"MANEJO DE LAS COMPLICACIONES DE LA NEFROLITOTRICIA PERCUTÁNEA (NLP)" Dr. Paul Ricardo Peñaherrera Toledo Carrera Universitaria de Especialista en Urología Facultad de Medicina - Universidad de Buenos Aires (UBA) Argentina Servicio y Cátedra de Urología - Hospital de Clínicas "José de San Martín" (UBA) -29 de julio de 2013- Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) ÍNDICE Dr. Paul Peñaherrera Toledo pág. 1 1. INTRODUCCIÓN ................................................................................................................ pág. 2 1.1 Historia pág. 2 1.2 Generalidades pág. 3 2. COMPLICACIONES DURANTE EL PROCEDIMIENTO .......................................... pág. 4 2.1 Hemorragia pág. 7 2.2 Perforación Colónica pág. 11 2.3 Lesión Pleural pág. 13 2.3.1 Fístula nefro-pleural 2.4 Lesiones del Sistema Colector pág. 14 2.4.1 Migración de fragmentos de cálculo 2.4.2 Tubeless 2.5 Lesión de Hígado, Vesícula Biliar y Bazo pág. 16 2.6 Urosepsis pág. 16 2.6.1Urinoma 2.7 Fístula Nefrocutánea pág. 17 2.8 Hipotermia pág. 18 2.9 Sobrecarga de fluido pág. 18 2.10 Lesiones relacionadas con la posición del paciente pág. 18 3. PREDICTORES DE COMPLICACIONES ............................................................ pág. 19 3.1 Guy´s Stone Score (GSS) pág. 19 3.2 Sistema de Clavien Modificado pág. 19 4. CONCLUSIONES .............................................................................................................. pág. 22 5. BIBLIOGRAFÍA ........................................................................................................ pág. 24 1 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo MANEJO DE LAS COMPLICACIONES DE LA NEFROLITOTRICIA PERCUTÁNEA 1. INTRODUCCIÓN 1.1 Historia En 1955 Goodwin y col., describen la técnica de la nefrostomía percutánea para drenar las hidronefrosis, abriendo de este modo un camino a la manipulación renal no quirúrgica por vía abierta. Después de algunos años, utilizando la técnica de Goodwin, los suecos Fernstrom y Johanssen, en 1976, comunican la remoción mecánica de cálculos renales a través de un tracto hecho por vía percutánea y bajo control fluoroscópico. Sin embargo, el verdadero desarrollo de la nefrolitotomía percutánea se la atribuye a Alken de Alemania y Marberger de Austria, quienes en 1979, logran fragmentar cálculos renales por vía percutánea, mediante el ultrasonido, bajo control fluoroscópico y visión directa y establecen las reglas básicas de la cirugía percutánea endorrenal. Posteriormente, los estadounidenses Wickham de Inglaterra, Hohenfellner de Alemania, Segura, Clayman, Smith y Amplatz contribuyeron al perfeccionamiento y difusión de esta nueva alternativa de tratamiento de los cálculos renales.2 La Cirugía Renal Percutánea nace a principios de la década de 1980 con la Nefrolitotomía Percutánea (NLP). A los grupos de Alken y Wickham se les atribuye la paternidad del método por haber sido los primeros en reportar series de casos tratados con sistematización de la técnica y la descripción de los aparatos necesarios para llevarla a cabo. La punción percutánea siguiendo la técnica de Seldinger, en un principio y guiada únicamente por Rx implicaba trayectos "sinuosos" y una excesiva exposición a las radiaciones ionizantes, tanto para el paciente como para el urólogo. Pronto se adoptan las guías rígidas tipo Lunderquist y los dilatadores metálicos coaxiales de Alken. Así mismo en Alemania se empieza a realizar la punción percutánea ecodirigida desde los primeros momentos.1 Los Nefroscopios con canal de instrumentación rígido para todo tipo de pinzas y sondas de litotricia son fabricados por todas las marcas comerciales. La litotricia intracorpórea ultrasónica y la electrohidráulica ya existente se adaptan rápidamente a esta técnica. Los instrumentos flexibles desarrollados para la vía digestiva se adecúan para la endoscopia urológica.1 2 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo 1.2 Generalidades La nefrolitotricia percutánea (NLP) es un procedimiento quirúrgico mínimamente invasivo para tratar a pacientes con litiasis renal. Las indicaciones para llevar a cabo una NLP son: tamaño de los cálculos mayores de 2 cm, presencia de uropatía obstructiva, presencia de anormalidades anatómicas, cálculos localizados en cálices de difícil acceso, composición de los cálculos, y fracaso de otras modalidades de tratamiento. Los resultados en los centros que utilizan la NLP más frecuentemente se acercan a 90% de éxito en extracción de litos. Algunos de los mejores centros han reportado una tasa de retratamiento por litiasis residual en casos complejos de hasta 20%.La tasa de morbi-mortalidad de este procedimiento se ha reportado baja aún para litos complejos y la recuperación postoperatoria en tiempo es diez veces menor que con la cirugía a cielo abierto. La mortalidad de la NLP varía entre 0.046 y 0.3%.3 En la literatura mundial las tasas de complicaciones se encuentran de 23 a 30%. Algunas complicaciones son clínicamente insignificantes (fiebre). La tasa de sangrado significativo es menor a 8%. La tasa de septicemia es de 0.9 a 4.7%, y para hemorragia masiva que requiere intervención de 0.6 a 1.4%. La tasa de transfusión sanguínea reportada en la literatura es de 5% a 18%. La lesión pleural en relación con la punción percutánea se presenta de 2.3 a 3.1% y la lesión colónica de 0.2 a 0.8%.3 En la siguientes tabla y figura, se describen las tasas de complicaciones y sus cambios a