LECCIÓN Nº 14 Apreciado estudiante: Con esta Exposición entramos a una nueva etapa. Necesitamos que reflexiones detenidamente en la siguiente pregunta: Por qué, si la humanidad ha vivido tanto 300.000.000 años- el progreso material y espiritual ha sido mínimo? Con tres cientos millones de años de progreso, nuestro planeta fuera uno de los más avanzados en el sistema solar de Ors. ¿Dónde está la falla? ¿Dónde podemos encontrar la causa de este retraso? Una de las respuestas que inmediatamente surgen en nuestra mente es la de las innumerables guerras en que las distintas humanidades se han visto envueltas. Otra de las razones de peso es la destrucción total de las grandes razas, previo paso al surgimiento de la siguiente. Es claro que tanto las autodestrucciones constantes entre los seres humanos, como las destrucciones de las grandes razas, tienen una razón poderosa, de acuerdo a la Ley del Karma. Esa razón debemos buscarla en el fondo de la psiquis de cada persona. En esta ocasión hablaremos referente a la Muerte Mística. El YO es la raíz del dolor. Es la raíz de la ignorancia y del error. Cuando el YO se disuelve, sólo queda en nosotros nuestro Real SER. Cuando el YO desaparece, lo único que queda en nosotros es eso que se llama AMOR. Cuando el Yo se disuelve, adviene en nosotros la auténtica felicidad. En forma enfática nos referiremos al centro emocional, el Plexo Solar, sabiamente colocado por la Naturaleza, en la región del ombligo. Se nos ha dicho que el “Ojo Magnético” del vientre es estimulado frecuentemente por el hidrógeno sexual Si 12 que sube desde los órganos creadores. Es pues un axioma inquebrantable de la Filosofía Hermética el que en la región del vientre existe un poderoso acumulador energético sexual. Mediante el agente sexual cualquier representación puede tomar forma en el campo magnético del PLEXO SOLAR. En modo alguno es exageración cuando enfatizamos la idea básica de que en el vientre se gestan los defectos que surgen más tarde a la existencia. Tales entidades psicológicas, ideoplásticas, de ninguna manera vendrían a la existencia sin el agente sexual. Cada Yo es pues una viva representación psicológica que surge del vientre: el Ego personal es una suma de YOES. Estos Yoes son verdaderas entidades tetradimensionales que toman cualquier forma, ya sea la de nuestro cuerpo físico, ya sea la de cualquier animal. Cada uno de ellos tiene mente propia, y por lo tanto acción propia y determinación propia. Por esta razón decimos que nosotros no tenemos una mente, sino muchas mentes, la mente de cada uno de nuestros defectos. Cada sensación, cada emoción, cada pensamiento, cada sentimiento, pasión, odio, violencia, celos, ira, codicia, lujuria, envidia, orgullo, pereza, gula, etc. están constituidos por pequeños Yoes, que de ninguna manera se hallan ligados entre sí, ni coordinados de modo alguno. No existe, no hay un yo íntegro, UNI TOTAL, sino una multitud de mezquinos, gritones y pendencieros yoes que riñen entre sí, que pelean por la supremacía, por el dominio de la máquina humana. Los yoes que tenemos metidos dentro de los cuerpos lunares, son verdaderas entidades creadas por nosotros mismos. Tal Yo sigue automáticamente a tal otro Yo y algunos aparecen acompañados de otros, pero no existe un orden de éstos, no hay verdadera unidad, sólo existen asociaciones accidentales, pequeños grupos que se asocian en forma inconsciente y subjetiva. Cada uno de estos Yoes sólo representan una parte de la totalidad de nuestras funciones, pero cree equivocadamente ser siempre un todo. Cuando decimos YO, tenemos la impresión de que hablamos de nosotros en nuestra totalidad, pero en realidad sólo es uno de los pequeños YOES de la LEGION el que habla. El YO que está jurando amor eterno a una mujer en este instante, tiene la impresión de ser el único, el hombre completo, y dice: “Yo te adoro”, “Yo te amo”, “Yo doy la vida por tí”, etc., pero cuando ese YO ENAMORADO es desplazado de su puesto de mando y otro Yo ocupa su lugar, entonces vemos el sujeto retirándose de esa mujer y enamorándose de otra. Un YO puede abrazar una causa, y jura fidelidad hasta la muerte, pero en cualquier momento es desplazado por otro YO que nada tiene que ver con ese juramento y se ve al