Monitor Semanal Tributario y Legal No nos olvidemos de las retenciones de Impuesto al Patrimonio de las empresas De acuerdo con lo estipulado por el artículo 16 del Código Tributario (CT), son sujetos pasivos de la relación jurídica tributaria las personas obligadas al cumplimiento de la prestación pecuniaria correspondiente, sea en calidad de contribuyente o de responsable. La retención se debe realizar sobre los saldos activos que mantengan personas del exterior contra uruguayos al 31 de diciembre de cada año. Es fácil de recordar las obligaciones como sujeto pasivo contribuyente, ya que es respecto de ellos que se verifica el hecho generador de la obligación tributaria (artículo 17 del CT); pero no se recuerda tan fácilmente, las obligaciones como sujeto pasivo responsable. Según el artículo 19 del CT, son sujetos pasivos en calidad de responsables, las personas que sin asumir la calidad de contribuyentes deben, por disposición expresa de la ley, cumplir con las obligaciones de pago y los deberes formales que corresponden a aquéllos (obviamente que teniendo, en todos los casos, derecho de repetición). Hay distintos tipos de responsables (solidarios, subsidiarios o substitutos), pero no es esta la ocasión de profundizar en ellos, sino en la condición de personas que, por sus funciones públicas o por razón de su actividad, oficio o profesión, intervienen en actos u operaciones en los cuáles pueden retener el importe del tributo correspondiente. ¿Y qué sucede con los responsables en el IP de las empresas, que es el objeto de la presente nota? Recordemos que el IP recae sobre el patrimonio fiscal, que se determina por la diferencia entre activos y pasivos, a valores fiscales. Dicho patrimonio comprende todos los bienes situados, colocados o utilizados económicamente en la República, con independencia del domicilio de sus titulares. El artículo 1, párrafo cuarto, numeral II del Título 14 del Texto Ordenado 1996 (nuestra Ley del IP) expresa: “Las entidades comprendidas en los Impuestos a las Rentas de las Actividades Económicas o a las Sociedades Financieras de Inversión que fueran deudoras de personas físicas domiciliadas en el extranjero o de personas jurídicas constituidas en el exterior que no actúan en el país por medio de establecimiento permanente”. Como se puede apreciar, a los efectos de poder recaudar el impuesto, la ley ha designado a diversos sujetos, que por razón de su actividad, u otro motivo, intervienen en actos u operaciones en las cuales pueden retener el importe del IP que pueda corresponder. Entre los designados agentes de retención (es decir, obligados por cuenta ajena), se encuentran las entidades comprendidas en el IRAE, que fueran deudoras de las personas físicas o jurídicas no residentes. © 2012 KPMG Sociedad Civil, sociedad civil uruguaya y firma miembro de la red de firmas miembro independientes de KPMG afiliadas a KPMG International Cooperative (“KPMG International”), una entidad suiza. Derechos reservados. 10 de abril de 2012, N° 461 Monitor Semanal Por lo tanto, en principio los saldos pasivos (acreedores) con el exterior, que mantengan las entidades comprendidas en el IRAE al 31 de diciembre de cada año, serán susceptibles de retención de IP, en el entendido que dichos saldos constituyen para la contraparte no residente un activo en la República. Decimos en principio debido que al respecto existe una amplia exoneración. No deberán considerarse a los efectos de determinar el monto imponible de la retención, por encontrarse exentos, los saldos de precios derivados de importaciones, los préstamos y los depósitos de PF o PJ extranjeras domiciliadas en el exterior. Debemos precisar que dentro del concepto de saldos de precios de importaciones se incluyen las adquisiciones de bienes situados en el exterior de la República y en los exclaves aduaneros (zonas francas, depósitos aduaneros y depósitos aduaneros portuarios). Cabe destacar que estas exoneraciones establecidas, evitan la doble imposición sobre algunas de las partidas antes mencionadas. Por ejemplo, en el caso de los saldos de precio derivados de importaciones, el art. 15 del Tít. 14 del TO 1996, establece cuales serán los pasivos que se admiten deducir (a efectos de determinar el IP de la propia entidad en calidad de contribuyente), y entre ellos se excluye expresamente, a los saldos de precio derivados de importaciones. De esta forma, al no admitirse como pasivo, indirectamente se está pagando IP sobre esos saldos, por lo tanto si se tuviera que retener por dichos conceptos, se tributaría dos veces sobre un mismo hecho generador. Una situación diferente se plantea con las retenciones sobre anticipos de clientes del exterior. No serían un pasivo admitido en la liquidación de IP del sujeto uruguayo que debe practicar la retención, por no encuadrar dentro de ninguno de los pasivos admitidos por el art. 15 antes mencionado, y a su vez se debe practicar la retención de IP al 31/12 por no estar dentro de las exoneraciones determinadas para este impuesto. Alícuota Con respecto a las alícuotas a aplicar, estas dependerán de la naturaleza del no residente. Si el sujeto del exterior es una PF, al patrimonio determinado en el país se le deberá deducir el mínimo no imponible (actualmente $ 2.383.000, si fuera soltero) para luego aplicarle las tasas progresionales establecidas en el artículo 45 del Título 14 del T.O. de 1996, y para el caso de las PJ la tasa será del 1.5% del patrimonio determinado. Vencimiento El plazo para la presentación de la Declaración Jurada y el pago del impuesto que tribute vía retención correspondiente a los saldos al 31.12.2011 vence en el mes cargo abril que se presenta ante DGI en mayo, de acuerdo con el cuadro general de vencimientos establecido en la Resolución de DGI N° 1.981/2011 © 2012 KPMG Sociedad Civil, sociedad civil uruguaya y firma miembro de la red de firmas miembro independientes de KPMG afiliadas a KPMG International Cooperative (“KPMG International”), una entidad suiza. Derechos reservados. 10 de abril de 2012, N° 461