través del tiempo en los Estados Unidos, entre 1998 y 2009.5 Complicaciones (1998-2009) Cualquier complicación Neumotórax Transfusión Celulitis del flanco Sepsis Embolismo Pulmonar (EP) Trombosis Venosa Profunda (TVP) Neumonía Injuria Vascular Renal Injuria Vascular Urosepsis/Infección del Tracto Urinario (ITU) Pielonefritis Muerte 13.020 (15.6%) 257 (0.3%) 3.713 (4.4%) 91 (0.1%) 2.037 (2.4%) 182 (0.2%) 220 (0.3%) 66 (0.1%) 89 (0.1%) 806 (1%) 7.038 (8.4%) 1.515 (1.8%) 219 (0.3%) Cambios a través del tiempo Valor - p <0.001 0.031 <0.001 0.903 <0.001 0.94 0.844 0.799 0.883 0.72 0.628 0.241 0.564 Tabla 1. Tasas de complicaciones y sus cambios a través del tiempo.5 3 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo Figura 1. Tasas de complicaciones a través del tiempo.5 2. COMPLICACIONES DURANTE EL PROCEDIMIENTO Al iniciar la NLP, la punción se realiza mediante una aguja de chiva preferentemente 18G, bajo control fluoroscópico, previa la inyección de material de contraste por un catéter ureteral colocado mediante cistoscopía. Una vez que se crea que se ha logrado el acceso al sistema colector, debe aspirarse la orina. Si lo que se aspira resulta ser sangre franca, simplemente se retira la aguja y se reintenta la punción. Dependiendo de la indicación del procedimiento y si ya está colocado un catéter ureteral, el alambre puede ser descendido al uréter para lograr un acceso completo más seguro. Si es posible visualizar el alambre en ascenso o descenso en la vena cava inferior o la aorta, el alambre se retira manteniendo la aguja de acceso en el lugar y se reposiciona en el sistema colector o uréter.4 El éxito y la ausencia de complicaciones de la NLP dependen en gran medida de la selección apropiada del cáliz. Las dos consideraciones más fundamentales son la localización de las estructuras anatómicas importantes, así como la ubicación del o los cálculos. Evitar la vena y la arteria renal es lo más importante, así como también la vasculatura intrarrenal, ya que esto minimiza mucho el trauma y las complicaciones propias de este procedimiento. Si existen múltiples cálculos en diferentes cálices, más de un tracto puede ser necesario. Sin importar la localización del cálculo o la disponibilidad de equipo, debe evitarse las punciones en la pelvis renal y el uréter. La ausencia de parénquima circundante hacen que tales sitios sean susceptibles de desgarro debido a las fuerzas ejercidas durante el procedimiento, lo cual, a su vez, puede traer como resultado sangrados significativos.4 4 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo En los gráficos a continuación se aprecia una clara disposición del sistema colector, cálices, e irrigación arterial, con vista anterior y posterior, fundamental para identificar las estructuras a implicadas en el trayecto a punzar. vista anterior vista posterior Gráfico 1. Irrigación arterial renal, vista anterior y posterior. Sampaio describió, de acuerdo a la distribución arterial renal, la probabilidad de sangrado en la punción infundibular, siendo esta: en cáliz superior: lesión vascular 67% (arterial en 26%), en cáliz medio: lesión vascular 23% y en cáliz inferior: lesión vascular 13%.22 La mayoría de autores coinciden en que la zona apropiada de la punción, para minimizar la potencial lesión de estructuras renales (vasculares y del sistema colector) y estructuras adyacentes, con el objetivo de evitar complicaciones inherentes a este procedimiento, debería ser: por debajo de la 11va costilla, por arriba de la cresta ilíaca, por fuera de los músculos paravertebrales y por dentro del extremo libre de la 12va costilla. Lo anteriormente expuesto se define como la zona específica, desde la cual se debe hacer una proyección en línea recta hacia la pelvis renal, para poder alcanzar el centro del cáliz póstero-lateral e inferior, cómo se puede ver en la siguientes ilustraciones. 5 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo Gráficos 2 y 3. Zona de punción segura.34 Acceso a cáliz inferior bajo control fluoroscópico (N. Bernardo). Las complicaciones que se pueden presentar durante o después de la NLP pueden ser: - Hemorragia - Lesión de estructuras adyacentes o perforación de órganos vecinos - Colon - Pleura o Pulmón - Hígado, Vesícula o Bazo - Urosepsis - Lesiones del sistema colector - Urinoma - Fístula nefrocutánea - Hipotermia - Sobrecarga de fluido - Lesiones relacionadas con el posicionamiento del paciente 6 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo En la siguiente tabla se describe el análisis de los resultados de un grupo de pacientes en Chile, los cuales fueron sometidos a NLP en decúbito supino y la conducta tomada al momento de la presentación de complicaciones, coincidiendo con la mayoría de las series publicadas. Se analizó la serie comparando la era pre LEC (grupo 1) y post LEC, en decúbito prono (grupo 2) y decúbito supino (grupo 3). Este grupo concluyó que el decúbito supino y una ubicación del cálculo en la pelvis renal son elementos predictivos de buen resultado. El decúbito supino es una posición comparable con el decúbito prono en cuanto a complicaciones, siendo mejor en cuanto a resultados.7 Tabla 2. Descripción de las complicaciones de la serie y el tratamiento utilizado.7 2.1 Hemorragia El sangrado durante o después del procedimiento, aunque se da en un porcentaje bajo de los pacientes, cuando se presenta puede tener consecuencias graves como la pérdida de la unidad renal, el choque