WWW.LAPALABRAISRAELITA. CL VIERNES EDITORIAL GIL SINAY El 21 de Jeshvan, que este año fue el miércoles 19 de noviembre, se cumplieron 56 años desde el fallecimiento de Chaim Weizmann, primer Presidente del Estado de Israel, ocurrido el 9 de noviembre de 1952. El tiempo transcurrido no ha hecho sino agrandar la figura de quien dedicó toda su vida y su esfuerzo al renacimiento de la soberanía judía. Hasta 1914, año en que se declara la primera guerra mundial, la participación de Weizmann en el Movimiento Sionista, si bien fue activa, no ocupó cargos de liderazgo. Hasta sus 40 años de edad pueden advertirse, en su vida, cinco fases que transcurren en diversas localidades geográficas que dejan notable influencia en su personalidad. Sus primeros 11 años de vida en Motol, pequeño poblado de la Rusia zarista, fueron de una intensiva y exclusiva educación tradicional durante la cual se empapó de los ideales de Hibbat Zion, lo que despertó su preocupación por la liberación de la nación judía. Trasladado a Pinsk, desde 1885 hasta 1892, su ideología Sionista se profundizó incorporándose de lleno a las actividades de Hibbat Zion, donde puso de manifiesto sus condiciones organizativas. Desde 1893 a 1897, en Berlín, como estudiante del Politécnico de Charlottenburg, su compromiso ideológico y su identidad cultural sufrieron el impacto de la actividad sionista de los estudiantes judíos rusos en esa ciudad. Trasladado en 1897 a Génova, se desempeñó como profesor asistente en la universidad, profundizando además sus experimentos en química. No asistió al primer Congreso Sionista en 1897, pero fue delegado a los congresos sucesivos. Encabezó la fracción democrática en el Movimiento Sionista y fue oponente del Sionismo político de Herzl, porque sostenía que debía darse prioridad a los trabajos prácticos en Palestina. A pesar de haber sido su oponente, al morir Herzl en 1904, refiriéndose a él, expresó: «Tuvo la mirada de un águila con una gran fortaleza». En realidad, fue su heredero al continuar su labor política que tuvo su coronación con la Declaración Balfour. Desde 1904 a 1914, Weizmann se HARRY TRUMAN Y JAIM WEIZMANN. trasladó a Manchester donde prosiguió su trabajo como químico y ejerció también labores docentes en la universidad, sin perjuicio de su participación en el Movimiento Sionista local. Fue en esta ciudad donde Weizmann, que en su Rusia natal había crecido en un ambiente cristiano hostil a los judíos y sin contacto con los gentiles, estableció relación estrecha con el medio no judío y desarrolló una personalidad que fue el producto de un encuentro entre un judío de la Europa Oriental y la Europa del Oeste. A esta síntesis contribuyó su profundo intelecto, como también su encanto personal que adquirió los modos y compostura británica. Esta atracción personal que irradiaba Weizmann explica su éxito posterior como líder indiscutido del Movimiento Sionista y los logros que obtuvo por sus contactos personales con Balfour, Churchill y Truman. Durante la Segunda Guerra Mundial, el 18 de abril de 1943, Churchill apoyó el llamado a modificar el otro Libro Blanco que en 1939 se había emitido, limitando la inmigración judía. Churchil expresó: «Yo no puedo aceptar que este libro sea política definitiva de Su Majestad y lo he considerado como un quebrantamiento de nuestro compromiso». Hizo circular entre los miembros del gabinete una nota en que ponía en duda el derecho de la mayoría árabe para negar la inmigración judía a Palestina. Como resultado de estas gestiones fue designado un comité especial bajo la presidencia de Herbert Morrison quien emitió un dictamen indicando que la Partición sería la mejor solución para