Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Rev Esp Patol. 2011;44(3):179—181 R E V I S TA E S PA Ñ O L A D E Patología www.elsevier.es/patologia ACTUALIZACIÓN EN PATOLOGÍA Contribución del patólogo en el diagnóstico de enfermedad celíaca. Comentarios sobre recientes avances Ricardo Drut Cátedra de Patología «A», Facultad de Ciencias Médicas, UNLP, Servicio de Patología, Hospital de Niños, La Plata, Argentina Recibido el 3 de noviembre de 2010; aceptado el 29 de noviembre de 2010 Disponible en Internet el 8 de marzo de 2011 PALABRAS CLAVE Biopsia; Bulbo duodenal; Enfermedad celíaca Resumen En la presente revisión se analizan los avances en los criterios y formas de diagnóstico histopatológico de las biopsias de duodeno en pacientes con sospecha de o con enfermedad celíaca diagnosticada. Se realiza especial énfasis en la necesidad de obtener biopsias del bulbo duodenal y utilizar una categorización numérica de la relación vellosidad/cripta. © 2010 SEAP y SEC. Publicado por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados. KEYWORDS The pathologist’s role in the diagnosis of celiac disease: recent advances Biopsy; Celiac disease; Duodenal bulb Abstract The present review is intended to analyze the advances in the criteria and classifications of the histopathological findings in patients suspected of or diagnosed with celiac disease. Particular emphasis is placed on duodenal bulb biopsies as well as the use of a numerical system in the determination of the villous/crypt ratio. © 2010 SEAP y SEC. Published by Elsevier España, S.L. All rights reserved. La enfermedad celíaca (EC) es una condición que constituye un típico ejemplo de la etiología multifactorial de las enfermedades. Sobre una particular constitución genética, representada en este caso por un HLA DQ2 o DQ8, actúa una circunstancia ambiental —–la gliadina del gluten de las harinas de trigo, avena, centeno y cebada (TACC)—–, generándose una cascada de eventos que determinan la enfermedad1 . La EC se presenta con un espectro clínico importante y que parece estar ampliándose permanentemente. Sintetizando esas manifestaciones, quizá puedan dividirse en dos grandes grupos, a saber: 1) con malabsorción, que es la forma clásica, o 2) sin malabsorción. Esta segunda resulta Correo electrónico: patologi@netverk.com.ar la más difícil de reconocer como EC y su expresión puede incluir un espectro importante de condiciones con fenómenos autoinmunes1,2 . En ambas circunstancias el diagnóstico de EC requiere de la sospecha clínica y de exámenes auxiliares para confirmarla, ya que la certificación implica una dieta libre de gluten (SINTACC) por el resto de la vida, así como el estudio de familiares en aquel sentido. Recientemente se ha propuesto la regla «4 de 5» (si hay 4 de los 5 siguientes se confirma el diagnóstico de EC): 1. Manifestaciones típicas de EC. 2. Inmunoglobulinas séricas positivas para EC con títulos elevados de autoanticuerpos de tipo IgA. 3. Genotipos de HLA tipos DQ2 o DQ8. 1699-8855/$ – see front matter © 2010 SEAP y SEC. Publicado por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados. doi:10.1016/j.patol.2010.11.002 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. 180 R. Drut Tabla 1 Clasificación de la alteración de la mucosa duodenal en la enfermedad celíaca en el examen histológico Marsh, 1992 Oberhuber et al, 1999 Corazza y Villanaci, 2005 Propuesta nueva Grado de enteropatía (tabla 2) Tipo Tipo Tipo Tipo Tipo Tipo Tipo 1 Tipo 2 Tipo 3A Grado B1 Grado B2 Tipo 4 Grado A Grado A Grado B1 Tipo 2 Tipo 3 Obsoleto Tipo 1 Tipo 1 Tipo 2 3 4 Obsoleto N 1 2 1 2 3 3B 3C 4 De Ensar15 . La columna «Propuesta nueva» es la propuesta de ese artículo. 4. Enteropatía severa en la biopsia de mucosa de intestino delgado. 5. Respuesta a la dieta libre de gluten3 . En este contexto el patólogo contribuye con la interpretación de la biopsia de intestino delgado, que siempre es del duodeno. La alteración característica de la mucosa duodenal, y que justifica la malabsorción, es la atrofia de las vellosidades con elongación de las criptas. Este fenómeno indica la desaparición del compartimiento diferenciado de los enterocitos, con hiperplasia del compartimiento regenerativo, el que detecta la instrucción para reponer la celularidad funcionalmente efectiva2 como cualquier circunstancia regenerativa. El patrón ha sido reconocido hace mucho tiempo y ha generado diversas clasificaciones destinadas a determinar el grado de atrofia de las vellosidades2 (tabla 1). En ese sentido, durante mucho tiempo se dio por cierto que la alteración de la mucosa era progresiva, y que la EC «comenzaba» en algún momento para ir luego agravándose progresivamente. Esta hipótesis no parece ser cierta, y lo concreto es que «se es o no se es» celíaco. En ese mismo sentido, la literatura tiene abundantes referencias al tema de la «atrofia en parches», situación —– falsa a mi entender—– muy probablemente