personaje traicionando esa causa. Todos estos pequeños YOES independientes se encuentran en los cinco cilindros de la máquina humana: Intelecto, Emoción, Movimiento, Instinto y Sexo. Es lamentable que por falta de sabiduría, innumerables entidades se roban parte de nuestra conciencia, pues los mismos, para venir a la existencia, y de acuerdo a la Ley de las Polaridades, necesitan un CENTRO POSITIVO para su cuerpo negativo. Ese centro positivo es una partícula de nuestra ESENCIA, de nuestra CONCIENCIA. En otras palabras, nuestra Conciencia está totalmente dividida y embotellada dentro del YO PLURALIZADO. ESA ES LA RAZON DE LA INCONSCIENCIA DE TODOS LOS SERES HUMANOS. Es también muy cierto y fuera de toda duda, que a veces se meten dentro de los cuerpos lunares algunos Yoes ajenos creados por otras personas; esos Yoes ajenos se roban parte de nuestra conciencia, se acomodan en cualquiera de los cinco cilindros de la máquina humana y se convierten por tal motivo en parte de nuestro EGO. Realmente el ANIMAL INTELECTUAL no tiene verdadera INDIVIDUALIDAD, no tiene centro de gravedad permanente, ni verdadero sentido de responsabilidad moral. Lo único de valor, lo único importante que tenemos dentro de nuestros cuerpos lunares es el BUDDHATA, LA ESENCIA, EL MATERIAL PSIQUICO que desgraciadamente es embotellado por las distintas entidades que en su conjunto constituyen EL EGO o YO PLURALIZADO. Muchos esoteristas dividen al YO en dos: aseguran enfáticamente que tenemos un YO SUPERIOR, DIVINO, INMORTAL y creen que dicho YO SUPERIOR o EGO DIVINO debe controlar y dominar totalmente al YO INFERIOR. Este concepto es totalmente falso porque SUPERIOR e INFERIOR son dos secciones de una misma cosa. Al YO le encanta dividirse entre SUPERIOR e INFERIOR. Al YO le gusta pensar que una parte de sí m ismo es DIVINA, ETERNA, INMORTAL. Al YO le gusta que le alaben, que le divinizen, etc. Realmente no existe tal YO SUPERIOR, tal EGO DIVINO. Lo único que tenemos dentro de los cuerpos LUNARES es LA ESENCIA y LA LEGION DEL YO, y ambas son opuestas. Son antitéticas. Eso es todo. ATMAN, EL SER, nada tiene que ver con ningún tipo de YO. El SER es el SER y está más allá de todo YOISMO. Nuestro REAL SER es IMPERSONAL, COSMICO, INEFABLE, terriblemente DIVINO. El INTIMO, EL REAL SER, no es el YO, trasciende todo YO, está más allá de todo YO. El Intimo es el SER. El SER es LO REALL, LO ATEMPORAL, LO ODIVINAL. El YO tuvo un principio y tendrá inevitablemente un fin; todo lo que tiene un principio, tiene un fin. El Ser, el Intimo, no tuvo principio, tampoco tendrá fin. El Es lo que Es, lo que siempre ha sido y lo que siempre será. El YO continúa después de la muerte, pero a la larga se desintegra. El YO es el origen del error y de su consecuencia, el dolor; mientras exista el YO, existirá el dolor, vivir es dolor. Dolor en la niñez, la adolescencia, la juventud, la madurez, la vejez. Todo en este mundo es dolor. Y el causante es el YO PSICOLOGICO. Cuando disolvemos el YO EN TODOS LOS NIVELES DE LA MENTE, desaparece el dolor. Desgraciadamente el animal intelectual no puede ENCARNAR a su REAL SER, porque tiene únicamente CUERPOS LUNARES, PROTOPLASMATICOS y estos últimos no resistirán el tremendo voltaje eléctrico de nuestro verdadero SER; quedarían carbonizados instantáneamente. Las entidades tenebrosas que habitan dentro de los cuerpos lunares no están presas dentro de dichos cuerpos animales, normalmente entran y salen y viajan a distintos lugares o deambulan subconscientes por las distintas regiones moleculares de la Naturaleza. Después de la muerte, el YO PLURALIZADO continúa entre los CUERPOS LUNARES proyectándose desde ellos a cualquier lugar de la naturaleza. Los Médiums del Espiritismo o Espiritualismo prestan sus materias o vehículos físicos a esos Yoes de los Muertos. Tales Yoes, aunque den prueba de su identidad, aunque demuestren ser el verdadero muerto invocado, no son el REAL SER del fallecido, ni su Alma, sino simplemente ese manojo de recuerdos, emociones, pensamientos, sentimientos, pasiones, representados en las múltiples entidades que forman el YO PLURALIZADO del fallecido. Esa es la razón por la cual, varios Médiums en distintos lugares, sirven de materia a un mismo fallecido simultáneamente. No