MUNDO DEPORTIVO Viernes 20 de febrero de 2004 29 POLIDEPORTIVO EN ACCIÓN La biatleta Poirée acaba de ganar Incluso hay embarazadas que han 4 oros mundiales al año de ser madre competido, un riesgo según el caso + “ Liv Grete Poirée y su marido, Raphael Poirée, posan con las medallas que ganaron la semana pasada en el Mundial de biatlón ses después de su maternidad. Otro caso curioso es el de la golfista Patricia Meunier Lebouc, de 31 años, que jugó embarazada casi toda la temporada pasada en el circuito USA. Sin estar encinta, ganó el primer Grand Slam del año (Nabisco) y embarazada de tres meses acabó 5ª en el British, cuya última jornada empezó como líder, y colaboró en el triunfo europeo sobre EE.UU. en la Sol- heim Cup. La atleta irlandesa Sonia O'Sullivan también ganó la Gran Carrera del Norte en julio de 2001, sobre 8 kms., estando embarazada de cuatro meses. El doctor Pujol señala la acidosis muscular –disminución del ph por la aparición del ácido láctico– y la hipertermia –aumento de temperatura– como los principales peligros para el feto cuando una deportista realiza un ejercicio intenso. Juli Chusovitina, oro mundial de gimnasia con 28 años por amor a un hijo enfermo La gimnasta uzbeca Oxana Chusovitina refleja como pocas la fuerza de la motivación para que una deportista brille en la alta competición después de ser madre. Oro mundial en suelo y plata en salto en Indianápolis'91 y campeona olímpica por equipos en Barcelona'92, Chusovitina se retiró de la gimnasia en 1997 tras completar una gran carrera. Se casó y en 1999 dio a luz a su hijo Alisher, a quien se le diagnosticó una leucemia en 2002. Ya había vuelto a competir en los Juegos de Sydney'2000 –también lo hizo su marido, el luchador Bakhodir Kurpanov–, pero a raíz de la enfermedad de su hijo alargó su carrera con el fin de ganar más dinero para pagar su costoso tratamiento. Con éxito. Primero se coló en tres finales del Mundial de Debrecen'2002, donde ganó el bronce en salto, y luego, 12 años después de su primer título mundial, repitió corona en salto en Anaheim'2003. Chusovitina debutó internacionalmente con 12 años. Ahora compite con 28 en un deporte repleto de niñas y adolescentes 쩨 PERE PUJOL (Jefe Nutrición CAR) Fisiológicamente, no hay ningún problema ni inconveniente para que una deportista que ha sido madre vuelva a competir” “ Entrenamientos, viajes... Esto gasta psicológicamente. Una vez has sido madre, la capacidad de aguantar el estrés de la competición disminuye. Ahí entran las motivaciones” “ Hay mujeres que han corrido suavemente maratones con un embarazo de 4 ó 5 meses. Hay peligro según sea el caso” FOTO: AP Inkster, Carin Koch o Catrin Nilsmark son otras madres golfistas en primera línea, y Sandrine Testud o Rosana Neffa de los Ríos lo son en el tenis. Más lejos en el tiempo, la búlgara Tania Dangalekova. Siendo campeona europea de 200 braza, abandonó la natación en 1987 con 23 años para ser madre y reapareció en Seúl'88 con un oro olímpico en 100 braza. Hubo, hay y habrá más casos 쩨 LAS FRASES Steffi Graf dejó el tenis para formar una familia Oxana Chusovitina, todo un ejemplo La gran mayoría de deportistas de élite fueron madres tras retirarse de la competición. Steffi Graf fue una de ellas, pero la tenista alemana se retiró en la plenitud de su carrera, ya que dejó el tenis con 30 años la misma temporada en la que ganó su sexto título de Roland Garros para formar una familia. Dos años después se casó y tuvo el primer hijo con Agassi. A Jaden Gil se unió después Jazz 쩨 La nadadora Rica Reinisch FOTO: MD Embarazo y aborto forzados como dopaje L a gimnasta rusa Olga Kovalenko o la nadadora de la extinta RDA Rica Reinisch, entre otras, denunciaron en su día una de las prácticas más repugnantes de la historia del deporte: forzar a una deportista a quedarse embarazada y luego a abortar para mejorar el rendimiento de entrenamiento aprovechando la mayor presencia de hormonas en la deportista encinta. El director del Laboratorio Antidopaje de Barcelona, Jordi Segura, explica la base de tal barbaridad. “Durante el embarazo, pero sobre todo en los primeros meses, la mujer libera la hormona gonadoprofinacoriónica (HCG), que aumenta la producción de testosterona, molécula que da más fuerza. Si aumentan los niveles de HCG, ligado a un entrenamiento, el resultado es que consigues más masa muscular”, afirma Segura. “En temas de dopaje, está prohibido inyectarse tanto testosterona como HCG, pero no está prohibido quedarse embarazada. Es posible que hubiese esa práctica. Hubo rumores, pero yo no tengo confirmación. Lo más chocante es que, cuando un hombre se inyecta HCG, su orina da como si estuviera embarazado. De hecho, el test de embarazo lo que detecta es la presencia de HCG. En unos días del ciclo menstrual, la mujer también libera algo de HCG, pero menos”, concluye el especialista 쩨