generada por dos circunstancias: • Inadecuada interpretación de muestras de biopsia no orientadas para determinar claramente la relación vellosidad/cripta (V/C). • Colocación de todas las muestras de diferentes porciones del duodeno en un mismo frasco y procesarlas sin saber de qué porción proviene cada una2 . La interpretación de la alteración de la mucosa duodenal, en particular la atrofia vellositaria, se complicó aún más con la inclusión del recuento de linfocitos intraepiteliales (LIE) en las vellosidades, poniendo un número de corte para decidir si están incrementados (a favor del diagnóstico de EC) o no. Más recientemente se ha redescubierto que la lesión duodenal característica de la EC puede estar presente sólo en la mucosa del bulbo duodenal4—12 (no podía ser de otra manera, ya que es la zona del intestino delgado expuesta a la mayor concentración de la gliadina), fenómeno que puede haber sido responsable de la mal llamada «atrofia en parches» (por estar en el mismo frasco con otras muestras). Por otra parte, la denominación «atrofia en parches» propiamente dicha ha sido también inadecuadamente utilizada en el sentido de que la primera porción del duodeno sería sólo una parte de la mucosa duodenal, y por lo tanto un «parche» o segmento. Tal nomenclatura confunde al clínico y a los patólogos. Curiosamente, durante un tiempo la biopsia del bulbo duodenal fue considerada como no aceptable porque «potencialmente» podría estar alterada por el efecto de su vecindad al estómago. Sin embargo, es desde hace mucho conocido el fenómeno de que las manifestaciones intestinales de la EC están vinculadas a la extensión de la lesión del intestino delgado (incluyendo este último al duodeno, por supuesto)13 : una verdad de una obviedad absoluta. Sobre esta particular situación hemos llamado la atención en el año 2007, en un artículo titulado «Histopathologic diagnosis of celiac disease in children without clinical evidence of malabsorption»14 [Diagnóstico histopatológico de enfermedad celíaca en niños sin evidencias clínicas de malabsorción], en el que referimos la constancia en el hallazgo de atrofia en la zona proximal del duodeno en todos los niños con otros marcadores de EC y sin malabsorción. Esta experiencia, que aumentó en número de casos hasta la actualidad, parece ser la misma referida más recientemente por otros grupos de autores4—12 , por lo que resulta evidente que la biopsia de este sector debe ser incluida siempre. En el tema de cómo evaluar la biopsia de la mucosa duodenal, la subjetividad rampante de las clasificaciones utilizadas hasta el presente ha sido reiteradamente mencionada2 : todas, incluso la más reciente15 , basan la graduación en la evaluación de la imagen de atrofia de las vellosidades (tabla 1). Curiosamente, todas están de acuerdo en que el reconocimiento de las formas más graves es sumamente sencillo. A fin de evitar esa subjetividad hemos propuesto y estamos usando desde hace más de 20 años, y con gran éxito, una forma de catalogación de la relación V/C de tipo matemático extremadamente sencilla2,14 (tabla 2 y fig. 1). Eso sí, el punto de mayor cuidado es la determinación exacta del cuello o entrada de la cripta, ya que esto posibilita definir la longitud de la vellosidad y la de la cripta. Y, si es posible, determinar la profundidad de la cripta en base al reconocimiento de criptas en toda su longitud. Este pequeño detalle habilita a transferir esa medida a la altura de la vellosidad. Los celíacos con malabsorción tienen sistemáticamente enteropatía grados 3 o 4 en las biopsias de todo el duoTabla 2 Clasificación vellosidad/cripta16 (fig. 1) basada en la relación Grados Normal I II III IV Vellosidad/cripta >2,5 <2,5 <2 <1 <0,5 Para medir apropiadamente la relación V/C es crítico el reconocimiento de imágenes que muestren criptas en toda su longitud. Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Contribución del patólogo en el diagnóstico de enfermedad celíaca. Comentarios sobre recientes avances 181 Confidencialidad de los datos. Los autores declaran que en este artículo no aparecen datos de pacientes. Derecho a la privacidad y consentimiento informado. Los autores declaran que en este artículo no aparecen datos de pacientes. Bibliografía Figura 1 Fotoesquema compuesto para ejemplificar la histopatología normal y los diferentes grados de enteropatía. deno. Los celíacos sin malabsorción suelen presentar ese grado de alteración sólo en las porciones proximales del duodeno, particularmente el bulbo, mientras que otros segmentos más distales muestran grados menores de lesión o mucosa incluso normal. Este pequeño detalle puede hacer reconsiderar todas las aparentes discordancias referidas en la literatura al respecto de esta enfermedad y los hallazgos de la biopsia. De manera que, insistiendo, el estudio histopatológico de biopsias duodenales en pacientes con sospecha de celiaquía debe incluir muestras separadas