Año 1570 Medina del Campo Salamanca Sevilla I.- Situación política 1570 ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ Coincidían Felipe II en España, Sebastián I en Portugal (sobrino de Felipe II), Carlos IX en Francia, Isabel I de Inglaterra, Maximiliano II en Alemania o Iván IV, el Terrible, en Rusia. El Papa era Pío V. El Imperio Ruso se expande hacia el este y el sur. El Imperio Otomano se ha convertido ya en una gran potencia militar y territorial. En el norte de África han conquistado Egipto (1517) y poco después toda la costa norte hasta Marruecos. En los Balcanes han conquistado Hungría (1526) y llegaron incluso hasta cercar Viena (1529), aunque el emperador Carlos consigue retener la Hungría Occidental. Suecia (con Finlandia) se establece con Gustavo I Vasa (1523-60) como un potente estado en el norte de Europa. Polonia es el gran estado de la Europa del este y desde 1560 existe una estrecha colaboración con Suecia. El Imperio Romano Germánico había formado parte de la herencia europea del emperador Carlos V como miembro de la dinastía de los Habsburgo austriacos. En 1556 el emperador Carlos cedió a su hermano Fernando su administración y dos años después éste fue proclamado emperador, al que sucedió en 1564 Maximiliano II. En pocos años (1578) el rey Sebastián de Portugal interviene en la lucha contra el turco desembarcando en Marruecos y sufriendo una gran derrota que destruyó prácticamente el ejército portugués. Empezará así un periodo de 60 años de incorporación a España (hasta mediados del reinado de Felipe IV) Las relaciones de la España católica de Felipe II con la Inglaterra protestante de Isabel I no eran buenas por sus intereses contrapuestos. La lucha en Flandes contaba con el apoyo a los rebeldes de Inglaterra y el tráfico en el Atlántico con las colonias era continuamente hostigado por la piratería inglesa (sir Francis Drake). La operación marítima de ataque a Inglaterra se llevó a cabo unos años más tarde (1588) con la denominada Armada Invencible (130 barcos, 30.000 hombres) que sufrió una humillante derrota. Por el momento, las relaciones con Francia (en ese momento en una paz momentánea) eran habitualmente tensas, como correspondía a dos grandes monarquías vecinas y en permanente lucha por el poder. En 1557 se había producido la gran batalla de San Quintín (en conmemoración de la victoria se edifica el monasterio de El Escorial). Al final del reinado de Felipe II, el rey Enrique IV de Francia (primer rey de la dinastía Borbón) declara la guerra por la posesión del Franco Condado y la hegemonía de España en Flandes. Los territorios de la España de Felipe II seguían siendo extensos, aunque hubiesen perdido los estados alemanes. Aparte de las colonias, aun se contaba con Flandes e importantes zonas de Italia (Milán, Nápoles y Sicilia). Estamos en 1570 en tiempos del duque de Alba como gobernador general de los Países Bajos (1567-1573) y su mano dura contra los rebeldes. Años después (1579) se produciría una separación de las provincias del norte (unión de Utrecht) frente a las del sur (unión de Arrás) que se adherían a la religión católica y se reconciliaban con el monarca. ∗ ∗ ∗ ∗ La Santa Sede, Venecia y España han formado la Santa Alianza que llevará en un año a la batalla naval de Lepanto contra los turcos. Felipe II se ha casado ya cuatro veces, la última vez con Ana de Austria. Aun no hay descendencia masculina al trono, ya que el príncipe Carlos ha fallecido hace dos años y al futuro heredero, Felipe III, aun le quedan unos años para su nacimiento. En la ya habitual lucha de la nobleza por la cercanía al monarca, son conocidas, en 1570, las rivalidades entre el secretario real, Antonio Pérez, y otros personajes de la corte como el hermano del Rey, Don Juan de Austria, el duque de Alba o el príncipe de Éboli. Hace ya medio siglo de las conquista españolas de Cortés en México, a las que siguen, en sólo dos décadas, Centroamérica, Perú (Pizarro), Ecuador (Belalcazar), Colombia (Quesada), Río de la Plata (Mendoza) y Chile (Valderia). II.