EVOLUCIÓN DE LOS UNIFORMES MILITARES ARGENTINOS Tercera parte Por el My Sergio O. H. Toyos COMIENZOS DE LA INFLUENCIA ALEMANA El primer casco (de cuero y fornituras de bronce), que usara nuestro Ejército. Una muestra de lo antedicho: uniformes de influencia francesa con cascos alemanes “pickelhaube”. BREVE INFLUENCIA BRITÁNICA Curiosa fotografía de un capitán de caballería ca. 1911, finalizando la campaña del Chaco. Su personalísimo uniforme, es de corte inglés, al que ha agregado a guisa de guardamontes, botas de caña alta, con prolongaciones, para protegerse de las espinas del monte. Como puede verse, montaba en mula. Soldados de Infantería ca. 1916. Puede verse en el color marrón claro que tenían los uniformes, los correajes, las polainas y el uso de gorras, la influencia británica. Oficial con uniforme de campaña usado ca. 1916. Es notoria la influencia británica. Cuadro de oficiales de la ESSC hacia 1932. Puede observarse la influencia británica en estos uniformes de diario, enteramente de color verde oliva, con todos los accesorios de cuero y el calzado, en color marrón. Personal de tropa del RI 4, mostrando sus uniformes de campaña… EL AFIANZAMIENTO DE LA INFLUENCIA ALEMANA Para los uniformes de social y gala, como los usados en algunos institutos, comenzó a afirmarse mientras tanto, una progresiva introducción germana, observada en forma mezclada con la francesa, como lo fue el casco “pickelhaube”, ya reglamentado hacia principios de la década del ’10. La influencia germana se afirmará particularmente a partir de fines de los años ’20, perdurando hasta poco después de finalizada la IIda Guerra Mundial. Se observó especialmente en el uniforme de campaña, el que fue en un inicio de paño verde oliva para las zonas frías y de loneta del mismo color, para zonas cálidas. Progresivamente avanzaba la década del ’40, fue variando del verde oliva al marrón terroso en el uniforme de campaña. Debe agregarse, que el casco que aparece en estas fotografías era no balístiUniformes de campaña para el soldado de Infantería hacia 1938. Puede notarse fácilmente, la total influencia germánica. co, salvo el curioso ejemplar de la foto central, que es el modelo alemán de la Ira GM. En efecto, si bien se había observado una directa influencia germana en esta parte del uniforme de campaña, y estando el mundo en guerra, se optó por seleccionar los modelos presentados por varios países (Francia, Alemania, Suecia y Suiza, entre otros), como primer casco de protección balística, al modelo suizo de 1935. Este perduró hasta bien entrada la década del setenta, siendo progresivamente reemplazado por el ubicuo casco M-1 modelo norteamericano, y pasándole el Ejército, los cascos suizos a la Gendarmería Nacional y policías provinciales, en algunas de las cuales, todavía puede observárselo en servicio. El modelo alemán aquí presentado, era de fibras de tela embebidas en sustancias ligamentosas, obteniéndoselo por moldeado a presión sobre moldes y bajo alta temperatura. Se usaba para cubrir servicios de armas, presentaciones, formaciones y desfiles. En campaña se empleaba para protección del sol, un casco de corcho. Un puesto de Guardia en Cdro. Rivadavia, ca. 1942. La imagen parece de integrantes del ejército alemán de la misma época. Una típica escena del reparto del rancho, con soldados vistiendo el uniforme de loneta verde oliva, tocados con el casco de corcho en vigencia hasta su total desgaste y destrucción. Los últimos pudieron verse finalizando los años ’60. Mientras todo lo mostrado y relatado sucedía, finalizaba la IIda Guerra Mundial, y nuestro Ejército, suprimía progresivamente el uniforme monocromo verde oliva, vistiendo primero a los oficiales, con pantalón o breech de color arena, manteniendo el uso de cinturón y bandolera y zapatos o botas altas, de cuero marrón, en sus uniformes de diario, prácticamente idénticos a los de campaña. La tropa pasó a usar para campaña un uniforme que marcó toda una época: el marrón terroso. Al mismo tiempo, se adoptó definitivamente el casco suizo. Casco modelo suizo 1935. Uniforme para campaña, en el que prácticamente no se observan diferencias con el de uso para diario. El casco de corcho, para zonas cálidas, era empleado junto con la gorra semejante al del alto oficial que se aprecia en el centro y el uso de un birrete sin visera, prenda muy cómoda, particularmente para actividades de campaña y servicio de armas. Otro ejemplo de la fugaz influencia británica. Mientras tanto, paradójicamente, los uniformes de campaña, los uniformes de diario y social, mantuvieron una cierta influencia británica. En el de gala, era todavía predominante el francés que se usaría hasta fines del siglo XX. El personal de suboficiales demoraría un tiempo más en usar chaquetillas con cuello abierto y en comenzar a usar el uniforme bicolor. Mientras tanto, el tipo de gorra que se usaba, era de corte prusiano, contrastando con las líneas todavía inglesas del uniforme de diario: Oficiales vistiendo el antiguo uniforme verde oliva ca. 1940, con la gorra con barbijo de cuero y escudo bordado y ya con el breech arena, habiendo cambiado la forma de los distintivos de arma, quitando los laureles debajo de ellos, agregando barbijo de cordón amarillo y escudo metálico a la gorra, pero manteniendo los correajes y botas marrones con espuelas. Hacia comienzos de la década del ’60, los uniformes comenzaron a evidenciar una fisonomía semejante del empleado por los EE.UU. de la misma época. Esto se evidenció particularmente en los uniformes de combate, adoptándose el color verde oliva, que pasó a un honroso retiro al viejo marrón terroso. Éste, no obstante, perduraría, merced a la calidad de sus materiales y confección, como a las enormes cantidades producidas en talleres propios del Ejército, usándose en muchas unidades hasta promediar la década del ’70. Mientras tanto, se abandonaban el cinturón y bandolera marrones para el uniforme de diario, cambiándose la chaquetilla entallada, por un modelo más holgado, afianzándose el modelo bicolor para todo el personal militar. La gorra bajaba su altura y lanzaba hacia delante su visera, adoptando un aire más americano que el tradicional prusiano acostumbrado hasta es momento.