Folleto - Laboratorio Cobas

El sistema
inmunitario nota
la diferencia
Índice
4
El sistema inmunitario:
el guardián de la salud
5
Cómo funciona el sistema inmunitario
6
Protección contra radicales libres
9
La nutrición correcta es esencial
12
Orthomol® Immun: único en su clase
14
¿En qué consiste realmente
la nutrición ortomolecular?
16
Micronutrientes para el
sistema inmunitario
20
Más consejos para ayudar
al sistema inmunitario
22
El sistema inmunitario
nota la diferencia
El sistema inmunitario:
el guardián de la salud
A lo largo de un año, las defensas del organismo
humano se enfrentan a muchos retos. Hay que superar
sobrecargas personales y profesionales, fluctuaciones
del estado corporal y a veces hasta enfermedades.
En esta tarea el sistema inmunitario desempeña un
papel decisivo, porque actúa contra bacterias, virus y
hongos, se enfrenta a contaminantes ambientales y
participa en la curación de heridas. Además, es capaz de
reconocer y destruir células tumorales.
El sistema inmunitario humano
Tonsila palatina
y adenoides
Ganglios
linfáticos
Defensas en
la sangre
(complemento)
Timo
Macrófagos
y células NK
en los tejidos
Bazo
e intestino
Ganglios
linfáticos
Vasos
linfáticos
Médula ósea
Cómo funciona
el sistema inmunitario
El sistema inmunitario es una red muy compleja y
sensible repartida por todo el organismo. Pertenecen
al sistema inmunitario células sanguíneas especiales y
órganos como la médula ósea, el timo, el bazo, las
amígdalas y los ganglios linfáticos. La lucha contra los
agentes patógenos se lleva a cabo mediante dos
estrategias que se complementan mutuamente:
1. la defensa innata no específica.
2. la defensa específica adquirida.
La defensa innata no específica
Este mecanismo de defensa actúa desde el nacimiento.
Las dos herramientas de defensa más importantes de la
defensa innata no específica son los macrófagos y
células NK natural killer. Cuando ciertos virus o bacterias
consiguen entrar en el cuerpo (por ejemplo, por una
herida), se activan estas células de defensa. Identifican
el agente patógeno, fagocitan la célula extraña y la
destruyen.
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La defensa específica adquirida
A veces los intrusos, debido a su hábil camuflaje, no son
inmediatamente reconocidos como células extrañas
peligrosas. Entonces entra en acción el sistema
inmunitario específico. Las células defensivas del sistema
inmunitario específico son, por ejemplo, los linfocitos B
y T. Las células B pueden marcar a los agentes
patógenos con proteínas especiales (anticuerpos) a fin
de que puedan ser reconocidos por los macrófagos y
células NK natural killer.
Protección contra
radicales libres
Los radicales libres se generan como "productos
residuales” de numerosos procesos metabólicos del
organismo humano. Pueden dañar las células corporales
y el genotipo que contienen. Otras causas de formación
de radicales libres son el tabaquismo, los rayos solares,
el esmog y el ozono. Para protegerse de los radicales
libres dañinos el cuerpo dispone de diversos sistemas
antioxidantes, que captan los radicales y de este modo
los neutralizan.
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Micronutrientes con propiedades antioxidantes.
Las vitaminas pueden neutralizar directamente a los
radicales libres. Es necesario ingerirlas, ya que el cuerpo
no las puede fabricar por sí mismo. Diversas vitaminas
solubles en agua y en lípidos son importantes para la
captura de radicales. Dado que sus efectos son
complementarios, es conveniente tomarlas
conjuntamente. Las vitaminas C y E, fitonutrientes
secundarios como los carotenoides y bioflavonoides son
micronutrientes antioxidantes muy importantes.
Enzimas antioxidantes.
Las enzimas antioxidantes pueden neutralizar los radicales libres. Son sintetizadas por el propio organismo.
Sin embargo, para ello es necesario suministrar al
organismo en cantidad suficiente oligoelementos tales
como selenio, cinc y cobre, que el cuerpo usa como
componentes de los sistemas enzimáticos. Estos
oligoelementos se deben aportar al cuerpo mediante la
nutrición.
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Por efecto de sustancias nocivas tales
como las del tabaco, tóxicos
ambientales o también por procesos
metabólicos, de las moléculas se
desprenden electrones. Con ello, la
molécula pierde su equilibrio estable.
Radical libre
Es muy reactiva y se denomina radical
libre.
Célula dañada
Los radicales libres tienden a
recuperar su equilibrio arrancando
electrones de otras moléculas para
completar los electrones perdidos.
Esto conduce a una reacción en
Radical libre
cadena.
Con este proceso los antioxidantes
Molécula
pueden desactivar los radicales libres.
Sencillamente ceden electrones sin
convertirse en moléculas agresivas.
