manual_vallas - Una Especie en Peligro

EL ARTE Y LA
CIENCIA DE
RETOCAR
V A L L A S
PUBLICITARIAS
UNA COMPLETA
GUÍA SOBRE CÓMO
A LT E R A R L A
PUBLICIDAD EXTERIOR
T H E B I L L B O A R D L I B E R AT I O N F R O N T
FRENTE DE LIBERACIÓN DE VALLAS PUBLICITARIAS
Traducción: ConsumeHastaMorir.org
¡MIRA HACIA ARRIBA!
Las vallas publicitarias se han convertido en algo tan común
como el dolor humano, tan difícil de ignorar como la mano extendida de un mendigo. Cada vez que abandonas tu sofá o cubículo,
cortando temporalmente el cordón umbilical electrónico, entras
en el ámbito de sus impactos. Tan extraordinarias como la vida,
tan delicadas como la guerra, ellas asaltan tus sentidos con una
complicada retaíla de mensajes comerciales, el ARN mensajero
del capitalismo. Cada vez que te metes en un carro, o viajas en
autobús, o asistes a un evento deportivo, recibes sus instrucciones. No puedes ni evitarlo ni ocultarlo, porque el horizonte de tu
camino de huída está lleno de anuncios y tu escondite cuenta,
como vista panorámica, con una valla publicitaria de 8 paneles.
Hay un millón de historias en la gran ciudad y el mismo número de razones para querer hackear una valla publicitaria. Nosotros tenemos nuestras propias razones y no pretendemos juzgar
las tuyas. En este manual hemos hecho un deliberado esfuerzo
por mantenernos lejos de la ideología y optar por la metodología. Las técnicas aquí descritas se basan en nuestra experiencia de 20 años realizando alteraciones de vallas publicitarias,
de forma competente, segura y -tocamos madera- sin daños
ni detenciones. En la mayoría de los casos no es necesario seguir las pormenorizadas, e incluso obsesivas, precauciones que
aquí describimos. Un bote de pintura en spray, un espíritu jovial y una agradable noche es todo lo que realmente necesitáis.
Blank DeCoverly
Secretario de Propaganda del BLF
ELIGIENDO UNA VALLA
En la elección de una señal, tened en cuenta que las alteraciones más
eficaces suelen ser las más simples. Si podéis modificar totalmente el
significado de un anuncio cambiando una o dos letras, os ahorraréis
una gran cantidad de tiempo y problemas. Algunos anuncios se prestan ellos mismos a la parodia, incluyendo una pequeña imagen o símbolo en el lugar apropiado (una calavera, la señal de la radiación, la
cara feliz, la esvástica, un vibrador, etc.). En otras vallas bastará con
añadirle un bocadillo “de pensamiento” o un bocadillo “de diálogo” a
alguno de los personajes.
Una vez habéis elegido el mensaje de una valla que deseáis alterar,
es posible que queráis averiguar si se muestra el mismo anuncio en
varios lugares. Deberíais decidir cuáles de ellos dan a vuestro mensaje la mayor visibilidad. Una valla en una autovia central os dará,
obviamente, más repercusión que en una zona oscura de una calle.
Debéis, por tanto, valorar el factor ubicación/visibilidad junto a otras
variables importantes como la accesibilidad física, las posibles rutas
de escape, el volumen de peatones y tráfico durante las mejores horas
para actuar, etc. Por supuesto, si podéis alterar más de una valla en
la misma campaña, mucho mejor.
Hay varios tipos de anuncios estandarizados en la industria de la publicidad exterior. Saber qué clase de anuncio estáis a punto de modificar puede ser útil a la hora de planificar la operación:
Las grandes vallas publicitarias son enormes estructuras, normalmente situadas junto a las principales autovias y carreteras urbanas. Miden 14,6 x 4,2 metros y suelen ser alquiladas con contratos de varios
meses, lo que significa que un anuncio se mantendrá allí por lo menos
durante 60 días.
Las vallas de 30 paneles, con 7,6 x 3,6 metros, están situadas a lo
largo de las carreteras primarias y secundarias, y suelen cambiarlas
cada 30 días.
Las vallas de 8 paneles, con 3,6 x 1,8 metros, se encuentran generalmente en zonas urbanas con gran densidad de población y en areas
comerciales del extraradio. Están diseñadas para llegar tanto a los
peatones como a los vehículos y se alquilan por periodos de 30 días.
