Capítulo 6: México en el siglo XIX 6.0 Introducción Este capítulo abarca el período que va de la Independencia a la Revolución Mexicana (1821-1911). La independencia conseguida en 1821 tiene unos actores, los criollos, que se rebelan ante el temor reformista del triunfante liberalismo español de 1820. En la lucha independentista destacó el caudillo Agustín de Iturbide que una vez unido su ejército al de otro caudillo, Guerrero, proclama el llamado Plan de Iguala, en el que se señalan tres garantías fundamentales: la independencia de España, la unión de los grupos sociales mexicanos, y la exclusividad de la religión católica. Iturbide consideró la monarquía como la fórmula de gobierno deseada, pero, al no enviar España un heredero para ocupar el planeado trono mexicano, Iturbide fue nombrado emperador de México con el nombre de Agustín I. México tendría en el siglo XIX dos experiencias imperiales: el imperio de Agustín I y el de Maximiliano de Austria, el primero fue breve, el segundo controvertido y dramático; los dos emperadores acabarían siendo fusilados. Sin embargo, no todos en México eran partidarios de una monaquía. Mientras Iturbide ascendía al trono imperial en 1822, grupos de mexicanos reunidos en logias masónicas eran partidarios de una fórmula republicana. El ambiente no era el más propicio para el ambicioso y flamante emperador y pronto se enfrentó con un sector del Congreso. A estos problemas se añadió la crisis económica en la que estaba el país y las presiones internacionales a partir de 1823, coincidiendo con el fin del Trienio Liberal en España (1820-23). Además coincidió con la formación de la Santa Alianza de carácter absolutista y que apoyaba al monarca español Fernando VII y sus pretensiones de recuperar México. La historia mexicana del siglo XIX comienza con la independencia en 1821 y termina con el estallido de la Revolución Mexicana y el triunfo de Madero en 1911. De 1821 a 1911 la historia de México está protagonizada por caudillos, unos de origen criollo como Iturbide o Santa Anna y otros de origen indio o mestizo como Juárez y Porfirio Diaz. Enrique Krauze ha escrito una obra basada en este aspecto del caudillismo y que lleva por título Siglo de caudillos, donde establece una diferencia entre los caudillos de origen criollo (Iturbide, Santa Anna) y los de origen indio o mestizo (Juárez, Porfirio Díaz). Busca entroncar a los últimos con la tradición caciquil de los indígenas prehispanos. Al margen de estas consideraciones, y como ya hemos visto en otros capítulos, el caudillismo es típico del siglo XIX latinoamericano y tiene profundas raíces en la mentalidad hispana y en la situación social de la América colonial y postcolonial. 6.1. Etapas históricas En el siglo XIX podemos distinguir tres etapas históricas definidas. La primera va desde 1821 hasta 1855. La segunda de 1855 a 1876 y la tercera de 1876 hasta 1911. (Aquí hay más). 6.2. 1821-1855 La primera etapa, de 1821 a 1855, se carateriza por la independencia, la presencia de caudillos criollos militares (Iturbide, Santa Anna) e intelectuales como Mora y Alamán. Durante esta etapa se publicó la constitución de 1824. El período estuvo marcado por inestabilidad política, crisis económica y conflictos internacionales: intentos de reconquista protagonizados por España, conflictos con Francia (la guerra de los pasteles) y la separación de Texas y la guerra con los EEUU. Durante esta etapa, las instituciones coloniales como la iglesia católica mantuvieron su poder temporal y espiritual en México. Esta etapa, que coincide cronológicamente con el período general de descolonización en América Latina, se caracteriza también por los cambios en el mapa mexicano. Tras la independencia, Centroaméria se uniría a México para separarse más tarde; solamente Chiapas permaneció unido a México. Además, tras la guerra con los EEUU, México perdió una parte considerable de su territorio. 