Entre los antioxidantes están las
vitaminas C y E así como las
sustancias vegetales secundarias
(mezclas de carotenoides y
Antioxidante
bioflavonoides) y los oligoelementos
tales como el selenio y el cinc.
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La nutrición correcta
es esencial
Las tareas del sistema inmunitario son muy complejas
y por ello es fundamental aportar en cantidad suficiente
las vitaminas y oligoelementos. Algunas células del
sistema inmunitario se deben “reproducir” de forma
continuada. Las deficiencias de micronutrientes afectan
negativamente la reproducción de dichas células y esto
puede debilitar las defensas. Por ello, es necesario que
la alimentación aporte continuamente y en cantidad
suficiente todas las sustancias necesarias.
Enfermedades y situaciones en las que nuestro
sistema inmunitario está más solicitado:
• resfriados crónicos, enfermedades de las vías
respiratorias, inflamaciones, diarreas.
• sobrecargas de trabajo o en el ámbito privado.
• sobrecargas por sustancias medioambientales
nocivas.
• toma de medicamentos.
• alimentación incorrecta o insuficiente después
de operaciones durante la convalecencia.
• práctica de deportes.
• personas mayores.
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Aporte insuficiente con la alimentación
Hoy día cada vez es más difícil aportar al organismo los
micronutrientes necesarios. Nuestros alimentos pueden
perder gran parte de sus nutrientes debido a las
cosechas tempranas, los transportes inadecuados, los
tratamientos industriales, el calor excesivo y el
almacenamiento demasiado largo.
Mayor necesidad de vitaminas y oligoelementos
durante las enfermedades
Las necesidades de vitaminas y oligoelementos
(micronutrientes) pueden ser mayores de lo habitual en
determinadas enfermedades y otras cargas del
organismo, por ejemplo por las sustancias tóxicas del
medio ambiente. Por ejemplo, los fumadores, las
personas mayores y los pacientes que padecen
enfermedades agudas o crónicas necesitan una cantidad
considerablemente mayor de micronutrientes, que
frecuentemente no se puede cubrir mediante la
alimentación. Habría que comer dos kilos de naranjas
para obtener 950 mg de vitamina C, 350 ml de aceite
de cardo aportan 150 mg de vitamina E, y para una
dosis de 5 mg de mezcla de carotenoides hay que
comer 50 g de zanahorias y 50 g de tomates. Sin
embargo, el consumo medio de 309 g de frutas y
hortalizas en Alemania está muy por debajo de los 650
a 700 g que recomienda la Sociedad Alemana de
Alimentación (DGE). Así pues, amplias capas de
población no ingieren la cantidad óptima de
micronutrientes. Las cantidades de vitamina D3, ácido
fólico, ácido pantoténico y yodo están claramente por
debajo de los valores de referencia de la DGE.
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Pérdidas de vitamina C y beta-caroteno de algunos
tipos de ensaladas debido al almacenamiento
A la sombra
Al sol
Lechuga
Vitamina C
Beta-caroteno
–11 %
–9 %
–39 %
–20 %
Endivia
Vitamina C
Beta-caroteno
–30 %
–7 %
–51 %
–17 %
Canónigo
Vitamina C
Beta-caroteno
–26 %
–8 %
–63 %
–36 %
Fuente: Felicitas Reglin: “Was Sie schon immer über Vitalstoffe wissen wollten“.
( Todo lo que usted quiere saber sobre sustancias vitales). Ralf Reglin Verlag,
Köln 2000.
Pérdida de vitaminas en platos preparados
Conservas esterilizadas al calor: espárragos, espinacas,
habas de lima, judías verdes, guisantes, patatas,
mazorcas de maíz
–67 %*
–42 %*
–49 %*
–51 %*
–10 %*
Vitamina A
Vitamina B1
Vitamina B2
Niacina
0–32 %**
56–83 %**
14–50 %** 31–56 %**
Vitamina C
28–67 %**
*Valor promedio. **Intervalo de fluctuación.
Fuente: Belitz, HD, Grosch: „Lehrbuch der Lebensmittelchemie“. (Manual de la
Química de los Alimentos) Springer Verlag 1992, S. 362.
11
¡Único en
El sistema inmunitario
El sistema inmunitario es una red muy compleja,
que desempeña un papel importante para el
funcionamiento de nuestro organismo.
Depende de una cantidad suficiente de energía
y vitaminas, oligoelementos y “fitonutrientes”:
los llamados micronutrientes.
Las situaciones especiales aumentan las ne
• las infecciones agudas y cr
• las enfermedades de las v
• después de quimioterapia
• después de operaciones, e
• edad adulta
Para garantizar un suministro adecuado
necesidades, se requiere una terapia
Orthomo
ofrece la combinación inmunita
fitonutrientes requerida p
12
12
n su clase!
