PIMECROLIMUS (ELIDEL, ISAPLIC, PIMECROLIMUS NOVARTIS) Y TACROLIMUS (PROTOPIC): NO EN NIÑOS MENORES DE 2 AÑOS POR RIESGO DE LINFOMAS Desde hace meses se dispone de 2 alternativas para tratar la dermatitis atópica: el pimecrolimus (Elidel, Isaplic, Pimecrolimus Novartis) y tacrolimus (Protopic). Su uso se ha asociado con linfomas y alteraciones cutáneas malignizantes. Recientemente la FDA ha evaluado la información y ha recomendado que se extremen las condiciones de uso en mayores de 2 años y nunca a niños menores de 2 años. La dermatitis atópica se presenta aproximadamente en el 10-20% de los niños menores de 14 años. La dermatitis atópica, también conocida como eccema atópico, es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel. El tratamiento de la dermatitis atópica incluye el uso de los corticosteroides tópicos y los inhibidores de la calcineurina, que se encuentran actualmente dos: pimecrolimus (Elidel, Isaplic, Pimecrolimus Novartis) y tacrolimus (Protopic) en preparaciones tópicas al 1% en crema el primero y al 0,1% y 0,03% en pomada el segundo. Son inmunosupresores tópicos, inhibidores de la calcineurina, que usados por vía oral (Prograf) ya se han asociado a alteraciones linfoproliferativas. Ambos fármacos exhiben una acción inmunosupresora directa en enfermedades con base inmunológica. Ambos agentes inhiben la activación de células-T por el bloqueo de la transcripción de las citoquinas. Su uso no ha sido estudiado más allá de 6 semanas. Por esto, la indicación autorizada es para tratamiento corto, no más de 6 semanas, o intermitente en un periodo máximo de 12 mese. Por vía sistémica, estos inhibidores de calcineurina se han asociado con alteraciones linfoproliferativas, linfoma y linfadenopatía. Con el uso repetido, estos productos tópicos se absorben sistémicamente, con lo que se incrementa el riesgo para los pacientes de desarrollar malignizaciones. En los estudios con animales, se ha observado una incidencia alta del 50% para el desarrollo de linfomas. Estos estudios incluyen animales adultos que experimentaron efectos en nódulos linfáticos antes que la aparición de linfoma. Esta información se recoge en la ficha técnica norteamericana, en la sección de carcinogénesis, en el epígrafe de Precauciones. Adicionalmente, en ambos productos se incluyen datos de ensayos clínicos y la aparición de linfadenopatía. Los efectos adversos tópicos más frecuentes en pediatría son: quemazón, prurito, eritema e irritación local. Entre los efectos adversos sistémicos se citan pirexia, infección del tracto respiratorio alto e infecciones virales de la piel. Después de la autorización y comercialización de pimecrolimus se han notificado casos de infecciones con estafilococo dorado, osteomielitis, osteitis, formación de abcesos, bronquitis y estreptocos en garganta. También se ha asociado con 2 casos de crecimiento no-maligno en pacientes pediátricos. El uso de tacrolimus se ha asociado con 10 casos notificados de infecciones que incluyeron una muerte. Las infecciones notificadas incluían neumonía y sepsis. Hubo 5 notificaciones de malignizaciones, que en todos los casos fueron en adultos con enfermedades concomitantes. Recientemente, el pasado 29 de octubre de 2003, el subcomité pediátrico del Comité Consultivo sobre Antiinfecciosos de la FDA norteamericana ha revisado los datos y ha recomendado la realización de estudios post-autorización de tratamientos prolongados con estos dos fármacos tópicos (ver en la web de la Drug Information Association http://www.diahome.org/docs/Publications/Publications_index.cfm). Los estudios post-autorización de pimecrolimus (Elidel, Isaplic, Pimecrolimus Novartis) y tacrolimus (Protopic) tópicos son para evaluar la incidencia del desarroillo de malignizaciones en pacientes pediátricos. Ambos inhibidores de la calcineurina están indicados para el tratamiento tópico de la dermatitis atópica en niños mayores de 2 años. Con la administración tópica, han demostrado que presentan absorción sistémica. Esta absorción se ha relacionado con el desarrollo de linfomas y malignizaciones cutáneas. Los datos revisados constatan un gran número de tratamientos en pacientes de menos de 2 años de edad. Recomendaciones La información actual de la ficha técnica para estos inhibidores de calcineurina no contiene información sobre el riesgo de cáncer asociado a su uso. El citado subcomité recomienda el siguiente método para la gestión del riesgo e informar a los prescriptores y pacientes o cuidadores: -Una precaución recuadrada en el texto, en la que se insista en que su uso NO debe ser en niños menores de 2 años. -Programas de educación amplios con énfasis en que estas terapias deben usarse solo como segunda opción y en pacientes mayores de 2 años, dirigidos a los profesionales de la salud y a los prospectos para los pacientes. -Una presentación con formato para el tratamiento corto. No ha sido estudiado en tratamientos superiores de 6 semanas.