108 sexo y pareja Shhhhhexo consultorio sexológico Silencios sexuales: ¿por que es tan dificil decirle a tu pareja lo que te gusta hacer en la cama? a www.revistaohlala.com Entrá y dejale tu mensaje. A las mujeres se les insiste todo el tiempo en cuerpo’. A veces le pido que me bese alguna zo- que tienen que decirle a su pareja lo que les na, así que le hago una seña de lo que me gus- gusta hacer en la cama, que sean más proac- taría. A veces, me entiende y lo hace”. tivas, más abiertas y audaces. Pero a muchas Los hombres dejan bien en claro que, si bien esto les resulta difícil, y mantienen una acti- están abiertos a escuchar indicaciones, no tud pasiva: tratan de disfrutar lo que se les soportan las críticas. “No bien empiezo a to- ofrece sin chistar. Muchas mujeres me cuen- carla, me comienza a decir lo que tengo que tan que les gusta extender la previa (que les hacer. Me pone nervioso seguir órdenes. Más gusta tanto o más que el acto en sí mismo) y lento, más rápido, más fuerte, más suave, es que, sin embargo, se adaptan a las necesida- el cuento de nunca acabar”, cuenta Juan Pa- des de su compañero y renuncian a su propio blo. Obviamente, diálogos como éste no ha- deseo. Entonces, siguen una definición más cen sino atentar contra la calidad de sus en- masculina del “acto”, en la que el juego pre- cuentros sexuales. vio es una mera introducción al sexo “verdadero”, es decir, la penetración. ¿Qué hacer? Esto no es así, es precisamente la expectati- ■■ Los detalles específicos acerca de qué va, la seducción, las caricias, los besos y las hacer en la intimidad y cómo hacerlo es me- miradas lo que alimenta el deseo y la excita- jor no discutirlos durante el sexo, sino en ción, lo que hace que ellas se sientan desea- cualquier otro momento. das y lo que constituye para ellas el “verda- ■■ Puede ser muy beneficioso mostrarle a dero” encuentro sexual. tu pareja lo que te gusta, en vez de decírse- A muchas mujeres con las que trabajo les pre- lo verbalmente. Agarralo suavemente de la ocupa que si tardan demasiado en llegar al clí- mano, guialo, y movete. max, su compañero pueda aburrirse. Por eso, una ■■ Mostrarse agradecida por la presencia vez que él llega al orgasmo, renuncian al propio, de tu pareja en tu vida es fundamental para como si el ritmo de él marcara el de ella. que él se sienta confiado. ¿Qué hacen entonces? Fingen sus orgasmos. ■■ Muchos hombres y mujeres caen en la Dicen: “Tiene el ego demasiado frágil”, “no creo trampa de pensar que, si es necesario ha- que sea capaz de escucharme”, “no quiero las- blar, eso significa que no hay buena co- timarlo”. O: “No quiero que se enoje y me recha- nexión sexual. ¿No es mejor pensar que si ce”. E incluso: “No sé lo que quiero, lo único que podés comunicar tus deseos, es una señal sé es que no quiero lo que tengo ahora”. de buena sintonía sexual? Maite me cuenta: “Apenas yo me empiezo a re- ■■ Atención: cuando nos sentimos frustra- lajar y a excitar, Juan Pablo lo toma como una das sexualmente, estamos irritables, menos señal de que ya puede pasar a la siguiente eta- pacientes, más agresivas y con menos tac- pa. Me estimula medio minuto y ya me empieza to. En vez de decir: “Me gustarían más cari- a penetrar. Y yo pienso: ‘Ay, ojalá fuera un poco cias”, decimos: “¿Por qué siempre vas direc- más despacio y me pasara la mano por todo el to a mis tetas?” ● Minibio Esther Perel es autora del bestseller Inteligencia erótica, traducido a veinticuatro idiomas, que revolucionó la manera de pensar el sexo. Además, enseña en la Universidad de Nueva York y tiene su consultorio en Manhattan. Está casada desde hace veinticinco años y tiene dos hijos varones.