- Sociedad 1570 ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ En muchas ciudades de Europa, son habituales los malos olores, unas condiciones higiénicas deplorables, con ausencia de alcantarillado y recogida de basuras, y una falta de iluminación nocturna que hace sus calles peligrosas. Los desplazamientos siguen siendo muy lentos. La velocidad media de un viaje a caballo puede ser de un máximo de 30 a 40 Km. por día, aparte de peligros, costes y molestias asociadas. Una carreta tirada por bueyes se desplazaba a unos 20 Km. por día. Desde hace 11 años se prohíbe a los españoles, por razones de ortodoxia religiosa, ir a estudiar a universidades extranjeras. Además, la Iglesia hace cuatro años que ha establecido el Índice de libros prohibidos. Estamos en tiempos de Teresa de Jesús y Fray Luis de León, que sólo un año después (en 1571) sería procesado por la Inquisición por presuntas desviaciones heréticas. Estamos en el apogeo de un Renacimiento cultural que culminará en un Siglo de Oro para la literatura española, que en el XVII verá coincidir las obras de Cervantes, Quevedo, Góngora, Lópe de Vega, Calderón de la Barca, Baltasar Gracián, Tirso de Molina... Surgen los primeros corrales de comedias, inicialmente patios de vecinos dedicados a la representación de obras teatrales. Ya han muerto Leonardo, Rafael y Miguel Ángel, pero están en plena producción Ticiano o el Greco. En arquitectura estamos ya en los finales del estilo renacentista en palacios, casas de nobles o edificios públicos (plateresco en España y herreriano en El Escorial) en su transición hacia el barroco de principios del XVII (el estilo de la Contrarreforma). Hace sólo siete años que ha terminado el Concilio de Trento (1545-1563), clave de la Contrarreforma. Cuatro años antes del inicio del concilio, Ignacio de Loyola ha sido elegido como primer General de la Compañía de Jesús. Es época de escasez en lo económico y de inclinación a lo espiritual: se multiplican sufragios, misas, ofrendas, bulas, indulgencias y últimas voluntades a favor de la Iglesia. El sistema habitual de herencia es el mayorazgo que exige que el patrimonio familiar sea indivisible y vinculado al hijo mayor. El sistema conduce a una inclinación a la vida religiosa utilizando a veces los conventos femeninos como “aparcamiento de mujeres” y haciendo del ser eclesiástico una profesión, con clérigos supersticiosos, jugadores o amancebados. La Corte se había trasladado a Madrid (1559) desde Valladolid, a donde volvería por un corto periodo (1601-1606) ya con Felipe III. En la Corte de Isabel I de Inglaterra sir John Harrington, un extravagante genio, ha instalado el primer «water-close». En Toledo un italiano recriado en España, Giovanni Torriani, a instalado una noria gigante para suministrar agua a la ciudad (artilugio de Juanelo) El atuendo habitual de un caballero era un pantalón hasta debajo de la rodilla (calzón), unas medias o calzas y una chaquetilla ceñida de cuello a cintura (jubón), aparte de capa y sombrero. III.- Demografía 1570 ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ En los últimos 100 años la población europea occidental puede haber aumentado en el orden del 20%, situándose alrededor de los 70 millones de habitantes, unos 10 millones más que en 1470. Unos dos millones y medio residían en los países nórdicos. Aparte de las cuatro ciudades que superaban ya los 100.000 habitantes hace un siglo (París, Venecia, Nápoles y Milán), van sobrepasando este listón otras diversas como Londres, Roma, Lisboa o, en España, Sevilla. Madrid, recientemente elegida como nueva capital del país, es aun un proyecto de ciudad en rápido crecimiento. En una década ha pasado de 10.000 a 35.000 habitantes. Medina del Campo tiene unos 20.000 vecinos y Salamanca 25.000. En España se calcula que hacia 1570 había unos 40.000 curas, 25.000 frailes y otras tantas monjas sobre una población de unos 7 millones, del orden de un millón más que hace un siglo. La Corona de Castilla tendría unos 5 millones y medio de habitantes y la Corona de Aragón superaría 1.100.000. El número de esclavos de raza negra en España superaba los 60.000. En 1609, cuando se decide la expulsión de los moriscos, se calcula esta población en unos 270.000. Entre 1550 y 1570 se estima en cerca de 50.000 los procesados por la Inquisición, siendo las causas más frecuentes, por este orden, proposiciones heréticas, moriscos y judaizantes. La nobleza (desde los hidalgos a los títulos y grandes de España) estaba compuesta por unas 600.000 personas sólo en Castilla, es decir uno de cada diez habitantes. IV.