La alimentación
Normalmente, una alimentación
equilibrada asegura el aporte al
sistema inmunitario de los
micronutrientes necesarios, entre
otras cosas.
ecesidades de micronutrientes, p. ej.
rónicas
vías respiratorias, p. ej., asma y EPOC
a o radioterapia
en convalecencias
o del sistema inmunitario con estas mayores
a de micronutrientes inmuno-específica:
ol® Immun
aria de vitaminas, oligoelementos y
para el sistema inmunitario.
13
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¿En qué consiste realmente
la medicina ortomolecular?
El principio de la medicina nutricional ortomolecular se
basa en la aportación determinada de micronutrientes,
tales como las vitaminas y oligoelementos. Si el cuerpo
no dispone de ellos en cantidad suficiente, pueden
producirse numerosas enfermedades. Para poder
restablecer el equilibrio natural del metabolismo se
deben aportar los micronutrientes que faltan.
Es decisiva la correcta elección de las sustancias y de su
concentración. Por ello, un cometido importante de la
nutrición ortomolecular es aportar al cuerpo los
micronutrientes decisivos con una dosificación y
composición acordes a las necesidades.
Medicina
convencional
Lucha contra las
enfermedades y
restablecimiento
de la salud
14
El principio de la medicina ortomolecular fue establecido
por Linus Pauling, bioquímico y premio Nobel. Esta
corriente médica está autorizada como terapia oficial en
los Estados Unidos desde 1978, y es cada vez más
apreciada en Europa. El empleo de la medicina
nutricional ortomolecular ha demostrado su validez en
especial para las funciones inmunitarias.
Medicina
ortomolecular
Conservación y
restablecimiento de
la salud, y mantenimiento de las
funciones corporales
(p. ej., defensas
inmunitarias y
regeneración) así
como tratamiento
de acompañamiento de enfermedades
15
Micronutrientes para
el sistema inmunitario
Defensa y lucha contra las enfermedades
Numerosas vitaminas, oligoelementos y fitonutrientes
son vitales para asegurar que el sistema inmune
funcione normalmente. Aquí están los ejemplos más
importantes con sus propiedades y características
nutricionales:
Vitamina C
• es imprescindible para la función de los macrófagos
• puede ayudar en la reproducción y activación de las
células inmunitarias asesinas
• está entre las vitaminas con propiedades
antioxidantes
• contribuye a la regeneración de las funciones
antioxidantes de la vitamina E
Vitamina A
• influye positivamente en la concentración de
determinadas células inmunitarias
• ayuda a desarrollar células del sistema inmunitario,
tales como los linfocito T CD4+ y los linfocitos B.
Vitamina E
• aumenta la actividad de diversas células del sistema
inmunitario
• posee propiedades antioxidantes
Cinc
• influye en la actividad de las células inmunitarias
• es un componente de enzimas antioxidantes
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Selenio
• es un componente de enzimas antioxidantes
• influye en la formación de anticuerpos
• es importante para la función de las células
inmunitarias
Fitonutrientes secundarios (p.ej. bioflavonoides y
carotenoides)
• son antioxidantes y ayudan a la función de las células
inmunitarias
• los bioflavonoides, como antioxidantes naturales,
apoyan el efecto de la vitamina C
Función y regeneración
Los micronutrientes, con sus propiedades nutricionales
fisiológicas, son imprescindibles para los procesos
metabólicos que tienen lugar ininterrumpidamente en el
cuerpo:
• el hierro es importante para la formación de los
glóbulos rojos y para el transporte de oxígeno.
• el yodo es el elemento central de la hormona
tiroidea, que regula numerosos procesos metabólicos.
• la vitamina A debe estar presente para la integridad
de la piel y las mucosas y su buen efecto de
protección.
• el metabolismo de los hidratos de carbono, proteínas
y lípidos necesita la vitamina B.
• la vitamina E influye en sistemas tan complejos
como la función de las membranas celulares.
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Más consejos para ayudar
al sistema inmunitario
Quien se queda quieto se oxida
¡Muévase! La actividad física moviliza el sistema inmunitario. Además, la actividad corporal periódica y
constante es más eficaz que los breves esfuerzos
intensos.
El aire fresco activa
Salga al exterior durante un rato cada día. El aire fresco
y el movimiento mejoran la circulación de la sangre y
estimulan el sistema inmunitario.
El sueño es la cuna de la salud
Duerma lo suficiente, para que el cuerpo se pueda
regenerar. Para dormir bien y dormirse fácilmente es útil
reducir el estrés, por ejemplo, relajándose con un baño
(no demasiado caliente) o leyendo un buen libro.
Mejor dejarlo
Fumar y consumir demasiado alcohol no solo daña el
pulmón y el hígado, sino que también afecta a las
funciones de las células inmunitarias. Deje de fumar e
intente beber menos alcohol.
20
El sistema inmunitario
nota la diferencia
Orthomol® Immun para el tratamiento dietético de
inmunodeficiencias alimentarias, tales como las que se
pueden producir después de la quimioterapia o la
radioterapia.
Viales bebibles
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Granulado
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Valoramos
su salud
®
36913SPA V06/10
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