Los frutos de la Ofrenda

Los frutos de la Ofrenda
Un mensaje de Pascua del Padre Felipe
¡Felices Pascuas!
Bienvenido-a a San Rafael, sobre todo si usted es nuevo o simplemente ha regresado después
de mucho tiempo. ¡Espero que la misa del Domingo de Pascua de la Resurrección del Señor
haya sido una bendición para usted, y le invito a que regrese de nuevo y se una a nosotros una
vez más!
A menudo, durante la Cuaresma, terminada recientemente, las imágenes del cultivo y la
siembra venían a mi mente y corazón en mi oración personal y en la oración con los demás.
“Cultiva la tierra de nuestros corazones, Señor - árala y siembra en ella las semillas de tu Palabra
para que puedan dar sus frutos en el tiempo de la Pascua que ya se acerca".
Bueno, ¡el tiempo de la Pascua está aquí! ¿Qué frutos está produciendo el Señor en nuestras
vidas? Y, ¿cómo podemos compartir algunos de esos frutos? En la Cuaresma les invité, como
parroquia, a centrarnos en el tema de la Ofrenda y mis dos desafíos prácticos fueron 1) procurar
rezar/hacer cada mañana un “Ofrecimiento Diario” y, por la noche, un examen del día, y 2)
hacer una acción pequeña en la que nos ofrezcamos así mismos a los demás durante alguna
visita a San Rafael para la misa dominical (Consulte nuestra página web para acceder a estas
dos invitaciones - www.saintraphael.org/. Usted todavía puede darse la oportunidad de
realizarlas).
Por consiguiente, ¿por qué no compartir con los demás algunos de los frutos logrados en
nuestras vidas a través de nuestra oración y acciones sencillas? ¿Qué le ha aportado a usted o a
su familia el rezar el Ofrecimiento Diario? ¿Qué nuevas amistades hizo o qué experiencia
profunda de la misa tuvo haciendo su "pequeño acto de ofrecimiento”?
Si desea compartir una historia de estos "frutos de la ofrenda", envíe un mensaje breve (160
caracteres aproximadamente) a: reflections@saintraphael.org. Elegiremos y publicaremos
algunos de éstos en nuestra página web y en el boletín durante estos 50 días del tiempo de
Pascua.
Jesús se ofreció completamente por nosotros, hasta la muerte… y el fruto fue la Resurrección –
Su resurrección y la promesa de la nuestra. ¡Sea parte de este esfuerzo por compartir todos los
frutos de esta Pascua aquí en San Rafael!
Dios les bendiga,
Padre Felipe Hurley, S.J., Párroco