hipovolémico y hasta la muerte. La hemorragia es una de las complicaciones más significativas. En todos los casos se evidencia por lo menos cierto grado de sangrado, que puede identificarse en cualquier momento durante o después del procedimiento. El tratamiento depende del momento y de la gravedad del sangrado. Cuando se produce durante el abordaje o la dilatación del tracto, en general suele responder a la colocación de un dilatador del siguiente tamaño que ocluya el trayecto en forma efectiva. Además, la dilatación con balón en lugar de la dilatación secuencial podría disminuir la incidencia de sangrado durante este paso.19 7 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo Si se desarrolla un sangrado significativo durante la manipulación del cálculo, se debe suspender el procedimiento en forma temporaria e instituir el drenaje a través de un tubo de nefrostomía durante un par de días. En los casos más graves, el tratamiento exitoso puede lograrse mediante la oclusión temporaria del tubo de nefrostomía, para permitir el taponamiento del sistema colector. En general, el tubo de nefrostomía puede desobstruirse en forma segura varias horas después. El sangrado que se evidencia durante la extracción del tubo de nefrostomía se controla mediante su reinserción inmediata.19 Ocasionalmente, percances tales como la venotomía renal o una cavotomía no se identifican sino hasta después de la dilatación. Si durante la instilación del contraste o la colocación del nefroscopio se encuentra que se ha dilatado un vaso equivocadamente, se debe colocar un catéter de de oclusión sobre la guía e inflar el balón. Posteriormente, se le desinfla en forma gradual y se retira durante el período post operatorio. Si hay sospecha de que la venotomía se comunica con el sistema colector, se debe inflar un catéter de oclusión para corregir el defecto en el sistema.4 La hemorragia tardía, o sea, la que se produce varios días después de la extracción del tubo de nefrostomía, se trata en forma más eficiente con procedimientos conservadores, como el control estricto de los signos vitales, el reposo en cama, la hidratación y la transfusión en los casos necesarios. Cuando el sangrado no responde a estas medidas, el tratamiento debe consistir en angiografía renal y embolia arterial selectiva.19 En caso de que no esté clínicamente claro, se puede realizar una TC con contraste endovenoso en fase renal o un angiograma, pero ningún paciente se debe transportar para un estudio de imágenes o un procedimiento intervencionista hasta que su estado clínico no sea óptimo.20 La angiografía resulta innecesaria en la mayoría de los casos de sangrado post operatorio. Debe reservarse para sangrados difíciles de ubicar que ocurran inmediatamente después de la operación. La necesidad de transfundir tres o más unidades de sangre durante o posterior al segundo día post operatorio debe hacer pensar en la presencia de una fístula arteriovenosa.20 8 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo En un estudio de 5537 pacientes, entre noviembre de 2007 y diciembre de 2009, con respecto al sangrado, al tiempo quirúrgico y al número de procedimientos, al momento de comparar los métodos de dilatación del tracto, los resultados reflejaron que hubo diferencia estadísticamente significativa a favor de la dilatación del trayecto con dilatadores seriales telescopados vs. los dilatadores con balón, los cuales se describen en las siguientes tablas.6 Complicaciones de sangrado y tiempos de operación Característica Sangrado Descenso del hematocrito (media/promedio) Transfusión sanguínea Tiempo promedio de operación (min) Dilatadores con balón n=2277 9.4% 4.48/4.50 7.0% 94.0 Dilatadores telescopados seriales n=3260 6.7% 2.48/2.40 4.9% 60 Valor - p Dilatadores con balón n=2277 7.9% 4.8% 105 8.8% 4.5% 98 10.4% 10.8% 90 Dilatadores telescopados seriales n=3260 12.9% 8.1% 108 11.6% 4.5% 80 3.6% 4.8% 55 <0.0001 <0.0001 0.001 <0.0001 Tabla 3. Complicaciones de sangrado y tiempos de operación.6 Complicaciones de sangrado y tiempos de operación por volumen del Centro de Estudio Bajo volumen (<25 procedimientos/año) Mediano volumen (25-100 procedimientos/ año) Alto volumen (>100 procedimientos/ año) Tasa de sangrado Tasa de transfusión sanguínea Tiempo de operación (min) Tasa de sangrado Tasa de transfusión sanguínea Tiempo de operación (min) Tasa de sangrado Tasa de transfusión sanguínea Tiempo de operación (min) Tabla 4. Complicaciones de sangrado y tiempos de operación por volumen del Centro de Estudio.6 Es este mismo estudio también se realiza una comparación con respecto al tamaño del Amplatz y su correlación, tanto con el sangrado como con la tasa de transfusión sanguínea, entre los grupos que usaron dilatación con balón o con dilatadores seriales telescopados y se observó que en ambos grupos el aumento del sangrado y las transfusiones fueron directamente proporcionales al diámetro del Amplatz, siendo menor en el grupo que usó dilatadores telescopados, como se muestra en la siguiente tabla.6 9 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Tamaño del set Pequeño (<18F) N=271 Mediano(24F, 26F) N=1039 Grande (27F, 28F, 30F) N=3533 Muy grande (32-34F) N= 371 Sangrado Dilatadores con balón n/N % 0/37 (0%) 9/107 (8.4%) Dilatadores telescopados seriales n/N % 11/234 (4.7%) 44/932 (4.7%) Dr. Paul Peñaherrera Toledo Transfusión Dilatadores con balón n/N % 0/37 (0%) 6/107 (5.6%) sanguínea Dilatadores telescopados seriales n/N % 3/234 (1.3%) 45/932 (4.8%) 197/1978 (10.0%) 109/1555 (7.0%) 143/1978 (7.2%) 63/1555 (4.1%) 2/95 (2.1%) 31/276 (11.2%) 6/95 (6.3%) 38/276 (13.8%) Tabla 5. Frecuencia de sangrado y transfusión sanguínea de acuerdo al método de dilatación y tamaño del set.6 A pesar de que haya una buena visualización y una instrumentación óptima, los sangrados intratables pueden ocurrir de vez en cuando y siempre representan un gran reto, incluso para el urólogo experimentado. El electrocauterio intrarrenal raramente es eficaz y no debe considerarse como una primera opción. En su lugar se debe suspender el procedimiento, inflar un catéter de oclusión en el sitio del sangrado y aplicar tracción, ya que esto puede resultar efectivo. En raras circunstancias, como ya se mencionó, se hace necesario llevar a cavo una embolización vascular mediante un procedimiento de radiología intervencionista. De igual manera, en caso de que haya una pérdida de sangre significativa o de que se produzca un trauma renal durante el procedimiento, la mejor opción es suspender la extracción de cálculos residuales y concentrarse en la estabilización del paciente.20 Gráficos 4 y 5. Angiografía pre y post embolización selectiva. (P. Daels). 10 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo Varios autores coinciden con que el sangrado intrarrenal, sin tener en cuenta su etiología, puede tratarse exitosamente mediante la oclusión temporal del tubo de nefrostomía durante el tiempo suficiente para la formación del coágulo y, por su parte, el sangrado originado en el tracto puede manejarse aumentando el calibre del tubo de nefrostomía para promover el taponaje.4 2.2 Perforación Colónica Hadar y Gadoth analizaron la relación del riñón y el colon en la TC y encontraron que el colon era retrorrenal en aproximadamente 0,6% de los individuos.8 A pesar de esta baja incidencia, si ocurriese una enterotomía con una aguja, ésta puede simplemente retirarse sin consecuencias. Sin embargo, si se ha realizado la dilatación a un calibre mayor, el tracto fecal y el urinario deben separarse, debe colocarse en el colon un catéter de oclusión en forma percutánea y debe dejarse un tubo de nefrostomía en el riñón. Las perforaciones hepáticas o esplénicas inadvertidas deben manejarse mediante la extracción de la aguja y la realización de nueva punción en ángulo diferente. Estas perforaciones pueden manejarse normalmente con pronósticos favorables.4 Gráfico 6 y 7. Perforación colónica con tubo de nefrostomía.10,14 Para ilustrar de mejor manera el manejo de la perforación colónica durante la NLP, a continuación se describe un algoritmo terapéutico. 11 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Extraperitoneal INJURIA COLÓNICA Dr. Paul Peñaherrera Toledo Intraperitoneal Reposo intestinal y antibióticos Intervención quirúrgica abierta - Retirar Tubo de NLP hacia el colon. - Colocar catéter doble J ureteral y catéter Foley o nuevo Tubo de NLP. Persistencia de extravasación Extraer Foley y retirar el drenaje colónico hacia el espacio pericólico Extraer el drenaje pericólico en 3 - 7 días Figura 2. Manejo de la injuria colónica.18 En ciertos casos, incluso cuando la lesión compromete el colon, el tratamiento conservador podría tener éxito y consiste en retirar el tubo de nefrostomía hacia el colon para lograr el drenaje mediante colostomía percutánea. También debe colocarse un catéter ureteral doble jota en el sistema colector comprometido para separar las corrientes colónica y urinaria. En todos los casos, el tratamiento conservador debe abarcar antibióticos por vía intravenosa. El paciente no debe consumir nada por vía oral y a continuación debe iniciar una dieta con baja cantidad de residuos.19 Otra consideración importante para determinar si un paciente es candidato al tratamiento conservador o debe someterse a reparación mediante cirugía abierta es si la lesión es intraperitoneal o extraperitoneal. En la mayoría de los casos, esta decisión puede basarse en el estudio radiológico empleado para arribar al diagnóstico inicial, ya sea un nefrostograma o una TC. En general, las lesiones extraperitoneales pueden tratarse con técnicas no quirúrgicas. Sin embargo, en las lesiones intraperitoneales debe considerarse la reparación quirúrgica abierta inmediata.19 12 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo 2.3 Lesión Pleural Dado el uso cada vez más frecuente de los abordajes a través del polo superior y supracostal, el hidrotórax, el hemotórax y el neumotórax adquieren una incidencia creciente. El tratamiento depende del cuadro clínico del paciente; si el individuo está estable, sin alteraciones ventilatorias o respiratorias, la mera observación podría permitir la resolución espontánea. En forma alternativa, la aspiración simple por única vez podría ser adecuada, aunque podría requerirse un tubo de tórax durante varios días.19 Gráfico 8. Hemotórax derecho post NLP.18 Cuando hay evidencias clínicas de un hemotórax , un urotórax o un neumotórax significativo, no se debe esperar mucho tiempo para la colocación de un tubo de tórax y monitorear de cerca la re expansión pulmonar en las próximas 24 horas. Si la efectividad del tubo pulmonar es baja o si la expansión pulmonar es insuficiente, se debe realizar una evaluación quirúrgica torácica. En estos casos es común que se indique un procedimiento VATS (video-assisted thoracic surgery), puesto que la intervención temprana disminuirá el riesgo de desarrollar una