CONSULTA 409 elemento caracterizante que ha señalado la doc­ trina: la ejecución de cometidos públicos o de in­ terés público. Sobre este punto, también caracte­ rístico de las personas públicas no estatales, véase supra 6. f) Prat ha agregado además, como otro ele­ mento caracterizante de estas personas: que sus empleados no son funcionarios públicos sino tra­ bajadores de la actividad privada sometidos, en algunos casos, a estatutos especiales (Derecho Administrativo, Tomo II, 1977, pág. 153) cues­ tión arduamente discutida en nuestra doctrina, pero desde hace varios años ha prevalecido la te­ sis expuesta. g) Finalmente, respecto de la atribución por ley de prerrogativas típicas de poder público, en lo referente a las Bancas, este carácter no apare­ ce, o se infiere en función de otros aspectos, según lo hemos señalado supra 8. En la mayoría de las personas públicas no estatales, este carácter sur­ ge en forma palmaria de normas explícitas; cree­ mos que su debilitamiento en las Bancas no de­ termina, en base a los restantes caracteres ana­ lizados en su conjunto, dejar de seguir pensando que estamos ante personas públicas no estatales. Esc. José Lamas Informante La Comisión de Derecho Público, integrada por los Eses. Emilio Biasco, César Lema, Marce­ la Curbelo Yates, Juan Lema, José Lamas y Elizabeth Castro, aprueba el informe que antece­ de. Aprobado por unanimidad por la C.D. de la AEU, Resol. Nfi 28530, de 5 de setiembre de 1994. 3.5.2. ACTOS ADMINISTRATIVOS. SERVIDUMBRES ADMINISTRATIVAS. RECURSOS ADMINISTRATIVOS. CONSTRUCCIONES. En caso de violaciones a las disposiciones legales y reglamentarias en la construcción de un edificio deben interponerse los recursos administrativos correspondientes. Las servidumbres non edificandi son limitaciones al derecho de propiedad y no dan derecho a reclamar indemnización a la Administración, salvo que ésta haya ejercido sus potestades en forma irregular. No toda irregularidad de un acto administrativo conlleva la nulidad absoluta del mismo. INFORME DE LA COMISIÓN DE DERECHO PUBLICO (*) I) Como precisión previa, es conveniente po­ ner de manifiesto una vez más -aunque lo que afirmaremos no constituye novedad en modo alguno- que las "denuncias" no son instrumentos jurídicos idóneos para la tutela de los derechos que se creen lesionados, salvo en aquéllas mate­ rias en que el principio inquisitivo es predomi­ nante (vg. materia penal, disciplinaria). Por tanto, si se tuvo conocimiento de la "fla­ grante violación a las disposiciones legales y reglamentarias que regulan la materia, y posee también un sinnúmero de irregularidades que violan las mismas disposiciones...", debieron bus­ carse los mecanismos que brinda el derecho para la tutela de los derechos o intereses que se creen menoscabados. (*) Ver consulta publicada en pág. 330 Avía de ejemplo, cabe citar: a) la interposición de él o los recursos administrativos pertinentes contra la resolución de la I.M.M. que concedió el permiso de construcción; b) solicitar la suspen­ sión transitoria, total o parcial, de la ejecución del acto impugnado, o la adopción de otra medida cautelar o provisional, en vía administrativa; c) el pedido de suspensión de la construcción de la obra, en proceso cautelar ante el Poder Judicial; d) en subsidio de los medios de tutela normales u ordinarios cabría, si se dan todos los requisitos exigidos por la respectiva ley, el proceso de ampa­ ro, también ante el Poder Judicial. Por consiguiente, si se produjo un avance en la obra tan plagado de las graves irregularidades 410 mencionadas, se debió a que los sujetos afectados por éstas no acudieron a las vías de tutela ade­ cuadas. II) A continuación trataremos de dar respues­ ta a las interrogantes planteadas por la consul­ tante, en el orden enunciado por ésta. III) Con relación a la primera diremos que, a nuestro juicio no se trata de un predio esquina aunque tiene dos frentes: uno a A. I. y otro, bastante más reducido, al Pasaje Peatonal. El solar 53 sí sería, por su configuración, un predio esquina, de acuerdo al plano acompañado. IV) En lo que dice relación con el segundo punto de su petitorio, esta Comisión entiende que la posición de la consultante no es correcta. Las mal llamadas "servidumbres non edificandi" no son tales. Son, en realidad, limitaciones o res­ tricciones al derecho de propiedad. Inciden sobre el carácter "absoluto" de dicho derecho, no sobre el carácter "exclusivo" de dicho derecho, pues, como lo señalaMarienhoff: "sólo implican delimi­ tación de sus contornos o límites, pero en modo alguno trasuntan lesión o agravio al derecho de propiedad; técnicamente, no constituyen un 'sa­ crificio' para el propietario, quien, por tanto, no puede agraviarse por el solo hecho de que la ^res­ tricción' sea impuesta" (Tratado de Derecho Ad­ ministrativo, Tomo IV, 1987, pág. 49). El citado autor enumera los caracteres que tienen tales restricciones administrativas sobre la propiedad. Ellos son: a) tienden a hacerse cada vez más numerosas; b) son generales, constantes y actuales. Es importante precisar, a los efectos déla consulta, este carácter. La "generalidad" de­ riva de que la restricción rige para todos los pro­ pietarios en igualdad de condiciones. En cambio las servidumbres y la expropiación son "especia­ les" para los casos concretos que las determinan, sin