6.2.1. Santa Anna: un caudillo criollo En 1823, otro actor importantísimo de la historia del siglo XIX mexicano, se pronunciaba a favor de la república con el Plan de Veracruz. Ese personaje era Antonio López de Santa Anna, y la oposición a Iturbide apoya el pronunciamiento. Se proclama la república. Agustín de Iturbide se exilia, un año más tarde, en 1824, volvería a México donde sería fusilado. Según Lucas Alamán "La historia de México desde 1822 pudiera llamarse con propiedad la historia de las revoluciones de Santa Anna". Podríamos precisarlo más: Santa Anna es el protagonista principal de la historia de México hasta 1855. En su obra Siglo de caudillos, Krauze nos presenta a un Santa Anna criollo, hijo de criollos, y con una mentalidad y comportamiento criollos. Le gusta, como buen jugador, aposar y es audaz en sus apuestas políticas. Una vez apoya a unos y otras veces a otros, según le convenga. Primero apoyó a Iturbide y más tarde le ataca. En el enfrentamiento entre Vicente Guerrero y Manuel Gómez Peraza, apoya primero a uno y después a otro. Santa Anna se mueve por impulsos, toma el poder y lo deja. Elegido presidente en 1833 deja el poder en manos del vicepresidente Gómez Farias. Fue presidente en varias ocasiones: 1833-35/ 1839/ 1841-42/ 1843-44/ 1847/ 1853-55. Santa Anna era un excelente y arriesgado militar, las intervenciones militares le dan gloria unas veces; así en 1829 al hacer fracasar la segunda intentona de los españoles de reconquistar México. Es nombrado general y entra triunfante en Veracruz. Otras veces es derrotado, como en la guerra contra los EEUU. San Anna controlaría hasta 1855, año de su muerte, directa o indirectamente el poder político. 6.2.2. La pervivencia de las estructuras sociales coloniales durante la primera mitad del siglo XIX Santa Anna era un militar liberal, no era un político reformista. Durante los años de su hegemonía unos intelectuales programarían reformas importantes en la vida mexicana. Éstos eran Mora y Alamán. La independencia había supuesto la separación política de España y el fin del sistema colonial en México, pero persistían las estructuras sociales coloniales. Las élites criollas y la iglesia católica seguían detentando el poder en México. El gran historiador Pierre Vilar dijo que las mentalidades son estructuras de larga duración, o como Krauze dice: Mexico seguía mentalmente siendo colonial. En México, la independencia y el proceso de descolonización fueron protagonizados por los criollos. Eliminada la administración colonial persistía un elemento de dominio económico e ideológico y social más: la iglesia católica. En 1833 Valentín Gómez Farias intenta una serie de reformas liberales. Santa Anna se había retirado dejando a Farias, que era vicepresidente, el encargo de la presidencia. Las reformas de Farias iban en contra de los intereses económicos y el poder social de la iglesia. Ésta reaccionó contra esas leyes y hasta hubo intentos de pronunciamiento militar a favor de la iglesia. Entonces Santa Anna intervino y paralizó las reformas. Aunque Santa Anna consideraba la intervención de la Iglesia en los asuntos políticos como impropia, no la combatió. 6.2.3. Ideologías políticas Las tendencias políticas (no podemos hablar de partidos) eran como en el resto de América Latina: la conservadora y la liberal. Además había los partidarios del federalismo, y los partidarios del centralismo. En 1824 la constitución es de carácter federal está muy influenciada por las constituciones norteamericana y la de Cádiz de 1812. En la década de 1830 los liberales mexicanos se dividen en moderados (partidarios de una república centralista y de un gobierno fuerte) y los auténticos o puros (partidarios del federalismo y la lucha por las libertades). Los moderados consiguieron en 1836, en un congreso con mayoría de moderados, suspender la constitución de 1824, sustituyéndola por las llamadas siete leyes. 