enfermedad pulmonar restrictiva.20 2.3.1 Fístula nefropleural: La fístula nefropleural se puede manifestar intraoperatoriamente, en el postoperatorio inmediato o a las < 1 a 2 semanas del postoperatorio. En el período postoperatorio inmediato, se debe sospechar esta complicación si persiste el fluido torácico a pesar del drenaje por la toracostomía. La fístula nefropleural retardada se debe sospechar en pacientes que se han sometido a la cirugía renal percutánea y que se presentan con dificultad respiratoria con dolor en el 13 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo flanco o no. El diagnóstico se hace mejor con pielografía retrógrada. El tratamiento consiste en drenaje del fluido pleural con un tubo de toracostomía y descompresión del sistema colector con un stent ureteral.17 2.4 Lesiones del Sistema Colector Se debe sospechar perforación si se visualiza la grasa perirrenal o el seno renal, si se visualizan otras estructuras perirrenales o si el abdomen o el flanco del paciente se distienden. Se pueden acumular rápidamente grandes cantidades de fluido en el espacio retroperitoneal o, menos comúnmente, en la cavidad abdominal. Este fluido puede causar dificultades en la ventilación del paciente durante el procedimiento, anormalidades electrolíticas secundarias a la absorción del fluido e íleo postoperatorio.23 Cuando se desarrolla una perforación significativa, en general se localiza en la pared medial de la pelvis o en la unión pieloureteral y puede generarse durante el abordaje, la dilatación del trayecto o la manipulación de los cálculos. Los efectos adversos potenciales pueden reducirse si se mantienen la esterilidad de la orina, se lleva a cabo el control meticuloso del ingreso y del egreso de líquido de irrigación, se usa una guía de seguridad en todos los procedimientos y, lo más importante, si se administra solución fisiológica como líquido para irrigación en lugar de agua destilada, de esta manera se evitan los efectos de la hiponatremia. Los grados menores de extravasación, e incluso algunos mayores, pueden tratarse mediante el drenaje a través del tubo de nefrostomía. En estos casos, en especial cuando la lesión se produce en la pelvis o en la unión pieloureteral, además del tubo de nefrostomía, se prefiere introducir un catéter pieloureteral o un catéter doble J. Cuando no es posible asegurar un drenaje satisfactorio o el paciente está inestable, debe considerarse la exploración y la reparación mediante cirugía abierta.19 Una vez que se ha terminado el procedimiento, se debe dejar una sonda de nefrostomía. la mayoría de las perforaciones cierran en 72 horas, pero puede ser prudente esperar 7 días y realizar un nefrostograma para confirmar el cierre de la perforación antes de volver a la extracción completa del cálculo. En raras ocasiones, puede ser necesaria la reparación quirúrgica abierta.24 14 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo Gráfico 9. Fuga de medio de contraste post perforación pélvica.14 2.4.1 Migración de fragmentos de cálculo: Los fragmentos de cálculo extrarrenales y extraureterales generalmente no tienen ninguna consecuencia clínica, siempre y cuando la orina y el cálculo no estén infectados y el cálculo esté lo suficientemente lejos del sistema colector y el uréter que no causen inflamación periureteral con la subsecuente formación de estrecheces. 25, 26 En la mayoría de los casos no se deben recuperar los fragmentos, porque esto puede agrandar la perforación.27 2.4.2 Tubeless: Con respecto al dejar o no un tubo de nefrostomía, en la actualidad la tendencia se inclina hacia no dejarlo (tubeless). Garofalo M. y cols. evaluaron la eficacia y seguridad de tubeless en la nefrolitotomía percutánea (NLP-t) en comparación con la NLP estándar (s-NLP). incluyendo retrospectivamente 317 NLP consecutivas y comparando los resultados peri operatorios, el tiempo de hospitalización y necesidad de analgésicos de t-NLP (114, 36,0%) con la s-NLP (203, 64,0%). La decisión de realizar tubeless NLP se realizó al final de los procedimientos, dependiendo de la preferencia del cirujano y de acuerdo con los siguientes criterios de inclusión: (a) sin hemorragia grave o perforación en el sistema de almacenamiento durante el procedimiento; (b) pacientes sin más de un acceso, y (c) carga de cálculos residuales que necesitan una nefroscopía en segundo tiempo. Los cálculos coraliformes y las anomalías anatómicas no se consideraron como criterios de exclusión para t-NLP. Este estudio confirmó que el t-NLP tiene resultados similares a s-NLP en términos de tasa de ausencia de cálculos, sin aumentar las complicaciones en casos seleccionados. tNLP es un factor independiente asociado con la hospitalización más corta y menor necesidad de analgésicos.31 15 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo 2.5 Lesión de Hígado, Vesícula Biliar y Bazo El hígado, la vesícula biliar y el bazo son estructuras que se encuentran muy cercanas al riñón, pero son muy infrecuentes de lesionar durante la NLP. Su diagnóstico se basa en la sospecha y se ratifican con TC. Si se diagnostica una lesión hepática postoperatoriamente, se debe dejar una sonda de nefrostomía por 7 a 10 días para permitir la maduración del tracto. Después de este tiempo, la sonda se puede retirar cuidadosamente, pero si se observa sangrado de gran volumen, se debe reinsertar la sonda inmediatamente. La colocación retrógrada de un stent ureteral al momento de retirar la sonda