Fecundidad secundaria, nivel medio superior y superior tienen un comportamiento particular a partir del sexto hijo, ya que aumentan las probabilidades de tener un hijo más. A diferencia de las mujeres con algún grado de primaria o menos, las probabilidades de crecimiento de la familia siempre decrecen, aunque son mayores. El mayor descenso se da al considerar a las mujeres que deciden tener un cuarto hijo, esto confirma una marcada preferencia por limitar la descendencia una vez que se alcanza el segundo o el tercer hijo. Otro aspecto a destacar, es la decisión de pasar del quinto al sexto hijo (p06), en 2010, se observa un incremento en esta proporción, de mujeres que deciden completar la “media docena” de hijos. Aún más, este comportamiento por preferir cierto número se confirma al observar la proporción de mujeres que una vez que tienen once hijos, deciden tener el duodécimo hijo, así queda completada la docena. Probabilidades de crecimiento de las familias según número de hijos de las mujeres de 45 a 49 años por nivel de escolaridad 2010 Gráfica 9 1.0 0.8 Las probabilidades de crecimiento de las familias, también conocida como razones de paridez, facilitan comparar los patrones reproductivos a partir de las decisiones sobre el número de hijos para un grupo que ha terminado su vida fecunda. Por lo tanto, resulta viable analizar las diferencias en la fecundidad según el nivel de escolaridad de las mujeres que en 2010 tenían entre 45 y 49 años de edad. 0.6 0.4 0.2 0.0 p01 p02 p03 p04 p05 Sin escolaridad Primaria Completa Media superior y superior p06 p07 p08 p09 Primaria Incompleta Secundaria o Equivalente Fuente: INEGI. Censo de Población y Vivienda 2010. Base de datos. Resulta interesante observar que de las mujeres sin escolaridad, existe una proporción pequeña con al menos un hijo (0.91), y de aquellas que aprobaron mínimo un grado de primaria, la proporción con al menos un hijo es de 0.95, es decir, 95% de las mujeres que estudiaron algún grado de primaria tienen un hijo o más. Vale la pena mencionar que esta forma cóncava de las curvas que se generan con los valores en las probabilidades de crecimiento de las familias, es característica de las poblaciones que usan anticonceptivos y que se ha podido observar a través del tiempo y en diversos países. Es evidente la influencia que ejerce la escolaridad en la decisión sobre el número de hijos, las probabilidades de tener el tercer y cuarto hijo muestran una disminución considerable para aquellas mujeres que cuentan con nivel medio superior o superior de educación. La probabilidad de que la mujer continúe teniendo hijos una vez que decide ser madre, es mayor para las mujeres sin escolaridad en comparación con aquellas con un nivel educativo mayor. Fecundidad en la adolescencia Aunque con propósitos analíticos, diversas organizaciones internacionales como las Naciones Unidas1, consideran como adolescentes a los individuos entre los 10 y 19 años de edad, para analizar la fecundidad adolescente, nos centraremos en las mujeres de 12 a 19 años, pues 1 Por otra parte, las mujeres que han tenido un mayor grado de escolaridad, aquellas con 24 Fondo de Población de las Naciones Unidas (2007). Framework for Action on Adolescents and Youth. Opening Doors with Young People: 4 keys. Nueva York, EUA. Pág. 8 Fecundidad atención a los considerados más vulnerables, y así disminuir el número de embarazos no planeados en la adolescencia. para este grupo de edad existe la información necesaria para su estudio. La importancia de estudiar los nacimientos en adolescentes radica en la relevancia que tiene garantizar pleno desarrollo a dicho grupo de la población, ofreciendo las oportunidades que les permitan potenciar sus capacidades, y permitirá transitar satisfactoriamente hacia la vida adulta, sin que éstas se vean limitadas por el cumplimiento de roles y obligaciones