02 INTERÉS GENERAL LUNES 4 JUNIO DE 2007 VAMOS A LOS CENTROS COMERCIALES PARA MATAR MUCHAS VECES ADQUIRIMOS COSAS QUE NO NOS SIRVEN, Y DE FORMA IMPULSIVA Más de la mitad de los españoles se vuelven locos por las compras Entre el 50% y el 70% de los ciudadanos no se controlan en el gasto en las compras y las hacen por ‘impulso’. Según algunos estudios, hasta el 8% de los españoles podría sufrir la patología de adicción a las compras. Es un hábito socialmente aceptado pero esconde un peligro, cuando nos pasamos y gastamos más de lo que tenemos y nos endeudamos por comportarnos como si todo el año fuesen rebajas YOLANDA MARTÍN / Pintora, 43 años. Zaragoza. ¿Cuántas veces hemos comprado algo que no nos servía o por un simple impulso? Cientos y miles. Pero no estamos solos en esta actitud. Le ocurre lo mismo a entre el 50 y el 70 por ciento de los españoles. Comprar un capricho de vez en cuando no supone ningún problema, lo que nos hace convertirnos en ‘compradores bulímicos’ es la falta de satisfacción o el remordimiento que sentimos una vez realizada esa adquisición. Si queremos empezar a controlar nuestros hábitos de consumo el profesor de Psicología del Consumo Javier Garcés propone una especie de ‘prueba del algodón’ para huir de las tiendas. “Cuando sintamos esa necesidad de adquirir algo que acabamos de ver, hay que salir cinco minutos del establecimiento, lo más probable es que ese arrebato desaparezca”, afirma. SE CAE UN MITO La falta de autocontrol en las compras es igual en ellos y en ellas Aunque a las mujeres les gusta más ‘mirar escaparates’ y a la hora de comprar entra más en juego la necesidad de afrontar una situación de tristeza o depresión, en cuanto a la compra compulsiva no existe ninguna diferencia de género. ROBERTO VILLALON No solo compran las mujeres. “Tengo aparatos de tecnología que se quedan en un cajón” SIEMPRE TENEMOS UNA RAZÓN Víctor Luna ha descubierto el medio más peligroso para las compras compulsivas: Internet. “Compro bastante en la red, sobre todo aparatos de tecnología que usas al principio pero después se quedan en un cajón olvidados”. 1. LA COMPRA COMPENSATORIA Compro bastante por Internet y otros objetos que adquiero y luego no sirven para nada están algunps peluches” Se da en esos momentos en los que estamos de ‘bajón’ o deprimidos. Salimos a comprar lo que sea pensando que eso nos aliviará. En el momento de la adquisición notamos un ‘subidón’ pero dura poco; la tristeza vuelve. 2. LA COMPRA SIMBÓLICA Todo lo que adquirimos está relacionado con la marca del producto, es decir, si una marca de ropa que nos gusta saca una nueva prenda, la compramos aunque no la necesitemos. QUÉ! jorgelina.torres@quediario.com “Regalé una bicicleta estática que pasa de manos y nadie usa” Yolanda Martín y su familia saben a la perfección lo que es comprar algo y no usarlo. “Le regalé una bicicleta estática a mi hermana y, ésta, a una tercera”. Apostilla que usarla “es un aburrimiento”. Alguna vez también he comprado ropa y, al llegar a casa, me he dado cuenta de que no me gustaba”. 3. LA COMPRA ‘BULÍMICA’ QUÉ! JORGELINA TORRES DATOS SOBRE NUESTROS PEORES HÁBITOS VÍCTOR DE LUNA / Informático, 27 años. Zaragoza. CÓMO SOMOS CUANDO COMPRAMOS El 90% que entra solo Gastamos un 20% a mirar compra algo más de lo previsto Muchas veces, para matar el tiempo o simplemente por diversión, entramos en un gran almacén o nos dedicamos a mirar escaparates. Gran error. Esta actitud nos vacía el bolsillo porque se ha demostrado que el 90 por ciento de las personas que realiza este tipo de actividad acaba comprando algo. Lo más grave es que no se trata de cosas que necesitamos, sino de simples, y a veces caros, caprichos. El horario laboral y la vida moderna hace que en ocasiones cuando vamos al ‘súper’ no llevemos una lista de la compra. Esto y el hecho de que no tengamos autocontrol hace que siempre acabemos gastando un 20% más de lo que teníamos previsto. Si esta cifra se suma cada vez que vamos al ‘hiper’, al cabo del año estamos hablando de cientos de euros que podríamos invertir en actividades menos consumistas. Los escoceses, los más obsesivos Son los que tienen más adicción al consumo y menos autocontrol económico. Europeas y europeos se comportan de la misma forma. Garcés los denomina “catedrales del consumo” y advierte de que se han convertido en la primera actividad de ocio familiar. De esta forma los niños, desde pequeños, se acostumbran a relacionar las compras con la diversión. Tanto psi- cólogos como sociólogos coinciden en que la compra compulsiva genera mucha frustración. La forma de conseguir autocontrol es pasar mucho tiempo voluntariamente rodeados de tentaciones de compra y no adquirir nada. MARGA BARRERA. Psicóloga de AJUREC “Comprar por frustración genera otra frustración, la que se desprende del gasto realizado” Los italianos, los más controlados Estos jóvenes son relativamente menos consumistas y tienen más autocontrol a la hora de comprar. Los españoles se encontrarían en un término medio entre los escoceses y los italianos. “Las familias ahora se divierten en los centros comerciales” “El salir de compras ahora está en los primeros puestos del ranking de actividades de ocio” Los escoceses no saben decir ‘no’ Quienes de verdad están expuestos a acabar siendo adictos a las compras (como patología) son los jóvenes, y esto es así en toda Europa. Un estudio ha revelado que para este segmento de la población europea casi lo más divertido es comprar algún producto y aceptan, sin plantearse las consecuencias, todo lo ‘malo’ de la sociedad del consumo. De hecho, la obsesión en los jóvenes del continente es de casi el 50%. Pero no todos tienen los mismos hábitos. Se da sobre todo en periodo de rebajas. El ‘comprador bulímico’ se lanza a los productos con más descuento en una carrera por poseerlos. Compra a destajo y la mayoría de las cosas que se lleva no le sirven para nada. JOSÉ LUIS MONTERO Dos jóvenes de compras. V. MARTÍNEZ-OTERO Profesor Psicología UCM “Algunos tienen tanta necesidad de comprar que aprovechan hasta la hora de la comida del trabajo” JAVIER GARCÉS Experto en consumo