6.2.4. Los conflictos internacionales Durante estos años estallaron conflictos bélicos de importancia como la guerra de Texas (1836), y años más tarde Texas quedó anexionada a EEUU como un estado de la unión norteamericana. Como resultado de este conflicto estalló la guerra entre México y EEUU. Los norteamericanos llegaron a ocupar México capital en 1847, un año más tarde se firmó el tratado de Guadalupe-Hidalgo, mediante el que México cedía a EEUU los territorios de Texas, California y Nuevo México. Otro resultado de la guerra fue el desprestigio de Santa Anna y la consolidación de una oposición al mismo que se concretó en el llamado Plan de Ayutla (1 de marzo de 1854), iniciándose una época en la historia de México conocida como la Reforma, en la que se llevaría a cabo una auténtica revolución desde arriba. La figura central de esta revolución sería Juárez. 6.3. 1855-1876 Durante la segunda etapa, de 1855 a 1876, se lleva a cabo la revolución liberal, cuya figura central es el caudillo Juárez. Éste ya no es un criollo, y busca la supresión definitiva de las estructuras coloniales. Se inicia con la insurrección del general Juán Álvarez contra Santa Anna (Plan de Ayutla, 1854) y triunfa en 1855 al ser elegido Juan Álvarez presidente. Se publica la Ley Juárez. En 1854 comienza en México el período liberal. Se van a llevar a cabo importantes reformas políticas (la principal una nueva Constitución en 1857) . Juárez llevará a cabo una política económica anticlerical que será condenada por la Iglesia que se aliará con los conservadores. Los liberales reaccionarán violentamente estallando en diciembre de 1857 la guerra civil llamada la Guerra de la Reforma entre conservadores y liberales. En la Navidad de 1860 tuvo lugar una victoria de Juárez, promulgándose las leyes de la reforma el 28 de diciembre de 1860. Éstas incluían una ley de nacionalización de los bienes de la Iglesia sin indemnización y la supresión de todas las órdenes de regulares (esta ley, que era de 1859, se incluye ahora en la ley de la Reforma). En 1863 los franceses entran en Puebla y en México capital. Un año más tarde Maximiliano llega como emperador a México. Tres años más tarde se rendiría en Querétaro siendo posteriormente fusilado. En 1867 Juárez es nombrado nuevamente presidente de México. Años más tarde, al morir Juárez en 1872, es sucedido por Lerdo de Tejada. En 1876 Porfirio Díaz tomaría por la fuerza el poder, convirtiéndose en dictador de México hasta 1911. Las reformas liberales van a afectar especialmente a la iglesia católica mexicana. Ésta era dueña de enormes extensiones de tierra y poseía un enorme poder social controlando la enseñanza y la vida de los mexicanos. Los conservadores mexicanos, y la iglesia católica reaccionaron con las armas que tenían: los conservadores con la guerra y la iglesia con la excomunión. El triunfo de Juárez y la publicación de una nueva constitución, la liberal de 1857, y las leyes de la Reforma generaron la Guerra de la Reforma (185861) entre conservadores y liberales, seguida por la guerra Franco-mexicana (1862-67). El Imperio de Maximiliano de Austria fue apoyado por Napoleón III en sus comienzos. Durante esta segunda etapa se consigue la plena descolonización y el triunfo liberal, así como el fin de las pretensiones de Francia de anexionarse de una u otro forma una influencia sobre México. El triunfo del liberalismo económico puso en circulación el capital que la Iglesia tenía en tierras y las corporaciones civiles, pero la desamortización de los bienes de la iglesia y de las corporaciones no supuso una mejora social de los mexicanos, ya que la tierra una vez desamortizada y subastada fue a parar a manos de latifundistas, con lo que el latifundio no sólo persistió, sino que incluso aumentó. Las comunidades indígenas perdieron su base económica y el problema social heredado de la colonia persistió y aumentó. 6.4. 