3° Concurso de Vidrieras Temáticas ACI 2014 Nombre de la vidriera: “El Ferroviario” Comercio Participante: Emmanuel Calzados Institución Participante: EEP N°6 Juan Bautista Alberdi Equipo Vidrierista: Benítez, Pamela Haspert, Mónica Malanga, Rita Dos empresas ferroviarias erigieron sus estaciones en Coronel Pringles, el Ferrocarril del Sud en el ramal Olavarría- Bahía Blanca y el Ferrocarril Rosario- Puerto Belgrano, que por llegar seis años más tarde a este punto, plantó su parada en las afueras. Coronel Pringles quedó así convertido en un nudo ferroviario que vio pasar innumerables trenes, tanto de pasajeros como de carga, con destino a Bahía Blanca o más al sur y también hacia Olavarría, Plaza Constitución y la lejana Rosario. El ferrocarril se expresaba con cambios de hábitos, conductas e incluso, en la fisonomía urbana Para graficar su verdadera representación, este resultó a su tiempo lo que Internet a nuestros días. Para empezar, surgió una nueva estructura trabajadora que llegó a constituir un verdadero ejército. Nuevas especialidades alimentaron un mercado virgen que pronto se nutrió de jefes de estación, guarda, inspectores, fogoneros, maquinistas, telegrafistas, sin contar con todos aquellos que cumplían sus respectivas tareas en la construcción, de caminos o de trenes propiamente dichos. El ferrocarril desarrollo una aristocracia laboral caracterizada por una fuerza física, unas aptitudes y un juicio completamente nuevos. El jefe de la Estación era parte de las autoridades destacadas, junto con el intendente, comisario y párroco. El 15 de julio de 1903 llega a Pringles el primer tren del “Ferrocarril Sud”. La nueva población creció como muchas de la pampa húmeda al influjo del tren. Así floreció el denominado Barrio de las Luces (actual Barrio Roca), donde todo era brillo y alegría, las siempre pujantes familias ferroviarias se multiplicaban día a día y los ciudadanos veían pasar desde el andén unas tras otra las formaciones ferroviarias. La EEP N°6, por encontrarse inserta en el Barrio de la Estación Roca, desea con esta muestra reivindicar la función que cumplió el ferrocarril y su personal para la sociedad pringlense. Como toda institución contaba con empleados que cumplían con responsabilidad innumerables tareas, desde cuidar la seguridad de la circulación de los trenes, hasta reportar las lluvias caídas y la temperatura. Para cumplir el propósito expuesto contamos con el testimonio del Sr Alberto Berardozzi, quien trabajo en el ferrocarril local desde el año 1970 hasta 1990, cumpliendo diversas funciones, siendo Jefe de Estación desde 1983 hasta mediados de 1989. Nos detallo en persona el significado de un oficio tan dignificante e invalorable para nuestra comunidad. El ferroviario era de esos oficios que se ejercían con orgullo, honor y con un amor profundo por el deber.