8 Inducción de fuerza centrífuga 1.8 Inducción de fuerza centrífuga en el interior de una esfera hueca En el epígrafe 4.5 hemos comprobado que se produce una aceleración del tipo de Coriolis por efecto de la inducción gravitatoria. Este resultado no significa la implementación del principio de Mach, ya que para ello se exigiría la evaluación del efecto de inducción gravitatoria de todo el Universo. Pero aún así, las conclusiones de 4.5 van en la dirección requerida por el principio de Mach. De una Física relacional también cabe esperar la aparición de fuerzas centrífugas inducidas. Se trata de investigar en este capítulo si tales fuerzas existen en el marco de la teoría linealizada de la relatividad general. Vamos a considerar una esfera hueca de radio R, de masa M y de paredes muy finas de densidad superficial V, que rota con una velocidad angular Z alrededor de un eje que pasa por su centro. Se trata de encontrar el valor de la fuerza centrífuga que se induce en un cuerpo de masa m situado en su interior. Para el caso de un cuerpo que se encuentra en reposo en el interior de la esfera hueca, la ecuación de movimiento (12.4) nos da para la aceleración de origen gravitoeléctrico dv 1 1 I 2 \ 2 I 2 . (1.8) dt c c Por las fórmulas (17.4) se calculan los dos potenciales escalares. El potencialI engloba al potencial kepleriano, que es constante en el interior de la esfera y por tanto no produce ninguna fuerza, a los que añadir los términos inductivos, que son nulos por simetría, puesto que la rotación de la concha esférica no modifica el tensor energíamomento, o sea, la densidad V es la misma en el momento actual que en el retardado. Por tanto, el único potencial que puede inducir la fuerza centrífuga es el\ Para el caso de una concha esférica compuesta de polvo, el tensor energía-momento es T ik U u i u k con U representando la densidad de volumen de materia, es decir, que vamos a despreciamos las tensiones. Entonces por (17.4) el potencial \ es 2U u 2 2UI 0 2VI 0 2V u 2 dV c G ³ dS c G ³ dS c (2.8) rc rc rc I0 es el potencial gravitatorio en un punto de la superficie de la esfera. La segunda de \ G ³ Wenceslao Segura González: Gravitoelectromagnetismo y principio de Mach, ISBN: 978-84-616-35222-1 95 96 GRAVITOELECTROMAGNETISMO Y PRINCIPIO DE MACH las integrales (2.8) es constante 2V I 0 M2 dS c 2G 2 2 rc R por tanto su divergencia es nula y no produce fuerzas, lo que significa que la fuerza centrífuga es inducida solamente por la primera de las integrales de (2.8). G³ 2.8 Cálculo del potencial \ en un punto interior de la esfera hueca Para calcular la integral del primer sumando de (2.8) elegimos el eje z de tal forma que el punto del campo esté situado en su parte positiva. El eje y es elegido con la orientación adecuada para que el eje de rotación de la esfera se encuentre en el plano zy, siendo D el ángulo entre el eje z y el eje de rotación. El centro del sistema de coordenadas coincide con el centro de la esfera. Si r es el vector de posición del punto del campo, R la posición de un punto fuente y r’ es el vector que va del punto fuente al punto campo, entonces 2 R rc r r c r §r· R 1 ¨ ¸ 2 cos T © R¹ R RB 1 C cos T donde B 1 r R 2 ; C 2r R 2 1 r R y T es el ángulo entre los vectores R y r, que dada la elección de coordenadas, también es una de las coordenadas esféricas angulares del punto de la esfera. Como el vector de posición de un punto de la esfera es R sin T cos M i R sin T sin M j R cos T k R y la velocidad angular ω Z sin D j Z cos D k entonces la velocidad lineal de un punto de la esfera queda u ωR RZ cos T sin D RZ sin T sin M cos D i RZ sin T cos M cos D j RZ sin T cos M sin D k