asociadas a la maternidad. En la actualidad, la fecundidad adolescente, es decir, los nacimientos ocurridos de las mujeres entre 12 y 19 años en 2009 muestra un ligero descenso en los últimos 10 años, al pasar de 40.3 nacimientos en 1999 a 36.4 nacimientos por cada 1 000 mujeres en 2009. Sin embargo, este descenso no significa que el número absoluto de nacimientos en adolescentes haya disminuido significativamente en el país, ya que el número de mujeres entre los 12 y 19 años se incrementó en los últimos diez años de 8.2 a 8.7 millones y por tanto, en el país, los hijos de madres adolescentes siguen siendo más de 300 mil cada año. Se puede hallar una relación entre la edad temprana del inicio de la reproducción y la presencia de condiciones socioeconómicas precarias de estas mujeres, generalmente producto de la exclusión social, donde una parte importante de mujeres y hombres no cuentan con la posibilidad real de tomar sus propias decisiones, sobre todo en lo que hace al ejercicio de su sexualidad y su reproducción. Tasa de fecundidad de las mujeres de 12 a 19 años 1999 y 2009 El porcentaje de adolescentes con al menos un hijo se refiere al total de mujeres entre los 12 y 19 años que han tenido uno o más hijos, entre el total de mujeres en este grupo de edad. Al mostrar este porcentaje por edad desplegada, se aprecia claramente cómo se incrementa conforme se avanza en la edad; así de las mujeres con 19 años de edad, una de cada cuatro cuenta con al menos un hijo. Gráfica 10 50 40 40.3 36.4 30 20 Porcentaje de mujeres con al menos un hijo nacido vivo por edad 2010 10 Gráfica 11 30 0 1999 26.58 2009 Fuente: INEGI. XII Censo General de Población y Vivienda 2000. Base de datos; Censo de Población y Vivienda 2010. Base de datos de la muestra. 18.87 20 11.07 En consecuencia y como reconocimiento a esta situación de desigualdad y vulnerabilidad de las y los adolescentes, ante la falta de información así como de la capacidad necesaria para planear aspectos relevantes sobre su vida y su sexualidad; se debe buscar la igualdad de oportunidades entre los diversos grupos de la sociedad, dando especial 10 0 5.34 0.06 0.12 0.53 12 13 14 1.92 15 16 17 18 Fuente: INEGI. Censo de Población y Vivienda 2010. Base de datos. 25 19 Fecundidad Otro dato importante a resaltar es que el censo captó que 0.06 por ciento de niñas de 12 años de edad, han tenido ya al menos un hijo, lo que representa una situación grave ya que esta población ha sido madre en una etapa de su vida en la cual su desarrollo físico, psicológico y social no es en manera alguna adecuado para el inicio de la maternidad. En entidades como Chihuahua, Nayarit, Baja California Sur y Coahuila una de cada diez mujeres adolescentes cuenta con al menos un hijo. Siendo las entidades con menor porcentaje Yucatán, Querétaro y el Distrito Federal, con menos de siete por ciento. Cabe destacar que el porcentaje de mujeres con al menos un hijo, no es una medida que necesariamente se refleja en el nivel de la fecundidad, aunque la probabilidad de tener mayor número de hijos aumenta cuando la fecundidad se inicia de forma temprana, el número de hijos que tienen las mujeres en México a lo largo de toda su vida reproductiva ha disminuido en los últimos años. El porcentaje de mujeres entre 12 y 19 años con al menos un hijo se ha incrementado en los últimos diez años en medio punto porcentual en todo el país, al pasar de 7.5 en 2000 a 8% en 2010. Esta tendencia de incremento en el porcentaje de mujeres adolescentes con al menos un hijo, se observa en la mayoría de las entidades, a excepción de Chiapas, Quintana Roo, Baja California, Campeche, Veracruz y Oaxaca. Porcentaje de mujeres de 12 a 19 años con al menos un hijo nacido vivo por entidad federativa 2000 y 2010 Respecto al tamaño de localidad de residencia, se observan diferencias al comparar localidades rurales y urbanas. Es posible