EN CASA SIEMPRE FUI M’IN (Fragmento) Yo tengo el mismo nombre que mi abuela. No éste de Rigoberta que uso ahora. Porque yo me llamo Rigoberta Menchú Tum sólo a partir de 1979. En realidad, mi verdadero nombre, y el de mi abuela, es M’in. Actualmente mis sobrinos y todos los familiares me dicen M’in. La aldea me conoció así y el pueblo de Uspatán me conoció así. Cuando nací, mi padre no tuvo tiempo de ir a registrarme a la municipalidad y dejó pasar varios días antes de hacerlo. Cuando llegó a la municipalidad, los alcaldes no le aceptaron el nombre M’in. Le dieron un listado de santos y él escogió entre todos los nombres el de Rigoberta. No sé por qué escogió Rigoberta. Es un nombre muy complicado. En la familia nunca pudieron pronunciarlo, especialmente mamá. Nunca pudo decir “Rigoberta”. Siempre dijo “Beta”, “Tita”, En casa siempre fui conocida como M’in. Cuando cumplí dieciocho años, mi padre tuvo que luchar mucho para establecer mi identidad. Se fue a la municipalidad a pedir mi acta de nacimiento y él quería pedir el acta de nacimiento de su hija M’in. Le contestaron que no había absolutamente ninguna M’ín registrada. Además, él sostenía que yo había nacido a las ocho de la mañana el 4 de enero y en la municipalidad afirmaban que no había ningún Menchú Tum nacido en esa fecha. Tuvo que encontrar varas multas hasta encontrar un nombre, que era Rigoberta Menchú Tum, que nació el 9 de enero, en donde coincidían los dos apellidos de mamá y papá. Entonces supieron que era yo y así se estableció mi identidad legal. Y así me llamaron. Rigoberta Menchú (guatemalteca) De RIGOBERTA: La nieta de los mayas Extraído de “Mi casa está llena de palabras”Antología de Literatura Hispanoamericana Lydia Ducret, Fondo Editorial QUEDUCAFederación Uruguaya de Magisterio, Montevideo, 2000