22-2009/23-2009 Inconstitucionalidad Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia: San Salvador, a las catorce horas con cuarenta y dos minutos del día diecisiete de diciembre de dos mil diez. Por recibido el escrito firmado por el Licenciado Romeo Benjamín Barahona Meléndez, en su calidad de Fiscal General de la República en Funciones, por medio del cual evacua el traslado que le fue conferido de conformidad al art. 8 de la Ley de Procedimientos Constitucionales. Previo a resolver lo que corresponda, esta Sala efectúa las siguientes consideraciones: I.- Que: (i) en fecha 13-I-2010, esta Sala pronunció sentencia definitiva en el proceso de inconstitucionalidad número 130-2007, que fue publicada en el Diario Oficial No. 15, Tomo 386, del 21-I-2010, en la cual se desestimó la inconstitucionalidad planteada respecto del art. 639 inciso 1º del Código de Procedimientos Civiles (Pr.C.), contenido en el Decreto Legislativo sin número, del 22-III-1888, publicado en el Diario Oficial No. 97, tomo 24 del 26-IV-1888, que reformó el Código de Procedimientos Civiles, hecho ley en virtud de la publicación del Decreto Ejecutivo de fecha 31-XII1881, en el D.O. correspondiente al 1-I-1882, en lo relativo a la supuesta vulneración de los artículos 2 inc. 1º y 3 inc. 1º de la Constitución; y (ii) el presente proceso constitucional coincide con el objeto y parámetro de control antes citados, y fue iniciado mediante remisión de sentencia de inaplicabilidad, dictada con fecha anterior a la publicación de la sentencia de inconstitucionalidad desestimatoria aludida en este párrafo. En atención a lo anterior, resulta necesario determinar si, de acuerdo con los criterios jurisprudenciales seguidos en este tipo de procesos, corresponde resolver la terminación anormal de este; es decir, emitir sobreseimiento por la existencia de sentencia pronunciada respecto de los mismos motivos y parámetros de control planteados en esta ocasión (sobreseimiento del 17-IV-2008, proveído en el proceso de inconstitucionalidad 105-2007); y para tal efecto, debe acotarse lo siguiente: 1. Conviene recordar que el proceso de inconstitucionalidad iniciado vía remisión de inaplicabilidades, por el hecho de fundarse en el ejercicio judicial del control difuso (art. 185 Cn.) -de conformidad con lo establecido en el art. 77-F de la L.Pr.Cn.-, se resuelve sobre la base de un requerimiento judicial, de acuerdo a la remisión de resoluciones judiciales en las cuales se ha declarado la inaplicabilidad de alguna(s) disposición(es) infraconstitucional(es). 1 2. En consecuencia, si el fundamento del proceso de inconstitucionalidad iniciado vía requerimiento judicial radica en la inaplicabilidad de una disposición infraconstitucional que ya fue objeto de decisión por parte de esta Sala, en relación con los mismos motivos y parámetros constitucionales, ha de concluirse que dicho proceso no tiene objeto alguno para su continuación. II. El presente proceso constitucional inició por remisión de dos resoluiciones judiciales en las que fue inaplicado el art. 639 inciso 1º Pr.C., en lo relativo a la facultad conferida al ejecutante –si no hubiere postores– para pedir que se le adjudiquen en pago los bienes embargados por las dos terceras partes del valúo que sirvió de base al remate; pues –a criterio de la autoridad remitente– con ello se permite que se adjudique en pago el inmueble subastado por un valor inferior al que realmente posee, en afectación del derecho de propiedad del deudor –art. 2 inc.1º Cn–. Asimismo, la citada disposición infraconstitucional se inaplicó por considerarse que en ella se prefiere a una persona por su calidad de acreedora en una relación jurídica; lo cual soslaya la igualdad de derechos –art. 3 inc.1º Cn– para el postor que participe en la pública subasta, a quien no se le admite posturas por menos del precio que sirvió de base para la venta. Respecto de tales argumentos, en la sentencia de inconstitucionalidad pronunciada en el proceso bajo referencia 130-2007, esta Sala, luego de una serie de consideraciones, determinó lo siguiente: A. El art. 639 inciso. 