HISTORIA RESUMIDA DE LA ARMADA DEL ECUADOR Por otro lado, los revolucionarios también fueron aumentando sus efectivos, con nuevos elementos que incentivados por el éxito de sus primeras acciones, se habían incorporado a sus filas, entre estos los mayores Julio Mena, Federico Lastra, Abelardo Bustamante y Rubén Ponce, oficiales en servicio pasivo que actuaron en la Campaña de 1912. En estas circunstancias y las inciertas noticias de donde se encontraban las fuerzas revolucionarias del coronel Concha, sucede un hecho determinante para el futuro de las acciones bélicas, y es el desacuerdo entre el jefe de operaciones y el comandante de la brigada. El historiador naval contralmirante Carlos Monteverde dice al respecto: “El coronel Velasco era de la opinión que no se debía buscar al adversario oculto en la selva, la reciente experiencia del desastre sufrido por el mayor Icaza pesaba fuertemente en su razonamiento, pero el comandante de la Brigada tenía diferente opinión y presionaba a su superior para que iniciara las operaciones inmediatamente, criterio que concordaba con los deseos del Gobierno de terminar con la subversión lo más pronto posible, lo que era también apoyado por el mando Superior del Ejército”. El coronel Velasco Polanco contrario a su propio criterio, decidió iniciar las operaciones para terminar con los revolucionarios en el terreno que fuere, dispuso que el batallón “Constitución” reforzado por alícuotas de la Policía de Quito y al mando del coronel Alejandro Andrade Lalama, reconozca el sector de la orilla derecha del río Esmeraldas, mientras el batallón “Quito” y parte del batallón “Guayas” el margen izquierdo en ruta a Majua donde se estimaba estaba el coronel Concha con sus guerrillas. Fue en el estero Cúquive en donde fueron prácticamente masacrados soldados y policías gobiernistas. En efecto, el 10 de diciembre de 1913 el batallón “Constitución” y la fracción de la Policía se encontraban en el paso de la cordillera del Guayabo; destacó por seguridad en la vanguardia al Tcrn. Ricardo Montenegro al mando de un pelotón de soldados a caballo. Cuando la pequeña unidad de caballería se disponía a pasar el estero de Cúquive fue de improviso emboscada, sus miembros inmisericordemente aniquilados, inclusive su comandante Tcrn. Montenegro. Acto seguido fue atacado violentamente el grueso de la columna. La segunda y tercera compañías fueron prácticamente eliminadas. En el sangriento combate también fue dado de baja el Tcrn. Alejandro Andrade Lalama, hermano del capitán de fragata Rafael Andrade Lalama, comandante del “Cotopaxi”. El 16 de diciembre se firma el acta de capitulación de las Fuerzas gubernamentales ante el ejército insurgente conocida como Convenio de Chinca, legalizado por el coronel Velasco Polanco jefe de Operaciones de las Fuerzas del Gobierno y el coronel Carlos Concha jefe de las Fuerzas revolucionarias. Mediante este convenio se acordó la entrega de todas las armas y municiones de las fuerzas del Gobierno al Jefe revolucionario a cambio de la libertad absoluta de jefes, oficiales y tropa, incluyendo a los prisioneros retenidos en Majua. Entre los factores para esta derrota se anotan: el desconocimiento del terreno y la desestimación de la capacidad combativa del adversario; el desconocimiento e inexperiencia en combates de selva o de guerra irregular; el inadecuado empleo de unidades de combate en un medio desfavorable, como la utilización de la caballería en áreas densamente selváticas; la falta de 176