después de simplificar resulta que su cuadrado es R 2Z 2 sin 2 D R 2Z 2 sin 2 D sin 2 T sin 2 M u2 R 2Z 2 cos 2 D sin 2 T 2 R 2Z 2 sin D cos D sin T cos T sin M . En coordenadas esféricas el elemento de superficie es dS c R 2 sin T dT dM . Con estas definiciones se calcula la primera de las integrales (2.8) \ 2GV ³ \1 2GV u2 R 2 sin T dT dM , RB 1 C cos T introduciendo el valor obtenido para el cuadrado de la velocidad podemos descomponer la integral en cuatro sumandos. El primero de ellos es 1 R 3Z 2 sin 2 D sin T dT dM B ³ 1 C cos T Inducción de fuerza centrífuga 2S 97 S 1 sin T dM ³ dT , B ³0 0 1 C cos T por un largo pero simple cálculo se encuentra que 2GVZ 2 sin 2 D R 3 S 1 sin T dT B ³0 1 C cos T 2 por tanto \ 1 2GMRZ 2 sin 2 D que la hemos puesto en función de la masa en vez de la densidad superficial de la concha esférica. La segunda de las integrales es 2GV ³ \2 R 2Z 2 sin 2 D sin 2 M sin 2 T RB 1 C cos T R 2 sin T dT dM 1 sin 3 T dT ³ B 0 1 C cos T S 2S GV R 3Z 2 sin 2 D resolviendo la integral se encuentra 1 sin 3 T 4 4§r· ¨ ¸ dT B ³0 1 C cos T 3 15 © R ¹ por tanto nos queda para la segunda integral S 2 ª 1§ r ·2º 2 GMRZ 2 sin 2 D «1 ¨ ¸ » . 3 ¬ 5© R ¹ ¼ La tercera de las integrales es \2 \3 2GV ³ R 2Z 2 cos 2 D sin 2 T RB 1 C cos T 4S GV R 3Z 2 cos 2 D R 2 sin T dT d M 1S sin 3 T dT ³ B 0 1 C cos T de donde obtenemos ª 1§ r ·2º 4 GMRZ 2 cos 2 D «1 ¨ ¸ » . 3 ¬ 5© R¹ ¼ En cuanto a la última de las integrales es nula al contener el término \3 2S ³ sin M dM 0 que es idénticamente nulo. Reuniendo todos los términos, se encuentra que el potencial \ para un punto situado a una distancia r del centro de la esfera y cuya posición forma un ánguloD con el eje de rotación es ª 1 § r ·2 º 4 GMRZ 2 «1 ¨ ¸ 1 3cos 2 D » (3.8) 3 ¬ 10 © R ¹ ¼ que es el único término responsable de la inducción de fuerza centrífuga. Nótese que el \ 98 GRAVITOELECTROMAGNETISMO Y PRINCIPIO DE MACH primer sumando de (3.8) no produce ninguna fuerza al no depender de la posición del cuerpo de prueba. 3.8 La aceleración centrífuga de un cuerpo en el interior de una esfera hueca Si ahora elegimos un sistema de coordenadas cuyo eje z esté alineado con el eje de rotación y que el vector r se encuentre en el plano y-z, podemos poner la expresión (3.8) de la forma 4 1 1 ª º GMRZ 2 «1 y 2 2z 2 » . 3 ¬ 10 R 2 ¼ La aceleración a la que quedará sometida la partícula que se encuentra en la posición (0, y, z) se obtiene por la ecuación de movimiento (1.8) \ 4 GM 2 Z yj 2 zk 15 c 2 R y como se comprueba por sustitución a ce 4 GM ω ω r 2ω ω r (4.8) 15 c 2 R que dado su carácter vectorial es extensible a cualquier sistema de coordenadas. La anterior aceleración es válida para cualquier punto en el interior de la esfera hueca y no se encuentra limitada a puntos cercanos al centro. (4.8) nos informa que sobre la partícula de prueba actúa una fuerza del tipo centrífugo, pero además aparece otra fuerza que tiene componente axial y en la dirección del eje de rotación de la esfera hueca, fuerza que no tiene equivalente clásico. Para el caso de que la partícula de prueba se encuentre en movimiento con velocidad v, se producirá tanto aceleración de Coriolis (8.5) como centrífuga y su suma es a ce 4GM (5.8) ω ω r 2ω ω r 10 v ω . 