Dominio del estrés: Técnicas A. TÉCNICAS DE DOMINIO A CORTO PLAZO: 1. RELAJACIÓN ESPONTÁNEA Se trata de lograr una relajación muscular. Este estado es incompatible con el miedo, la irritación, el nerviosismo, la cólera, etc. Podemos conseguir la relajación si, p.e., respiramos profundamente y ponemos tensos durante unos segundos algunos músculos, relajándonos después, y concentrándonos en la sensación diferencial entre tensión/distensión. Se pueden emplear todos los tipos de relajación muscular o de entrenamiento autógeno, según la situación y los conocimientos de cada uno. 2. DISTRACCIÓN INTERNA “Distraerse internamente” significa que se intenta de modo totalmente consciente interrumpir los pensamiento estresantes y dirigirse hacia otros neutros o agradables, como p.e., el tiempo libre. 3. DISTRACCIÓN EXTERNA Por “distracción externa” se entiende el ocuparse en otras actividades normales que puedan relajarnos y lleguen a procurarnos mejoría (p.e., una visita a los amigos, colaborar en un trabajo con otras personas, oír música). 4. MONÓLOGOS Consiste en hablar consigo mismo, en voz alta o mentalmente, introduciendo los siguientes contenidos: - Órdenes y autoinstrucciones tales como: “Esto lo soluciono yo ahora”·, “¡Vamos, ánimo!”, “¡Haz un esfuerzo!”. - Suavizar y relativizar la situación, comparar con otras situaciones más difíciles, buscar aspectos positivos, como p.e.: “Hay cosas peores”, “Ya pasará”, “¿Qué es esto comparado con…?”. - Comprensión y disculpa de la conducta de los demás, como p.e.: “Es sólo un pobre hombre”, “Seguro que no piensa lo que dice”, “En el fondo está ocultando su propio miedo e inseguridad”. Dominio del estrés: Técnicas 1-4 5. DESCARGA FÍSICA Se entienden como “descarga” las reacciones que liberan las energías automáticas que aparecen en el estrés, logrando así un mejoramiento fisiológico general (p.e., un corto sprint, cortar leña, hacer deporte, subir escaleras). 6. DISMINUCIÓN DE LA DOSIS DE ESTRÉS Algunas veces también se puede reducir a corto plazo la dosis de estrés, aunque no por ello se solucione el problema en profundidad y de modo sistemático. Algunos ejemplos: apagar el ruido de la radio, desconectar el teléfono, o evitar encontrarnos con una persona que nos molesta. B. POSIBILIDADES DE DOMINIO A LARGO PLAZO 1. RELAJACIÓN: La relajación hace que no parezca, o al menos que se limite, el miedo, el nerviosismo, la cólera, y la ofuscación mental que éstos conllevan, para facilitar una reflexión tranquila; hace que se aumente el umbral de resistencia y que se reduzcan los efectos psicosomáticos del estrés. 2. SOLUCIÓN DE PROBLEMAS: A través de una reflexión y planificación sistemática, se pueden elaborar de modo más efectivo soluciones ante los problemas existentes, mejorando las improvisaciones. Además, se pueden prever futuras situaciones estresantes, de modo que se puedan suavizar, o incluso evitar, sus efectos molestos. 3. CAMBIO DE ACTITUDES: Prejuicios, sentimientos injustificados de culpa, falsas apreciaciones de nosotros mismos y cosas parecidas que todos tenemos, nos limitan en nuestro hacer y nuestro trato. Para evitar el estrés, deben cambiarse nuestras actitudes erróneas por otras más adecuadas. 4. TÉCNICAS DE COMUNICACIÓN: A menudo surgen complicaciones en la relación con otras personas. Mejorando la comunicación con la persona que ha ocasionado la dificultad en la situación, pueden encontrarse muchas posibilidades efectivas de superación. Estos métodos pueden utilizarse aisladamente o en combinación, para lograr una superación del estrés en un plazo más largo de tiempo. Evidentemente, para una superación a largo plazo hay que actuar desde distintos ángulos: - Dominio del estrés: Técnicas Los estresares, o la dosis de estrés. 2-4 - La propia persona. - El organismo. - El medio ambiente y las personas allegadas. EL ENFOQUE MÁS ADECUADO DEBE PRECISARSE INDIVUALMENTE, PARA LAS DISTINTAS SITUACIONES. NO EXISTE NINGUNA REGLA VÁLIDA GENERAL. EJERCICIO CORTO DE RELAJACIÓN. Este ejercicio sólo se deberá practicar cuando la persona domine del todo el ejercicio de relajación detallado (relajación larga). Primero debe poner en tensión todo el cuerpo. Para ello siéntese en el suelo o en el borde delantero de asiento. Apriete los puños, doble los brazos, apriételos contra el cuerpo y suba los hombros. Levante las rodillas todo lo que puedan, de modo que los pies no toquen al suelo. Doble la espalda. Presione al mismo tiempo la cabeza contra el pecho y tense todos los músculos de la cara. Doble las puntas de los pies hacia arriba. Así ponga en tensión todo el cuerpo. Brazos, manos, nuca, hombros, cara, espalda, pecho, vientre y piernas. Inspire profundamente y retenga el aire: (1-2-3-4-5-6-7-8-9-10-11-12-13-14-15) Ahora relájese. Colóquese cómodamente y expire poco a poco. Relaje por orden todos los músculos del cuerpo: Brazos, manos, nuca, hombros, cara, espalda, pecho, vientre y piernas. Tómese el tiempo necesario y relájese totalmente. Disfrute de la relajación (5-7 seg) Dominio del estrés: Técnicas 3-4 INSTRUCCIONES BÁSICAS PARA EL ENTRENAMIENTO AUTÓGENO. PREPARACIÓN En general: La condición más importante para el éxito del ejercicio es un elevado grado de tranquilidad externa e interna (por ello se enseña primero la relajación muscular larga y breve). Lugar del ejercicio: Tranquilo, templado, sin interferencias (teléfono, etc.). Al principio, es recomendable hacer siempre el ejercicio en el mismo lugar. Parientes/Conocidos: Informarles y pedirles colaboración, para crear el ambiente tranquilo necesario (que no interrumpan el ejercicio). Momento: No hacerlo inmediatamente antes de ir al trabajo, o antes de actividades desagradables o demasiado importantes, para poder realmente desconectarse del todo. El ejercicio debe tener un lugar propio en los quehaceres diarios. Es preferible escoger siempre la misma hora, p.e., por la tarde o por las mañanas, después del trabajo. Vestimenta: Cómoda y suelta, prescindir de los accesorios que pueden estorbar, (joyas, gafas), desabrochar cinturones o cintas apretadas. Preparación muscular: Ejercicios gimnásticos o una forma breve de relajación muscular producen una buena “base de relajación”. Postura del cuerpo: Acostado, o en “postura del cochero” (demostrarla): Acostado: cómodamente sobre una base no demasiado dura. Los brazos y las piernas ligeramente entreabiertas y sueltas. Postura del cochero: sentado en una silla, con los pies totalmente apoyados en el suelo. Las manos caen sueltas entre las piernas, apoyando los antebrazos en los muslos. La cabeza cuelga suelta hacia delante y la espalda se encorva. Preparación interna: Cerrar los ojos, desconexión total, desviar todo pensamiento que distraiga, concentración total en el cuerpo, entregarse a la sensación de relajación. Dominio del estrés: Técnicas 4-4