- Gobierno 1570 ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ El ejército de España era el más grande en Europa (unos 200.000 efectivos) para hacer frente a los conflictos permanentes con Francia, Inglaterra, más la rebelión de Flandes y el mantenimiento del imperio colonial. Una continua sangría de recursos para la Hacienda. El oro y la plata de América llegaban en cantidades importantes (unas 100 toneladas de oro y hasta 1.500 de plata hasta 1570) y en aumento. Sin embargo, existían corruptelas que desviaban parte del metal y cobros de acreedores que limitaban lo que llegaba efectivamente a manos de la Hacienda Pública. El monarca tiene derecho a un quinto de la producción de metales. El poder absoluto correspondía al rey, incluso por encima de las leyes, ya que el propio monarca se reservaba habitualmente la capacidad legislativa. La Corona había ganado poder en la lucha secular con la nobleza y el rey distribuía gracias y mercedes, por un lado, y cargas y tributos, por otro. Las Cortes, que habían venido actuando como contrapoder, iban perdiendo importancia aunque aun conservaban parte de su fuerza, especialmente en casos límites. Desde 1442 en Castilla la representación dejó de ser por estamentos y pasó a ser por ciudades (18 elegidas por el propio monarca). Las Cortes se reunían de vez en cuando para asuntos fundamentalmente impositivos (así se hizo en 1570 para socorrer a la Hacienda en vísperas de Lepanto) y entre reuniones permanecía un comité (la Diputación de Cortes). En España se había ido consolidando, desde tiempos de los Reyes Católicos, una organización política en que juegan un papel especial los Consejos (de Estado, de Castilla, de León, de Italia, de Flandes, de Indias, de Hacienda, de Guerra ...). El Consejo de Estado se constituyó a partir del Consejo Privado del monarca y se consideraba como el de más dignidad, al corresponder a él la política exterior del Imperio y estar representados todo los reinos. Después estaba el Consejo de Castilla, también llamado Consejo Real, al que correspondía funciones de justicia y, sobre todo, gobierno. Crecientemente se fue profesionalizando y alejándose del poder de la nobleza. Entre los especializados en áreas de gestión, el Consejo de Hacienda (establecido en 1523 por Carlos V) ejercía la política fiscal con una presidencia fuerte y vinculada a la Corona y consejeros, con especial peso del de Castilla. El sistema de Consejos era lento y engorroso porque obligaba al rey a despachar con muchas personas diferentes. Por ello, ya con Carlos I existía la figura del Secretario de Estado, una especie de secretario personal del monarca con amplios poderes para organizar la red de consejeros. En 1556 fue nombrado el príncipe de Éboli y en 1567 Antonio Pérez. Adicionalmente Felipe II estableció diferentes pequeños comités o juntas para su asesoramiento personal. Los ingresos de la Corona española, siempre escasos para las abultadas necesidades, provenían sólo en la mitad, aproximadamente, de impuestos. El resto eran rentas patrimoniales, de Indias, contribuciones eclesiásticas, estancos o rentas forales. Era época en que todo tipo de consejeros y cercanos al poder, proponían remedios simplistas (y a veces interesados) para resolver los problemas de la hacienda pública u otros temas de gobiernos. Esa multitud de informes, memoriales, pareceres y sugerencias se conocían como obra de «arbitristas». V.