15c 2 R Lo notable de esta ecuación es que la rotación de la esfera hueca induce una fuerza centrífuga y otra de Coriolis, pero la relación entre sus coeficientes, que en el Universo real es de 1 a 2, aparece en (5.8) con la proporción 1 a 10. Por lo tanto, (5.8) deja entrever que en cierta medida el principio de Mach se obtiene de la relatividad general. Pero en cualquier caso una decisión definitiva sobre la inclusión de las ideas de Mach en la relatividad general solo se podrá dar cuando se haga una integración sobre toda la materia del Universo. a 4.8 Inducción de fuerza centrífuga en el exterior de una esfera maciza Consideremos ahora una esfera maciza que rota con velocidad angularZ alrededor de un eje que pasa por su centro, que tiene de radio R y densidad uniforme U. Un cuerpo de prueba se encuentra en un punto exterior situado a una distancia r del centro de la esfera. Queremos calcular la fuerza centrífuga inducida por la esfera rotante sobre el cuerpo de prueba. El vector r es el de posición del punto del campo, r* es el vector de posición de un punto fuente del interior de la esfera, y el vector r’ es el que va del punto fuente al punto del campo. Vamos a suponer que el punto del campo se encuentra Inducción de fuerza centrífuga 99 situado en la parte positiva del eje z y que el ángulo T es el formado entre los vectores r* y r, entonces 2 r* § r*· r 1 ¨ ¸ 2 cos T © r ¹ r r * r c r r c RB 1 C cos T donde ahora B 1 r * r 2 C 2r* r . 2 1 r * r Si suponemos que los ejes coordenados son elegidos de tal forma que el eje de rotación de la esfera se encuentre en el plano y-z, seguirán valiendo las mismas fórmulas que en el apartado 2.8, resultando que la velocidad lineal de un punto interior de la esfera es u2 ; r * 2 Z 2 sin 2 D r * 2 Z 2 sin 2 D sin 2 T sin 2 M r * 2 Z 2 cos 2 D sin 2 T 2r * 2 Z 2 sin D cos D sin T cos T sin M . Ahora hay que hacer una integración de volumen cuyo elemento es dV c r * 2 sin T dT dM dr * . Hay que resolver la primera de las integrales (2.8), problema que podemos abordar descomponiéndola en tres integrales más elementales. La primera de ellas es \1 2G U ³ r * 2 Z 2 sin 2 D 2 r * 2 sin T dT dM dr* §r · r* r 1 ¨ ¸ 2 cos T © r ¹ r * 2S R S 1 sin T dT 2G U Z 2 sin 2 D ³ dM ³ r * 4 dr * ³ r B 1 C cos T 0 0 0 de donde obtenemos la primera de las componentes del potencial \ R2 6 GM Z 2 sin 2 D . r 5 La segunda de las integrales en que se descompone\ es \1 \2 2G U ³ r * 2 Z 2 sin 2 D sin 2 T sin 2 M rB 1 C cos T 2S R r * 2 sin T dT dM dr * 1 sin 3 T dT 2G U Z 2 sin 2 D ³ sin 2 M dM ³ r * 4 dr * ³ r 0 0 0 B 1 C cos T de donde obtenemos S 2 R2 ª 1§ R· º 2 GM Z 2 sin 2 D 1 « ¨ ¸ ». r ¬ 7© r ¹ ¼ 5 La tercera de las componentes del potencial escalar \ es \2 \ 3 2G U ³ 2G U r * 2 Z 2 cos 2 D sin 2 T rB 1 C cos T 1 2 Z cos 2 D r 2S ³ 0 r * 2 sin T d T d M dr * R S 0 0 d M ³ r * 4 dr * ³ sin 3 T B 1 C cos T dT 100 GRAVITOELECTROMAGNETISMO Y PRINCIPIO DE MACH simplificando queda 2 R2 ª 1§ R· º 4 GM Z 2 cos 2 D «1 ¨ ¸ » . r ¬ 7© r ¹ ¼ 5 La última de las cuatro integrales en que se puede descomponer \ es nula. Ahora podemos reagrupar todo los resultados y tras simplificar \3 2 º 4 GM Z 2 R 2 ª 1 § R · 3 1 « ¨ ¸ 1 3cos D » . 5 r ¬ 14 © r ¹ ¼ Ahora vamos a elegir un nuevo sistema de coordenadas, tal que el eje z coincida con el eje de rotación del planeta, entonces z r cos D y el potencial \ queda \ \ 1 \ 2 \ 3 \ 4 4 1 2 1 6 z2 GM Z 2 R 2 GM Z 2 R 4 3 GM Z 2 R 4 5 r 35 r r 5 35 la aceleración inducida sobre la partícula exterior a la esfera es \ a ce 1 4 GM Z 2 R 2 r 6 GM Z 2 R 4 r \ 2 2 3 5 35 c c r c2 r5 30 GM Z 2 R 4 z 2 r 12 GM Z 2 R 4 zk 35 c2 r 7 35 c2 r5 (6.8) teniendo en cuenta que Z 2r ω ω r ω ω r ω ω r Z 2 zk z 2 r 2 cos 2 D entonces la aceleración centrífuga inducida es 2 º 4 GMR 2 ª 3 §R· 1 ¨ ¸ 1 5sin 2 O » ω ω r 2 3 « 5 c r ¬ 14 © r ¹ ¼ 2 2 ª 4 GMR 9 § R · § 15 ·º 1 ¨ ¸ ¨1 sin 2 O ¸» ω ω r 2 3 « 5 c r ¬ 14 © r ¹ © 9 ¹¼ hemos puesto la fórmula en función de la latitud Odel punto donde se encuentra el cuerpo de prueba. De nuevo volvemos a obtener no solo una fuerza centrífuga inducida