Publicidad exterior es el concepto que utiliza la industria para referirse
a la publicidad dirigida a personas en desplazamientos, incluyendo
paradas de autobús, el exterior del autobús, taxis, estaciones de metro, mobiliario urbano (quioscos de prensa, bancos, puestos callejeros),
muros pintados y espacios “de interior” como aeropuertos y centros comerciales.
Por supuesto, también hay muchos formatos no estandarizados, que
con frecuencia suponen los blancos más interesantes. Vallas gigantes,
anuncios animados, edificios pintados y vallas de neón, suponen una
oportunidad única para realizar trabajos avanzados.
Los enormes anuncios de textos iluminados normalmente pueden ser
alterados simplemente apagando unas cuantas letras, por ejemplo,
convirtiendo “HILLSDALE” (un condado de Míchigan, EEUU) en “LSD”,
o “HOTEL ESSEX” en “HOT SEX” (sexo caliente). Las posibilidades sólo
están limitadas por tu imaginación.
PLANIFICANDO LA ALTERACIÓN
Aunue el súbito impulso de trepar hasta una valla y comenzar a alterarla
puede ser aveces irresistible, nuestra experiencia nos dice que este tipo de
“impulso alterador” suele ofrecer malos resultados en prescindibles situaciones de riesgo personal. Las siguientes recomendaciones se basan en los 20
memorables años de historia del BLF planificando y ejecutando este tipo de
acciones sin daños ni arrestos.
Accesibilidad
¿Cómo te subirás a la valla publicitaria? ¿Vas a necesitar tu propia escalera
para alcanzar la parte de abajo de la escalera de la valla? ¿Podrás escalar la
estructura que la soporta? ¿La valla se encuentra en la azotea de un edificio?
Y si es así, ¿se puede alcanzar desde dentro del edificio, desde una escalera
de incendios, o tal vez desde un edificio contiguo? Si necesitas escaleras para
actuar en la valla, a veces se pueden encontrar en las plataformas que hay
sobre o detrás de la valla, o en otras vallas o tejados colindantes.
Aplicación práctica
¿De qué tamaño son las letras y/o imágenes que te gustaría cambiar? ¿Cuánto de cerca está el área que quieres trabajar de la plataforma en la parte
inferior de la valla? En las grandes vallas puedes colgarte desde arriba e
inclinarte sobre la fachada de la valla para llegar a aquellas partes que no
se alcanzan desde abajo. No recomendamos este método a menos
que tengáis experiencia en escalada y andamiajes. Cuando te cuelgas, tu área de trabajo hacia los
laterales es muy limitado. Vuestra
capacidad para huir rápidamente
de la escena disminuye proporcionalmente a lo complicado que
haya terminado siendo vuestra
postura de trabajo. Colocar enormes palabras o imágenes también
es mucho más complicado.
SEGURIDAD
Tras elegir vuestra valla publicitaria, aseguraros de inspeccionarla, tanto
de día como de noche. Tomad nota de todo lo que ocurre en la zona. ¿Quién
hay a las 2 de la madrugada? ¿Se os verá mientras escaláis la estructura
que soporta la valla? Tened en cuenta que vais a hacer ruido, ¿hay cerca
ventanas de apartamentos u oficinas? ¿Hay alguien en casa? Caminad
suavemente si estáis en la azotea de alguien que sabe que estáis ahí.
¿Que visibilidad tienen los coches que pasan por la calle y por la carretera? ¿Qué podéis ver desde vuestra área de trabajo en la valla? Aunque es
muy difícil discernir una figura en una oscura valla durante la noche, no
es imposible. Cualquier lugar donde tengáis campo de visión es un punto
desde el que podéis ser observados. ¿A que distancia está vuestra valla de
la Comisaría de policía más cercana o de un Cuartel de la Guardia Civil?