- Dinero 1570 ∗ ∗ En la España de 1570 las monedas oficiales eran el escudo de oro y el real de plata. De hecho no había cambiado mucho la situación en los últimos 100 años, ya que los Reyes Católicos habían establecido el ducado de oro (o excelente), muy similar al nuevo escudo. Las cuentas se realizaban indistintamente en escudos (10 reales) o en ducados (11 reales). Pero seguía, además, utilizándose el maravedí como unidad de cuenta (375 maravedíes = 1 ducado). Al precio actual del oro, un ducado serían unos 50 euros, un real del orden de 5 euros y un maravedí 10 ó 15 céntimos. El valor en oro acuñado más alto fue de 4 escudos y en plata predominaban los reales de a 8. Algunas referencias sobre el valor adquisitivo de estas monedas en aquellas fechas: § § § § § § § § § § § § § ∗ ∗ Don Juan de Austria tenía un escandaloso sueldo anual de 20.000 escudos. Cervantes recibió por sus heridas de guerra en Lepanto un donativo de 22 escudos, la mitad del sueldo de un capitán. Una galera fabricada en Nápoles costó 1.500 escudos. Una misa cantada, 4 escudos. El patrimonio del comerciante Simón Ruiz se calculaba en 142 millones de maravedíes, unos 400.000 escudos. Según las cuentas de Teresa de Jesús, un convento con 13 monjas necesitaba, para sobrevivir, unos 500 ducados al año (unos 38 ducados por monja). La dote de entrada de Teresa de Jesús fue de 200 ducados. Una cátedra en la Universidad de Salamanca podía suponer unos 200 ducados anuales. El precio de la arroba de lana (poco más de 50 litros) había bajado de 20 reales a 13 entre 1550 y 1570. El incipiente servicio de correos ordinario podría costar cerca de 30 maravedíes por legua (unos 5,5 kms) recorrida; diez veces más en correo urgente. Es decir, un mensaje de Madrid a Barcelona podría costar del orden de un ducado de oro en correo ordinario. El cargo de regidor de una ciudad (podía haber entre 30 y 50 por ciudad) se vendía, por la Hacienda de Felipe II, a 2.000 - 4.000 ducados. Un esclavo negro entre 25 y 30 años valía unos 85 ducados. Aprender a leer y escribir costaba 4 reales por niño y mes (6 reales si, además, aprendían a contar), es decir unos 5 escudos al año. En las ferias de aquellos tiempos (como la de Medina del Campo) era habitual vender a futuro y utilizar letras de cambio con corresponsales en otros países. Instrumentos financieros típicos eran los censos (deudas con base hipotecaria y tipos de interés del orden del 7%) y los juros (una especie de deuda pública cuyo cobro iba unido a la cesión de algún tipo de gravamen). Además, existían cédulas o libranzas (certificados de pago con compromiso de fecha y lugar) VI.- Actividad económica 1570 ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ ∗ Entre 1555 y 1570 se produjo una auténtica fiebre minera en España, con buscadores sobre todo de plata, aunque con resultados muy limitados. Seguían las actividades tradicionales de minería del hierro e industria siderúrgica. La actividad agricultora y ganadería seguía también por cauces tradicionales, con terrenos alternándose en barbecho y desastres naturales contra los que se utilizaba superstición y prácticas religiosas que establecían incluso un calendario de actos. La Mesta obtuvo nuevos privilegios de retorno a pasto de terrenos roturados recientemente y otros pleitos sobre terrenos. Hacia mediados del siglo XVI había unos 18.000 kms. de caminos, de los que la mayor parte (12.000) eran de herradura y los restantes permitían el tránsito de carros. El transporte a larga distancia se realizaba por cuadrillas con caravanas de hasta 30 carretas, con bueyes y mulas de repuesto. Estamos en tiempos de decadencia de la importancia económica de España en el mundo, a pesar de poseer un gran imperio colonial. La llegada periódica de la flota de Indias era todo un acontecimiento, con unos 150 buques que llegaban varias veces al año a Sevilla. Las fortunas del momento viven del comercio, los intercambios monetarios y los rendimientos financieros de juros y censos, sin preocuparse demasiado de la agricultura, la ganadería o la incipiente industria. Las carencias de producción se compensan con una creciente importación, que termina llevando el oro y la plata traída de América a otros países. Los precios aumentan constantemente para todo tipo de productos, incluso los de primera necesidad como el trigo (que se había multiplicado por dos y medio entre 1540 y 1570). En Europa se ha iniciado un importante impulso económico en Inglaterra y la Hansa, asociación de las ciudades alemanas de la costa, monopolizan el comercio del mar del Norte y del Báltico. Antonio Pulido, Momentos estelares de Econolandia