son pues los espíritus divinos los que acuden a una sesión espiritista, sino entidades tenebrosas que son los Yoes. Algunas de esas entidades o pequeños Yoes suelen separarse del grupo después de la muerte, para ingresar a los sub-mundos de la naturaleza o REINO MINERAL SUMERGIDO. Otras de esas entidades gozan reincorporándose en organismos del reino animal inferior: burros, perros, etc. o en el reino vegetal. Cuentan antiguas tradiciones que ENEAS EL TROYANO permaneció algún tiempo refugiado junto con su gente en los bosques de Ida, hasta que los Griegos hubieron abandonado la vieja Troya. Y cuando los Helenos abandonaron las ruinas hereicas de la soberbia Ilión, Eneas construye su flota y llorando abandona las playas de la patria y la llanura solitaria donde estuvo emplazada la antigua ciudadela convertida ahora en un montón de ennegrecidas ruinas. Y el viento hincha las dulces velas bajo la luz del plenilunio, el remo lucha con el suave mármol y llegó el héroe con sus naves y su gente a las costas de Tracia, rudo país, donde confiaba encontrar tierra acogedora, ya que los tracios habían sido aliados del anciano Príamo. Dice la Historia de los siglos que en la ruda tierra de los Tracios, Eneas fundó una ciudad a la que lllamó ENEADA. Y cuando hacían los Troyanos el sacrificio a JUPITER, EL CRISTO COSMICO, en los precisos momentos en que se preparaban para encender el fuego e inmolar el blanco toro, sucede un prodigio extraordinario: las ramas que cortaron para el fuego dejaron caer, en vez de savia, una sangre negra y corrompida que manchaba la tierra. Eneas quedó helado de terror y suplicó a los Dioses Inefables que hiciesen que aquel presagio se volviese favorable a sus designios. Cuenta el héroe que rompió algunas otras ramas del mismo árbol, pero todas gotearon Sangre, hasta que llegó a sus oídos una voz profunda que parecía salir de las raíces de la planta, diciéndole: “ENEAS, por qué me desgarras? Respeta a un desdichado y no cometas la crueldad de torturarme. Soy yo, Polidoro, a quien mis enemigos acribillaron a heridas en este mismo lugar, y los hierros que se clavaron en mi cuerpo han fructificado y creado una planta que, en lugar de púas, da aceradas jabalinas”. Relata la leyenda que sobre el montón de tierra en que estaban enclavadas las raíces del árbol, Eneas consagró un altar a los MANES del muerto y se derramaron libaciones de vino y leche. Así se celebraron los funerales de Polidoro, el fallecido guerrero muerto en la dura batalla. Desde los antiguos tiempos de la Arcadia, los viejos Hierofantes encanecidos en sabiduría, jamás ignoraron la multiplicidad del Yo. Es acaso pues, cosa rara que algunas de esas tantas entidades que constituyen el EGO, se aferran con tanto afán a la vida incorporándose en un árbol? En las inmortales obras de Homero y encubiertas cono el velo del símbolo filosófico, encontramos éstas y otras realidades de la vida humana, que siempre se han enseñado en todas las Escuelas de Misterio. En realidad, casi toda nuestra vida está controlada por las horribles entidades de Seth, como llamaron los Egipcios al YO Psicológico. Al decir casi toda nuestra vida, hacemos excepción a nuestra primera infancia. En el niño recién nacido encontramos la Esencia en plena manifestación de pureza y belleza, ya que los Yoes se encuentran dentro de su Psiquis, sin manifestarse, pues el pequeño vehículo no reúne las condiciones necesarias para hacerse sentir. El Yo es paciente y espera el debido crecimiento para controlar gradualmente la nueva máquina. Mientras tanto, el niño es inocente, limpio y puro, y sólo nos brinda amor. La primera manifestación del Yo en el niño es la IRA. Al pedir su tetero, grita, llora, etc. Cuando no se le permite asir algún objeto frágil, llora, se tira al suelo, etc. y así trata de hacerse obedecer. Más tarde, recibe sus juguetes con alegría inocente, se divierte y en cualquier momento pierde el interés por los mismos. Pero si otro niño quiere disfrutar de sus juguetes se presenta el Yo de la mezquindad asociado al Yo de la IRA, y vemos al niño llorando por su juguete o arrebatándolo. Si hay resistencia de parte del otro niño (quien está controlado por el YO CODICIOSO y EL YO LADRON), entonces se presenta el YO PELEADOR: el