1876-1911 La tercera etapa de 1876 a 1911, es conocida también como el Porfiriato. La figura central es Porfirio Díaz, general del ejército de Juárez y liberal moderado. Partidario de un gobierno fuerte y del orden y el progreso, gobernó como un auténtico dictador. Las revoluciones operadas en los transportes (ferrocarril) y la fluidez de la inversión extranjera sirvió a Porfirio Diaz para modernizar económicamente el país pero sin solucionar los problemas sociales, ahora agravados por las leyes dadas por Porfirio Diaz y que llevaron a la expropiación de los baldíos y a la actuación de las compañías deslindadoras que en parte se hicieron con enormes propiedadees de tierra. El problema social continuaba. La Revolución Mexicana, en su fase bélica 1910-1917, llevaría al enfrentamiento de todos estos problemas, especialmente el social. 6.4.1. Autoritarismo, progreso económico y estancamiento social En 1876 comienza un nuevo período de la historia política mexicana caracterizado por su carácter autoritario y contrarrevolucionario. La iglesia católica recupera sus privilegios, pero no sus propiedades. En 1878, Porfirio Díaz logra una enmienda a la constitución que permitía la reelección inmediata del Presidente. En 1887 logra una nueva enmienda que le facilita de nuevo la reelección. El lema de la dictadura fue: "Orden y progreso". Otro de sus lemas era: "Nada de política, mucho de administración". El fundamento filosófico del Porfiriato fue el positivismo. Fue importante el desarrollo económico durante estos años pero el sector agrario no se modernizó y a la par aumentó el extranjerismo y el hacendismo. El Porfiriato supone además 34 años de relativo desarrollo industrial, tanto minero (plata, oro, cobre, plomo y hierro) como financiero. El Porfiriato apoyó la inversión del capital extranjero en México (ferrocarril, sociedades de crédito, latifundios, e industrias). Entre los años 1883-93 se dieron una serie de leyes para la colonización de los baldíos, poniendo en manos de los grandes propietarios las tierras poseídas sin títulos por campesinos y comunidades. Entre 1880 y 1884 gobierna a través del Presidente Manuel González. 6.4.2. Organización de la oposición a Porfirio Díaz La dictadura tuvo como justificación la paz y el progreso. Por progreso se entendía más bien el material, ya que no hubo una conciencia de una redistribución más justa de la riqueza en México, el progreso solamente favoreció a los grupos privilegiados. Existía una enorme injusticia social que incluso aumentó durante esos años. El desarrollo económico no fue unido a la mejora de la situación socio-laboral de los trabajadores. Durante el Porfiriato se desarrollaron las primeras formas de organización obrera: las cooperativas. En 1853 se fundó la Sociedad Particular de Socorro Mútuo. El anarquismo en México dio un matiz político al movimiento sindical mexicano. En 1887 se fundó La Sociedad de Ferroviarios Mexicanos. Por su parte se produjo una organización de la oposición liberal: Club Ponciano Arriaga. En 1910 la oposición estaba dividida en tres grupos fundamentales: los liberales, los radicales y los intelectuales. Entre los liberales, Madero intentó configurar el partido nacional democrático. Este hacendado tenía unas ideas bastante moderadas, pero en 1910, ante la súbita decisión de P. Díaz de quedarse en el poder por más tiempo, Madero se presenta como candidato alternativo a las elecciones. Al ser Díaz elegido nuevamente Presidente, Madero se refugia en Texas, desde donde comienza a preparar la revolución a través del llamado Plan de San Luis de Potosí. Los objetivos del Plan eran eminentemente políticos, pero también se mencionaba la devolución de tierras. Otras fuerzas radicales se unieron a la causa de Madero: Emiliano Zapata y Pancho Villa. El 25 de mayo de 1911, Díaz renuncia a la presidencia y se exilia en París. Madero, tras fundar el Partido Constitucional Progresista, es elegido Presidente en octubre de 1911. Madero era un liberal pero no un reformista social. Zapata sintió que no se llevaban a cabo los pasos necesarios para solucionar el problema agrario y publicó el Plan de Ayala. 