1º Pr.C. prevé que, cuando la venta en pública subasta se frustre por falta de postores, el acreedor ejecutante pueda pedir que se le adjudiquen en pago los bienes embargados, por las dos terceras partes del valúo. De la posible adjudicación –acotó este tribunal- habría que distinguir dos situaciones: a) que las dos terceras partes por las cuales se adjudique basten para pagar la deuda, costas e intereses que reclama el acreedor, o b) que las dos terceras partes por las cuales se adjudique no sean suficientes para cubrir el monto reclamado, pero el valor total del bien, tasado por peritos, rebase dicho monto. Sin embargo –se precisó en la sentencia en comento-, la segunda posibilidad no está incluida en el contenido normativo del art. 639 inciso 1º Pr.C., que solo regula la adjudicación en pago por las dos terceras partes del valúo, lo que provoca que la ejecución como tal, no tenga ningún provecho para las partes procesales; pues ni el ejecutante ve satisfecho su derecho, ni el ejecutado logra liberarse de la ejecución. Ello, pese a haber entregado un bien de su patrimonio cuyo valor excede al de su deuda, debiendo afrontar una ampliación del embargo, en el sentido que podrán perseguirse otros bienes que le pertenezcan. Así –agregó esta Sala-, al disponer que se podrá adjudicar el bien embargado al acreedor por las dos terceras partes -independientemente de si con ello se cubre o no con el crédito que se reclama- el art. 639 inciso 1º Pr.C. ocasiona un perjuicio en el derecho de propiedad del ejecutado que ha sido despojado de su bien –que 2 perfectamente podía cubrir la deuda o gran parte de ella- y continúa sujeto a la ejecución. Y en tal sentido, la norma impugnada resulta insuficiente, en tanto no logra cumplir la finalidad de la ejecución (obtener el máximo valor del bien concernido) y vulnera el derecho de propiedad del deudor; ya que omite contemplar el supuesto en el cual pueda adjudicarse el bien al acreedor por el valor total del precio tasado cuando este logra cubrir todo lo adeudado. En ese orden, este tribunal estimó que, visto que la disposición legal en cuestión poseía un contenido normativo menor al exigible constitucionalmente, se encontraba habilitado para ejercer una función positiva o integradora de la norma, a efecto de evitar una declaración de inconstitucionalidad que trajese como consecuencia su expulsión del ordenamiento jurídico y que pudiese provocar un resultado aun más gravoso, puesto que el vacío normativo detectado afectaría aquellas posibilidades fácticas en las que el valor tasado del bien embargado es más que suficiente para pagar el monto de la obligación que el acreedor reclama; y aun así, se adjudica por las dos terceras partes del valúo y se somete al deudor a un nuevo embargo de sus bienes. De tal forma –se estableció en la reseñada sentencia-, deberá entenderse que cuando el art. 639 inciso primero Pr.C. prevé que la adjudicación en pago del bien al acreedor ejecutante -ante la falta de postores a la venta en pública subasta-, podrá hacerse, no sólo por las dos terceras partes del valúo, sino además por la totalidad del valúo del bien, si con este porcentaje se alcanza a cubrir lo adeudado, intereses y costas -o una buena parte de ello-; con lo cual se ajusta su contenido a lo exigido constitucionalmente. B. En cuanto a la aseveración de que el art. 639 inciso 1º Pr.C. prefiere a una persona por su calidad de acreedora en la relación jurídica, y soslaya la igualdad de derechos –art. 3 inciso 1º