Síndrome de ardor bucal Definición El síndrome de ardor bucal (SAB, también conocido como glosodinia, glosopirosis, disestesia oral o estomatodinia) es un dolor o molestia de la mucosa oral crónico que no tiene lesiones causantes identificables y que no es provocado por ninguna otra afección o enfermedad. Epidemiología La prevalencia comunicada en poblaciones generales varía desde el 1 % al 15 %, dependiendo de los criterios de diagnóstico. Las mujeres se ven afectadas de 3 a 20 veces más que los hombres, normalmente en la edad menopáusica o postmenopáusica. Se ha citado una mejora en una proporción de entre la mitad y dos tercios de los pacientes en el plazo de 6 a 7 años desde la aparición, con tasas de remisión espontánea del 20 % durante ese periodo de tiempo. Fisiopatología Considerado en otros tiempos puramente psicológico en cuanto a su etiología, este trastorno muestra ahora crecientes indicios de elementos neuropáticos, con cambios centrales indicados tanto por las pruebas neurofisiológicas como por las resonancias magnéticas funcionales. Características clínicas Ubicación, irradiación: principalmente bilateral, con implicación de la parte anterior de la lengua en la mayoría de los casos y a veces también los labios, el paladar y la faringe. Carácter: ardor, hormigueo, pinchazos, molestias. Intensidad: variable. Duración, periodicidad: aparición gradual y espontánea, con sensaciones de ardor que se presentan diariamente, aunque se informa también de periodos sin dolor durante el día. Factores que influyen: los síntomas se pueden incrementar al hablar, comer alimentos calientes o picantes, y en momentos de estrés. Los síntomas pueden disminuir con la ingesta de determinados alimentos o bebidas, por el sueño o descanso y mediante la distracción. Características asociadas: alteración del sentido del gusto, cambios en la salivación y, con frecuencia, puntuaciones altas en las pruebas psicométricas de ansiedad y depresión. El diagnóstico se obtiene en función de una anamnesis detallada y del descarte de factores locales (p. ej., candidiasis, herpes, hiposalivación, alergia o lesiones de las mucosas) o los factores sistémicos (p. ej., 01225 386439, deficiencias vitamínicas, diabetes, hipotiroidismo, Copyright © 2013 International Association for the Study of Pain medicamentos como los inhibidores de la ECA o trastornos autoinmunitarios) como causas de los síntomas. Investigaciones Las pruebas diagnósticas incluyen análisis de sangre (hematológico, bioquímico e inmunológico) y pruebas microbianas (cultivo vírico o fúngico). Terapia El tratamiento para el SAB es principalmente farmacológico, mediante el uso de medicamentos para el dolor neuropático. Hay ciertos indicios de que la terapia cognitivo-conductual podría ser de ayuda. La ansiedad o la depresión asociadas pueden necesitar tratamiento. Tranquilizar y animar a los pacientes es de extrema importancia, porque a estos les preocupa la posibilidad de tener una enfermedad maligna y que nadie crea que sienten dolor. Referencias [1] Fedele S, Fricchione G, Porter SR, Mignogna MD. Burning mouth syndrome (stomatodynia). Q J Med 2007;100:527–30. [2] Taiminen T, Kuusalo L, Lehtinen L, et al. Psychiatric (axis 1) and personality (axis11) disorders in patients with burning mouth syndrome or atypical facial pain. Scand J Pain 2011;2:155–60. Copyright © 2013 International Association for the Study of Pain