suponer que un contexto en el que hay menor acceso a información y disponibilidad de anticonceptivos, además de menores oportunidades educativas y laborales impacte las decisiones sobre la vida sexual y Gráfica 12 2010 Chihuahua Nayarit Baja California Sur Coahuila de Zaragoza Durango Chiapas Quintana Roo Guerrero Tabasco Sonora Baja California Sinaloa Campeche Colima Tamaulipas Michoacán de Ocampo Veracruz de Ignacio de la Llave Morelos Estados Unidos Mexicanos Zacatecas Nuevo León Puebla Aguascalientes Hidalgo México Tlaxcala Oaxaca San Luis Potosí Guanajuato Jalisco Yucatán Querétaro Distrito Federal Resulta interesante conocer algunas de las características personales y el contexto en el que viven las adolescentes que han tenido hijos. 2000 10.2 9.8 10.1 8.9 9.9 9.4 9.7 8.6 9.4 8.1 9.3 10.5 9.3 9.5 9.1 8.8 8.8 8.6 8.8 8.4 8.8 9.8 8.6 8.4 8.5 9.3 7.5 8.5 8.0 8.5 6.7 8.3 8.3 8.2 7.1 8.1 7.5 8.0 6.2 8.0 7.0 8.0 7.6 7.9 6.1 7.8 7.5 7.7 7.1 7.7 7.1 7.6 7.5 7.5 6.8 7.4 5.9 7.2 5.8 7.0 5.8 6.8 5.7 6.7 5.7 6.2 0 3 6 9 Porcentaje de mujeres de 12 a 19 años con al menos un hijo nacido vivo según tamaño de localidad 2010 10 8 8.9 8.0 8.6 Gráfica 13 8.3 7.2 6 4 2 0 12 Total Fuente: INEGI. XII Censo General de Población y Vivienda 2000. Tabulados básicos; Censo de Población y Vivienda 2010. Tabulados del cuestionario básico. Menos de 2 500 habs. 2 50014 999 habs. 15 00099 999 habs. 100 000 y más habs. Fuente: INEGI. Censo de Población y Vivienda 2010. Base de datos 26 Fecundidad reproductiva de las jóvenes. Así, se observa en las localidades rurales, un mayor porcentaje de adolescentes con al menos un hijo. Inclusive, al comparar el porcentaje de mujeres adolescentes que tienen al menos un hijo que viven en localidades de menos de 15 mil habitantes, se observa una marcada diferencia respecto a localidades de mayor tamaño. hijo, en cambio, de las que no asisten a la escuela una de cada cuatro adolescentes ha tenido por lo menos un hijo. Las diferencias en el porcentaje de adolescentes con al menos un hijo también se observan al comparar su situación conyugal. El 59.1% de las adolescentes que viven en unión libre tienen al menos un hijo, este porcentaje es ligeramente mayor para aquellas que se encuentran casadas, ya sea a través de un matrimonio civil, religioso o ambos, con un 61.4 por ciento. Cabe mencionar, que el 7% de las mujeres entre los 12 y 19 años se encuentra unida, un 3% casada y que el 89% son solteras. La asistencia escolar está claramente relacionada con el inicio de la maternidad a edades tempranas. Tener un hijo a temprana edad puede hacer que la joven madre abandone la escuela. Aunque con la información censal no es posible establecer relaciones de causalidad, es decir, si se ha dejado de asistir a la escuela porque se ha tenido un hijo o el hecho de no asistir a la escuela fue una condición previa a la maternidad. La información muestra menores porcentajes de asistencia escolar cuando se ha tenido al menos un hijo. Porcentaje de mujeres de 12 a 19 años con al menos un hijo nacido vivo según asistencia escolar 2010 Porcentaje de mujeres de 12 a 19 años con al menos un hijo nacido vivo según situación conyugal 2010 Gráfica 15 70 Gráfica 14 60 61.4 59.1 50 40 30 30 24.7 25 20 10 20 1.5 0 15 Unión libre 10 Soltera Casada Fuente: INEGI. Censo de Población y Vivienda 2010. Base de datos Los aspectos mencionados, muestran la importancia de prestar atención a los adolescentes y la necesidad de promover acciones que brinden los elementos que les permitan tomar decisiones libres e informadas sobre su vida y ofrecer la oportunidad de recibir educación y condiciones laborales que les aseguren una mejor calidad de vida. 5 0.9 0 Asiste No asiste Fuente: INEGI. Censo de Población y Vivienda 2010. Base de datos Entre aquellas mujeres que asisten a la escuela, menos del uno por ciento ha tenido al menos un 27