niño golpea, da con las uñas, muerde, etc. Cuando aprende a hablar, se presenta el YO de la mentira, apoyando a los otros YOES. Se roba cualquier objeto que le atrae y se defiende diciendo que su tío o su amiguito se lo ha regalado. Es claro que los padres simplemente dejan que todos estos defectos se manifiesten libremente, debido a erradas consideraciones hacia el niño, su Ego se ve robusteciendo y la personalidad que se está formando durante estos primeros siete años, se moldea de acuerdo a la forma que le va dictando el EGO. Por el contrario, cuando los padres, adaptando SUS RAZONAMIENTOS o ARGUMENTACIONES a la mentalidad del niño, con sabiduría, con psicología, lo hacen recapacitar a fin de que el niño no dé rienda suelta a la manifestación de su EGO, sino que le inculcan las virtudes, entonces esa primera manifestación del amor puro en el infante se mantiene y se desarrolla, aportando su valiosa contingente a la formación de una personalidad positiva. El niño responde a este tipo de formación de una personalidad positiva. El niño responde a este tipo de formación debido al amor innato que siente por sus padres, arma valiosísima que éstos no deben desaprovechar para bien de sí mismos y de la ESENCIA que se les ha encargado para formar en esta vida, Esencia alojada en el infante. Los padres son responsables ante las leyes Superiores, por la forma de criar a cada uno de sus hijos y después les toca o disfrutar el triunfo, o pagar el dolor. El 3% de conciencia que tenemos, nos sirve para buscar el mejoramiento físico, moral y espiritual, y hay que hacer todo lo posible para robustecer las virtudes del niño con la debida educación, cultura y enseñanza esotérica progresiva. Los YOES son muy astutos; para alimentarse, incitan a los gérmenes o semillas negativas a manifestarse, por medio del pensamiento, la palabra y las acciones. El EGO se manifiesta a través de: 1º) La Herencia, a través de los Genes. 2ª) La Educación. 3º) Las Circunstancias. La Educación Fundamental es la Educación que debemos darles a los niños para llevarlos por una correcta formación. Pero no la educación a base del miedo, la disciplina del miedo. Miedo al grito del padre o de la madre, miedo al “viejito” que para todos los días por la calle, o miedo al lobo o al duende. El miedo es una de las barreras de la inteligencia. La persona llena de temor no se atreve a disentir de la opinión ajena. No puede tener libre iniciativa. La persona llena de temor acepta como artículo de fe ciega todo lo que digan los distintos autores de cualquier tipo de enseñanza. Es indispensable, es de palpitante actualidad, que todos los padres de familia y por extensión sus hijos, entiendan realmente el hondo significado de la profunda COMPRENSION. COMPRENDER es algo inmediato, directo, algo que vivenciamos intensamente. Algo que experimentamos muy profundamente y que inevitablemente viene a convertirse en el verdadero RESORTE íntimo de la acción consciente. Cuando el niño comprende que no debe hacer tal cosa, porque trae tales y tales consecuencias, se evita de hacerlas. Todo se basa en la Ley de la Causa y Efecto, y al niño se le va educando, haciéndole COMPRENDER el funcionamiento de esa Ley. Es urgente que el pequeño y el grande comprendan sus errores. Comprender la IRA en todos los niveles de la mente es fundamental para que en nosotros nazca la serenidad y la DULZURA. Comprender los infinitos matices de la codicia en las 49 regiones subconscientes, es indispensable para que en nosotros nazca la filantropía y altruismo bien entendidos. Comprender la envidia en todos los terrenos de la mente es suficiente para que nazca en nosotros el sentido de cooperación y la dicha por el bienestar ajeno. Comprender el orgullo en todos sus matices y grados es la base para que nazca en nosotros en forma natural y sencilla, la flor exótica de la humildad. Comprender lo que es ese elemento de inercia llamado pereza, no sólo en sus formas grotescas sino también en sus formas más sutiles, es indispensable para que nazca en nosotros el sentido de actividad. Comprender las diversas formas de la gula y de la glotonería, equivale a destruir los vicios del Centro Instintivo. Cada defecto tiene muchos matices, fondos, trasfondos y