¿Que tipo de patrullas hacen en esa zona? ¿Tiempo medio de respuesta
ante una llamada del Ciudadano Joe1? Podéis haceros una idea delimitando la zona y observando. ¿Es tranquila por la noche o hay mucha gente
andando? Al cerrar los bares, ¿supondrá cierta cobertura (por ejemplo, los
borrachos mantendrán a la policía ocupada) o aumentará la posibilidad de
que nos descubran los viandantes. ¿Les llamará la atención? Si se os ha
visto claramente, hay que lograr que el personal de tierra se les acerque,
mejor que esperar que no llamen a la policía. Evitad que os relacionen con
un vehículo. Que vuestro personal de tierra intenten parecer transeúntes y
a ver que piensan los que miran. A nosotros nos han descubierto actuando
un buen número de veces y a la mayoría de la gente les hacía gracia. Ya
veréis como la mayoría de la gente, incluídos los agentes, no miran hacia
arriba a menos que tengan una razón para hacerlo.
Subiros a la valla publicitaria antes de dar el definitivo golpe. Experimentad primero lo que supone estar ahí y moverse por la estructura de noche.
Llevad una cámara -se trata de una buena coartada cuando estáis haciendo algo que supuestamente no deberíais hacer-: “Hola agente, soy un fotógrafo que trabaja de noche y desde aquí hay una toma impresionante del
puente...” Comprobad las rutas de huída. ¿Podréis atravesar los tejados y
salir a través de la escalera de incendios del edificio? etc, etc.
ILUMINACIÓN
La mayoría de las vallas publicitarias son iluminadas por algún tipo
de foco. Las vallas más grandes aveces se apagan entre las 11 de la
noche y las 2 de la tarde, mediante un mecanismo horario ubicado en
algún lugar de la valla o cerca de ella. Las vallas más pequeñas a menudo son controladas por células fotoeléctricas o cronómetros convencionales, también en algún lugar de la valla. Si encuentras la célula fotoeléctrica, podrás apagar las luces de la valla colocando directamente
en el “ojo” de la célula una pequeña linterna encendida. Esto le engaña
haciéndole pensar que es de día, por lo que apaga las luces.
Como decíamos, las vallas más grandes se controlan mediante cronómetros. Estos se pueden encontrar en los paneles de control ubicados
en la base de la estructura y/o detrás de la propia valla. Estos paneles
suelen estar cerrados (sobre todo los que están en la base de la estructura). A menos que estéis familiarizado con circuitos eléctricos y
dispositivos de este tipo, os aconsejamos que esperéis a que el propio
reloj apague la valla a eso de la media noche. Muchas de estas vallas
funcionan a 220 voltios y podrían dejaros como una patata frita.
ACCIONES DE DÍA
No recomendamos este método para la mayoría de las grandes vallas ubicadas en autopistas y carreteras principales o cerca de ellas.
Funciona bien con vallas más pequeñas y cercanas al suelo, donde la
alteración es relativamente rápida y sencilla. Si decidís trabajar de
día, usad monos de trabajo (¿Con nombre de la empresa en la espalda?), sombreros de pintor, y trabajad con rapidez. Vigilad los vehículos
aparcados y los que pasan con el nombre de la empresa de vallas o del
anunciante impreso. Cada valla tiene el logo de la empresa abajo en el
centro. Si estás en una valla de la empresa estadounidense Sleaze Co.
y uno de sus camiones se para, probablemente tendrás problemas. Es
raro que sus trabajadores traten de detenerte físicamente (intenta el
soborno si es necesario), pero es probable que llamen a la policía.
ELABORANDO VUESTRAS SUPERPOSICIONES
A pesar de que algunas estupendas alteraciones en ocasiones se realizan
con sólo un bote de spray y un agudo ingenio, la mayoría de las acciones
requieren de la elaboración de algún tipo de “superposición” (utilizaremos este término para referirnos a las imagenes o letreros que se aplican
sobre el anuncio) para modificar el mensaje de la valla publicitaria. El
aspecto más profesional de estas superposiciones hace que, probablemente, vuestros anuncios alterados tengan un mayor impacto en la gente.
Esto no quiere decir que todas las alteraciones deban parecer anuncios
originales, lo cual tendría un coste prohibitivo para buena parte de los
colectivos, y en esta era del retoque fotográfico con ordenador, podría dar
lugar a que te acusaran de que tu acción es una ilusión digital, elaborada
en Photoshop antes que en un escenario urbano. Mientras que la calidad
técnica es un respetable logro a perseguir (y una importante motivación
para el BLF), el éxito o el fracaso de tu alteración dependerá más bien de
la calidad de tus ideas y de la potencia de tu mensaje alterado que de lo
mucho que coincida con el original.
