Semana 4 · Audacia para imaginar

FE AUDAZ – LA CLAVE PARA LOS MILAGROS
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SEMANA 4.- AUDACIA PARA IMAGINAR
Una de las cosas más increíbles que Dios nos ha dado es nuestra imaginación; la habilidad de crear
imágenes en nuestra mente, de visualizar, de tener ideas y de crear en nuestra mente. Y la razón
por la que podemos hacer esto es porque fuimos creados a la imagen de Dios y Él es creativo, Él
piensa.
De hecho, nos parecemos más a nuestro creador (Dios) cuando somos creativos.
Nada se vuelve realidad si alguien primero no lo imagina.
Ahora, la imaginación es un regalo de Dios y como todo regalo puede ser mal usado, es por eso que
la Biblia nos dice como si y como no deberíamos usar nuestra imaginación.
Hay cosas que no debemos imaginar, otras que no podemos imaginar y otras que deberíamos
imaginar, nos vamos centrar en esta última pero vamos a comentar las dos primeras.
No Debemos Imaginar (Malas intenciones, Especulaciones)
· La preocupación: cuando algo nos preocupa demasiado
· La venganza: cuando planeamos como dañar a alguien que nos ha dañado.
· Lujuria.
· Violencia.
Cosas que NO PODEMOS imaginar
· No podemos entender cuanto nos ama Dios.
· No podemos imaginar cuan poderoso y grande es Dios.
· No podemos imaginar el cielo. (1 Juan 3:2)
Cosas que DEBERIAMOS IMAGINAR
“Concéntrense (enfóquense, imaginen, piensen) en todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo
lo justo, todo lo puro, todo lo bello y todo lo admirable. Piensen en cosas excelentes y dignas de
alabanza.” Filipenses 4:8 (NTV)
1. Mi Imaginación da forma a mi vida. Proverbios 23:7
“La imaginación es el órgano de la intención” C.S. Lewis
“Cuida tu corazón, porque este determina el rumbo de tu vida.” Proverbios 4:23 (NTV)
Nuestra imaginación puede usarse para el bien o para el mal.
2. Imaginar es esencial para vivir por fe.
“La fe es la confianza de que en verdad sucederá lo que esperamos; es lo que nos da la certeza de
las cosas que no podemos ver.” Hebreos 11:1
“No nos fijamos en las cosas que se ven, sino en las que no se ven; porque las cosas que se ven son
temporales, pero las que no se ven son eternas.” 2 Corintios 4:18
3. Las grandes vidas se construyen alrededor de grandes sueños
No hay personas naturalmente grandiosas pero si hay grandes propósitos, y son estos los que
hacen grande a una persona.
La grandeza no es algo que heredamos, la grandeza es algo que sale de nosotros, pero necesitamos
algo más grande que nosotros mismos por lo cual vivir.
“Pido que Dios les abra la mente para que vean y sepan lo que Él tiene preparado para la gente que
ha llamado.” Efesios 1:18
Cuando entendemos el sueño de Dios, el propósito de Dios para nuestra vida nos llenamos de
esperanza.
“Cuando no hay visión, el pueblo se desvía.” Proverbios 29:18
4. El sueño de Dios para mi vida es más grande que mi sueño
“Por el poder de Dios que obra en nosotros, Él puede hacer mucho más de lo que jamás podríamos
pedir o imaginar.” Efesios 3:20
Dios quiere que soñemos en grande, pero Él quiere que soñemos SU sueño para nuestra vida.
Debemos basar el sueño para nuestra vida no en lo que creemos que nosotros podemos hacer sino
en lo que sabemos que Dios puede hacer.
Debemos dejar que el tamaño de nuestro Dios determine el tamaño de nuestras metas.
5. La duda es el enemigo de la imaginación
La duda y el miedo neutralizan lo que Dios quiere hacer en nuestra vida. Soñar requiere valentía,
porque siempre hay un posible miedo al fracaso. La duda es lo que obstaculiza nuestra fe.
“Si a alguno de ustedes les falta sabiduría, pídasela a Dios, y Él se la dará, pues Dios da a todos
generosamente sin menospreciar a nadie. Pero pida con fe, sin dudar porque quien duda es como
las olas del mar, agitadas y llevadas de un lado a otro por el viento. Quien es así no piense que va
a recibir cosa alguna del Señor.” Santiago 1:5-7
Debemos avanzar a pesar de la duda y el temor y dejar que la fe gobierne nuestra imaginación y
mente.
“Ten misericordia de nosotros y ayúdanos si puedes. ¿Cómo que “si puedo”? –Pregunto Jesús-. Todo
es posible si uno cree. Al instante el padre clamó: -¡Si, creo, pero ayúdame a superar mi
incredulidad!” Marcos 9:22-24
En la historia de este versículo Jesús sano al hijo del hombre en el momento en que este reconoció
que necesitaba creer y vencer su incredulidad (miedo, falta de fe) y esto es porque aunque no
tenemos todas las respuestas si podemos vencer todo aquello que impida creer y avanzar.
6. El Espíritu de Dios y la Palabra de Dios llenan mi imaginación
Estas son las dos fuentes que Dios provee para nuestros sueños.
“Yo le pediré al Padre, y él les dará otro Abogado Defensor, quien estará con ustedes para siempre.
Me refiero al Espíritu Santo, quien guía a toda la verdad. El mundo no puede recibirlo porque no lo
busca ni lo reconoce; pero ustedes sí lo conocen, porque ahora él vive con ustedes y después estará
en ustedes.” Juan 14:16-17
El Espíritu de Dios está dentro de nosotros, guiando, inspirado.
“Ayúdame a comprender el significado de tus mandamientos, y meditaré en tus maravillosas obras.”
Salmos 119:27
La Palabra de Dios es el combustible para nuestra vida.
Necesitamos pasar más tiempo con el Espíritu Santo y en la palabra Dios.
La clave: UN TIEMPO A SOLAS CON DIOS TODOS LOS DÍAS.
Leer: Job 33:14-15 (NTV) Isaías 50:4 (NTV)
7. El desarrollo de mi carácter aclara mi visión
Si estamos teniendo problemas para ver los planes de Dios para nuestra vida necesitamos trabajar
con nuestro carácter.
“A su fe, virtud; a su virtud, entendimiento; al entendimiento, dominio propio; al dominio propio,
constancia; a la constancia, devoción a Dios; a la devoción a Dios, afecto fraternal; y al afecto
fraternal, amor. Porque estas cualidades, si abundan en ustedes, les harán crecer en el
conocimiento de nuestro Señor Jesucristo, y evitarán que sean inútiles e improductivos. En cambio,
el que nos las tiene ES TAN CORTO DE VISTA QUE YA NI VE.” 2 Pedro 1:5-9 (NVI)
8. Si un sueño es de Dios, de alguna forma se conectará con Su iglesia y Su plan para el mundo
Lo último que hizo Jesús fue darles a sus discípulos la Gran Comisión.
“Si tratas de aferrarte a la vida, la perderás; pero si entregas tu vida por mi causa y por causa de la
Buena Noticia, la salvarás.” Marcos 8:35 (NTV)
· ¿Qué tal si Dios abriera las puertas a nuevas posibilidades?
· ¿Por qué no está ocurriendo esto ahora?
· ¿Por qué no yo?
Lo más importante de lo que debemos darnos cuenta es que PARA DIOS NADA ES IMPOSIBLE.
Dios quiere que seamos mejores en cada área de nuestra vida. Dios quiere extender nuestra fe, Dios
tiene un sueño para nuestra vida y quiere que lo alcancemos.
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