de nefrostomía puede ayudar a prevenir el desarrollo de fístula renobiliar. También puede ocurrir lesión de la vesícula durante el acceso. El paciente se puede presentar con signos de peritonitis y el tratamiento consiste en colecistectomía laparoscópica.28 La lesión del bazo puede causar sangrado interno significativo y en algunos casos shock hipovolémico. Aunque algunos pacientes con laceración esplénica se pueden manejar en forma no operatoria, la mayoría de pacientes requiere esplenectomía.29 2.6 Urosepsis Se ha reportado que la sepsis ocurre en 1,5% a 21% de los pacientes. Los pacientes sometidos a nefrostomía percutánea por pionefrosis y los pacientes con cálculos renales infectados son particularmente propensos a la septicemia. La bacteriemia transitoria durante la nefrostomía percutánea por obstrucción infectada es inevitable porque el paso de las agujas, dilatadores y catéteres a través del parénquima infectado y los sistemas colectores inoculan bacterias en la corriente sanguínea. Se pueden desarrollar temblores, escalofríos e hipotensión y el paciente puede ser mal diagnosticado como estar experimentando una hemorragia post procedimiento. El tratamiento apropiado con antibióticos intravenosos antes del procedimiento es esencial en un sistema que se sabe infectado. Son aconsejables los antibióticos intravenosos profilácticos para todos los procedimientos de nefrostomía percutánea porque los pacientes pueden desarrollar signos de sepsis incluso cuando están en bajo riesgo.9 La elevación de la presión intrarrenal durante la colocación del tubo de nefrostomía percutánea eleva el riesgo de sepsis. por lo tanto, se debe posponer la pielouretrografía retrógrada hasta que la orina esté clara. Si el organismo es desconocido, un régimen útil es con Ampicilina, 1 gramo administrado intravenoso para cubrir Enterococos y Proteus, en combinación con un aminoglucósido como Gentamicina, 80 mg IV para cubrir todos los organismos Gram negativos, 16 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo excepto los Enterococos. Una sola dosis dada una hora antes del procedimiento es suficiente para la profilaxis. Alternativamente, se puede usar una Cefalosporina de primera generación como la Cefazolina con relativo bajo costo. En caso de alergia a la Penicilina, se puede usar Vancomicina y Ciprofloxacina. El absceso perinéfrico es una complicación rara de la nefrostomía percutánea en pacientes con pequeños fragmentos de cálculos infectados que pueden extruir en el espacio perinéfrico.10 Los urocultivos preoperatorios negativos no evitan a los pacientes el desarrollo de bacteriemia o urosepsis. Rao y cols.13 demostraron que los pacientes sin bacteriuria aun pueden desarrollar bacteriemia y endotoxina. Esto probablemente se deba a que los resultados negativos del urocultivo no predicen resultados negativos de cultivos de orina pélvica o de cálculos. Es importante solicitar cultivos de orina de la pelvis renal y de los cálculos durante la NLP para ayudar a predecir y guiar la terapia en el caso de urosepsis.14 Si la sepsis se presenta a pesar de haber tomado todas las medidas preventivas, el paciente deberá ser tratado con antibióticos de manera agresiva y con un soporte, de ser posible, en una unidad de terapia intensiva. 2.6.1 Urinoma: La fuga persistente de orina desde el sistema colector ha sido reportada en 0,6% a 2% de los procedimientos de nefrostomía percutánea. Las fugas pequeñas usualmente no tienen consecuencias. Las fugas masivas pueden llevar a fibrosis peripélvica. La extravasación de orina infectada puede producir un absceso. El urinoma puede ocurrir cuando el catéter se coloca a través del sistema colector y forma inadvertidamente un asa en el seno renal o en el espacio perinéfrico. Tal mala colocación puede que no se reconozca inmediatamente porque el sistema continuará drenando si alguno de los orificios laterales del catéter sigue en el sistema colector.10 Si existen motivos de preocupación por un desgarro o trauma significativo a la pelvis renal o al uréter, se debe dejar colocado un catéter ureteral por lo menos por unas semanas.20 2.7 Fístula Nefrocutánea La formación de una fístula nefrocutánea es de una ocurrencia rara después de la Cirugía Renal Percutánea (CRP).11 Usualmente es causada por la obstrucción distal secundaria a edema ureteral, cálculo obstructivo, coágulo de sangre o estrechez. Se ha reportado el desarrollo retardado de fístulas nefrocutáneas en pacientes con tuberculosis genitourinaria.12 El alivio de la obstrucción con la colocación de un stent ureteral o la remoción del cálculo usualmente permite que la fístula se cierre. 17 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo 2.8 Hipotermia Se debe evitar el uso de irrigante frío durante la NLP, para así disminuir el riesgo de hipotermia. Roberts y cols. mencionan que las consecuencias de la hipotermia incluyen deterioro de la función plaquetaria, metabolismo enzimático alterado y temblores que conducen a aumento en el consumo de oxígeno combinado con descenso en la disponibilidad de oxígeno, lo cual puede llevar a isquemia cardíaca o arritmias. Medidas como el uso de irrigante tibio, cubrir de manera adecuada al paciente, uso de compresas que preservan el calor y mantener al paciente lo más seco posible pueden ayudar a reducir el riesgo de hipotermia.16 Con respecto al estrés oxidativo, Söylemez H. y cols., en un estudio de 34 pacientes entre 2010 y 2011, en los cuales se