1 Tras su manto de neblinas…. Por Ricardo D. Primo ricardodarioprimo@hotmail.com El 20 de noviembre de 1981, el General Viola a cargo de la Junta Militar delega el mando en el General Horacio Liendo, afectado por un cuadro de hipertensión arterial e insuficiencia coronaria. Un mes de idas y vueltas, consolidaron el apoyo que necesitaba el general que recibió en este caso el voto favorable de la Armada. El 22 de Diciembre asume Leopoldo Fortunato Galtieri como Presidente de los argentinos. A tal punto el recambio ya había estado planificado que según algunas fuentes, ni Viola ni Liendo estaban al tanto en Diciembre de 1981 de la existencia de un plan para recuperar las Malvinas, pese a que los dos integraban el Comité Militar. La economía seguía sin rumbo y por ese entonces se formuló ese cómico consejo de “El que apuesta al dólar pierde”. Nuestra moneda había perdido en diez meses, el 80% de su valor, las importaciones de pésima calidad sustituían en nuestros mercados a los productos nacionales. La caída del Producto bruto industrial fue de un 25% con relación al año anterior. En lugar de Viola- como ya se dijo- asumiría Galtieri quién ejercería dicho cargo hasta el 29 de Marzo de 1984. Con la llegada de los “halcones", se desempolvaba el viejo plan de recuperar Malvinas y para ello se cuenta con el procedimiento diseñado por orden del Almirante Anaya a su jefe de Operaciones Navales, vicealmirante Juan J. Lombardo En esa oportunidad, el canciller quién había sido designado para manejar nuestras relaciones exteriores era el Dr. Nicanor Costa Méndez, que recuerda; “Se refirió luego (Galtieri) a la disputa con Gran Bretaña sobre las Malvinas. “No podemos permitir que este reclamo sea ignorado en la práctica por Gran Bretaña y que el trámite se eternice. El ciento cincuenta aniversario de la ocupación no puede pasar desapercibido. La gestión diplomática debe ser firme y clara. Usted habrá advertido que desde el mes de Julio pasado nuestra acción ha sido más enérgica. Tenemos que estar preparados para el fracaso de las negociaciones y debemos tener planes de alternativa. No hablo de tomar la decisión de ocupar las islas, ni siquiera le doy instrucciones para que prepare acción diplomática alguna en tal sentido. Solo quiero significar que algún día debemos analizar todas las posibilidades que la política exterior puede ofrecer, sin exclusión alguna, y sus consecuencias negativas o positivas”. A lo que agregó; “Por ahora converse el tema en algún lugar de su mente. Ya conversaremos sobre él, con mayor extensión, más adelante” (COSTA MENDEZ Nicanor, MALVINAS ESTA ES LA HISTORIA, Sudamericana, Bs. As1993, Pág.16) En Enero de 1982, la Junta Militar había acordado, materializar, en algún momento, a su debido tiempo, el plan de recuperación de nuestras Islas Malvinas. Durante los primeros días de Marzo de 1982, Galtieri había manifestado al Gral. Mario Benjamín Menéndez, Jefe del Estado Mayor, que iba a ser el futuro gobernador de las Malvinas “Gobernar las islas, es una pavada” habría dicho Galtieri. (LUNA Félix, NUESTRO TIEMPO, Historia Gráfica de la Argentina Contemporánea desde Roca a Menen, Hyspamérica Bs. As., 1984, Tomo XX- Hacia la Restauración Democrática (1976- 1983), Cáp. IV Pág. 50 ) De más estaba decir, que la concreción de este viejo sueño, otorgaría no solamente a la persona de Galtieri sino a toda las Fuerzas Armadas, el respaldo popular necesario para asegurar una salida electoral, en la que por cierto, quién materializará este antiguo anhelo sería un virtual y casi seguro ganador. Sin embargo, era de fundamental importancia poder contar con “luz verde” de parte de los Estados Unidos. 2 Para los primeros días de Marzo de 1982, Costa Méndez comenzó a percibir claras señales de que los Estados Unidos se alinearían junto a Gran Bretaña en caso de “una controversia diplomática”. Los tiempos se aceleraron en forma vertiginosa y el 19 de ese mes, se produce el desembarco de operarios al mando del Sr. DAVIDOFF en San Pedro, Georgias del Sur, para proceder a desmantelar unas instalaciones existentes. La reacción Británica no se hizo esperar, y el día 22 la Primer Ministro británica Margaret Thatcher cursó una enérgica nota advirtiendo que utilizaría la fuerza para retirar a los operarios “intrusos” de ese lugar de soberanía británica. Para ello había despachado al buque “Endurance” a destacarse en dicha zona y ordenado a uno submarinos nucleares dirigirse al Atlántico Sur. Para el 26 de Marzo, en nuestro país se ordenaba la movilización de determinadas fuerzas que constituían las de desembarco. Dos días después, partieron sin despedidas ni pañuelos que se agitaran en el puerto; iban a un lugar de nuestra Patria. Paralelamente, un grupo comando apodado “lagartos” al mando del tristemente célebre Teniente Aztiz, desembarcaban en las Islas Georgias para “apoyar” a los obreros. El 30 de Marzo se realizaba una gran manifestación organizada y dirigida por la CGT, la cual fue enérgicamente reprimida por las fuerzas policiales. Era evidente que los satélites espías norteamericanos estaban monitoreando el movimiento de fuerzas argentinas .En la noche del 1º al 2 de abril, el Presidente Reagan telefonea a Galtieri. Según Costas Méndez (ibidem anterior) ocurrió lo siguiente: “El diálogo entre el presidente Reagan y el Presidente Galtieri, tuvo lugar a las 22:10 hrs. La conversación tuvo comienzo difícil debido a que los intérpretes tardaron en adaptarse. No es fácil sintetizarla. Conviene sin embargo destacar tres aspectos: la posición del Presidente Galtieri en cuanto a la afirmación de la soberanía argentina sobre las Islas Malvinas y a la necesidad de que alguna forma Gran Bretaña la reconociera; la afirmación de que la Argentina actuaría con total libertad e independencia; la seguridad de que la Argentina garantizaría la libertad y forma de vida de los isleños. Por su parte el Presidente Reagan ofreció enviar al Vicepresidente para tratar de arreglar la situación:”... pero por favor eviten el conflicto”, dijo. El General Galtieri contestó: “Le agradezco pero es tarde, los hechos están lanzados”. (COSTA MENDEZ Nicanor, op. Cit. Pág. 50) Según Cardozo, Kirschbaum y Van der Kooy, en el libro Malvinas, LA TRAMA SECRETA, en está conservación entre Reagan y Galtieri, el primero había afirmado que Estados Unidos apoyaría a Gran Bretaña. . El 2 de Abril de 1982, la Operación Rosario, había culminado con la recuperación de nuestras Islas Malvinas. Una marcha, escrita hacía tiempo y bastante desconocida, comenzaba a ocupar todos los espacios en los distintos medios de Comunicación Social.