sino también una componente axial. Hay que observar que el sentido de la fuerza centrífuga es contraria a la producida en el caso interior, es decir, esta fuerza se dirige hacia el eje de rotación, por lo que podríamos hablar más bien de una fuerza anticentrífuga. Nótese la dependencia de la fuerza inducida de la latitud de la partícula de prueba. La fuerza axial sigue teniendo el mismo sentido que en el caso interior, o sea, se dirige hacia la parte negativa del eje de rotación. El cociente entre las intensidades de la fuerza gravitatoria newtoniana y la de inducción centrífuga para el caso de un cuerpo sobre la superficie de la Tierra es a ce 1 \ c2 2 F Newton § c · 11 |¨ ¸ | 4 10 . Finductiva © RZ ¹ Inducción de fuerza centrífuga 101 4.8 Inducción de fuerza centrífuga en el interior de una esfera maciza Ahora vamos a considerar la aceleración inducida sobre una partícula que se encuentra a una distancia r del centro de una esfera maciza de densidad uniforme Uy radio R. Para resolver este problema dividimos al esfera maciza en dos partes. Una de ellas, la exterior, es la que está más alejada del punto donde se encuentra el cuerpo. La otra parte es la interior. La aceleración centrífuga inducida será la suma de las producidas por ambas partes de la esfera. Para calcular la aceleración centrífuga producida por la parte exterior de radio interno r y radio externo R, la dividimos en conchas esféricas de espesor muy delgado de radio r̂ . La aceleración producida por cada concha es da ce 4 GdM ω ω r 2ω ω r 15 c 2 rˆ como dM 4SU rˆ 2 drˆ entonces integrando se obtiene que la aceleración inducida por la concha gruesa exterior en un punto de su superficie interior 8S G U R 2 r 2 ω ω r 2ω ω r . 15 c 2 Para la parte interior de la esfera tenemos una aceleración inducida en su superficie dada por a ext ce 8S G U 2 8S G U 2 r 17 15sin 2 O ω ω r r 23 15sin 2 O ω ω r 105 c 2 105 c 2 y para determinar la aceleración inducida total por la esfera maciza en un punto interior sumamos ambas aceleraciones. a int ce 5.8 Discusión El uso de una concha esférica delgada como modelo simple de Universo fue introducido por Einstein en 1913 y desde entonces ha sido utilizada para investigar los efectos de la inducción gravitatoria. Se trata de un modelo extremadamente simple, cuyos resultados no pueden extrapolarse al Universo real por varios motivos. Uno de ellos es que cuando se hacen los cálculos con el modelo de la concha esférica, se sigue manteniendo el resto del Universo y por lo tanto se tienen que considerar tanto los efectos inductivos del Universo como los producidos por la concha esférica. Otro defecto que aleja el modelo de la concha del Universo real, es que dado el tamaño del cosmos, la acción retardada de los potenciales adquieren un especial protagonismo, efectos que son despreciados en la concha esférica, donde las magnitudes atrasadas coinciden con la actuales por la simetría del modelo. Asuntos tales como la dinámica cósmica y la constante cosmológica son factores que tienen su peso en los cálculos de inducción producidos por el Universo y que convierten el modelo de la concha esférica en puramente teórico. No obstante, este modelo ha tenido gran importancia en el esclarecimiento de la inducción gravitatoria. Por esta razón lo hemos expuesto en el presente capítulo. 