ELIGIENDO UN MÉTODO DE TRABAJO
Antes de avanzar demasiado en el proceso de diseño, debéis decidir cómo
elaborareis las superposiciones. Si tenéis la suerte de poder utilizar un
equipo de impresión de anuncios comerciales, podéis hacerlo de forma
profesional y optar por los vinilos utilizados por la industria. Las superposiciones de vinilo son fuertes, ligeras, fáciles de transportar, y fáciles
de aplicar, pero a menos que vuestro equipo cuente con un infiltrado en la
industria, probablemente resultará demasiado caro de elaborar. Si vosotros o algún otro colaborador tenéis acceso nocturno a las instalaciones
de una imprenta, una copistería de barrio, o a las oficinas de una agencia
de publicidad, podéis sacar vuestras superposiciones con una impresora
a color de gran formato o con un plotter. Las impresoras de gran formato
y chorro de tinta, capaces de hacer impresiones DINA3, son ahora habituales en las oficinas.
Imprimir en papel casi siempre supone un proceso conocido como “mosaico”: dividir la imagen en trozos más pequeños para luego ensamblarlos
formando una sola pieza. Programas de ordenador tan conocidos como
Quark Xpress y Adobe inDesign pueden realizar esta función de forma
automática, seleccionando la opción “Tiling” del menú de impresión. Si
no tenéis acceso a un a impresora de gran formato, intentad conseguir
una maquina que pueda manejar hojas DINA3 (el mayor formato que dará
vuestra impresora), las distintas piezas que tendréis que unir para crear
la superposición final. La mayoría de las copisterias de barrio y muchas
oficinas de empresas ahora tienen impresoras a color de formato DINA3.
Por su bajo coste y su gran durabilidad, pensad la opción de usar
lona. Cuando están recubiertas con pintura esmalte al aceite, una
superposición hecha con lona tiene incluso la capacidad de durar
más que la superficie del anuncio donde se coloca. Es más pesada de llevar y más difícil de colocar en el anuncio, pero es una alternativa fiable y poco tecnológica que se puede usar sin mucho gasto.
No recomendamos el uso de superposiciones mucho mayores de 120 cm
x 91 cm. Si vuestro trabajo es mayor, deberíais trocearlo y juntar luego
las distintas partes para formar la imagen final. Si hace mucho viento
sobre las vallas, los trozos grandes serán difíciles de colocar.
ESCALA
Si váis a modificar sólo una pequeña zona (una letra, un pequeño símbolo, etc.) es probable que no necesitéis un soporte de tamaño determinado para diseñar vuestra superposición.
Necesitaréis las medidas
de la valla. Si tenéis suerte
quizás vengan a la derecha
de la valla. Si no, otro buen
método es usar una escusa
para permanecer bajo la valla y hacerle una foto. Abrid
esa imagen con Photoshop.
Sabiendo la altura de la valla podréis crear una ratio
pixeles-centímetros. El método de la ratio es también
útil cuando, teniendo las medidas,
intentamos determinar la posición
exacta del área de trabajo dentro
de la valla.
AJUSTE DE COLOR
Una vez más, en Photoshop (o GIMP si
eres un defensor del código abierto)
utiliza la herramienta cuentagotas para obtener el número exacto
del color. Si el sol incide en alguna
zona de la valla, puedes conseguir
diferentes lecturas en diferentes
puntos. Los diseñadores suelen
manejarse con estos números a
la hora de elegir los valores de las
tintas CMYK, así que toma un par
de ejemplos y redondea al 5% mas
cercano.
AJUSTE DEL TIPO DE LETRA
La coincidencia total del tipo de letra no es un requisito indispensable para
una alteración impactante. Una de las ventajas es que la mayoría de los
diseñadores son de costumbres arraigadas, así que en los anuncios sólo se
suelen utilizar 20 tipos de letras y el 80% de estas son tipo Helvética. Para
conseguir una lista de tipografías puedes utilizar dos recursos en Internet,
Identifont.com y myfonts.com/whatthefont.
