Ascensores y Montacargas, marzo 2014 Cuestionario cintas ascensores y montacargas ¿Cómo han marchado las ventas de cables de tracción para ascensor en 2013? ¿Qué crecimientos o decrecimientos ha tenido el mercado español? Otis utiliza su tecnología exclusiva de cintas de tracción en sus ascensores pero sólo suministra equipos completos, no componentes, por lo que no disponemos de datos referentes a ese mercado. ¿Qué ámbitos de la demanda (rehabilitación, grandes edificios…) tiran más del mercado? Las cintas se utilizan mayoritariamente en los ascensores destinados a edificios de uso residencial y comercial de hasta 150 metros de altura. Por lo tanto, es la venta nueva y sobre todo la modernización de ascensores antiguos el núcleo central de la demanda. En España existe un parque muy amplio de ascensores con más de 20 años de antigüedad que necesitan ser adaptados a las nuevas necesidades de confort de viaje, silencio y sobre todo eficiencia energética, por lo que la tecnología GeN2 de cintas planas es la más adecuada para este mercado. Las cintas de acero recubiertas de poliuretano son una patente de Otis. ¿Todas las cintas de este tipo son fabricadas bajo licencia de Otis? ¿Quién más fabrica este producto? ¿Cuándo caduca la patente? Las cintas planas de acero recubiertas de poliuretano fueron diseñadas y patentadas por Otis en el año 2000 y ninguna otra compañía las puede ofrecer. Las fabrica un proveedor único a nivel mundial para todas las compañías Otis en cada país. ¿Están contempladas estas cintas en las normativas europeas del ascensor? En la UNE-EN 81-1 sobre reglas de seguridad para la construcción e instalación de ascensores no se recoge nada al respecto. Esto es debido a que la norma en este caso va por detrás de la innovación. La invención de las cintas planas de tracción por nuestro departamento de I+D fue la primera revolución en el sistema de tracción de los ascensores desde que se inventaron en 1853. Esta tecnología está patentada por Otis y está avalada por los diferentes organismos de control autorizados, en nuestro caso ATISAE. ¿Qué futuro cree que le auguran a estas cintas? ¿Acabarán sustituyendo a los tradicionales cables? ¿Y qué desarrollos veremos en estos cables de tracción? Para Otis las cintas no son el futuro, son el presente. Ya han sustituido a los cables en todos los ascensores con tecnología GeN2 que salen de nuestras fábricas y cada vez más equipos se modernizan para aprovechar las ventajas que proporcionan las cintas de tracción: menos ruido, utilización de una máquina y poleas más pequeñas y más respetuosas con el medio ambiente, ya que no necesitan lubricación. En la actualidad estamos diseñando anchos de cinta diferentes para distintos tipos de carga y recorridos, combinando tamaños y número de cintas. OTIS DESARROLLA LAS CINTAS PLANAS DE TRACCIÓN MONITORIZADAS LAS 24 HORAS La utilización de cintas planas en lugar de cables de acero tradicionales se ha convertido en la seña de identidad de Otis. Se trata de una tecnología original desarrollada y patentada por la compañía y que, desde el año 2000, nadie más puede ofrecer. Ahora además, gracias al sistema Pulse las cintas pueden monitorizarse las 24 horas para garantizar su correcto funcionamiento. El sistema Pulse emite un impulso eléctrico a intervalos de tiempo prefijados que monitoriza el estado de las cintas y emite un reporte inmediato del estado de las mismas, y todo sin necesidad de parar el ascensor. Esto simplifica las labores de mantenimiento y permite detectar posibles averías por el deterioro de las cintas antes de que se produzcan, incrementando la seguridad y fiabilidad del aparato. Esta tecnología se viene aplicando a la familia de ascensores Otis GeN2, lo que supone muchas ventajas y permite aplicar los mayores avances tecnológicos. En cada cinta se distribuyen paralelamente 12 grupos con 588 hilos de acero. Sus dimensiones son de 3 mm. de espesor y 30 mm. de ancho, y son capaces de soportar 3.200 kg. de peso cada una. Las cintas de acero reforzado son mucho más flexibles que los cables, lo que posibilita la utilización de una polea de tracción de diámetro muy pequeño y una máquina de dimensiones reducidas. De este modo se hace innecesario el cuarto de máquinas. Además, son extremadamente silenciosas y tienen una vida de entre dos y tres veces superior a la de los cables convencionales porque al tener una mayor superficie de adherencia, sufren menor desgaste. Gracias a su recubrimiento de poliuretano no precisan de lubricación (al contrario que los cables convencionales que han del lubricarse a través de su núcleo central) y se logra un funcionamiento más silencioso y con menos vibraciones al evitar el contacto directo de metal con metal.