Levantamiento del trayecto de un teleférico

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Levantamiento
del trayecto de
un teleférico
E
n 2011 se celebró la feria federal de horticultura
alemana (Bundesgartenschau o BUGA) en la ciudad
de Coblenza, en la confluencia de los ríos Rin y
Mosela. Muestra de jardinería y horticultura, arquitectura
del paisaje, diseño de jardines y cultivo de plantas, esta
feria se celebra en varias ciudades alemanas cada dos
años, culminando con la Feria Internacional de Jardinería
(IGA) cada diez años. Estas ferias duran varios meses y
atraen a millones de visitantes.
La feria de Coblenza se ubicó en tres zonas principales: dos
al oeste del Rin, en Coblenza y en el cercano Deutsches
Eck (el rincón alemán), donde confluyen los ríos Rin y
Mosela; y la tercera en la Fortaleza Ehrenbreitstein, sobre
una meseta que se eleva sobre la orilla este del Rin. Esto
significaba que iba a ser necesario trasladar a los visitantes
de la feria desde la orilla oeste atravesando el río hacia la
meseta (y viceversa) de forma eficiente, fácil y con un bajo
impacto ambiental.
Teleférico sobre el Rin
Las autoridades de la ciudad de Coblenza y la empresa
BUGA decidieron que la mejor solución era construir un
teleférico sobre el Rin. El contrato fue adjudicado a la
empresa austríaca Doppelmayr Cable Car GmbH & Co KG,
líder tecnólogico mundial en sistemas de teleféricos. En
aquella época, la nueva tecnología de tres cables utilizada
en Coblenza sólo había sido adoptada tres veces en todo
el mundo. Capaz de transportar hasta 7.600 pasajeros por
hora, el sistema tiene la capacidad de transporte máxima
de cualquier elevador aéreo en el mundo.
El teleférico recorre una distancia de 890 metros sobre
el Rin y se extiende por un desnivel de 112 metros.
Está compuesto por 18 cabinas, cada una de las cuales
puede transportar hasta 35 personas y tiene acceso para
cochecitos de bebé, sillas de ruedas, y bicicletas. Desde
sus ventanas panorámicas puede contemplarse una
vista espectacular de 360 grados del paisaje. Desde que
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terminó la Feria de Horticultura alemana, el teleférico ha
sido utilizado para transporte público.
El Teleférico del Rin llamado Koblenz Rheinseilbahn en
alemán, se encuentra en el paisaje cultural del "Valle
Superior del Medio Rin", el cual ha estado incluido en la
lista de localidades patrimonio mundial de la humanidad
de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la
Cultura (UNESCO) desde 2002. Debido a los requisitos
paisajísticos de la UNESCO, se había previsto inicialmente
quitar el teleférico en 2013. Pero en junio de 2013, el
Comité del Patrimonio Mundial decidió que la operación
podría extenderse hasta 2026, sin perjuicio de la condición
de Patrimonio Mundial del Valle Superior del Medio Rin.
Se requieren inspecciones anuales
La Asociación de Inspección Técnica de Vehículos
alemana Technischer Überwachungsverein (TÜV), que
es la autoridad en normas de seguridad, lleva a cabo
una inspección anual con el fin de que la operación siga
estando autorizada. Además, la autoridad del agua y el
transporte marítimo requiere información anual sobre
la ruta de tránsito del teleférico sobre el río. Debido al
cambio en el nivel del agua del río, es esencial que haya
una distancia segura entre las cabinas del teleférico y
los buques de contenedores, que cada vez llevan cargas
más elevadas.
Inicialmente, la ruta de tránsito era determinada
utilizando un taquímetro y un prisma colgado en la parte
externa de la puerta de la cabina, pero el seguimiento
directo resultaba difícil. El ingeniero Manfred Frickel del
Departamento de Administración de tierras y topografía
de Coblenza, trabajó con Alexander Mandt de Herzog
+ Mandt GmbH para desarrollar una solución mejor y
más eficaz. El objetivo era disponer de un seguimiento
automatizado con mediciones a determinados intervalos
de tiempo.
La solución se logró usando una estación total robótica
Trimble S8 con tecnología Trimble VISION y un objetivo Trimble
MultiTrack™. Mandt se mostraba optimista: "Si utilizamos todos
nuestros instrumentos y accesorios topográficos al máximo de
su capacidad, podremos lograr excelentes resultados técnicos.”
Las cabinas del teleférico se desplazan sobre el río a una
altura de aproximadamente 160 metros. Un parámetro crítico
en la evaluación de los resultados es el punto más bajo de
la trayectoria sobre el agua. Pero, ni el peso de las cabinas
contiguas ni la longitud del cable tenían efectos medibles sobre
este punto, el cual varía con los cambios de temperatura. Se
registró la temperatura pero no se aplicó ninguna corrección ya
que los cables pueden tensarse hidráulicamente en las ruedas
de retorno de las estaciones superior e inferior.
Para poder realizar las mediciones, una cabina fue cargada en la
estación superior del teleférico con un peso de 2.800 kilos, que
corresponde al número máximo permitido de 35 personas. Tras
una breve puesta en marcha en la estación de la parte superior,
el prisma se fijó en la parte inferior de la cabina utilizando una
base magnética y extensiones. Como las cabinas están hechas
de aluminio, se utilizó una apertura en la parte inferior del piso
para que las cuadrillas tuvieran acceso a las vigas de acero
donde iban a fijar la base magnética con el prisma.
Entonces, la cabina fue desplazada hasta estar más allá del
soporte superior, y cuando estaba por encima de la orilla este
del Rin, fue detenida. Desde este punto, podía medirse el
prisma un vez por segundo en una longitud de 500 metros con
respecto a un punto sobre la orilla oeste del río. "Fue fascinante
ver cómo la estación total hacía un seguimiento automático
del prisma hasta el soporte en la estación del valle en la
orilla oeste del Rin", observó Frickel. “Podíamos ver incluso los
resultados del levantamiento visualizados en el controlador. La
tecnología Trimble VISION integrada en la S8 permitió combinar
las imágenes con las medidas georeferenciadas grabadas.”
Incluso con las cabinas en movimiento, las mediciones tenían
la precisión requerida de 1–2 cm. Al capturar imágenes durante
el levantamiento, la cuadrilla podía superponer los datos del
levantamiento y confirmar al mismo tiempo en el campo que
los datos eran correctos y que el instrumento había seguido
con precisión las cabinas en movimiento.
Con la autorización de la UNESCO para extender el plazo de
operación del teleférico hasta el 2026, la ruta de tránsito se
medirá cada año. Trimble VISION permite documentar la imagen
completa de los datos, la cual puede usarse como referencia
en caso de que haya preguntas sobre cuestiones en materia de
seguridad. Cada punto está georeferenciado y puede verificarse
posteriormente en la oficina. Las funciones fotogramétricas en
el software Trimble Business Center también permiten extraer
datos detallados adicionales, por lo que no hay necesidad de
tener que volver al campo.
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