ELABORANDO SUPERPOSICIONES
Después de diseñar la superposición e imprimir los trozos, tendrás que
reunir las piezas impresas del rompecabezas y pegarlas sobre algún
tipo de soporte. Para esto es mejor un tipo de papel duro, pero también puedes utilizar cartón pluma para las pequeñas superposiciones,
por ejemplo, las de menos de 70 centímetros de lado. Comienza en
una esquina, pegando la primera pieza en el soporte con spray adhesivo. Ensambla con cuidado el resto de los trozos, cortando las zonas
no impresas de los márgenes cuando sea necesario y dejándolas a un
lado una a una, asegurándose de que todos los bordes quedan protegidos. Si en algún momento del proceso estás un poco descentrado/a
y las piezas no se ajustan con absoluta precisión, no te preocupes: los
trabajos de gran formato son más permisivos, puesto que la gente los
verá a distancia. Cuando todos los trozos estén colocados, refuerza
los bordes con cinta de embalaje transparente. Si va a ser una noche
lluviosa o existe la posibilidad de que tu obra permanezca durante
unos cuantos días, piensa en recubrir tu superposición con una capa
de barniz transparente.
UN MOSAICO CON UNA FOTOCOPIADORA
Si no tienes acceso a un ordenador con algún programa de maquetación, pero sí lo tienes a una buena fotocopiadora, puedes realizar
los pasos ya descritos utilizando la función “ampliar” de la fotocopiadora. Primero, dibuja tu superposición a escala en una hoja, utilizando plantillas o letras de quita y pon. Después, marca con lápiz una cuadrícula sobre tu dibujo, de tal forma que cada trozo sea
equivalente al mayor formato de papel que la fotocopiadora permite (carta, tabloide, etc.). Corta a lo largo de las líneas a lápiz dividiendo los trozos y entonces amplia cada pieza en la fotocopiadora,
tantas veces como sea necesario hasta que cada parte de la cuadrícula ocupe toda la hoja de papel. Ensambla las piezas como se
describió anteriormente, añadiendo color con pintura esmalte o marcadores permanentes, si quieres que sea resistente a la intemperie.
ELABORANDO A MANO SUPERPOSICIONES
Recomendamos utilizar un tipo de papel fuerte y pintura esmalte brillante al aceite. La pintura esmalte recubre el papel, haciéndolo muy
duradero, resistente al agua, y difícil de romper. Para la fabricación
de las superposiciones, recubrid el fondo con un rodillo y pintad los
textos con spray sobre plantillas de letras recortadas. Para imágenes
o paneles muy grandes, utilizad trozos mayores de lienzo pintado. El
lienzo debe ser lo suficientemente fuerte como para que no sea deshilachado por los vientos que sacuden a la mayoría de las vallas.
Pega y grapa el lienzo, arriba y abajo, a dos listones de pino
de 2x10 cm y del largo de la tela. Entonces se enrollará el lienzo como una alfombra para transportarlo mejor y se podrá desenrollar desde arriba de la valla bajándola mediante cuerdas.
MÉTODOS DE APLICACIÓN
Aunque se pueden utilizar muchos tipos de adhesivo, recomendamos
la cinta de doble cara de espuma de polietileno. La cinta se arranca
fácilmente (aunque si se pega correctamente se queda de forma indefinida) y no daña o marca permanente la superficie de la valla. Esto
puede ser importante si te detienen y las autoridades y los propietarios
intentan evaluar los daños materiales que hubo. La cinta se puede comprar en cualquier gran almacén, por lo general en la sección de papelería
o donde están los marcos, ya que fueron diseñados para sostener fotos.
Puedes pegar un lado de la cinta antes de subir a la valla. Pon bastante cinta.
Una vez sobre la valla, simplemente quítale el recubrimiento de plástico y aprieta. En las noches frías, puede haber humedad en la valla,
en cuyo caso tenéis que limpiar primero el área a cubrir: utilizad paños absorventes o una gamuza.
EJECUTANDO EL GOLPE
Una vez hayáis completado los preparativos y estéis ya listos para dar el
golpe, hay muchas cosas que podéis hacer para minimizar el riesgo de detenciones y/o lesiones:
EQUIPO HUMANO
En la valla debe estar el menor número posible de personas. Tres es el número ideal:
dos para hacer el trabajo y otra persona para vigilar/comunicaciones. Dependiendo
de vuestra ubicación, puede que necesitéis más personas en tierra (ver más abajo).