102 GRAVITOELECTROMAGNETISMO Y PRINCIPIO DE MACH Poco después del trabajo de Thirring en donde se deducía la aceleración de Coriolis y centrífuga inducida por la rotación de la concha esférica, se comprobó que sus supuestos no eran correctos. En efecto, al igual que hemos hecho nosotros, Thirring consideró una esfera que gira con una única velocidad angular y compuesta de polvo. Situación física irrealizable. Para mantener las órbitas esféricas de cada uno de los puntos de polvo de la concha esférica, es necesario que exista una fuerza que contrarreste la fuerza centrífuga que actúa sobre cada porción de la concha esférica. Esta fuerza se manifestaría como tensiones en el material que constituye la concha, lo que contradice la hipótesis de partida de que la concha está formada por partículas de polvo sin presión. Pero hay más, incluso cuando la concha formada por partículas de polvo no esté rotando, no sería estable y colapsaría por efecto de la gravedad. Para que esto no ocurra deben de existir tensiones en el material que lo impidan. Aún hay más. El modelo de la concha esférica compuesta de polvo sin tensiones, no cumple con el teorema de conservación local del momento-energía. En fin, la rotación de la concha inevitablemente producirá una deformación fruto de la desigual fuerza centrífuga sobre puntos de latitudes diferentes, extremo que tiene que ser considerado al hacer una valoración exacta de la fuerza gravitatoria inducida (tanto centrífuga como de Coriolis) en el interior de la esfera hueca. Por tanto, no es aceptable un modelo de la concha esférica formada por partículas de polvo y es necesario considerar tensiones en el material, que a su vez son fuente de campo gravitatorio y por tanto de inducción gravitacional. Aún así, no se reproduciría en su interior las fuerzas de Corioilis y centrífuga en la proporción clásica y persistiría la fuerza axial, inexistente en la Físicia clásica. La solución rigurosa del problema de la inducción gravitatoria en una cavidad que rota en el Universo real, exige no sólo una geometría diferente de la esférica, sino también su rotación diferencial. Lográndose de esta forma la reproducción de las fuerzas de Coriolis y centrífuga en la proporción observada y la ausencia de la incómoda fuerza axial. 6.8 Inducción de fuerza centrífuga en una esfera maciza formada por un gas perfecto Consideremos una esfera de radio R rotando con velocidad angularZ y compuesta de un gas perfecto sometido a una presión uniforme p. Se trata de averiguar la participación que la presión tiene en la generación de la fuerza centrífuga. El gas perfecto tiene un tensor energía-momento expresado por T ik U p c 2 u i u k g ik p . De la segunda de las ecuciones (17.4) comprobamos que solo las compomentes 0,0 y D,D del tensor energía-momento intervienen para el cálculo del potencial \. Estas componentes son 0 0 T 00 p; T DD 3 p donde entendemos suma respecto a al índice D. Estas componentes no contienen el término Z 2 por lo que no pueden generar efectos centrífugos a segundo orden en la inversa de c. No obstante, la presión del gas que conforma la esfera si produce una Inducción de fuerza centrífuga 103 fuerza gravitatoria, que resulta ser de segundo orden y de tipo kepleriano. Nótese que también en este caso consideramos, por simetría, que son nulas la parte inductiva del potencial gravitoeléctrico I. 7.8 Referencias 1.- MASHHOON, Bahram; HEHL, Friedrich W.; THEISS, Dietmar S.: «On the Gravitational Effects of Rotating Masses: The Thirring-Lense Papers», General Relativity and Gravitation 16-8 (1984) 711-748. 2.- BRILL, Dieter R.; COHEN, Jeffrey M.: «Rotating Masses and Their Effect on Inertial Frames», Physical Review 134-4 (1966) 1011-1015. 3.- PFISTER, Herbert: «On the history of the so-called Lense-Thirring effect», General Relativity and Gravitation 39-11 (2007) 1735-1748. 4.- PFISTER, H.; GRAUN, K. H.: «Induction of correct centrifugal force in a rotating mass shell», Classical and Quantum Gravity 2 (1985) 909-918.