profundidades. Comprender un defecto en el nivel intelectual no significa haberle comprendido en los distintos terrenos subconscientes, inconscientes e infraconscientes de la mente. Cualquier defecto puede desaparecer del nivel intelectual y continuar en los otros terrenos de la mente. La IRA se disfraza con la toga del Juez. Muchos codician no ser codiciosos. Hay quienes se sienten orgullosos por la posición, el dinero, la fama y el prestigio y hay quienes se sienten orgullosos de su condición humilde. Diógenes se sentía orgulloso del tonel en que dormía y cuando llegó a casa de Sócrates saludó diciendo: “Pisando tu orgullo Sócrates, pisando tu orgullo”. “Si Diógenes, con tu orgullo pisas mi orgullo”, fue la respuesta de Sócrates. Cuenta la tradición que Aristipo, el filósofo Griego, queriendo demostrar a todo el mundo su sabiduría y su humildad se vistió con una túnica viejísima y lleno de agujeros, empuñó en su mano diestra el palo en la Filosofía y se fue por las calles de Atenas. Cuando Sócrates le vió venir, exclamó: “Se ve tu vanidad a través de los agujeros de tu vestidura, Oh Aristipo!” Dentro de la cadencia deliciosa de un verso también se esconde el delito. El delito también se viste de Santo, de Mártir, de Casto, de Apóstol, etc. La envidia con todos sus infinitos matices se esconde tras de sublimes propósitos. Existe envidia en aquel que habiendo sido informado sobre la existencia de sublimes Santos, Mahatmas o Gurús, desea también llegar a ser Santo. Existe envidia en el filántropo que se esfuerza por superar a otros filántropos. Existe envidia en todo individuo que codicia virtudes porque tuvo informes sobre la existencia de sagrados individuos llenos de virtudes. Los santos con sus virtudes han causado muchos daños, salvo excepciones. Tal es el caso de un hombre que a sí mismo se considera muy santo. En ciertas ocasiones un poeta hambriento y miserable tocó a sus puertas para poner en sus manos un hermoso verso, especialmente dedicado al Santo. El poeta sólo aguardaba una moneda para comprar alimentos para su cuerpo exhausto y envejecido. Todo imaginaba el poeta menos un insulto. Grande fue su sorpresa cuando el Santo, con mirada piadosa y ceño fruncido, cerró la puerta diciendo al infeliz poeta: “Fuera de aquí, amigo, largo, largo... a mí no me gustan estas cosas, aborrezco la lisonja... no me gustan las vanidades del mundo, esta vida es ilusión... yo sigo la senda de la humildad y de la modestia.” No fue capaz de comprender el Santo, que el infeliz poeta sólo deseaba una moneda para mitigar su hambre. La falsa modestia, las poses pietistas, las fingidas mansedumbres, han llenado el mundo de dolor. Cualquier individuo puede amordazar sus defectos por conveniencias sociales o por su fe religiosa y de la noche a la mañana se ve transformado, asombrando a sus conocidos; pero lo que en realidad ha sucedido es que esos agregados psicológicos han pasado a otros niveles de la mente. Allí pueden permanecer mucho tiempo en suspenso, sin prisa, pues al YO no le perjudica el tiempo. Pueden pasar muchos años en cualquier momento la fiera sale de la jaula y causa más destrozos que antes. El borracho que ha estado años en abstención total por ejemplo, de pronto siente toda la furia y la sed del YO ALCOHOL y se desencadena. NECESITAMOSREALIZARUNTRABAJORADICAL,UNA DESTRUCCION DEFINITIVA DE CADA UNO DE NUESTROS DEFECTOS. SIN DOGMATISMOS, SIN REMEDIOS SUBJETIVOS. Sólo disolviéndose las varias entidades que en su conjunto constituyen EL EGO podemos establecer en nosotros un centro permanente de conciencia INTEGRA. Al disolverse cada uno de los defectos, la Conciencia, el Material Psíquico se va liberando gradualmente y nos hacemos conscientes cien por ciento en todos los planos de manifestación Cósmica. PRACTICA DE AUTO-OBSERVACION ESCRITA Haz una lista de todos tus defectos de los cuales tienes conciencia. Al principio encontrarás que no son muchos. Auto-obsérvate en tu vida diaria, en tus relaciones con los demás y frente a los diversos problemas, encontrarás más defectos que irán aumentando tu lista. No te condenes ni te justifiques. Simplemente COMPRENDE tus defectos. Después te enseñaremos el sistema para desintegrarlos, utilizando TUS PROPIAS ENERGIAS. Atentamente, EI Instructor