COMUNICACIONES
A la hora de trabajar en grandes vallas, donde sois visibles durante mucho tiempo, os recomendamos haceros con unos walkie-talkies. En algunas tiendas venden walkie-talkies de precio asequible y se les puede añadir auriculares y micrófonos que facilitan su uso.
Dejad uno o dos coches aparcados en las intersecciones desde las que se
divise la valla. El equipo de tierra debería estar pendiente del tráfico que
se acerca y mantener contacto por radio con los que vigilan desde la valla.
(aviso: no utilicéis los frecuentados canales CB o FM; hay muchas otras frecuencias para elegir. Un lenguaje en código es una buena idea ya que los
canales que utilizaréis no son seguros.)
Es esencial que el personal de tierra no de vueltas alrededor de sus vehículos o haga cualquier otra acción que pudiera indicar que merodean por una
(probablemente) desolada zona, por la noche y sin ninguna razón aparente.
Un coche de policía patrullando los verá mucho antes de que puedan avisar a
los que están en la valla. Así que pasad desapercibidos. Hemos descubierto
que vestir como borrachos o como parejas de vagabundos permite haceros
invisibles en el paisaje urbano. Aparcad todos los vehículos fuera de la vista
de la acción.
SEGURIDAD
El riesgo de que os detengan en una valla es menor comparado con
el riesgo de caeros de ella, así que la salud debería siempre prevalecer. Si no sois escaladores experimentados es mejor ayudar en tierra:
como vigilantes de seguridad, diseñadores gráficos o comunicadores. Incluso si sois escaladores experimentados, no os recomendamos
hacer acciones en solitario en vallas de más de 8 paneles (3,6 x 1,8
metros). Lo ideal sería que todas las acciones se apoyaran en compañeros, pero especialmente aquellas que requieren algún tipo de escalada. Si vais a colocaros sobre la parte superior de la valla para colocar unos carteles, deberíais contar con un compañero que os asegure
con una cuerda. Es una gran caída, así que tened cuidado ahí arriba.
LIMPIEZA
Las estructuras de las vallas publicitarias son destacados imanes de
basura, así que no empeoréis las cosas dejando por allí los tubos de pegamento vacíos, los descartes de vinilo, colillas de cigarros o recipientes
vacíos. Un alterador de vallas publicitarias responsable no deja nada
detrás de sí (ni siquiera sus huellas dactilares), aunque en ocasiones
puede dejar una caja de cervezas para aquellos incansables reponedores
de publicidad a los que les toca la nada distinguida tarea de deshacer
su alteración.
ESCAPAR
Si habéis hecho los deberes, conoceréis muy bien el terreno que hay
alrededor de la valla. Por si os descubrieran, preparad una serie de
rutas para salir de la zona y un punto de encuentro con el grupo de apoyo
en tierra. Si una patrulla de la policía se acerca y estáis en un lugar complicado para bajar rápidamente y esconderos (colgados de una cuerda
en medio de la valla, por ejemplo), puede ser mejor, simplemente, esperar a que pasen. Probáblemente vuestros movimientos les llamaran
la atención.
Una vez en tierra, si la persecución es inminente, la apuesta más segura es ocultarse. Si habéis rastreado minuciosamente los alrededores
estaréis al tanto de cualquier buen escondite. Tened en cuenta que si
la policía hace una búsqueda exhaustiva (sería raro pero no imposible),
utilizarán las potentes luces de los coches y, si van a pie, la de las linternas.
Algo de ropa guardada en vuestro escondite podría seros útil. Quizás un
traje elegante, o ropa deportiva arrugada y con restos de vómito. Sed
creativos.
DIFUNDIENDO VUESTRA ACCIÓN
Al igual que los anuncios publicitarios alterados, vuestras acciones deberían tener la mayor difusión posible. Tratad de calcular cuánto tiempo ha
podido durar vuestra alteración y qué número de “impactos” ha logrado
generar. Las acciones realizadas al inicio de un fin de semana festivo suelen durar más, ya que las cuadrillas de limpieza están menos disponibles.
Sin embargo, incluso si vuestra alteración sobrevive dos o tres días en una
de las principales calles de la ciudad, no logrará el mismo tipo de alcance que podéis conseguir con la atención de los medios de comunicación.