de bulbo duodenal y otras porciones del duodeno. Este detalle me hace sospechar que si bien el duodeno es una estructura con 4 porciones anatómicas, funcionalmente no son iguales (aparte de la carúncula mayor y menor), y quizá tampoco lo sean histológicamente. ¿Alguien se tomó el trabajo de analizar la histología de las diferentes porciones del duodeno y compararlas entre sí? Sospecho que el duodeno proximal tiene algunas diferencias con el distal. El lío de los LIE: en un minucioso estudio cuantitativo16 se ha demostrado que la cantidad de LIE, cuando la muestra está bien orientada, está relacionada con la altura vellositaria; es decir, a menor altura, mayor cantidad de LIE. Pero cuando se cuenta la cantidad de LIE por milímetro de muscular de la mucosa, ¡el número permanece constante! O sea, cuando en el recuento los LIE están realmente aumentados, lo que se está determinando es la altura vellositaria (es decir, lo mismo que la relación vellosidad/cripta). En conclusión, la determinación de esta última es más fácil y evita tener que hacer un recuento del que no siempre se está seguro. En conclusión, nuestra práctica consiste en determinar el grado de enteropatía en base al establecimiento de la relación vellosidad/cripta, siguiendo el criterio matemático esquematizado en la tabla 2. No hacemos el diagnóstico escrito de EC, sino que dejamos que sea el clínico gastroenterólogo el que evalúe el informe en el contexto del paciente, ya que la alteración no es histológicamente patognomónica2 . Siempre efectuamos biopsias separadas de los diferentes sectores del duodeno, lo más común del bulbo y de la segunda o tercera porción. Responsabilidades éticas Protección de personas y animales. Los autores declaran que para esta investigación no se han realizado experimentos en seres humanos ni en animales. 1. Schupann D, Junker Y, Barisani D. Celiac disease: From pathogenesis to novel therapies. Gastroenterology. 2009;137:1912—33. 2. Drut R. El diagnóstico histopatológico de la enfermedad celíaca (EC). VIII Congreso Virtual Hispanoamericano de Anatomía Patológica. Octubre de 2006. http://conganat.cs.urjc.es. Actas Hispanoamericanas de Patología 1-6. Con la bibliografía pertinente hasta esa fecha. 3. Catassi C, Fasano A. Celiac disease diagnosis: simple rules are better than complicated algorithms. Am J Med. 2010;123:691—3. 4. Rashid M, MacDonald A. Importance of duodenal bulb biopsies in children for diagnosis of celiac disease in clinical practice. BMC Gastroenterology. 2009;9:78. Disponible en: http://www.biomedcentral.com/1471-230X/9/78. 5. Prasad KK, Thapa BR, Nain CK, Singh K. Assessment of the diagnostic value of duodenal bulb histology in patients with celiac disease, using multiple biopsy sites. J Clin Gastroenterol. 2009;43:307—11. 6. Zawahir S, Safta A, Fasano A. Pediatric celiac disease. Curr Opin Pediatr. 2009;21:655—60. 7. Gonzalez S, Gupta A, Cheng J, Tennyson C, Lewis SK, Bhagat G, et al. Prospective study of the role of duodenal bulb biopsies in the diagnosis of celiac disease. Gastrointest Endosc. 2010;72:758—65. 8. Mangiavillano B, Masci E, Parma B, Barera G, Viaggi P, Albarello L, et al. Bulb biopsies for the diagnosis of celiac disease in pediatric patients. Gastrointest Endosc. 2010;72:564—8. 9. Levinson-Castiel R, Hartman C, Morgenstern S, Avitzur Y, Hirsch A, Rosenbach Y, et al. The role of duodenal bulb biopsy in the diagnosis of celiac disease in children. J Clin Gastroenterol. 2010 Jul 10. Resumen.[Epub ahead of print]. 10. Ravelli A, Villanacci V, Monfredini C, Martinazzi S, Grassi V, Manenti S. How patchy is patchy villous atrophy?: distribution pattern of histological lesions in the duodenum of children with celiac disease. Am J Gastroenterol. 2010;105:2103—10. 11. Prasad KK, Thapa BR, Nain CK, Singh K. The frequency of histologic lesion variability of the duodenal mucosa in children with celiac disease. World J Pediatr. 2010;6:60—4. 12. Weir DC, Glickman JN, Roiff T, Valim C, Leichtner AM. Variability of histopathological changes in childhood celiac disease. Am J Gastroenterol. 2010;105:207—12. 13. MacDonald WC, Brandborg LL, Flick AL, Trier JS, Rubin CE. Studies of celiac spure. IV. The response of the whole length of the small bowel to a gluten-free diet. Gastroenterology. 1964;47:573—89 [Esta referencia parece fuera de época, pero se cita como homenaje a estos pioneros con ideas claras.]. 14. Drut R, Cueto Rúa E. Histopathologic diagnosis of celiac disease in children without clinical evidence of malabsorption. Int J Surg Pathol. 2007;15:354—7. 15. Ensar A. Gluten-sensitive enteropathy (celiac disease): Controverses in diagnosis and classification. Arch Pathol Lab Med. 2010;134:826—36. 16. Drut R, Cueto Rúa E. Análisis cuantitativo e inmunohistoquímico de la mucosa yeyunal en niños con enfermedad celíaca y con dieta libre de gluten. Arch Argen Pediatr. 1985;83:20-24. Disponible en: www.e-gastroped.com.br/sept97/index.htm.