedad de sus acciones procede de una adjudicación por herencia, circunstancia que en su momento debió motivar el pago del Impuesto de Sucesiones (cuya tarifa oscila entre un 8% y un 82% en función de los bienes recibidos, el parentesco con el difunto y el patrimonio preexistente del receptor de los bienes) y que dicho pago, junto con los otros gastos derivados de la herencia, distorsionará la ganancia generada pudiendo dicha ganancia llegar a transformarse en una pérdida fiscal. Cabe recordar que el importe de la ganancia o pérdida patrimonial obtenida por la venta de las acciones se determinará por la diferencia entre el valor de transmisión y el valor de adquisición. El Valor de Transmisión será el importe real de enajenación de las acciones. El Valor de Adquisición de las acciones adjudicadas por herencia, será igual al valor de cotización de las acciones en la fecha de defunción más los gastos y tributos inherentes a la adquisición de las acciones satisfechos por el adquirente (notario, Impuesto de Sucesiones). La suma de estos gastos al valor de adquisición puede motivar un valor de adquisición superior al valor de transmisión y en consecuencia una pérdida fiscal. En dicho supuesto, fiscalmente será más beneficioso proceder a la venta de las acciones con anterioridad al transcurso de un año desde su adquisición a fin de poder compensar dicha pérdida con otras ganancias con periodo de generación inferior a un año o con otros rendimientos de la parte general. En consecuencia, la pérdida fiscal obtenida permitiría la recuperación de parte del Impuesto de Sucesiones pagado y los gastos derivados de la herencia (siempre en la parte correspondiente a las acciones adquiridas), pudiendo alcanzar dicha recuperación hasta un 45% de dicho coste en los casos en los que el tipo impositivo de la parte general del transmitente fuera del 45%. La presente respuesta ha sido redactada en fecha 01 de octubre de 2004 en base a la legislación vigente actualmente aplicable y está basada en los datos e informaciones facilitados siendo por tanto susceptible de modificación si éstos fueren erróneos o mal interpretados, debiendo en su caso estar sometidos a un ulterior estudio más exhaustivo. Cuanto antecede, salvo error u omisión involuntarios, constituye nuestra opinión sobre la consulta planteada, con arreglo a nuestro leal saber y entender que gustosamente sometemos a cualquier otra mejor, debidamente fundada, y subordinamos a mejores criterios. SABADELL BANCA PRIVADA, S.A. no se hace responsable del uso que se haga de esta información. © 2004, SABADELL BANCA PRIVADA, S.A.