FOTOGRAFÍAS
Lo mejor para enviar a revistas y periódicos son las diapositivas a color, pero los medios digitales prefieren archivos JPG de alta resolución. Acordaros de hacer una buena foto del “antes” de que la valla sea alterada. Lo ideal es hacerla desde el mismo sitio y a la misma
hora del día (o noche) que la foto del “después”. En todo caso, habría
que hacer una foto del resultado en cuanto la acción se haya completado. Si además queréis una foto de día, volved a por ella más tarde.
NOTAS DE PRENSA
Pueden ser serias o surrealistas, según tus objetivos y gustos. Sencillamente, una carta de presentación de las fotografías que recojen la esencia de la historia. La mayoría de las bibliotecas disponen de algunos de
los principales Manuales de Relaciones Públicas, con los contactos de
cada publicación impresa y compañía de televisión del país (ahí veréis el
estilo de las notas de prensa de AP -Associated Press-). Mejor aún, gra-
bad vuestro comunicado en una cinta o en un CD y reproducidlo en una cabina de teléfono, mientras dejáis vuestra “denuncia anónima” en la oficina de
algún medio de comunicación. Cuanto más creativos seáis es más probable
que consigáis la respuesta deseada.
POSDATA
Si cualquiera que lea este manual lo encuentra útil para sus acciones contrapublicistas, desde el BLF lo consideraríamos un éxito. Creemos que la alteración de la publicidad es un tipo de pasatiempo al que deberían unirse más
personas. No es tan difícil hacerlo a pequeña escala, en las vallas publicitarias a pie de calle. Un rápido “golpe y adios” en ese tipo de vallas no requiere
toda la preparación y las precauciones que hemos explicado. Y cuanto más
“reales” sean los mensajes que recibimos en las carreteras y calles, mejor.
R.O. Thornhill
Encargado de Educación del BLF
Blank DeCoverly
Secretario de Propaganda del BLF
revisado el 2/08
“El arte y la ciencia de retocar vallas publicitarias” fue publicado originalmente en la revista Processed
World. Queremos agradecerle a su equipo la ayuda en la elaboración de este documento.
Gracias también a Lloyd Void y Paizley Hayes de la revista Twisted Times, al Institute of Media Deconstruction, al Institute of Rational Analysis of National Trends y -por supuesto- a la industria de la publicidad externa.
Publicado en EE.UU. por Infohazard Heavy Industries, filial de Never Mind inc.
Revisado en ferebro de 2008.
Derechos registrados bajo Creative Commons: Reconocimiento. Debes atribuir la obra en la forma especificada por el autor o el licenciador (pero no de forma que parezca que ellos te patrocinan o patrocinan tu uso de
la obra). Sin fines comerciales. No puedes utilizar esta obra con fines comerciales. Compartir bajo la misma
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Con sede en San Francisco, el BLF es una entidad fantasma privada, controlada por sus propios trabajadores, sin número de teléfono ni dirección fija.
Nuestro espacio de trabajo de alta seguridad y nuestra situación extralegal
garantiza a nuestros clientes el mejor de los servicios, mientras que nuestro internacionalmente reconocido equipo creativo propina un inigualable
“uauuuu”.
A diferencia de las agencias tradicionales, el BLF no está disponible para
cualquier negocio, sino que ofrece sus servicios sólo a una lista exclusiva de
anunciantes. Nuestros clientes son cuidadosamente seleccionados sobre la
base de una fórmula compleja sólo conocida por los miembros conspiradores, y nuestras alteraciones se realizan de forma desinteresada, libre de las
mezquinas exigencias de incompetentes ejecutivos y pusilánimes cuadros intermedios. Esta posición única de independencia nos ofrece libertad creativa
sin límites y nos proporciona la llave para “desbloquear” mensajes que, de lo
contrario, se perderían en el compadreo burocrático de algún anodino equipo
de publicistas. Estamos orgullosos de no tener servicio de atención al cliente
y de nuestra forma de enfocar el mensaje al estilo laser.
Fundado en 1977, el BLF es alimentado por una única pasión: la oportuna
alteración de la publicidad exterior. Del humilde anuncio de un quiosco al
poderoso mega-anuncio de la autopista, nuestros experimentados operarios
poseen tanto las habilidades técnicas como la visión creativa para elaborar
campañas mediáticas para la clase media mundial.
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