07-cOK.qxd 07/01/07 08:21 p.m. Page 1 I NTERES G ENERAL La Plata, lunes 8 de enero de 2007 7 ARGENTINA ESTA POR DEBAJO DEL PROMEDIO IDEAL Pocos bebés: la tasa de nacimiento tiende a ser cada vez más escasa Casi la mitad de las naciones que cuentan con un alto índice de población mundial presentan una tasa de fertilidad que va en descenso. La cantidad de nacimientos en Buenos Aires se redujo notoriamente en los últimos tres años. La preocupación ante un envejecimiento general una etapa en la que ya han perdido su fertilidad máxima. Las chances, por lo tanto, se reducen. A partir de los 40 años, la función ovárica de la mujer comienza a declinar y aunque el recurso de un óvulo donado puede resolver algunos inconvenientes e, incluso, reducir el riesgo de problemas genéticos que es más alto en mujeres de mayor edad, las bajas tasas de éxito de embarazo entre las mujeres de mayor edad y el aumento del riesgo de complicaciones durante el embarazo llevan a que los médicos no sometan a tratamiento a todas las mujeres que quieren ser madres después de los 40 o 50 años. Las mujeres prolongan la maternidad y el número de integrantes en una familia tiende a reducirse. Las cifras a nivel mundial grafican un descenso de la tasa de natalidad en países desarrollados. A nivel local, las estadísticas bonaerenses muestran una baja en los últimos tres años. Esperar hasta los 35 para tener el primer hijo, hoy es un escenario común. Pero los especialistas y gobiernos de distintos países muestran preocupación ante una futura población envejecida. La Provincia pasó de 63.896 nacimientos en el primer trimestre de 2004, a 49.738 en igual período de 2006 Según datos del Registro Provincial de las Personas, la tasa de natalidad se redujo notoriamente con la crisis de 2001. El repunte económico, sin embargo, no promovió suba alguna en la cantidad de nacimientos. En el primer trimestre de 2004 hubo, en toda la Provincia, 63.896 nacimientos; en 2005 -en el mismo período- se redujo a 56.259 y el año pasado, a 49.738. En el Conurbano bonaerense, los números hablan por sí solos: mientras que en 2004 fueron 39.385 los bebés nacidos, en 2005, bajó a 33.145 y en el año que dejamos atrás fueron 27.463. En el interior de la Provincia, en cambio, la diferencia no es tan noto- Descenso. En el Conurbano hubo, en el primer trimestre de 2004, unos 39.385 nacimientos, frente a 27.463 en 2006 ria: se pasó de 24.511 en 2004 a 22.275 en 2006. Pocos niños Cerca de la mitad de las naciones del mundo que cuentan con más de un 40% de la población mundial hoy tienen tasas de nacimiento menores y las tasas de fertilidad van en descenso en la mayor parte de los países desarrollados. Las estadísticas no hacen más que revelar que en el futuro las poblaciones pueden tener más cantidad de personas mayores que niños nacidos, lo que generaría una tendencia a un envejeci- El dato La búsqueda del recambio poblacional La tasa utilizada para medir el nivel de natalidad es la tasa de fecundidad, esto es, el promedio de hijos por mujer. Según datos del Indec, la proyección para nuestro país al 2010 es de 2,3%, lo que permitirá un recambio de la población por estar encima de la media estimada de 2,1%. Países con pirámide invertida Desde el gobierno de distintos países han creado una serie de beneficios adicionales para aquellos que decidan agrandar la familia. Una búsqueda para revertir la tendencia de la pirámide invertida: más población envejecida que joven. Pero no hay consenso sobre si todavía hay tiempo para cambiar esta tendencia. Los hábitos en los países del mundo han provocado que la tasa de natalidad sea cada vez menor y, en cambio, la población anciana vaya en ascenso. Italia es uno de los ejemplos más conocidos, igual que Alemania, donde se registra la tasa de natalidad más baja del mundo: 1,36 bebés por cada mujer, por lo que se alcanzó el nivel más bajo registrado en 1945, último año de la Segunda Guerra Mundial. De continuar esta tendencia, antes de 2050 el número de niños nacidos en Alemania será menor en un 50% al registrado hoy, según un informe del Instituto de Población y Desarrollo de Berlín. Italia y Alemania son algunos de los países con la tasa de natalidad más baja del mundo Alemania ya comienza a registrar un cierre de jardines de infantes y de escuelas por falta de niños, y se prepara para afrontar una escasez de mano de obra especializada, una reducción de sus jubilaciones y un aumento de los aportes sociales, ade- más de las drásticas reformas que deberá emprender el gobierno. Para mantener, naturalmente, el nivel de la población en Alemania, cada mujer que habita este país debería tener al menos 2,1 niños, un valor que tampoco alcanza ningún país de la Unión Europea en estos momentos. La ONU proyecta que a este paso, a nivel mundial, en 2050 habrá dos personas mayores por cada niño. En tanto, durante los próximos cin-cuenta años, el número de personas de 60 años o mayores será más del triple, aumentará de 606 millones actuales a casi 2.000 millones en 2050. El incremento de los mayores de 80 años se prevé que será más acentuado, pasando de 69 millones en 2000 a 379 millones en el año 2050. miento general de la población mundial y a una fuerte baja en el crecimiento demográfico. “La tasa de fertilidad va en descenso ya desde los 60 con la aparición de los anticonceptivos orales, y hoy hay que sumar que la mujer dilata el primer embarazo”, dice el especialista en reproducción y director de Halitus Instituto Médico, Sergio Pasqualini. “Hoy todavía no es preocupante, pero sí lo será en unos años”, señala Pasqualini. En Halitus, el promedio de edad en quienes se lanzan a la búsqueda de la maternidad es de 35 años, Mientras en Capital Federal el índice de niños por mujer (1.39) está debajo del ideal, en Misiones es de 3.15 Argentina, en lo bajo Según los demógrafos, para tener un nivel de reemplazo de la población, la tasa de fertilidad de un país debería rondar los 2.1, aunque hay muchos países con tasas menores: Rusia tiene 1.28, Polonia 1.25, Alemania 1.39, Australia 1.76, Japón 1.25. Sólo EEUU llegan a la marca con 2.09. Nuestro país está dentro del grupo de países con menor tasa de fecundidad, aunque existe gran disparidad entre jurisdicciones: en la ciudad de Buenos Aires es 1.39, pero en Misiones es de 3.15.