el problema palestino. El plan Morrison fue aceptado por los judíos y rechazado por los árabes. Churchill, el 12 de junio de 1944, envió un memorando al Secretario de Guerra aceptando la idea de organizar un regimiento judío y al anunciar esta 3 LA PALABRA ISRAELITA SEMANARIO DE LA COMUNIDAD ISRAELITA DE SANTIAGO Jaim Weizmann POR 21 DE NOVIEMBRE resolución en la Cámara de los Comunes, expresó: «Yo sé que hay un gran número de judíos sirviendo en nuestras fuerzas y en el ejército americano pero, me parece apropiado que una fuerza especial judía sea creada porque, quienes han sufrido indescriptibles tormentos de los nazis, deben ser representados por una formación especial entre las fuerzas que se han unido para la derrota final del nazismo». Weizmann, a pesar de su quebrantado estado de salud, participó también en las gestiones para lograr la mayoría en las Naciones Unidas para la aprobación de la Partición de Palestina. Fue por su intervención que Francia, que estaba renuente a aprobarla, luego de un llamado telefónico suyo a León Blum, que había sido Primer Ministro, logró el voto favorable de ese país. Su contacto personal con Harry Truman fue decisivo para que Estados Unidos aceptara la Partición, incluyera el Néguev en los límites del Estado judío y reconociera a Israel el mismo día en que se declaró la Independencia. En febrero de 1949, el primer parlamento, reunido especialmente en Jerusalén, lo eligió para la Presidencia, cargo en el cual estuvo dedicado a actividades ceremoniales a las cuales nunca fue muy adicto. En sus últimos días tuvo la satisfacción de inaugurar, el 2 de noviembre de 1949, el Instituto Científico que lleva su nombre y que ha tenido la gran misión de poner a Israel en la vanguardia de la investigación científica. Seguramente en los últimos días, desde su habitación en Rejovot, pudo contemplar el hermoso paisaje de los montes de Judea y las hermosas plantaciones que rodeaban los laboratorios científicos establecidos bajo su inspiración. Hoy el Instituto es elegido como la mejor universidad del mundo para que los científicos de la vida lleven a cabo sus investigaciones, según una encuesta realizada por la Revista Scientist. Con toda certeza se puede decir que fue un hombre de la historia contemporánea que pudo contemplar como su visión, a través de su propio esfuerzo, se había transformado en una sólida realidad. Es de esperar que dada la personalidad del extinto primer presidente del Estado de Israel su memoria sea recordada en forma digna, especialmente por el colegio que lleva su nombre, como enseñanza para todos los alumnos. DÍGANOS QUÉ LE PARECIÓ ESTE ARTÍCULO. ESCRIBA SU OPINIÓN A LAPALABRA@CIS.CL 21 DE NOVIEMBRE DE 2008 23 DE JESHVAN DE 5769 www.lapalabraisraelita.cl e-mail: lapalabra@cis.cl SANTIAGO DE CHILE EL SEMANARIO LA PALABRA ISRAELITA ES PROPIEDAD DE LA EMPRESA PERIODÍSTICA «LA PALABRA ISRAELITA S.A.» AV. LAS CONDES 13450 REPRESENTANTE LEGAL SERGIO JODORKOVSKY DIRECTOR GIL SINAY S. EDITOR EN ESPAÑOL SILVIA PREISS PERIODISTAS / COLABORADORES ISAÍAS WASSERMANN ANDREA SALAMOVICH JOYCE VENTURA JOANNA WURMANN SONJA FRIEDMANN SONIA REIZIN DANIELA GOTTLIEB ALAN MEYER IMAÍ KATANELLA EITÁN SZEWKIS SEBASTIÁN ABELIUK COMITÉ DE PRENSA GIL SINAY BENY PILOWSKY CAROL ROSEMBERG SERGIO NAVON MILKO GRBIC ANDRÉS ISRAEL ADMINISTRACIÓN SYLVIA THOMAS PRODUCCIÓN JUAN MEZA O. SERVICIOS FOTOGRÁFICOS ARRIAGADA FOTOGRAFÍA OFICINAS AV. LAS CONDES 13450 TELÉFONOS 9552294 - 9552349 9552251 LOS ARTÍCULOS FIRMADOS NO REPRESENTAN NECESARIAMENTE LA OPINIÓN DE LA EMPRESA EDITORA, Y SON DE EXCLUSIVA RESPONSABILIDAD DE SUS RESPECTIVOS AUTORES. 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