“Para vender vino en China es muy importante fomentar la marca país” Jesús Miramón, director de la oficina de representación de Bankia en Shanghai, ha descrito en FENAVIN las peculiaridades del mercado chino y los factores básicos para asegurar el éxito en la exportación China es, además del país más poblado del mundo con 1.300 millones de habitantes, el mayor mercado potencial, la segunda mayor economía, la primera potencia en poder de compra, el segundo país importador y el primero en reserva de divisas. Todo ello, sumado a su progreso económico sin precedentes –con 300 millones de personas pertenecientes a la clase media- y su excepcional capacidad de logística, hacen de China el lugar en el que todas las empresas que exportan vino español quieren estar. Así lo ha explicado en FENAVIN el director de la oficina de representación de Bankia en Shanghai, Jesús Miramón, destacando sin embargo que la diferencia cultural es muy grande, por lo que “hay que saber adaptarse y saber manejar bien esta diferencia, para lo que es imprescindible abrir la mente y contar con un buen asesoramiento local”. Asimismo, Miramón, ha explicado que en China se está produciendo un cambio de modelo económico muy importante y profundo, pues aunque ha sido la fábrica del mundo son conscientes de que no pueden seguir exportando de manera ilimitada. Ante esa realidad, el gobierno chino está gestionando un cambio hacia una economía en la que se consuma más y el peso de los servicios tenga más relevancia. China es un país muy dinámico, en el que la demanda evoluciona de forma muy rápida y donde quieren parecerse cada vez más a los occidentales, según ha indicado el director de la oficina de representación de Bankia en Shanghai. “Hay dos tipos de consumidores chinos: el tradicional, al que le gusta un vino más dulce, con más graduación alcohólica; y el occidentalizado, al que lo que le gusta es demostrar que tiene estatus, más allá de que le guste el vino. Este último hace una compra, para consumir o para regalar, que está asociada al nivel social, pues el vino importado sigue siendo un artículo casi de lujo”, ha dicho. Respecto al lugar que el vino español ocupa en China, Miramón ha asegurado que el vino está mejor valorado hoy que hace tres años y que en ello han tenido mucho que ver las instituciones españolas, “que están haciendo una labor muy importante para potenciar la marca España en el sector del vino”. “Para vender en China es muy importante fomentar la marca país, más que la Denominación de Origen, la bodega o la marca del vino”, ha añadido. Asimismo, las tendencias están cambiando y hoy la mayor parte del vino que se exporta a China es embotellado, contrariamente a lo que pasaba hace unos años, cuando era el vino a granel el líder en la exportación. “Creo que el trabajo está dando frutos, que hay que seguir en esa línea, potenciando la comercialización, tratando de ir de una manera más agrupada como país y pensando en sistemas de distribución asociada”, ha aconsejado el director de la oficina de representación de Bankia en Shanghai.