determinaron parámetros de estrés oxidativo, tales como la paraoxonasa 1 (PON1), el estado antioxidante total (TAS), el estado total de oxidante (TOS) y los niveles de malonildialdehído (MDA), que se examinaron antes de la operación como niveles de referencia y luego a los 30, 60, 90, y 120 minutos durante la operación y usando una prueba de correlación bivariante, mostró correlación entre parámetros de estrés oxidativo y el tiempo de operación (p = 0,002), pero no se encontró correlación entre parámetros de estrés oxidativo y otros parámetros (p> 0,05), concluyendo que el estrés oxidativo y la respuesta a ella se incrementaron con el aumento del tiempo quirúrgico durante un procedimiento de NLP, especialmente después de 1 hora.21 2.9 Sobrecarga de fluido Para el caso de evitar la sobrecarga de fluido durante el procedimiento y así disminuir la absorción del mismo, se puede minimizar manteniendo la presión de irrigación más baja que permita la visibilidad. El uso de una manga de trabajo puede reducir la presión en el sistema pielocalicial y por lo tanto reducir la absorción de fluido.15 Limitar la duración del procedimiento y suspender el procedimiento en caso de perforación significativa del sistema colector también reduce esta complicación. Se debe usar solución salina normal como irrigante siempre que sea posible para limitar el desarrollo de hiponatremia.14 2.10 Lesiones relacionadas con el posicionamiento del paciente Se han descrito varias, entre ellas lesiones en el plexo braquial y dislocación de hombro por posicionamiento anómalo y falta de acolchonamiento en los puntos de presión, así como también no evitar tensión en las articulaciones del paciente al momento de su posicionamiento. Si se llagara a presentar neuropraxia, lo recomendable es la fisioterapia y el tratamiento conservador.14 18 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo 3. PERDICTORES DE COMPLICACIONES Justamente, con el objetivo de predecir las complicaciones que se podrían presentar durante y posteriormente a una Nefrolitotricia Percutánea, se han desarrollado esquemas para este fin, encaminado a prevenir y evitar en gran medida la presentación de dichas complicaciones. Entre estos esquemas tenemos al GSS (Guy´s Stone Score) y al sistema de Clavien modificado, los cuales han sido usados y relacionados de manera efectiva en varios estudios. 3.1 Guy´s Stone Score (GSS) La puntuación GSS se desarrolló a través de una combinación de opiniones de expertos, publicaciones, la revisión de datos y pruebas iterativas. Se compone de 4 grados: grado I, piedra solitaria en polo medio/bajo o piedra solitaria en la pelvis con una anatomía simple; grado II, piedra solitaria en polo superior o varias piedras en un paciente con la anatomía simple o una piedra solitaria en un paciente con anatomía anormal; grado III, múltiples piedras en un paciente con la anatomía anormal o piedras en un divertículo calicial o cálculo coraliforme parcial; grado IV, cálculo coraliforme o cualquier piedra en un paciente con espina bífida o lesión de la médula.30 3.2 Sistema de Clavien Modificado Tabla 6. Clasificación de las complicaciones quirúrgicas de acuerdo al sistema Clavien modificado. 19 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo Palmero JL y cols. en España se plantearon establecer los predictores de las complicaciones en la nefrolitotomía percutánea (NLP) utilizando el sistema Clavien modificado. realizaron un estudio retrospectivo que incluyó 172 NLP en posición de Galdakao entre enero de 2005 y diciembre de 2011. Se clasificaron las complicaciones de estos procedimientos utilizando el sistema de Clavien modificado. Sus resultados reportan que en 49 de los 172 procedimientos se detectaron complicaciones (28,5%). Las complicaciones más frecuentes fueron de grado 1 (9,9%), 12 complicaciones (6,9%) fueron clasificados como grado 2, al exigir tratamiento médico adicional, 6 como grado 3A (3,5% ), 7 como 3B grado (4,1%), 2 y 4A (1,1%), 4 y 4B (2,3%) y uno y 5 (0,6%). En el análisis univariado, el urocultivo positivo antes de la cirugía, los cálculos complejos y > de 40 mm, mostraron una asociación estadísticamente significativa con la aparición de complicaciones (P <0,05). El cultivo positivo (OR: 2,96) y los cálculos complejos (OR: 3,03) resultaron ser las variables independientes que predicen las complicaciones en el análisis multivariado, concluyendo que el sistema de Clavien permite un lenguaje común para la clasificación de las complicaciones, que expresa tanto el grado de la misma, como la complejidad de tratamiento requerido para la resolución. La positividad del cultivo de orina preoperatorio y la complejidad del cálculo resultaron predictores de estas complicaciones en esa serie.32 Swarnendu M. y cols.33 realizaron un estudio en la India, con el objetivo de documentar prospectivamente las complicaciones peri operatorias de la nefrolitotomía percutánea (NLP) utilizando el sistema de clasificación Clavien modificado. La evaluación de las complicaciones y las tasas de aclaramiento, de acuerdo con la complejidad del cálculo, con el Guy´s Stone Score validado (GSS), también se hizo. En un total de 221 unidades renales se realizaron 278 procedimientos de NLP, entre septiembre de 2010 y septiembre de 2011. Se excluyeron los pacientes con comorbilidades como: diabetes, insuficiencia renal, hipertensión y enfermedades cardiopulmonares. La complejidad del cálculo fue clasificado de acuerdo con