perjuicio de que inciden sobre caracteres diversos del derecho de propiedad; mientras las servidumbres afectan lo exclusivo de la propie­ dad, la expropiación opera sobre la perpetuidad del referido derecho; c) no aparejan indemniza­ ción (art. 32 de la Constitución que sólo prevé dicha posibilidad en el caso de expropiación); d) son ejecutorias, es decir que la Administración las hace efectivas directamente, por sí misma, valiéndose o no del auxilio de la fuerza pública según las circunstancias; e) no se extinguen por el no uso. Son imprescriptibles. En la enuncia­ ción de los caracteres mencionados hemos segui­ do las enseñanzas de Miguel Marienhoff (Trata­ do... cit., págs. 59 y 62). REVISTA DE LA A.E.U. T. 80 (7-12), 1994 En nuestro medio y entre los autores privatistas, hay coincidencia en cuanto a la categorización de las servidumbres non edificandi como verdaderas limitaciones al derecho de propiedad señalándose, además, que: "no le dan derecho al propietario a reclamar por ellos compensación o indemnización" (Yglesias, Arturo, Derechos rea­ les limitados, F.C.U., 1988, pág. 11). Pero cabe observar que tal imposibilidad de reclamar indemnización no es absoluta. Si la Ad­ ministración ejerció sus potestades (no sus "dere­ chos") enforma irregular o anormal debe indem­ nizar toda vez que causa un daño (art. 24 de la Carta), por ejemplo, cuando el trabajo se efectuó en forma deficiente, contrariando las reglas o re­ caudos que debieron observarse (Conf.: Marien­ hoff, ob. cit., págs. 64 y 65). Es menester recordar que las disposiciones del C. Civil en la materia pueden haber sido sus­ tituidas (no cabría hablar de derogación) por resoluciones de la respectiva I. M.M. o decretos de su Junta Departamental "con fuerza de ley en su jurisdicción" (Constitución, art. 273; L.O.M., arts. 19, num. 12 y 35 num. 26). V) En cuanto al tercer punto del petitorio de la consulta, cabe señalar, como consecuencia de lo expuesto en el apartado anterior, que la con­ sultante no está en una situación jurídica activa, sino precisamente todo lo contrario; su situación jurídica es de sujeción, esto es, debe tolerar las li­ mitaciones impuestas a su propiedad por la Ad­ ministración, pues aquéllas no son más que avatares connaturales que debe sufrir la propie­ dad, pues como lo señala Marienhoíf: "estafacul­ tad surge implícita del orden jurídico general" (ob. cit., pág. 55). La acción indemnizatoria ca­ bría sólo en los supuestos referenciados en el apartado anterior, pero, "el derecho adquirido'' de la consultante obviamente tendría su fuente en el obrar ilícito y dañoso de la Administración, en oportunidad de hacer efectiva la mentada restricción. VI) Con respecto al cuarto punto del petitorio de la consulta, sintéticamente expresaremos que no toda irregularidad de un acto administrativo conlleva la nulidad absoluta del mismo. Y aún en este supuesto, el acto nulo desplegaría igualmen­ te efectos si su revocación con efectos ex tune implican afectar situaciones de derechos subjeti­ vos amparadas en el mismo. Por otra parte, como lo anota Cassinelli Mu­ ñoz ("Competencia del Poder Judicial oara cono- CONSULTA cer de la validez de un acto administrativo como premisa del fallo", Revista D.J.A., Tomo 71, págs. HOy 111):'la admisibilidad de la excepción de acto administrativo en sede judicial, no impli­ ca necesariamente que los actos de derecho pri­ vado, apoyados en el acto administrativo nulo, deban tenerse por ineficaces. Las consecuencias sustanciales de la invalidez del acto administra­ tivo antecedente de un acto de derecho privado, respecto de la validez o eficacia de éste, configura una cuestión de derecho material que no está regulada por la Constitución, de modo que ha de estarse a la regulación legal que para cada cate­ goría de actos de derecho privado, resulte de la interpretación de las leyes... Es menester exami­ nar una cuestión de derecho privado, la de si la validez del acto de incorporación al régimen es un requisito cuya ausencia configura un mero impedimento prohibitivo o, por el contrario, un impedimento dirimente de la ulterior traslación de dominio por el modo tradición... no sería in­ constitucional una ley que prohibiera hacer tra­ dición de un apartamento si no ha sido válida­ mente incorporado al régimen de la ley 10.751, pero limitara los efectos de la infracción de esa norma prohibitiva, a la aplicación de sanciones 411 -civiles, penales, administrativas- a los culpa­ bles, conservando la validez de la tradición fun­ dada en un acto inválido de incorporación a di­ cho régimen" En mérito a las consideraciones expuestas por el Prof. Cassinelli, al principio de conserva­ ción del acto jurídico y de estabilidad de las si­ tuaciones jurídicas subjetivas creadas a su amparo, sólo en casos excepcionales, previstos a texto expreso, podría declararse nulo un acto de De­ recho privado que tuviera como antecedente un ac­ to administrativo irregular en grado de nulidad no convalidable, situación que proyecta sus efec­ tos a la actuación de los profesionales intervinientes. Esc. José Lamas Informante La Comisión de Derecho Público, integrada por los Eses. Emilio Biasco, José Lamas, César Lema y Rubén Rodríguez Grenni, aprueba el in­ forme que antecede. Aprobado por unanimidad por la C.D. de la AEU, Resol. Ns 28798, de 24 de octubre de 1994.