fuerte que aplastó una caja de t a b a c o que tenía en aquel bolsillo, p e r o salvando la cajita de la aguja imantada que llevaba en el mismo bolsillo» ( i ) . Herborizó en los montes de T o l e d o , habiéndose detenido en Y é b e n e s , y lo hizo igualmente en la A l c u d i a , al pie de Sierra M o r e n a , entrando en A n d a l u c í a á principios de A g o s t o y siguiendo p o r C ó r d o b a , Ecija, Marchena, Paradas, A r a h a l y U t r e r a , hasta Cádiz ( 2 ) . Es de creer que Mutis iniciaba sus o b s e r v a c i o n e s de acuerdo con Barnades, supuesto que un criado de éste le a c o m p a ñ ó hasta las inmediaciones de Sierra Morena, c o m o auxiliar, y «con el destino de r e c o g e r algunas semillas y plantas» confirmándose las buenas relaciones que existían entre ambos naturalistas. D e s p u é s de descansar Mutis en casa de sus padres desde el I O de A g o s t o , p r ó x i m a m e n t e , que llegó á Cádiz, hasta el 6 de S e p tiembre, y decidido á a c o m p a ñ a r al M a r q u é s de la V e g a de A r m i j o , D . P e d r o Mesíá de la C e r d a y C á r c a m o , n o m b r a d o V i r r e y de N u e v a G r a n a d a , en calidad de m é d i c o , con la idea de estudiar la gea, fauna y flora americanas, e m b a r c ó s e al a n o c h e cer del referido día en el navio de guerra Castilla., destinado á conducirlos á Cartagena, y salió á las seis de la mañana del domingo 7 de S e p t i e m b r e de 1 7 6 0 . E s v e r d a d que Mutis estaba eleg i d o p o r el R e y para ir con otros j ó v e n e s á perfeccionar sus estudios en París, en L e y d e n y en Bolonia, p e r o prefirió trasladarse á las Indias occidentales con la esperanza de encontrar, en bien de la ciencia, material abundante para llevar á c a b o la obra importante y laboriosa de una Historia Natural de toda la A m é r i c a septentrional. (1) L a primera hoja, escrita con lápiz, de la Relación del viaje de Mutis, q u e más adelante publicamos, añade á estas palabras: y el termómetro que llevaba en la mano. Probablemente este es un lapsus calami, pues en otra hoja, donde Mutis puso en limpio la relación de su caída, dice: «de mi rosario, q u e llevaba en la mano». Esto hace perfecto sentido, pues no es lógico que Mutis viajase d e noche con el t e r m ó m e t r o en la.mano, sino con el rosario mientras iba rezando. (2) Insertamos en los Escritos de Mutis una Relación de su viaje, dividida en tres artículos, y p o r esta razón no añadimos detalles curiosos q u e allí puede v e r el lector. (Véase segunda parte.)