Verónica Stark “Volverán las oscuras golondrinas” de Gustavo Adolfo Bécquer Cuando yo tenía quince años, yo memoricé (1836-1870) este poema para mi primera clase de español. Este poema era mi primera vez que Volverán las oscuras golondrinas en tu balcón sus nidos a colgar, y, otra vez, con el ala a sus cristales jugando llamarán; pero aquéllas que el vuelo refrenaban tu hermosura y mi dicha al contemplar, aquéllas que aprendieron nuestros nombres... ésas... ¡no volverán! yo veía literatura en español. Desde que yo vi eso, me encantan Gustavo Adolfo Bécquer y sus poemas. Hay símbolo entre el hombre y las oscuras golondrinas. El hombre sale en la Volverán las tupidas madreselvas de tu jardín las tapias a escalar, y otra vez a la tarde, aun más hermosas, sus flores se abrirán; pero aquéllas, cuajadas de rocío, cuyas gotas mirábamos temblar y caer, como lágrimas del día... ésas... ¡no volverán! Volverán del amor en tus oídos las palabras ardientes a sonar; tu corazón, de su profundo sueño tal vez despertará; pero mudo y absorto y de rodillas, como se adora a Dios ante su altar, como yo te he querido..., desengáñate: ¡así no te querrán! misma manera que las golondrinas fueron de la pareja. También hay símbolos entre el amor que fue y las oscuras golondrinas que salen. Los dos nunca volverán a la mujer para amor y memorias. Este poema es mi favorito porque es sobre el amor y las dificultades del primero amor. Mi parte favorita es la última estrofa cuando el hombre dice a la mujer que este es un amor que ninguna persona podrá repetir. Me encantan las descripciones y las metáforas que Gustavo Adolfo Bécquer usa.