el GSS, mientras que las complicaciones perioperatorias fueron gradadas con el sistema de clasificación Clavien modificado. En sus resultados se encontraron doscientos cuarenta y cinco complicaciones en 278 procedimientos de NLP, involucrando 116 unidades renales (41,72%). Las complicaciones de los grados 1, 2, 3a, 3b, 4a, 4b y 5 se observaron en 52 (18,7%), 122 (43,8%), 42 (15,1%), 18 (6,4%), 6 (2,1%), 4 (1,4%) y 1 (0,3%) unidades renales, respectivamente. Había 68, 98, 50 y 5 unidades renales en GSS I, II, III y IV de los grupos, respectivamente. Todos los grados de complicaciones fueron más frecuentes en GSS III y IV (P <0,05). Para GSS I, II, III y IV, 100%, 74%, 56% y 0% de las unidades renales respectivamente, estuvieron libres de cálculos después de una sesión y en 0%, 24%, 44% y 60%, respectivamente, se necesitaron dos sesiones para estar libres de cálculos; concluyendo que aunque las tasas de complicaciones fueron altas, la mayoría eran de bajo grado y 20 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo autolimitadas. Las complicaciones fueron significativamente más comunes con GSS más altos y el GSS predijo efectivamente las tasas libres de cálculos.33 Thomas K y cols.34 y su grupo en el Reino Unido también reportan que la puntuación GSS era el único factor que predijo de manera significativa e independientemente del tipo de cálculos (P = 0,01). y encontraron que es reproducible, con buena concordancia entre evaluadores (P = 0,81). Aparte, refieren que ninguno de los otros factores de prueba, incluyendo la carga de cálculos, cirujano, peso del paciente, la edad y la comorbilidad estuvieron en correlación con la tasa de ausencia de cálculos, concluyendo finalmente que la puntuación Guy's stone score (GSS) predijo con exactitud la tasa de ausencia de cálculos después de la NLP, que era fácil de usar y reproducible.30 21 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo 4. CONCLUSIONES - El mejor manejo de las complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea es prevenir y evitar su aparición, tomando siempre en cuenta todas las variables, tanto del paciente como del equipo clínico-quirúrgico, antes, durante y después del procedimiento. - Es fundamental contar con una Tomografía Computada (TC) en la evaluación pre quirúrgica, para tener clara la anatomía a la cual nos enfrentamos, identificar anomalías o transposición de estructuras adyacentes, la distancia del cálculo hacia la piel y la ubicación del mismo. - La posición del paciente es un paso crucial al iniciar el procedimiento. Hay varios criterios en la elección de la posición, la cual puede ser en decúbito prono, en decúbito intermedio o en decúbito supino, cada una de las cuales tienen sus ventajas y desventajas. Sea cual sea la posición que se elija, es de suma importancia trabajar en equipo con el personal entrenado de quirófano y anestesia. - Se debe contar previamente con todo el equipo necesario para la intervención, supervisado y funcionando, para evitar la innecesaria prolongación de los tiempos quirúrgicos. - Elegir correctamente el sitio de punción en la zona lumbar es crucial. Si es preciso hay que delimitar y dibujar sobre la piel del paciente las estructuras circundantes a la zona a punzar; esto, con la finalidad de evitar al máximo la lesión de estructuras adyacentes, al momento de la introducción y el paso de la aguja, de los dilatadores y del nefroscopio. - Tener presente siempre la administración de un antibiótico intravenoso horas antes del procedimiento o en la inducción anestésica, sea este una Cefalosporina o una Quinolona, disminuye sustancialmente el riesgo que el paciente desarrolle bacteriemia o sepsis. - Si se produjese alguna complicación durante el procedimiento, como por ejemplo hemorragia importante, se recomienda no dudar en suspenderlo o posponerlo hasta que el paciente se encuentre hemodinámicamente estable o, en el caso de una lesión colónica intraperitoneal, realizar una laparotomía exploratoria. - Hay que tomar en cuenta que la mayoría de complicaciones trans o postquirúrgicas pueden tener manejo conservador y esto depende del correcto seguimiento y diagnóstico temprano, como en el caso de la realización de una placa Rx de tórax ante la sospecha de una lesión pleural. 22 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo - La NLP es un procedimiento mínimamente invasivo pero no exento de complicaciones graves. Ante esta circunstancia es recomendable realizarlo en una institución hospitalaria que cuente con Unidad de Cuidados Intensivos y Angiografía Intervencionista. - El uso de los predictores de complicaciones (Guy´s Stone Score y el sistema Clavien modificado) son herramientas aplicables y reproducibles al momento de la evaluación pre quirúrgica del paciente que va a ser sometido a una NLP, ya que nos brindan un claro panorama del pronóstico. 23 Manejo de las Complicaciones de la Nefrolitotricia Percutánea (NLP) Dr. Paul Peñaherrera Toledo 5. BIBLIOGRAFÍA 1. González G, Gamarra M, Gallego J, Pereira J, Camargo I. y Bernuy C. Litotricia renal percutánea. Evolución, indicaciones y metodología actual en nuestra unidad de litotricia. Unidad de litotricia. Hospital de Galdacano. Usansolo. Vizcaya. España. Arch. Esp. de Urol. 2001; 54, 9: 951-969. 2. Martínez Velasco A. Litiasis renal, Manejo percutáneo de la litiasis renal. Investigación; Sociedad Peruana de Urología, 2001: 1-10. 3. 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