APLICACIÓN DE LAS REDES SOCIALES EN EL TRABAJO EDUCATIVO Las redes sociales son una potente herramienta de trabajo ya que todo favorecen al aprendizaje colaborativo, entendiendo como tal, el intercambio y el desarrollo del conocimiento en el seno de pequeños grupos iguales, encaminados a la consecución de objetivos académicos. Las redes sociales son servicios con base web que permiten a los individuos construir un perfil público o semi-público dentro de un sistema cerrado, construir una lista de contactos con los que compartir un vínculo y ver y atravesar esta lista de contactos y aquellos hechos por otros miembros del sistema. La tecnología sobre la que se sustentan las redes sociales permite a sus usuarios compartir todo tipo de datos e información y en múltiples formatos: audio, texto y vídeo, y con muchas menos limitaciones que el correo electrónico, cuya capacidad es mucho más limitada. Esta característica las convierte en espacios ideales para el intercambio comunicativo entre internautas. Las redes sociales y comunidades virtuales se están convirtiendo en herramientas imprescindibles para los usuarios de Internet. Desde su nacimiento, los usuarios crecen a un ritmo impresionante, de manera que algunos de estos espacios aglutinan a más de doscientos millones de internautas en todo el mundo. Al mismo tiempo que evolucionan se les buscan nuevos usos y aplicaciones, tanto en el ámbito profesional, como en el de entretenimiento y por supuesto en el campo de la educación. Pero si bien es cierto que las redes sociales y las redes de aprendizaje son una característica fundamental de estos entornos de aprendizaje personales, no lo es menos que vienen definidos por lo “personal”. Es el propio aprendizaje y el propio desarrollo personal lo que se busca, interactuando con los demás a través de redes de aprendizaje también personales, pero desde nuestro propio entorno, buscando aquellas cuestiones que son relevantes para nosotros. Esta manera de enfocar el aprendizaje lleva consigo grandes retos para el aprendizaje corporativo, pero no son absolutamente incompatibles. Una primera manera, sencilla por lo demás, de integrar la segunda y la tercera ola, es no intentar reducir el aprendizaje a través de sistemas corporativos de aprendizaje on-line. Un entorno de aprendizaje es, por lo tanto, algo que nosotros hacemos por nosotros mismos, utilizando nuestras aplicaciones favoritas: nuestro blog, nuestras wikis, nuestro e-porfolio, nuestros marcadores sociales, nuestro correo web, etc. Y es aquí donde deberíamos conectar el CLMS de nuestra institución educativa o profesional. Porque el paradigma de aprendizaje no es ya trabajar “uno-a-muchos”, distribuyendo conocimiento, sino que se basa en la creación y gestión del conocimiento por parte de los usuarios. Entre sus ventajas tenemos: Motivación en el proceso educativo, ante la confianza del docente con cierta autonomía y libertad de acción y la conexión de esta forma de trabajo con sus propias aficiones personales. Estimulación del aprendizaje autónomo, en interacción con los demás. Organización y sistematización de la información. Versatilidad para el uso de distintos formatos (textual, audiovisual, hipertextual, gráficos, etc) Facilidad e incentivación de la comunicación y del conocimiento mutuo de los participantes. Lo que también redunda en una ayuda a la labor docente, al poder conocer al docente el perfil de sus estudiantes para la elaboración de la materia y al poder mantener un contacto virtual más ágil y continuo. Favorece la retención de lo aprendido ya que aprenden haciendo. Desarrollo del pensamiento crítico durante los procesos de discusión en el foro. Práctica de la capacidad de expresión escrita y el manejo de las TICs. Gratuidad del servicio educativo, ya que no depende del software local. Prolongación del proceso de aprendizaje más allá del espacio físico y temporal del centro. Incentivación del aprendizaje activo, en el que el estudiante se convierte en el agente de su propio aprendizaje y el docente abandona el liderazgo como única fuente de conocimiento. Revalorización del trabajo en equipo. Posibilidad de integración de contenidos propios y de otros docentes de distintas procedencias y ubicaciones geográficas. Estimulación de los progresos y logros mediante la opción de mandar regalos virtuales a los estudiantes como medio de incentivación del proceso de aprendizaje. Permite la creación de grupos especializados en algún tema específico dentro de la propia red por lo que es posible realizar una sola red y aplicarla para varias áreas o varios grupos de estudiantes. Se puede incorporar artículos y noticias externas a la red utilizando la tecnología RSS. Es bueno enseñar a usar una red social en el aula, en un entorno virtual seguro, con un número de participantes limitado y conocido y con la moderación y supervisión de un tutor o docente que sirva de guía en su manejo e instruya sobre sus potencialidades y carencias.