6.5. Vocabulario Caciquismo: El caciquismo es un fenómeno rural y propio de las democracias poco consolidadas, donde una minoría de personas con poder económico ejerce un gran poder - a nivel local o regional - sobre otras personas que tienen con ellos lazos de lealtad basados en la necesidad, en la miseria y en la incultura. El cacique es un Señor paternal/tiránico en su territorio, su poder es grande a nivel local o regional. Éste puede convertirse en caudillo, cuando sus ambiciones le llevan a tomar el poder político regional o estatal. Caudillismo: El caudillismo es uno de los rasgos dominantes de la historia de los nuevos países hispanoamericanos, es, como el caciquismo, propio de las sociedades rurales con democracias poco consolidadas, supone la existencia de individuos con gran poder local o regional (caciques) que no se someten a las leyes del juego democrático y que para conseguir los objetivos marcados por sus intereses económicos y sociales particulares, llegan incluso a tomar el poder por la fuerza. Mestizaje: Durante la Colonia hubo en México abundancia de población nativa y mestiza asimilada a los colonizadores. Nueva España fue uno de los virreinatos más ricos. El mestizaje fue frecuente y en la segunda mitad del siglo XVIII se formó una sociedad de castas. Cada casta suponía un grado de mestizaje. Hacendismo: Sinónimo de latifundismo en México. Formación de una gran propiedad agraria. Poder económico de la iglesia católica hasta la reforma liberal de Juárez. La Reforma liberal en México durante la segunda mitad del siglo XIX, tuvo repercusiones en el sistema de la propiedad de la tierra, algo que se intensificó con la Reforma de Porfirio Díaz. Estas reformas originaron un agravamiento de la situación del campesinado sin tierras en México. Regionalismo: La extensión de los territorios y la dificultad de comunicaciones originó durante la Colonia una fragmentación que llevaría al regionalismo durante el siglo XIX. En este siglo se consolidó el regionalismo, los poderes personalistas y los vínculos personales de cacicazgo y compadrazgo. El Caudillismo también se desarrolló en el siglo XIX en México. Revolución: Para muchos México es un país que se asocia con la palabra revolución. Desde la Colonia ha habido una serie de revueltas y revoluciones hasta la fecha. Las revoluciones han sido de diversos tipos (polítícas, sociales,etc.). 1810. Hidalgo y Morelos. (Componentes político y social) 1821. Independencia.(Componente político) Tipos de revoluciones en México 1854-1860. Revolución de la Reforma. (Componentes político y económico) 1910-1917. Revolución Mexicana. (Componentes político y social). Desamortización: Poner en venta los bienes inmuebles, principalmente tierras, en manos de la Iglesia u otras instituciones como las corporaciones civiles. La desamortización aplicada a la iglesia se llama tambien desamortización eclesiástica. Los liberales en la segunda mitad del siglo XIX aplicaron las llamadas leyes de desamortización tanto en España como en Hispanoamérica. El motivo era económico: poner en circulación el capital amortizado o no circulante en manos de las llamadas manos muertas. Fueros: Leyes o privilegios de la Iglesia o Corporaciones civiles. Los liberales trataron de unificar las leyes y acabar con estos fueros especiales. La Constitución de 1857 incluía la ley Juárez sobre abolición de los fueros e inmunidades eclesiásticas. Tambien incluía la Ley de Iglesias por la que se suprimía la coacción civil en el cobro del diezmo. Corporaciones civiles: Comunidades de carácter social o religioso. Por ejemplo las cofradías o las comunidaes indígenas. Tambien los ayuntamientos eran corporaciones civiles. La constitución de 1857 incluía la ley Lerdo de Tejada de 1856, o ley de desamortización de los bienes de manos muertas (iglesia, corporaciones civiles). Baldíos: Tierras no cultivadas. Fueron desamortizadas durante el Porfiriato. 6.6. Ejercicios 1. ¿Quiénes fueron los personajes históricos más destacados durante el siglo XIX en México? Comenta su papel histórico. 2. ¿Por qué se puede dividir este siglo en tres etapas? 3. Comenta los problemas sociales, económicos y políticos más importantes del siglo en cuestión. 6.7. Referencias bibliográficas Krauze, Enrique (1994): Siglo de caudillos. Barcelona: Ed. Tusquets.