SPAN 3100 Los Orígenes de la Prosa Castellana Contexto histórico El siglo XIV se caracteriza por numerosas crisis: teológica: aparecen movimientos que difieren de la tradición católica: el misticismo (la relación individual entre el hombre y Dios); “la posibilidad de llegar al conocimiento de Dios por vía racional” (Sánchez-Romeralo e Ibarra 44); y el Gran Cisma que divide la Iglesia, resultando en dos Papas (Roma y Avignon, Francia). social: desintegran la organización medieval y el sistema feudal y empiezan a aparecer los países separados por razas y nacionalidades; guerras: como la de los Cien Años (1337-1453) entre Francia e Inglaterra; salud: plagas como la peste negra. La Prosa La prosa aparece en España en el siglo XIII, o sea, tarde. La prosa no aparece hasta entonces por: Razones internas: la literatura es la expresión en prosa más difícil que la poesía porque hace falta una gramática más compleja; Costumbre: todo fue expresado en latín, por lo cual no se solía escribir prosa en castellano porque no fue visto como culto; Razones internas: ajenas de la literatura: analfabetismo extenso. Por eso no había razón de escribir en castellano porque sólo leyeron los alfabetos en latín. Los dos elementos que había presentes a la aparición de la prosa son: el apoyo de la iglesia: decidió utilizar las lenguas romances porque el latín no fue entendido por la gente; además, las primera obras tienen propósito didáctico; la gran actividad traductoria en Europa a lenguas clásicas (escuelas de traductores, por ejemplo en Toledo) como al árabe y al hebreo (se traduce por fin al romance, que nació con raíces clásicas). Se intentó dar un carácter estilístico a las obras didácticas: nace la preocupación literaria. Aparecen en castellano los temas más importantes del tiempo, usando fuentes muy diversas. No hay mucha originalidad en los temas porque dependen de obras anteriores y conocidas. Las obras castellanas son paralelas a las obras latinas, las cuales siguen siendo escritas en el extranjero. Hay obras de todo: la astronomía, el ajedrez, la historia, etc. La Escuela de Traductores de Toledo, bajo la dirección del rey Alfonso X El Sabio, desempeñó un gran papel en el desarrollo de la lengua castellana, sirviendo como norma lingüística y gráfica uniforme gracias a la redacción del mismo rey. Juan Manuel (1282-1348) fue nuevo tipo de escritor: aristócrata (sobrino de Alfonso X) y bélico; vio en la literatura unos elementos importantes, es decir, la moralidad y el didactismo, mediante la literatura culta. Se caracteriza por tres factores: Preocupación por el estilo: frases hermosas y la preocupación por la transmisión de la obra, buen sentido del lenguaje y estilo muy personal; La consciencia de la obra como totalidad: unión consciente entre la vida y la literatura. Sin embargo, no trata de su propia vida. Las fuentes: es el primer autor que se preocupa por justificar las autoridades. El Conde Lucanor (también conocido por El Libro de Patronio) (1335) es una obra considerada precursor de la novela europea (Mujica 33). Se divide en cinco partes, cuya primera parte es la más importante. El libro es una colección de unos 50 “ejemplos” con tema recurrente de la moralidad enseñada, dirigida al Conde Lucanor por su criado mayor y sabio, Patronio, mediante fábulas narradas y una aplicación didáctica. Las fábulas son de origen latino y oriental (árabe y judío). Cada ejemplo va rematado con un pareado (un par de versos), al estilo árabe. Los personajes y los temas son empleados en la aplicación cotidiana con valor directo para el lector: didactismo mundano y filosofía moral medieval (Mujica 34) en vez de comentario estrictamente religioso. Pero además lleva consigo un sentido estético que acompaña el didactismo. Burton, David. El Conde Lucanor. Newark, DE: European Masterpieces, 2008. Sánchez-Romeralo, Antonio e Ibarra, Fernando. Antología de Autores Españoles Antiguos y Modernos I. New York: MacMillan, 1972.