379936. . Cuarta Sala. Quinta Época. Semanario Judicial de la Federación. Tomo LVII, Pág. 2976. TRABAJADORES, CAUSAS DE RESCISION DEL CONTRATO DE TRABAJO, POR CULPA DE LOS. Si se encuentra ampliamente comprobado en un juicio arbitral, que en el interior de una fábrica se suscitó una riña entre dos trabajadores, y con ese motivo se suspendieron las labores por corto tiempo, debido a la alteración de la disciplina en el taller, resulta que la rescisión del contrato hecha valer en el juicio respectivo, por las causas antes expresadas, se ajusta en todo a lo dispuesto por las fracciones II y III del artículo 121 de la Ley Federal del Trabajo, y por tanto, es procedente la acción de rescisión del contrato de trabajo, celebrado entre la citada empresa y el trabajador reclamante, sin responsabilidad alguna para la propia empresa, siendo, también, improcedente el pago de salarios caídos que se reclamen por el propio trabajador, sin que obste la circunstancia relativa a que después de la riña mencionada, permitiera el patrono al repetido trabajador, que continuara prestando sus servicios, esto es, que después de haber ocurrido el incidente, no se debió haber consentido que continuara prestando sus servicios, si además de que no se señale justificante alguno de esta circunstancia, el mismo trabajador confiese en su demanda, ante la Junta, que después de ocurrida la riña, fue llamado a la oficina de uno de los jefes de la empresa y recibió consejos, y al siguiente día laborable se le despidió, lo que lleva a la conclusión de que después de efectuada la riña, no continuó prestando servicios y, por consiguiente, no existió el tácito perdón de la falta cometida por el trabajador reclamante. Amparo directo en materia de trabajo 3802/38. Garza Refugio. 21 de septiembre de 1938. Unanimidad de cuatro votos. Relator: Xavier Icaza. -1-