Cn- para el postor que participa en la pública subasta, a quien no se le admiten posturas por menos del precio que sirvió de base para la venta, esta Sala consideró que el acreedor ejecutante puede intervenir en la fase de ejecución de dos formas: como postor o posible comprador en la subasta, o a través del supuesto de la adjudicación en pago. En ese sentido –afirmó este tribunal-, si el acreedor ejecutante decidiera participar en la subasta –no hay ninguna prohibición legal que se lo impida- junto a otros postores, el mecanismo consistiría en ir anunciando sus ofertas por un sistema de posturas al alza, hasta que uno de ellos ofrezca el mejor precio; posturas que, en todo caso, partirían de la base del remate, es decir, las dos terceras partes del valúo. Entonces, la puja no podría ser inferior a las referidas dos terceras partes. Consecuentemente, en la sentencia en comento se señaló que el acreedor ejecutante que decida participar junto a otros postores en la subasta, lo haría en igualdad de condiciones; e incluso si –ante la imposibilidad de vender el bien por la falta de opositores– al ejecutante se le adjudica en pago el bien, el valor mínimo por el cual 3 habría de hacerse sería las dos terceras partes del valúo; que constituye, precisamente, la misma proporción mínima por la cual salió a venta en pública subasta. Por tanto, se declaró que no existe la inconstitucionalidad alegada, respecto de la supuesta violación al principio de igualdad, pues no se está frente a un trato preferente a favor del acreedor; por el contrario, este accede a la venta en pública subasta en igualdad de condiciones respecto de cualquier otro postor. III. Así, habiéndose evidenciado la existencia de una resolución de este tribunal, atinente a la misma disposición (art. 639 inciso 1º Pr.C.), motivos y parámetros constitucionales (arts. 2 inc. 1º y 3 inc. 1º de la Constitución) que los propuestos en el presente proceso constitucional, y de conformidad con lo sostenido por la jurisprudencia de esta Sala, corresponde emitir el presente sobreseimiento. Decisión que atiende al verdadero significado de dicha figura, que ha de interpretarse como un mecanismo procesal de rechazo para aquellas demandas o requerimientos que, por uno u otro motivo, no pueden provocar la terminación normal del proceso, esto es, mediante sentencia definitiva (sobreseimiento del 19-XI-2008, pronunciado en el proceso de inconstitucionalidad 54-2007). Por las razones expuestas y de conformidad con los artículos 6 ord. 3° y, supletoriamente, 31 numeral 5 de la Ley de Procedimientos Constitucionales, esta Sala RESUELVE: 1. Sobreséese el presente proceso de inconstitucionalidad iniciado vía requerimiento judicial, mediante el cual fue planteada la inconstitucionalidad del art. 639 inciso 1º del Código de Procedimientos Civiles, contenido en el Decreto Legislativo sin número del 22-III-1888, publicado en el Diario Oficial No. 97, tomo 24 del 26-IV1888, mediante el cual se reformó el Código de Procedimientos Civiles, hecho ley en virtud de la publicación del Decreto Ejecutivo de fecha 31-XII-1881, D.O. correspondiente al 1-I-1882, en lo relativo a la supuesta vulneración de los artículos 2 inc. 1º y 3 inc. 1º de la Constitución, respectivamente. Ello, en tanto que, por sentencia de fecha 13-I-2010, proveída en el proceso de inconstitucionalidad 130-2007, esta Sala sostuvo, luego de una serie de argumentos, que no existe la contradicción señalada por la autoridad requirente, entre el artículo 639 inciso 1º del Código de Procedimientos Civiles y los artículos 2 inc. 1º y 3 inc. 1º de la Constitución. 2. Notifíquese. ---J. B. JAIME---F. MELÉNDEZ---J. N. CASTANEDA S.---E. S. BLANCO R.---R. E. GONZÁLEZ B.---PRONUNCIADO POR LOS SEÑORES MAGISTRADOS QUE LO SUSCRIBEN---E. SOCORRO C.---RUBRICADAS. 4